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Trujillo, La Libertad, Peru
Un espacio para mostrar ideas y puntos de vista ligados al arte, a la cultura y la vida de una sociedad tanto peruana como universal

lunes, 27 de agosto de 2018

PADRES EN SU SOLEDAD (ARTÍCULO DE OPINIÓN PARCIALMENTE REPRODUCIDO DIARIO LA INDUSTRIA DOMINGO 26 DE AGOSTO)


La reciente lamentable muerte de la niña Xohana Guerra en un buzón de la plaza de armas de Cerro Azul, Cañete, viene a ser una suerte de triste colofón, de una serie de errores inmediatos y mediatos que debemos de tener en cuenta. Rodeados por la cultura de informalidad y la displicencia, cada uno de los actores de esta triste experiencia es una larga suma de errores sociales (algunos de los cuales justificamos como casualidad) que está generando una larga retahíla de niños y adolescentes heridos o, en lo más extremo, muertos.
La cultura del aislamiento que se viene desarrollando agresivamente en nuestro siglo ha cambiado comportamientos y perspectivas de todas las personas de una sociedad, personas que asumimos diversos roles, entre los cuales están el de ser hijos y padres de una familia. Este acelerado proceso de aislamiento ha coincidido con una tergiversación de reconocimiento de valores individuales, así como un marcado ensimismamiento de las personas de su mundo personal, ayudado por la presencia de un mundo electrónico invasivo que hace que mucha gente deje sus labores de su compromiso social (como es el del preocuparse del prójimo, entre estas, la de cuidar de sus hijos) para sentirse raramente integrado con el mundo descuidando a su entorno. Así no es raro ver a policías, mozos, secretarias, maestros, padres de familia en general, más preocupados por su celular que de las personas a las cuales se dedica. El caso de Xohana, producto inicial de un descuido, es el largo hilo de una madeja. Agreguemos a esto, la informalidad y la escasa cultura de la prevención y seguridad para tener una de las tantas tragedias familiares de nuestro país.
La tergiversación de valores es otro de los grandes problemas en este mundo plagado de derechos y escaso de deberes. La niñez y la juventud han tenido grandes avances en el reconocimiento de sus derechos, aunque faltan muchos pasos más por dar. El abuso de estos derechos por parte de adultos, entiéndase padres de familia, genera una fuerte debilitación del crecimiento de relaciones sanas en el núcleo familiar. Los niños y adolescentes crecen en mundo avieso en el cual su persona es el centro del mundo y los demás son accesitarios. Craso error. Grandes conflictos de jóvenes mimados, carentes de límites y autoridad los vemos cada día. Estas carencias devienen en rebeldía extrema, escasa emoción social, frustración por su dependencia en todos los campos. Muchos jóvenes intentarán medidas extremas (como el suicidio) para hallar respuestas a un periodo doloroso el cual no tuvo cimientos sólidos desde la niñez por exceso de sobreprotección y carencia de reglas de convivencia. Hay muchos padres que en su accionar debilitan su propia figura de autoridad, la cual será un patrón referente para ese joven, quizá futuro padre o madre de familia.
La sociedad nuestra, además, genera situaciones que generan dudas en el crecimiento de niños y adolescentes. Se les habla de valores y ven un mundo adulto lleno de cínicos y corruptos; se les habla de la unidad familiar y vemos cada vez más madres adolescentes tratando ellas mismas de sobrevivir; por eso se llaman adolescentes, pues carecen de muchos recursos aún. La sociedad lejos de apoyar dando buenas herramientas a diversos jóvenes que desconocen todo, se les da la espalda aduciendo criterios religiosos o morales de quienes, a veces, no tienen ningún sustento más que el de sostener sus creencias. La educación sexual correcta en el Perú es urgente. Así no lanzaremos a la vida a padres tan jóvenes que después generan una cadena de problemas de nunca acabar.


domingo, 26 de agosto de 2018

LA SOLEDAD DEL AUTOEXILIO (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO DOMINGO 26 DE AGOSTO)


