Datos personales

Trujillo, La Libertad, Peru
Un espacio para mostrar ideas y puntos de vista ligados al arte, a la cultura y la vida de una sociedad tanto peruana como universal
Mostrando entradas con la etiqueta literatura. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta literatura. Mostrar todas las entradas

martes, 1 de mayo de 2012

OSWALDO REYNOSO EN LA UPN TRUJILLO


El día viernes 27 de abril tuvimos como invitado de lujo en nuestra Universidad al escritor Oswaldo Reynoso gracias a la gestión de Mauricio Málaga y la Editorial San Marcos, empresa representada por Mauricio en nuestra ciudad. Esta visita está dentro de un marco del plan lector que nuestro Dpto. en el área de Lengua ha desarrollado por varios años. Para este año académico tenemos como proyecto trabajar dos autores urbanos. Oswaldo Reynoso es el primero. Nuestros jóvenes deben leer un texto de este autor dependiendo el curso que lleven (se escogió LOS INOCENTES y EN OCTUBRE NO HAY MILAGROS); el texto LOS INOCENTE fue acompañada por un puesta en escena de la misma obra con un inusitado éxito, tanto por la propuesta en sí, como la calidad de los actores y la polémica generada entre los alumnos que fueron a verla (casi mil quinientos alumnos). http://www.youtube.com/watch?v=_mOjWezM3g8&feature=g-upl&context=G2700a14AUAAAAAAAAAA
Y para redondear, una conversación amena, franca y directa con el autor mismo, tanto sobre su vida como su obra en sí.
La presentación de Reynoso se realizó en dos turnos. Lastimosamente nuestra Sala de Conferencias no reúne las condiciones para poder alojar a más de mil ochocientos estudiantes que han leído uno de los dos textos (algunos ya han leído los dos, motivados por la obra de teatro). Así que se procedió a seleccionar a algunos alumnos para que “representen” a sus demás compañeros en dichos conversatorios. La organización y las instalaciones estuvieron correctas, y los eventos se realizaron sin contratiempos.
El primero se realizó por la mañana. Oswaldo es una fuente de anécdotas y experiencias que hicieron muy divertida y dinámica el conversatorio. Primero habló de él como persona y luego como creador. Fue muy puntual al diferenciar las palabras “escritor” con creador”. El artista no es escritor, palabra que está ligada a toda aquella persona que escribe, sea su obra arte o no. Él se reconoce como artista, como “creador”. La palabra “escritor” limita al artista a hacer una producción que no necesariamente esté ligada al arte como el ensayista o periodista. Narró sus experiencias como conferencista y contó una que arrancó muchos aplausos espontáneos de los alumnos: cuenta que una vez fue a un colegio para hablar sobre LOS INOCENTES; todo transcurría en la normalidad hasta que una alumna le hizo pedido extraordinario: un regalo para Colorete, uno de los personajes de la obra. Los chicos compañeros de la alumna hicieron chacota y el mismo autor la quiso desalentar en su empresa. Le dijo que el personaje era una ficción literaria; ella replicó si este personaje no había surgido de uno de sus amigos; Reynoso replicó que sí hubo una inspiración, pero que dicho personaje ya peinaba posiblemente canas como él, sino estaba muerto. Insistió ella en darle el regalo y él le respondió que le dé un plazo de una semana para buscarlo y darle el regalo; si no lo hallaba, lo tomaría él. Reynoso respetó sus palabras comprometidas y esperó la semana, sabiendo el final. Al finalizar el plazo, abrió el regalo y en él había un bombón. Nunca en su vida había comido un bombón más delicioso que ese. También tuvo algunos tristes desencuentros con autoridades escolares, sobre todo en colegios religiosos o en aquellos en que la educación es excesivamente vertical. Hubo casos anecdóticos como el hecho de haber sido invitado por las autoridades de un colegio y, en el transcurso del diálogo con los alumnos, las autoridades le iban dando la espalda y salía con “olor en santidad” vitoreado por los alumnos. Ahora, luego de 50 años de publicada su pequeña novela escandalosa, colegios religiosos lo invitan e, incluso, en una genial anécdota, lo hacen partícipe de eventos religiosos, como el que le sucedió en Huancayo durante una procesión del Señor de los Milagros. Las autoridades educativas del colegio lo invitan, a pesar de saber que es ateo, a que presencie el paso de la imagen en la suerte de estrado oficial que se había hecho para la ocasión. Y no sólo eso, sino que tenía que permanecer al lado del altar que se había colocado ex profeso. Me hizo recordar al personaje suyo, Don Manuel de En octubre no hay milagros,  que miraba el paso de la procesión desde un balcón privilegiado de las antiguas familias oligarcas de nuestro país de los 50. Y más anecdótico aún saber que su mismo libro, así como le sucedió a MVLL con La ciudad y los perros, lo iban a condenar a la hoguera en plenas festividades moradas. Ironías de la vida.

