Este espacio ha sido creado por Gerardo Cailloma con el fin de difundir mis ideas y poder compartir con el que esté interesado temas sobre cine, música, educación, viajes, literatura y todo aquella diletancia que produzca placer estético (como el buen comer)
Datos personales
- Gerardo Cailloma
- Trujillo, La Libertad, Peru
- Un espacio para mostrar ideas y puntos de vista ligados al arte, a la cultura y la vida de una sociedad tanto peruana como universal
domingo, 28 de abril de 2024
DE LA SELVA, SU PODER (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO 28 DE ABRIL)
domingo, 27 de agosto de 2023
MESIANISMOS PELIGROSOS (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO 27 DE AGOSTO)
En una reciente visita a Buenos Aires pude visitar una interesante exposición: Devociones populares argentinas. En esta conoces todo el rosario de personajes que se van convirtiendo en santos populares que hacen milagros a por doquier. Entre estos no faltan Maradona y Eva Perón. Quien haya leído la desopilante historia de esta mujer o haber leído la novela Santa Evita, uno entiende cómo la manipulación de las necesidades y desesperaciones convierte, construye un personaje a la medida para todo ese gran bolsón de necesitados. Todos estos personajes, desde la izquierda y, en los últimos tiempos, de la extrema derecha usan un lenguaje confrontacional, agresivo para construir un artificio que satisfaga fragmentos de las penurias y angustias populares, neutralizando incluso grupos etarios y económicos diferentes. Estos personajes asumen una cruzada para salvar a la sociedad, a la nación, a los valores, a la humanidad. Y este “encargo” se reviste de divinidad lo que les permite usar dogmas como argumento discreto o, varias veces, como verdad acabada. Quieren imponer “su” propuesta por lo que estos personajes son grandes enemigos de la democracia formal y real; les incomoda, pues tienen que convencer o lidiar con congresos adversos o personajes tan díscolos y disparatados como ellos (basta ver el circo congresal que tenemos). Los personajes de extrema derecha se expanden a lo largo del continente tal como lo hemos visto en Trump y Bolsonaro. Muchos tienen varios puntos en común: chocan con la iglesia católica, se apoyan en grupos religiosos conservadores, niegan el cambio climático a rajatabla, defenestran del Estado del cual viven. El mesianismo ha ido evolucionando desde la llegada europea en nuestras tierras. Es interesante leer el libro Mesías, cruzadas, utopías de Jacques Lafaye que habla de las locuras mesiánicas de inicios de la conquista y cuyas características se asemejan tanto a este mundo en el que vemos a estos nuevos mesías sumidos en las redes sociales vía Tik Tok, Facebook o Instagram para llevar las palabras de salvación a una sociedad que navega en la desesperación y el escepticismo, y se les delegan esas responsabilidades. Pero ahí están ellos para salvarnos de la ruina, del desorden, del crimen, del pecado. Pero se visten de manera diferente y permanente para identificarlos, para hacer gráficos, caricaturas, muñecos, merchandising de fácil recordación, siluetas que se vuelven logos entre jóvenes para su fácil captación en la que los medios juegan un rol importante. Los siguientes pasos serán la beatificación y luego la canonización, aunque sea por legitimación popular. Así nos curarán, nos salvarán de muchos problemas y mejorarán la economía personal y la de nuestro país. Esos personajes que al final, como João Abade de la obra La guerra del fin del mundo, subirán al cielo con la ayuda de unos arcángeles y la población será testigo de tal milagro. Una franca locura, la que estamos viviendo.
domingo, 12 de junio de 2022
NUEVO ESPECTRO DEL COJUDIGNISMO (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO 12 DE JUNIO)
Sorprendente,
pero también esperable. La política peruana ha entrado en una fase de anomia
que está arrastrando a toda nuestra sociedad. El debilitamiento y pudrimiento
de la clase política, a través de sus partidos, en las últimas décadas está
dando sus decepcionantes frutos delante de toda la ciudadanía. Y el adjetivo
acuñado tras las recientes elecciones presidenciales, “cojudigno”, está ampliándose
a un gran sector (por no decir todos) de electores y simpatizantes que
esgrimieron la idea de no cambiar ni modificar la Constitución de 1993. Muchas
personas y varios partidos políticos apoyaron con firmas, propaganda, marchas y
obviamente dinero para realizar toda la actividad hecha por la cual miles de
peruanos simpatizaban y simpatizan.