Por varias décadas la vida ha sido dura para miles de compatriotas que tuvieron que partir presionados por la situación económica que atravesábamos desde los años finales del segundo gobierno de Fernando Belaunde, la presencia creciente de Sendero Luminoso, el nefasto primer gobierno de Alan García, el recrudecimiento terrorista en nuestro país y el terrible paquetazo de Fujimori en su primer gobierno. Muchas eran las condiciones políticas, sociales y económicas que asolaban a la sociedad peruana. Eran años que, a diferencia de sociedades estables, las más frecuentes reuniones de amigos eran para despedir a uno u otro que se iba a estudiar, trabajar o, en el peor de los casos, a tentar suerte fuera de nuestro país por lo insostenible de nuestra realidad. Miles de peruanos prefirieron coger sus bultos y partir dejando atrás una patria desolada, violenta, egoísta. Esa situación hizo que muchos países cambiaran sus regímenes migratorios para controlar ese desbande humano. El fuerte flujo migratorio hacia varios países como España e Italia, permitían un sueño europeo para muchos latinos y, con una migración tan fuerte que hizo reaccionar violentamente a la sociedad española al hallarse, de pronto, rebalsada por un flujo migratorio, no solo de latinoamericanos, sino de magrebíes, africanos saharianos, europeos del este. Sus calles, servicios, e incluso carreteras, se llenaron de emigrantes desesperados por hallar una vida mejor o, por lo menos, algo de condiciones de vida básicas satisfechas. En esa oleada migratoria, fueron personajes marginales que hallaron una sociedad incauta, cándida, fácil de engañar; así surgieron varias bandas delincuenciales que hicieron su “América” en una España desesperada por hallar un control. Pero no eran todos los migrantes.
La visa española de 1994 fue una respuesta ante los acontecimientos, la que nos encontró un poco desprevenidos. Ese año tuve la suerte de ganar una corta beca en Dinamarca. Un mes antes de mi partida, España implementó, de manera unilateral, dicha visa para colombianos, ecuatorianos y peruanos. Mi llegada, aquella vez, a España no fue grata. El trato general de mucha gente era un poco hostil contra los “sudacas” que llegaban por cientos. Ese término se generalizó. A mi retorno, nuevamente pasé por Madrid. En el vuelo iban unos tres o cuatro pasajeros deportados. Hablé con uno de ellos; estaba desolado, sin dinero, extraviado en su angustioso regreso a Lima, lugar adonde iba con incertidumbre.
Quienes hayan experimentado la sensación de ser un extraño “peligroso” comprenderán la realidad que pasan muchos venezolanos que tratan de buscar un futuro mejor. Identificados como peligrosos, son humillados por personas de escasa empatía y, por qué no decirlo, llenos de resentimiento. Los venezolanos están “quitando” el trabajo a peruanos; de ser así, eso es lo que están haciendo ahora los más de dos millones de peruanos que viven en el extranjero.

domingo, 19 de agosto de 2018

ANATOMÍA DEL CORRUPTO A LA PERUANA (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO DOMINGO 19 DE AGOSTO)