Por la tarde, Reynoso se centró en hablar en, para mí, su obra cumbre: En octubre no hay milagros. La construcción de la historia en historias paralelas y distantes (realidades económicas de una ciudad emergente como lo era Lima en los 50 – cierta analogía con el Trujillo de inicios del XXI-); realidades aparentemente dislocadas, personajes que se van entrelazando en un campo gris como lo fue, es y será siempre Lima. Rememorando a Joyce y su Ulises, Reynoso cuenta las historias de un gran psique urbana en sólo 18 horas; se desnuda en realidades violentas, cargadas de frustraciones y oscuros manejos del poder. Y el hilo conductor lo es la ciudad, el mes, un evento religioso que estratifica en ese reducido espacio todas las realidades socioeconómicas del Perú de entonces. Aunque Reynoso rechaza encasillar su novela a ese espacio histórico que fueron los 50 en nuestro país, la novela rezuma mucho las características históricas de sus tiempos. Una oligarquía xenófoba, enemiga de los capitales foráneos, monopolizadores económicos y políticos que van a derrumbarse lentamente hasta la estocada de Velasco y su golpe militar. Vemos a una Lima emergente, arribista, inescrupulosa; violenta, frustrada pero sensual, con sexualidad explosiva que se manifiesta abiertamente en los lugares tumultuosos para sobarse sin enfado entre hombres y mujeres, la mañosería a la orden del día. Además, las propuestas políticas desinfladas por una ley o por un varazo policial. Los asesinatos políticos que aún quedan en retinas como las nuestras (los grupos Colinas están al acecho). Su técnica narrativa micro espacial fue trabajada posteriormente por MVLL en su gran obra La casa verde; en esta última los espacios no se circunscriben a una ciudad; ya hablamos de realidades geográficas más lejanas, Piura, la selva.  
Aunque las dos sesiones no se las puede llamar conversatorio, sino interrogatorio, las preguntas formuladas por los alumnos fueron bastante interesantes y que Reynoso respondió con anécdotas y datos personales. Hubo varias, pero las focalizaré en las del uso de lenguaje, la construcción del personaje y su actividad creadora: la primera fue la que marcó la revolución en la acartonada literatura peruana de esos años. Trasladar el lenguaje de la calle, el umgangsprache de la gente, lenguaje familiar, el creativo, el que va entornando las palabras, lo que lo hace rico, expresivo. Como decía Reynoso, no el lenguaje del diccionario que es el “cementerio de las palabras” sino el cotidiano; el habla es permanentemente poética, estamos creando todos los días. Cuando iba dando respuesta a estas preguntas, recordaba a Julio Hevia en su libro ¡Habla, jugador!, libro que reflexiona sobre la jerga peruana. Pero sí cuestionó la pobreza de los usos lingüísticos, no ligados a la creatividad; muy por el contrario, es la negación de la misma. Formas tan usuales como “o sea” y el famoso “y nada” tan frecuente en figuras públicas como futbolistas o vedettes han terminado por empobrecer las formas comunicativas de los jóvenes. La falsa crudeza con la que se expresan los jóvenes de Los inocentes sigue escandalizando a padres, educadores y otros tras cincuenta años de publicada. Creo que hay que abrir un poco más los oídos para oír a sus hijos, alumnos y jóvenes en general, está ahí. En cuanto a la construcción de sus personajes y su identificación con ellos, Reynoso no rechaza la idea de que algunos de sus personajes lleven mucho de él, es casi una ley literaria que el autor tome parte de su vida personal. Creo que ambos grupos de preguntas, las de focalizadas en el personaje y las de su actividad creativa, van juntas. Reynoso nos habló de la influencia personal, sus experiencias y anécdotas de vida, como la del autor reflejo de su momento histórico, de su coyuntura. Así tal como lo reflejo en su novela reflexiva Los eunucos inmortales, en las que va uniendo su experiencia china en el momento de estallar la revuelta y masacre de plaza Tian´anmen en Beijing y la masacre del colegio Independencia de su añorada Arequipa, ciudad de nacimiento. En el autor confluyen estas dos corrientes y el creador va en la búsqueda de nuevas formas para poder expresar lo que él quiere. Comentó sobre su libro El escarabajo y el hombre, obra en la que hace una interesante experiencia literaria a nivel del uso de palabra escrita,  de lo coloquial a lo estándar a lo literario. Ante una pregunta interesante de por qué no había mujeres en la obra Los inocentes, Reynoso se refirió a nuestra costumbre muy latina de reunirse con las personas del mismo género, costumbre por todos aplicada y que no ha dejado de hacerse hasta en nuestros días. Él mismo contó la anécdota de tres amigas suyas que iban con ellos, varones, a diversos sitios como bares; automáticamente todos los demás presentes inferían que ellas eran prostitutas. Esa costumbre es un fiel reflejo de su época, que aunque aún quedan rezagos en nuestros días, ciertamente están un poco en desuso, felizmente. Con esto explicó por qué los personajes femeninos son periféricos en esa obra, son secundarios y vistos y narrados por esos muchachos cuyas vidas eran el fiel reflejo de la crueldad urbana.