El mar
de contradicciones en el que sumergieron a toda la ciudadanía encierra la idea
de que esa Constitución, a la larga, no sirve a los intereses de muchos
políticos. Esgrimieron la idea de reducir la participación del Estado al
máximo, pero inauditamente quieren vivir de él: bicameralidad, reelección...
nuevos Gargantúas. Desde el inicio de este débil Gobierno, con un presidente vapuleado
por todos los frentes, el Ejecutivo y su cabeza han hecho los méritos para
captar la atención de la ciudadanía por los numerosos desaciertos realizados y
la situación crítica que les ha tocado vivir. Mientras los reflectores caían sobre
Pedro Castillo y sus prontuariados ministros, otras bandas, disfrazadas de
partido político, comenzaron a hacer de las suyas. El hemiciclo se volvió el
espacio de turbias negociaciones sorprendentes que han permitido que otras
sutiles o grotescas formas de corrupción al caballazo vayan ganando terreno.
Los grandes medios de comunicación han jugado también ese papel, medios que
clamaban el no cambio de constitución hacen la vista gorda ante los atropellos
de un empoderado corro de congresistas hambrientos del poder y lo que este
significa para detentarlo a su manera y gusto. Para esto, lentamente han ido
acaparando todos los poderes autónomos del Estado en complicidad de los mismos
medios y juristas a la medida. Ahora quieren irse sobre los pocos que restan
modificando el cuerpo legal constitucional a su antojo. La ciudadanía, hastiada
por las marchas insulsas casi semanales, no reacciona por cansancio ante
semejante atropello. Todo indica que estas marchas debilitaron el sentido del reclamo. Pareciera que todo se hizo a la medida: un gobierno débil,
un puñado de congresistas arteros hábiles en festinar procesos y leyes y, de
pronto, ¡otra constitución! El poder político en su conjunto está, a estas
alturas, en manos de una suerte de hampa organizada que busca legitimarse en el
poder. Estrategias que recuerdan los tiempos oscuros de los 90 o las hábiles
movidas de AGP en su segundo gobierno. ¿Hacia dónde vamos? ¿Cuál es el
Frankenstein que estos oscuros personajes están gestando para su provecho en
abierto daño a toda la institucionalidad que nos queda? Sombras se ciernen
sobre nuestro país.
domingo, 13 de junio de 2021
KEIKO EN SU SOLEDAD (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO 13 DE JUNIO)
Una semana de pesadilla, de divisiones, de situaciones vergonzosas. A estas alturas, algunos medios de prensa internacional comparan el comportamiento de la lideresa Keiko Fujimori con los de Trump y el israelí Netanyahu, quienes hicieron tambalear el sistema democrático de sus respectivos países; peor aún en el nuestro por las graves deficiencias que este tiene en una sociedad muy golpeada por la corrupción y la crisis de la pandemia. Parece que su suerte está echada. Estamos en vilo.