La proliferación inaudita de corruptos en Lima ya está tocando a Trujillo. El Poder Judicial de nuestra ciudad se ve remecido por una serie de acusaciones que, posiblemente, terminen pareciéndose a los gruesos destapes hechos gracias a los audios difundidos por diversos medios limeños que muestran el poder del narcotráfico (origen de la investigación), lavado de activos y tráfico de influencias. Además, nos permite conocer a una retahíla de corruptos que han desarrollado un espíritu cínico bajo el amparo de una serie de absurdas justificaciones legales risibles que los mantiene, aún, en sus puestos. Es cinismo puro. Jueces, abogados, empresarios, comunicadores, periodistas, políticos hasta deportistas de antaño, han sido nombrados y pocos, desgraciadamente, acusados y en prisión. Lo lamentable es que, tras ellos, hay un grupo nutrido de personas que los defiende, quizá por temor a que la caída de aquellos los involucre estrepitosamente.
Aunque la corrupción en nuestro país campea por siglos (hay que leer el libro Historia de la corrupción en el Perú de Alfonso Quiroz Norris), los eventos del periodo montesinista y el actual cuentan con claras evidencias de la corrupción: aquel con vídeos; este, con audios. Pese a todo el aparato legal que jueces y abogados corruptos quieren emplear para deslegitimar las pruebas obtenidas en los recientes audios, las evidencias quedan y la sociedad ya está informándose. Nosotros sí tenemos por qué estar indignados por los recientes sucesos, salvo que uno sea abiertamente cómplice de cualquiera de estos individuos. Veamos el perfil del corrupto, según Bertrand De Speville, especialista en lucha contra la corrupción. Muchos de nuestros personajes identificados como tales encajan perfectamente. Tomemos a cualquier persona identificada en los audios que sea un corrupto comprobado o que tiene todas las posibilidades, pese a los artilugios legales (como prescripciones u otras leguyadas), y comprobamos: 1) Cree que lo suyo es más valioso (“sobrevaloración psicótica de lo propio”) frente a una subvaloración de lo ajeno, sin remordimiento alguno. 2) Genera un clima de credibilidad de tal manera que las personas que son víctimas de sus actos colaboran con ellos con toda pasividad; por eso detestan la violencia para no generar inestabilidad en su juego. 3) Es hábil y crea mecanismos que aseguran una cierta estabilidad para mantener la actividad corruptiva en el campo que se está desempeñando. 4) Se convierte paulatinamente en una persona admirada por dotes intelectuales y capacidad de “emprendimiento”. 5) Desprecia a las demás personas que, pudiendo hacer lo mismo, no son arrojados a realizar dichos actos. 6) Y, por último, ya cayendo en los límites de la insania social, tiene una escasa percepción del riesgo y desarrolla una confianza amparada en la impunidad. Así podemos entender la actitud de Hinostroza, Chávarry, Camayo, un largo etcétera a la peruana.

domingo, 12 de agosto de 2018

RULETA RUSA CONTRA LA MUJER (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO DOMINGO 12 DE AGOSTO) LEY TRUNCA CONTRA LOS DERECHOS DE LAS MUJERES


Dos noticias llenaron los medios de nuestro país y del mundo: en nuestra sociedad ha surgido una fuerte oleada de xenofobia, la cual se ha expandido por las redes. A nivel internacional, un anacrónico rechazo por parte del Senado argentino a la aprobación de la despenalización del aborto consentido y asistido ha dado las espaldas a la sociedad de ese país y del mundo.
Durante y tras la discusión sobre esta posible ley que hubiera ayudado a miles de mujeres en condiciones extremas a mejorar un poco su condición de seres humanos y darle una pequeña luz de calidad de vida, diversos grupos en “favor de la vida” sostienen argumentos en los que la mujer como tal no tiene ninguna presencia. El mero envase en el que se convierte la mujer le resta cualquier derecho para poder planificar su vida, muchas veces destrozada por momentos dolorosos que les toca vivir: acoso familiar (padres, tíos o primos que embarazan a una menor aterrada), violación o prostitución. Hasta donde yo sé, la familia planifica la prole que va a tener. Es un acuerdo en común que le permite a la pareja poder ofrecerle al hijo que venga no solo amor, sino calidad de vida y condiciones para su desarrollo. Esto es lo óptimo, sentido común, sensatez. Pero las situaciones duras que proliferan en nuestras sociedades muestran la verdadera cara del horror para miles de mujeres indefensas no solo previo o durante un ataque que vulnere sus condiciones mínimas de seguridad y respeto, sino también tras los ataques de cualquier índole. Por ejemplo, una mujer violada no solo recibe una asistencia mediocre o nula por parte de las autoridades competentes, sino que llegan a culpar a la víctima de ser la propiciadora de la situación. Podemos extender esta situación delicada a los casos de pederastia. Tanto así que incluso ha habido y hay autoridades eclesiásticas que emiten juicios derivando la culpa a la mujer y al niño de ser los incitadores de la violación. El mito de Eva ad aeternum. La iglesia, alarmada por esta impactante realidad, ha comenzado lentamente a reaccionar. Es algo.
Pero lo más preocupante, alarmante es saber que muchas de las personas que claman defender la vida, posteriormente se desentienden totalmente del niño y la mujer. Les cierran todas las posibilidades de soñar por algo mejor. No apoyan causas para acoger niños nacidos bajo estas condiciones; no apoyan en crear centros de apoyo psicológico para mujeres en riesgo; no fomentan una transparente educación sexual en los colegios para que tanto niños y niñas, futuros hombres y mujeres, conozcan su cuerpo, sus riesgos y posibilidades. Deberían ser los promotores de crear condiciones para una mejor calidad de vida. Hay que oír el descontento de la gente. Irónico es saber que muchos de esos defensores de la vida apoyan causas como la institucionalización de la pena de muerte, son homofóbicos o promueven la xenofobia pidiendo la expulsión de venezolanos que llegaron buscando una vida mejor.