Una vez concluidas los conversatorios los chicos se acercaron para hacerles algunas preguntas, para los famosos autógrafos y las fotos de rigor. Conversar con él de manera personal es más divertido aún, pues es una fuente inagotable de datos y ocurrencias de un hombre con más de 80 años de viajes, experiencias, sinsabores, éxitos y chismes puede cargar consigo mismo.

Quedan pendientes otras reuniones.

sábado, 28 de abril de 2012

MÁS DE MUJERES QUE HABLAN SOBRE MUJERES QUE ESCRIBEN


El mundo de la literatura es amplio y rico. Es un trabajo ambicioso escudriñar esta arte en una sola lengua, lo es más cuando abordamos otras más. Luego de las exposiciones iniciales de Orietta Brusa (quien habló sobre Elsa Morante) y Miriam Núñez (sobre María Emilia Cornejo), el día martes 10 de abril se realizaron las exposiciones de Claudia Riess, Emily Kesch y Carmen Ortega. Lugar de reunión: Alianza Francesa de Trujillo.

La primera, alemana, decidió abordar a una escritora inglesa, Anne Perry. La fascinante historia de esta escritora nacida como Juliet Marion Hulme, no sólo es famosa por sus terribles narraciones del oscuro Londres de fines del XIX, sino por haber protagonizado un asesinato en Nueva Zelanda, a la cual había llegado para alcanzar a sus padres que se habían mudado a ese país. Allí protagonizó un sonado asesinato que fue “visto” a través del film neozelandés CRIATURAS CELESTIALES con gran éxito internacional. Libres de la pena capital por el asesinato cometido contra Honora Rieper, madre de la amiga cómplice, Pauline Parker, ambas son recluidas por cinco años y liberadas por separada. Juliet se muda a Inglaterra para luego pasar a Norteamérica. Regresa a vivir a un pequeño pueblo en Escocia donde inicia su carrera como escritora. Pareciera que sus obras son truculentas, dignas crónicas de la prensa amarilla. Pero Claudia se centró en hacernos ver el valor de estos relatos cortos que iban mostrando crímenes en un mundo más sórdido como pudo haber sido la época victoriana. Al estilo de Dickens, la Perry (seudónimo que tomó de su padrastro) comenzó a desnudar la crueldad social que rodeaban a los alucinantes criminales y los detectives e investigadores (Thomas Pitt – cadalso, irónico, ¿no?- y William Monk). En sus casi 50 libros policiales (y de otros temas menores), ella nos muestra cómo ha asimilado pacientemente la estructura de la novela policiaca, gracias a las intensas lecturas que tuvo en su infancia, cuando yacía postrada en su cama debido a su delicada salud (por eso mudaba tanto a diversos países con mejores climas como Sudáfrica). Pero la estructura policial sólo es pretexto para mostrar ese ambiente omnipresente y agobiante que fue la era victoriana, las rígidas clases sociales, los sombríos intereses de una potencia económica que era sociedad londinense, que vivía de apariencias y formas, y no dudaba en sacrificar o hacer desaparecer todo a aquel o aquello que atentara cambiar el statu quo. Claudia Riess nos trajo además una serie de datos, imágenes y fotos que mostraban la realidad sórdida de los bajos fondos de las ricas ciudades inglesas de entonces.