Keiko es un personaje surgido
de uno de los gobiernos más corruptos que tuvo nuestro país; ese gobierno supo
debilitar las instituciones de nuestra sociedad y a muchas las corrompió de
raíz. Con ella también vino una serie de personajes que incursionaron en la
política gracias al debilitamiento y vacío de los tradicionales partidos
políticos. Así se entiende la desaparición del APRA o el PPC del mapa
electoral en los últimos años o en el fantoche que se convirtió AP. Esos
vacíos fueron ocupados por nuevos partidos que se adecuan a un neo clientelismo
(“plata como cancha”, por ejemplo) que ha viciado el mundo político. Keiko se
erigió como una lideresa que recogió la popularidad positiva y negativa de su
padre, quien quedó en la recordación de mucha gente por su estilo práctico de
gobernar y toda esa urdimbre corrupta que envileció a nuestro país por una
década y cuyos rezagos seguimos sufriendo. Ella comenzó a marcar ciertos rumbos
de nuestra sociedad: con Ollanta abrió su primer frente. Su trabajo de bases,
sobre todo en el Norte peruano, comenzó a entrar en acción logrando destacados
avances; por eso, Keiko esperaba su ascenso apoteósico en su segunda contienda;
pero, la suerte le fue adversa. Ella, increíblemente, quemó un capital político
que ahora le hubiera sido totalmente positivo. Pudo más el rencor que la
racionalidad y en su insano accionar sumió a nuestro país en un lustro para el
olvido: 4 presidentes, dos congresos y un colapso del sistema por una pandemia
que desnudó graves vacíos de décadas.
Estoy leyendo justificaciones por los
resultados adversos en estas elecciones, incluso culpando al electorado de
ignorante e irresponsable por haber permitido el triunfo de Pedro Castillo. No.
El sentimiento anti Keiko cruza todos los estratos de la sociedad, la que
hastiada ha visto tambalear la democracia por sus caprichos. No podemos borrar
cinco años de pesadilla. Pedro Castillo debe de tomar en cuenta esto. Miles de
votos vienen no de apoyo abierto a su tendencia política, sino de un rechazo a
una candidata que arrastra tantos pasivos que cualquier otro candidato, que
hubiera estado frente a ella en segunda vuelta, la hubiera vencido por un margen
arrasador. Ni la inversión millonaria, ni los miedos y pánicos difundidos por
los medios, ni los pactos y apoyos de personalidades han sido suficientes para maquillarla.
Solo han servido para dividir más a nuestra fragmentada sociedad. Penoso
Bicentenario.
domingo, 14 de febrero de 2021
CLARIDAD Y OSCURIDAD (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO 14 DE FEBRERO)
Vacunas. Una luz en las tinieblas. Una pesadilla para la estupidez humana.
Rashomon, filme del maestro
Akira Kurosawa, tiene por tema la descripción de una violación y posteriormente
el asesinato de un samurái en manos de un asaltante de caminos. Desde un punto
de vista de la magnitud del caso, sería un simple crimen, uno más en la época medioeval
japonesa en la que cundía el desorden y primaba la ley del más fuerte y avezado.
Pero la historia es muy singular, pues el hecho o incidente es narrado desde
cuatro perspectivas: la de un testigo, un peregrino que vio casi todo el
incidente; la del bandido que explica sus motivos; la de la mujer que había
sido violada por el bandido y esposa del asesinado; y, para redondear la
increíble narración, el mismo samurái muerto que se encarna a través de una
médium. El hecho es el mismo: cada uno describe cómo fueron los sucesos antes,
durante y después de la muerte del guerrero; todos coinciden en los mismos.
Pero ver las motivaciones, temores, mentiras y dudas que van surgiendo en cada
uno de ellos para entender el porqué de estos crímenes van hundiendo cada vez
más a un monje budista que va perdiendo la fe en la humanidad por conocer estas
simples narraciones.
El domingo pasado arribó a
nuestro país un lote de 300 mil vacunas para tratar de controlar la pandemia
que está en su segunda ola agresiva no solo aquí, sino a nivel mundial. Una
esperanza que comenzó a alegrar a muchas personas, sobre todo los que trabajan
en salud, como una forma de ayudar a todo el terrible trabajo que están
soportando diariamente. Me contaba un médico que ya se había contagiado dos
veces y no tenía ánimos de seguir adelante. Pero mucha gente y medios vieron el
hecho para construir imágenes e información negativas de la llegada de este
lote: desde que la vacuna no sirve hasta que la cantidad era ínfima. Es más, en
redes sociales se leen mensajes informando que todo es fraude o farsa y, en el
caso más insano, esperaban que estas vengan falladas o el haberse extraviado en
el mar. Las redes están plagadas de basura y circulan libremente. El otro caso
es la cobertura que se le da al expresidente Vizcarra por su decisión de
haberse vacunado o no; sea lo que haya hecho, su acción ha hecho sepultar el
reconocimiento a miles de peruanos y peruanas que sí pusieron el hombro para
que ahora muchos de los que despotricaban de las vacunas terminen siendo
inoculados. Como colofón está el accionar de los alcaldes, como el de Trujillo,
que quiere gestionar la compra y manipulación de vacunas, cuando su gestión no
ha concluido correctamente con el asfaltado de calles y haya hecho algunas ciclovías
que enfrentan ciclistas con choferes. Me abstengo de opinar sobre este nefasto
Congreso, rémora cómplice de la pandemia.