domingo, 5 de agosto de 2018

TODOS LOS CAMINOS (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO DOMINGO 05 DE AGOSTO, TRUJILLO)


“Todos los caminos conducen a Roma”. En nuestro país, “todos los caminos conducen a la corrupción”.
Tras idas y venidas en estas dos últimas semanas, la ética, la verdad, la justicia y la credibilidad han recibido tantos golpes humillantes. Sus repercusiones están alcanzando a todos los ciudadanos sin excepción. Tenemos la conciencia social triturada, no solo por las acciones de los malos ciudadanos ejecutores de estas maniobras ilegales, sino por el absurdo manejo que otros tantos hacen de toda la información que ha ido apareciendo, ciudadanos a los cuales solo les preocupa sus intereses partidarios más que la verdad. Han ido pulverizando la conciencia ciudadana. Día a día, Pandora nos ha ido revelando pesadillas de un mundo movido por intereses lesivos contra nuestra sociedad en su conjunto. Las investigaciones, cuyo móvil inicial es la lucha contra el narcotráfico y el mundo criminal organizado en torno a este, han sacudido toda la clase política (bastante desacreditada), “empresarios exitosos”, personajes mediáticos, además del bastante podrido Poder Judicial. Además, nos ha acercado a grupos empresariales turbios, acusados de diversas formas de cohecho, malversación, extorsión e, incluso, asesinato. Los tentáculos de estas mafias se han enquistado en todos los campos y hemos visto personas autodenominadas de intachables e incorruptibles entrando en estas danzas nefastas; estas han tratado de justificarse tras la aparición de sus nombres en ese caldero de audios de esta valiosa investigación. Vemos desfilar jueces, abogados, congresistas, empresarios, deportistas, comunicadores: un largo etcétera humillante. La semántica nunca se había usado con fines tan viles para restañar su imagen ante los demás.
En esta vorágine, algunos líderes políticos están buscando estratagemas para salir librados de esta segunda oleada de escándalos; estos han intentado, escandalosamente, salir totalmente limpios del tema Odebrecht - Lava Jato. Aún quedan pendientes muchas explicaciones claras sobre la danza de dólares “invertidos” en campañas electorales de las últimas décadas y grandes favoritismos en concesiones en mega obras de infraestructura (¿les suena Chavimochic?). Solo estuvieron en prisión Ollanta y Nadine; pero, Marcelo Odebrecht y Jorge Barata hablan de más graciosas “donaciones” a candidatos y candidatas, sea de manera directa o indirecta en la modalidad de una bolsa de aportantes, explicación que comprometió a gente de la Confiep y medios.
Para cerrar esta lúgubre semana, vimos cómo los partidos políticos se han convertido en abiertos paraguas que acogen a oscuros postulantes para diversas alcaldías con el fin de legitimar sus actos delincuenciales. La captura del alcalde del distrito de La Victoria es una muestra de ello: el cuarto delincuente legal acogido por un partido capitalino. Estas evidencias nos hacen preguntar si en realidad somos sus cómplices y si estos son una real muestra de nuestra verdadera imagen como sociedad.