Emily Kesch, aunque peruana, por sus orígenes belgas, abordó a una grande: Marguerite Yourcenar. Este “monstruo” literario (en el buen sentido de la palabra) tuvo un gran bagaje cultural gracias a su familia, ambas líneas de origen aristocrático. Huérfana de madre desde prácticamente recién nacida, se crio en el norte de Francia. Su padre le enseñó latín y griego clásicos, toda una formación humanística clásica. Por la guerra, se va a los Estados Unidos, donde mantiene una relación afectiva con Grace Frick, relación que tuvo hasta la muerte de esta última en 1979. La Yourcenar (anagrama de uno de los apellidos paternos: Crayencour) escribe su primera obra: ALEXIS O EL TRATADO DEL INÚTIL COMBATE. Esta obra expone la lucha inútil de un personaje, Alexis, quien le escribe a su esposa para confesarle su homosexualidad. Me atrevo a decir que su condición (la de Marguerite) le permitió acercarse al tema homosexual con marcada discreción, pero con franca verdad frente a esta condición, tan vilipendiada por siglos en la humanidad. Así le permitió acercarse al grande Yukio Mishima, en su obra MISHIMA O LA VISIÓN DEL VACÍO. Pero nuestra expositora se concentró en dos obras: CUENTOS ORIENTALES y opus magnum, MEMORIAS DE ADRIANO. La primera obra es, en realidad, una serie de cuentos reunidos bajo este título. Proceden de diversas partes del Lejano Oriente, como China y Japón, pero los hay también de Grecia y del folclor de los Balcanes; de este último recuerdo un terrible cuento llamado LA LECHE DE LA MUERTE, de la antigua tradición balcánica, específicamente albanesa, que mezcla una terrible narración de la muerte de una madre con la antigua tradición de enterrar o empalar un muro con una bella doncella para darle consistencia a la construcción. Y cómo el lugar se torna en un lugar de peregrinaje a las madres, ya que la doncella en realidad era una madre reciente y  clama que le dejen los senos afuera, no sellados, para poder dar de lactar a su bebé recién nacido hasta que ella se extinga. Pero la historia es contada justo cuando llega a ellos una gitana que va encegueciendo a su bebé recién nacido para poder mendigar. Los contrastes maternos. Y más alucinante aún la narración KALI DECAPITADA, que explica a su manera el origen terrible y triste de esta bella diosa caída en desgracia por culpa de la ambición de los hombres, a quienes les recuerda sus errores con sus despiadadas acciones y su gusto por el sufrimiento de todo ser vivo. Mas Emily Kesch se iba a concentrar más en MEMORIAS, obra capital de la escritora, una de las primeras grandes novelas históricas del siglo XX y que va a trazar la pauta a todos aquellos que gustan de este variante en el género. Adriano, uno de los grandes emperadores romanos, agoniza y decide escribirle una carta-testamento a su nieto, Marco Aurelio. Él, Adriano, le va contando toda su historia desde su juventud, sus victorias, sus miedos, su pasión por el joven Antínoo. Es una profunda reflexión que hace de Adriano un ser humano excepcional y común, a la vez. La vejez, camino obligado a la muerte, permite a un ser humano hacer un recuento de todo lo somos y hemos hecho. Nuestras acciones dan nuestra hechura. Profusa en datos históricos, personajes que existieron, hechos bélicos, nos cuenta el largo sendero que fue su vida. La pasión que tuvo por el joven Antínoo al cual le dedicó estatuas y templos, así como su admiración y respeto por una cultura milenaria: Egipto. Cual Alejandro Magno, cuenta su viaje a este místico mundo y es en Luxor donde Adriano le dedica un pequeño templo – ara a Antínoo. Una de las partes más sentida es la reflexión sobre su cuerpo cansado, viejo y agotado, al que describe como un cúmulo de líquidos y tejidos, que conforman a su único y gran amigo, el único que lo acompañará hasta su muerte. Más que una visión dolorosa es de alegría de saber que éste nunca lo dejará sino al morir. MEMORIAS es un gran libro. Personalmente, me hubiera gustado que abordase también OPUS NIGRUM para conocer a Zenón y el hombre que encarna la luz en los momentos que originan los cambios del medioevo al renacimiento.