Rashomon, obra maestra de
observación de la naturaleza humana, le da una opción de redención al monje:
rescata a un niño abandonado y decide criarlo para restituir la fe en la
humanidad. Ojalá.
domingo, 29 de noviembre de 2020
RANCIOS CINISMOS (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO 29 DE NOVIEMBRE)
Las aguas no están para nada
quietas. A río revuelto, ganancia de “pescadores”. Y qué pescadores. En el hemiciclo
que reúne una variopinta cantidad de personajes con problemas judiciales, los
congresistas siguen en su fanfarria como si lo sucedido hace una semana no
hubiera nunca ocurrido. Mientras miles de ciudadanos de todas las edades, sobre
todo jóvenes, salen a las calles a protestar hastiados de la política y del
nada prestigioso privilegio de haber tenido tres presidentes en menos de una
semana; nuestra casta política hace diversos contubernios amañados sin ningún
tipo de escrúpulos buscando cómo ganar réditos a como dé lugar. Las reuniones
del actual presidente Sagasti con personajes arteros como Keiko Fujimori o
César Acuña genera mucho escepticismo en la sociedad, pese a los drásticos
cambios necesarios en una cúpula de la PNP cuestionada por muchos actos de corrupción
durante la pandemia (recordemos los casos del material sobrevaluado o de pésima
calidad) y, peor aún, por los acontecimientos represivos y luctuosos en las
últimas protestas callejeras con la suma de dos muertos, ciudadanos heridos e,
incluso, secuestrados. Las humillantes declaraciones de un cínico Manuel Merino
colmaron la paciencia de muchas personas y, en un arranque de populismo, los
congresistas decidieron levantar la pensión vitalicia de los numerosos
expresidentes vivos (prófugo, con arresto domiciliario, golpista, con sentencia
suspendida). Pero nuestros parlamentarios olvidaron un reclamo pendiente: la
inmunidad. De pronto, nos viene una sorpresa: el lanzamiento de Martín Vizcarra
al Congreso por el partido Somos Perú. El apoyo masivo (no sé si le quedará
este hasta las elecciones en abril del 2021), sin duda, cambia todo el panorama
electoral. Muchos de los actuales candidatos cuyos partidos participaron en la
asonada de hace dos semanas ven con mucho temor esta candidatura. Muchos han
salido mal parados como golpistas, mentirosos y traicioneros. Personajes como
KFF o Acuña Peralta enfrentan el dilema de promover la vacancia para evitar el
posible acaparamiento de curules por parte de Somos Perú, o se hacen
literalmente los locos con el posible riesgo de que varias agrupaciones
desaparezcan del mapa electoral. La primera posibilidad nos hace recordar la
pesadilla que experimentamos con una mayoría parlamentaria confrontacional
plagada de fujimoristas aviesos que tumbaron a PPK y volvieron ingobernable al
país. Vizcarra, como candidato, pone a los políticos contra las cuerdas. A todas luces, es la cerecita de la torta.