Para cerrar la noche, Carmen Ortega nos presentó a una escritora poco conocido en el mundo del castellano sudamericano: ROSALÍA DE CASTRO. La escritora que Carmen presentó no sólo es grande por su obra poética, sino porque ella sí encarna el verdadero movimiento romántico en la península. El romántico es un movimiento artístico que surge en Alemania bajo los designios de una necesidad cultural, lingüística y política para forjar una nueva nación. Las ideas de la Revolución Francesa tienen en Alemania una clara manifestación del sentido de Libertad e Igualdad. El alemán como idioma de cultura (ya lo había intentado Lutero con la fuerte reacción de la iglesia católica), el folclor como una verdadera manifestación noble del espíritu humano, la naturaleza como un medio de los sentimientos humanos. Así como Goethe y Beethoven en Alemania, esta semilla se esparce por toda Europa. Y llega a España. La cultura oficial castellana, sobre todo durante la dictadura de Francisco Franco, sólo reconocía como romántico al gran poeta Gustavo Adolfo Bécquer. Pero la democracia a la muerte del tirano, abrió las puertas a las autonomías para revalidar su lengua y su gran obra literaria. Para el vasco, catalán y gallego, el periodo franquista se emerge como una sombra amenazadora. Desde 1939, al fin de la guerra civil española hasta la muerte de Franco en 1975, hubo diversas y tristes manifestaciones de estas opresiones vergonzosas. Para los que ya tenemos varios años encima, recordamos cuando Joan Manuel Serrat fue vedado para representar a España en Eurovisión, ya que quería cantar en catalán. Le dieron el pase a Massiel. Volvamos a Rosalía de Castro. Gallega de nacimiento, escribió tanto en castellano como en gallego. Esta última decisión fue transcendental en un momento en que el gallego era considerado un dialecto campesino, inculto. Entonces, había que empezar de cero, puesto que todo tenía que ser por primera vez escrito, luego de varios siglos de silencio gráfico (si cabe el término) a la que se sumió esta lengua. Al escribir su poemario CANTARES GALLEGOS, Rosalía daba un paso a la reivindicación cultural de su pueblo. Es por eso que es considerada una heroína por los gallegos, dignificó su lengua y, a través de ella, cantó las bellezas de la región gallega, la de Santiago de Compostela, la vida del mar. Carmen nos contó sobre su interesante infancia, dándonos algunos datos como el hecho, parece ser, que Rosalía fue hija de un cura y una dama de sociedad (sucede, muchas veces); tuvo una educación como el de todas las señoritas de la época. La formación era para hacerlas un poco minusválidas ante la sociedad. Casó, felizmente, con Manuel Murguía, quien la apoyó mucho en su desarrollo literario y él mismo se encargó de la publicación del primer poemario de su esposa. Se llenó de hijos, como era costumbre en la época, tuvo un total de siete, falleciendo dos, uno al nacer y otro a los diecisiete mes de nacido. Tuvo una precaria salud y todo se precipitó a sus 48 años muriendo de varias complicaciones, entre ellas, un  cáncer al útero. Rosalía trabajó la prosa, pero es la poesía la que más destaca, siendo su primer poemario de treinta y un poemas, CANTARES GALLEGOS, el que es considerado el punto de partida del Rexurdimento gallego. Es un poemario que sintetiza, en cierta manera, la concepción romántica del arte: identidad regional, poemas íntimos de amor y el costumbrismo. En su descripción de su región nos cuenta además del desarraigo, la situación injusta de los campesinos, el olvido y el atraso en que viven, y la emigración. Carmen Ortega nos mostró algunos de ellos, musicalizados por diversos cantautores o compositores españoles como Amancio Prada. El tiempo, implacable como siempre, no nos permitió seguir viendo más sobre esta gran escritora, sobre todo, poetisa. Sus palabras quedan para la posteridad. Aquí nos quedamos con un bello poema que canta sobre su terruño, sobre las bellezas de su espacio en el cual vivió, enterró a su madre, y donde quedan sus restos.

Adios, ríos; adios, fontes;

adios, regatos pequenos;

adios, vista dos meus ollos:

non sei cando nos veremos.

Miña terra, miña terra,

terra donde me eu criei,

hortiña que quero tanto,

figueiriñas que prantei,

prados, ríos, arboredas,

pinares que move o vento,

paxariños piadores,

casiña do meu contento,

muíño dos castañares,

noites craras de luar,

campaniñas trimbadoras,

da igrexiña do lugar,

amoriñas das silveiras

que eu lle daba ó meu amor,

camiñiños antre o millo,

¡adios, para sempre adios!

¡Adios groria! ¡Adios contento!

¡Deixo a casa onde nacín,

deixo a aldea que conozo

por un mundo que non vin!

Deixo amigos por estraños,

deixo a veiga polo mar,

deixo, en fin, canto ben quero...

¡Quen pudera non deixar!...

Mais son probe e, ¡mal pecado!,

a miña terra n'é miña,

que hastra lle dan de prestado

a beira por que camiña

ó que naceu desdichado.

Téñovos, pois, que deixar,

hortiña que tanto amei,

fogueiriña do meu lar,

arboriños que prantei,

fontiña do cabañar.

Adios, adios, que me vou,

herbiñas do camposanto,

donde meu pai se enterrou,

herbiñas que biquei tanto,

terriña que nos criou.

Adios Virxe da Asunción,

branca como un serafín;

lévovos no corazón:

Pedídelle a Dios por min,

miña Virxe da Asunción.

Xa se oien lonxe, moi lonxe,

as campanas do Pomar;

para min, ¡ai!, coitadiño,

nunca máis han de tocar.

Xa se oien lonxe, máis lonxe

Cada balada é un dolor;

voume soio, sin arrimo...

¡Miña terra, ¡adios!, ¡adios!

¡Adios tamén, queridiña!...

¡Adios por sempre quizais!...

Dígoche este adios chorando

desde a beiriña do mar.

Non me olvides, queridiña,

si morro de soidás...

tantas légoas mar adentro...

¡Miña casiña!,¡meu lar!


viernes, 6 de abril de 2012

MUJERES QUE HABLAN SOBRE MUJERES QUE ESCRIBEN


El martes 03 de abril en la Alianza Francesa de Trujillo se realizó la primera ronda de exposiciones hechas por mujeres que hablan sobre otras mujeres que escriben. En nuestra primera versión se invitó a dos personalidades: Orietta Brusa, docente universitaria, especialista en arte, polémica pensadora de nuestra ciudad y compulsiva lectora; y Miriam Núñez, docente de lengua y literatura, con amplia experiencia en la formación de estrategias de lectura para adolescentes. Cada una de ellas tuvo como misión acercar al público al mundo literario y personal de dos escritoras desconocidas para las mayorías. Para esta exposición, ambas expositoras nos acercaron a Elsa Morante y María Emilia Cornejo.