¿Somos el país de las maravillas?, ¿qué hacer? Pues informarnos. Saber qué nos van a ofrecer los numerosos partidos que, de hecho, vienen con posibles delincuentes como candidatos. Nuestro voto es clave para seguir poniendo límites a la corrupción. Es momento de construir ideas, argumentos para desarticular cuanto payaso populista se ponga delante de un estrado o cámaras. Ahí está nuestro poder.
domingo, 8 de noviembre de 2020
DESBARAJUSTE GRINGO (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO 08 NOVIEMBRE)
¡Vaya elecciones norteamericanas! Imbuidas en la pandemia, la fuerte crisis económica, los miedos a cualquier cosa o acción que evoque a un hipotético socialismo y la marcada influencia tendenciosa de una cultura que vive de las encuestas; la semana que pasó ha sacado varios y diversos demonios norteamericanos que están mostrando profundas y preocupantes brechas no solo en lo económico, sino en lo social y cultural, brechas que repercuten en la vida política de ese país. Al terminar de redactar este artículo la balanza se inclinó a favor de Joe Biden, quien será el inquilino de la Casa Blanca, en su calidad del cuadragésimo sexto presidente de esa nación. Sin embargo, hay nubarrones en el panorama.
La figura polémica de Donald
Trump desata fuertes pasiones. Hemos visto por diversos medios las reacciones
de muchos adeptos y correligionarios con actitudes desafiantes y autoritarias
que han generado profundas grietas en el tejido social norteamericano; también
hemos visto las reacciones de diversas comunidades, personalidades y
movimientos contrarios a este presidente por las numerosas declaraciones,
actitudes y desplantes que lo han caracterizado desde su campaña electoral
hasta su periodo presidencial que culminará el próximo enero. Previas a las
elecciones que lo enfrentaron a Hillary Clinton, sus declaraciones racistas,
sexistas, xenófobas y bravuconas eran aplaudidas por aquellos que miraban en él
las posibilidades de volver a hacer a “América grande otra vez”. En su política
exterior tendió a aislar a los Estados Unidos ante una posición que no dejaba
de tener cierta razón desde el punto de vista de un inversionista; sin embargo, en las relaciones internacionales, aunque tengan mucho de ese trasfondo, las cosas
no se mueven necesariamente así. Además, la errática visión pragmática frente
al caso de coronavirus ha tenido consecuencias nada positivas, como le pasó a
la suerte de adlátere que es Jair Bolsonaro. Sus políticas económicas por
encima de las de salud llevaron a sus países a una expansión de la epidemia a
niveles insospechados y, con el agravante de una segunda ola devastadora que
está generando mucha zozobra. La pandemia hizo que millones de estadounidenses
hayan emitido su voto por correo, acción que ha sido cuestionada por Trump al
decir que hay claras evidencias de fraude y que, a la larga, esos votos han
decidido la suerte del ahora virtual presidente norteamericano. Trump y sus
seguidores han actuado erráticamente y dejan mucho por desear: desde la
autoproclamación de su reelección, desconocimiento del voto electoral y el no
reconocimiento de estas elecciones. Esta actitud nos hace recordar las últimas
elecciones en las que Keiko Fujimori nunca reconoció el triunfo de su
contrincante y dio la consigna de boicotear al Poder Ejecutivo desde cualquier
frente con el avieso Congreso que terminó por ser clausurado. ¿Biden y América
Latina? Muchos apuntan que nada cambiará. Veremos.
domingo, 27 de septiembre de 2020
¿QUÉ PASA EN HUANCHACO? (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO 27 SETIEMBRE)
Aires enrarecidos soplan sobre Huanchaco. El balneario emblemático de Trujillo se ve envuelto nuevamente en acciones nada transparentes que están dejando desconcertados a muchos de sus pobladores y a la ciudadanía en general.
Huanchaco es una de las zonas
con mayor identidad no solo en el litoral liberteño, sino en todo el país. Para
la mayoría de las personas que aún no han visitado nuestra ciudad, Huanchaco se
asocia a muchos conceptos con los que se identifica esta antigua zona:
caballitos de totora, su ancestral iglesia que descuella como una atalaya, el
pequeño muelle en el cual vemos a visitantes y pescadores disfrutando de sus
instalaciones, su bella ensenada y las olas que atraen a muchos tablistas.
Entorno a estos conceptos, nuevos y ancestrales, diversas autoridades y
personas ligadas a la actividad productiva del balneario comenzaron a promover al
balneario como un lugar de gran valor sociológico, antropológico e histórico:
desde la antigua ocupación de la zona hasta las costumbres ancestrales preservadas
como el uso de un tipo de junco para hacer los caballitos de totora son
conceptos que atraen a muchos visitantes nacionales e internacionales y,
gracias a ellos, ha surgido una actividad turística (restaurantes, escuelas de
surf, hoteles, bares, ventas de artesanías, visitas a centros de interés) que,
aunque aún no bien ordenada, genera ingresos atractivos a la población y de la
cual se beneficia, también, Trujillo. Pero, el puesto edil también ha sido una
suerte de albur negativo para los intereses colectivos de sus habitantes. Desde
la vacancia del alcalde Fernando Bazán, una serie de situaciones irregulares ha
ido minando el desarrollo armónico del lugar. Huanchaco no es solo el espacio
humano ocupado, es también un complejo ecológico vasto que incluye los
totorales, el cerro Campana y el Tablazo. Esta última ha sufrido una serie de ocupaciones
irregulares; las delimitaciones de la zona de amortiguamiento del cerro Campana
generaron conflictos entre la sociedad y Chavimochic. Además, las propuestas de
pavimentar la vía carrozable que unía Huanchaco con Santiago de Cao atravesando
los totorales procedió generando un impacto negativo sobre estos. Esta vía se
hizo con el fin de reducir el tiempo de acceso al sitio arqueológico de Huaca
de El Brujo; pero, como es costumbre, camiones y vehículos de gran calado
utilizan esta vía con el fin de evadir puestos de control o el peaje de la
Panamericana. Ahora, de manera furtiva y sin avisar a la población, se ha
decidido instalar una serie de postes cuya información técnica se desconoce y,
agregar, que dichas instalaciones presentan una serie de deficiencias como han
denunciado diversos ciudadanos. Huanchaco sufre una serie de acciones que son
una abierta agresión contra los derechos de sus residentes, sin consultas ni
consensos.
La sociedad civil está demandando explicaciones y las autoridades están obligadas a responderlas.
domingo, 30 de agosto de 2020
PELIGRO: POPULISMO (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO 30 DE AGOSTO)
2021: elecciones presidenciales y generales para un nuevo periodo en el Bicentenario de nuestra independencia política. Un nuevo escenario político que comienza a regir sobre las nuevas decisiones y cambios en lo que resta del periodo del actuar poder político. En otras palabras: ya empezó la campaña electoral, comienza el populismo en acción.
El populismo no es una
modalidad política muy antigua; aparece a fines del siglo XIX y, desde
entonces, trata de fagocitar las democracias formales débiles y bajo una
presión social y económica fuerte para existir. Sin embargo, el populista
desprecia la democracia como forma de gobierno, pese a que utiliza todas las
reglas del juego de aquel sistema para catapultarse al poder. Es la forma cómo
se legitima ante la sociedad interna y externa de una nación; por eso, los
dictadores no caben en esta categoría. Los populistas han convertido la
política en un circo, puesto que en los últimos años han recurrido a las formas
populares, incluso las más ramplonas, para atraer a su público objetivo.
Necesitan de las masas para vivir, les succionan la mente y tratan de
comportarse como ellos: por eso, los mítines son espacios para vedettes,
futbolistas o grupos de música chicha, en el caso peruano. Mucha gente confunde
al populista con un izquierdista: aunque dice preocuparse por el pueblo, es una
posición ideológica totalmente opuesta al comunismo; es más, es un zafarrancho
de ideas adecuadas a la coyuntura, como una suerte de ameba social que aparenta
compromiso y sensibilidad social. En la historia los más grandes populistas,
Mussolini y Hitler, fueron enemigos acérrimos de movimientos sociales pese a
que sus partidos se decían llamar socialistas. Sus estrategias de movilización
social, eso sí, fueron empleadas por las extremas derechas que los utilizaron
como tapón. En nuestro país, tal como se ha descrito líneas arriba, hemos
tenido muchos gobernantes de ese talante, con matices en sus perfiles que
terminan fascinando no solo a una población desesperada de legitimidad y atención,
sino por intelectuales y personas con formación personal relevante. Fujimori,
por ejemplo, tuvo a varias personalidades académicas que justificaron sus
atropellos contra DDHH o los opositores de su régimen, el que iba cayendo cada
vez más en la corrupción. Son personas que buscan el reconocimiento de su labor y,
al igual que el corrupto, justifican sus actos como una acción justa hacia el
pueblo, que lo aclama y se admira de sus hechos, pese a que estos son obligaciones
que le corresponden a su función.
En los próximos meses, veremos
atentamente cómo ideas desfachatadas surgen en el marco de esta situación
extrema de una sociedad golpeada en su economía y en su sanidad. Campo ideal
para un oportunista avezado como lo es cualquier populista. Así, jugando con la
necesidad de una masa electoral enceguecida y enfurecida, esta pueda poner en
el sillón presidencial el pináculo de su desgracia.
domingo, 9 de agosto de 2020
EN EL LIMBO (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO 09 DE AGOSTO)
Cierta vez un amigo extranjero comentaba que en el Perú era muy difícil aburrirse, pues siempre había alguna novedad que te sacaba de cuadro y rompía los esquemas cotidianos. Después de Fiestas Patrias, hemos tenido incrementos alarmantes de contagio y muertes, y pedidos desesperados para implementar medidas caprichosas, como la de Christian Rosas de volver a abrir las iglesias en plena expansión de la pandemia.
Martes 04. El entonces
flamante (ahora extinto) Gabinete presidido por Pedro Cateriano fue al Congreso
de la República a presentar su plan y solicitar a este el voto de confianza
para empezar a trabajar. Desde que inició sus funciones, el parlamento no ha
dejado de sorprendernos: el tratamiento de la inmunidad creó el primer choque
no solo con el ejecutivo, sino con la ciudadanía en general. Medidas más,
medidas menos; el Congreso seguía su camino desconcertante contra una población
urgida de planes concretos y necesitada de recursos para mitigar su situación.
Pedidos como el sesionar en Arequipa desconcertaban a la opinión pública. Por
otro lado, la conformación del gabinete Cateriano con algunas personas de
dudosa capacidad de gestión encendió la pradera. Un ministro de trabajo
cuestionado y encubierto por el ex Premier fue comidilla de la opinión pública.
La presentación de Pedro Cateriano no satisfizo a varias personas que no ven
con buenos ojos, por ejemplo, la minería como el motor económico de una nación
en la que ha visto desarrollar otras actividades vitales como la agricultura; el
voto en contra de los congresistas del FREPAP y de izquierda era de esperarse;
pero las otras votaciones sí fueron bastante sorpresivas en un principio; pero,
a medida que se van desenredando los hilos turbios, todo va encajando en un
engranaje tenebroso. Este Congreso, sabedor del hecho de la imposibilidad de su
disolución, ha comenzado a mostrar la cara y su urgencia de no perder tiempo
para lograr objetivos contrarios al bien común e interés nacional: la primera
muestra la dieron cuando en el mes de julio se interpeló al Ministro de
Educación. La intención es desmantelar el sistema de acreditación universitario,
pesadilla para muchas universidades surgidas en los 90, que han resultado ser
toda una estafa a miles de estudiantes por la calidad de enseñanza impartida.
Para nadie es un secreto el hecho de que muchos partidos han surgido en torno a
una universidad o clan universitario. Los procesos de acreditación han develado
errores, faltas e incumplimientos básicos; y aún restan todavía. El negociado
que involucra a partidos como APP, y su abstención, o Podemos han generado desconcierto
en la sociedad peruana. Y otro partido que desluce cada vez más es Acción
Popular, que ha resultado ser una suerte de refugio de personajes
cuestionables, como antes lo solía ser FP. Una vez más ponemos en duda la
naturaleza de los partidos políticos, creados más por intereses personales que
el de buscar el bien común.