Con su peculiar estilo, Orietta nos fue acercando al alma sensible y combativa de la Morante, quien tuvo como un fuerte sino ser esposa de un grande de la literatura italiana: Alberto Moravia. No opacada por la imagen de su esposo, la Morante fue una prolífera escritora en narrativa, testigo de una de las épocas más duras de Italia en el siglo XX: el ascenso del fascismo y la caída de éste arrastrando con él a la sociedad italiana de post guerra. La exposición de Orietta se centró en un solo libro en el cual, según Orietta, vamos a ver resumidas su filosofía y actitud de vida frente a las circunstancias que le toco vivir. El libro, La Storia (la Historia – existe traducción en castellano-) nos habla sobre la vida de una mujer, que podríamos llamar, insignificante. Judía (como la autora, también de origen hebreo) en un momento trágico de la humanidad, es violada por un soldado alemán que va huyendo de la estrepitosa caída del fascismo del Duce. Ante el avance aliado, Italia es arrasada por bombardeos y ella, la protagonista, sufre todas las vicisitudes de un conflicto como lo fue esta guerra. Por la violación, engendra un hijo, bastardo de esta guerra, al cual oculta por ser ella una madre soltera, y, sobre todo, una mujer pobre: nadie.  Para legitimar su existencia, si cabe el término, se aboca a uno de los clásicos roles de la mujer en nuestra sociedad: madre. Su hijo es un niño débil que arrastra las penurias del conflicto que ya había llegado a su fin. Italia comienza una dura reconstrucción y los primeros años son duros. Muchas ciudades, como muchas consciencias habían sido arrasadas. Ida, una de las principales protagonistas (hay otros dos: Nino y Useppe), como la mayoría de personas, tratan de adecuarse para sobrevivir. Su hijo bastardo, Useppe, enfermizo, muere demasiado joven; esta situación cae sobre Ida, ya que en la lógica social, que ella tiene muy inherente, su rol ya no existe. Deviene en un ente, un ser sin rumbo.  No existe otro rol más que el de madre. El otro personaje, Nino, es un joven de variables militantes, desde fascista, pasando por partisano hasta terminar como contrabandista, que nos muestra la sociedad italiana de entonces. El libro cuando apareció cayó mal para una sociedad que reclama estar entre las más pudientes del mundo actual. Fue criticada, como lo fue LADRÓN DE BICICLETAS, por ser demasiado trágica, nada de optimismo. No sé si puede ser optimista si en una sociedad en la que se han construido bellas entelequias sobre los derechos individuales, aún seamos testigos pasivos de abusos de género, laborales, raciales, culturales. Como muchos críticos, y esa fue la reflexión con la que Orietta cerró su exposición, La Storia es una novela río cuyo propósito es mostrar a los débiles, a los sin voz, a esos Don Nadie que caminan por las calles de cualquier ciudad y  cuyas existencias anárquicas ya son casi una tragedia.


Miriam Núñez se adentró dentro del alma de una gran poeta mujer, María Emilia Cornejo. ¿Cuál es el gran valor de su obra? Fuera de una calidad estética, la grandeza de la Cornejo es haber hablado libremente de temas tabúes en una sociedad regida por el mundo masculino; nos habla de la felicidad femenina, desde sus perspectivas, desde su sexualidad y su erotismo. Los críticos literarios han sido muy parcos con la producción literaria hecha por mujeres, nuestros textos escolares, aquellos que tratan de acercar a la mayoría a un primer encuentro estético con la literatura, nos hablan de Amarilis, de Clorinda Matto de Turner (siempre la pertenencia, aunque ahora la presentan como Clorinda Matto) y alguna que otra poeta mujer de nuestros tiempos. La revolución sexual de los 60 en Europa trajo sus buenos coletazos por Sudamérica. Para las mujeres el camino hacia su espacio propio ha sido duro, muchas no soportaron el viaje y decidieron irse antes. Otras, como la Matto, fueron maltratadas, vejadas por su sociedad. La Cornejo habló francamente de esos demonios que vamos aprendiendo a través de la educación y cultura, los estereotipos que tenemos que seguir para ser “adecuados” (como Mundo Feliz) en una sociedad tradicional que se les escapa el control de las manos. Desde los 60 la revolución de los géneros cambiará la sociedad. Pese a los intentos retrógrados vividos en diversas instituciones sociales (políticas, religiosas, culturales), lo avanzado ha calado en nuestras sociedades.  Para Emilia su sexualidad y erotismo eran una suerte de tabú, producto de siglos de dominación y censura por todo aquello que significase descubrir su cuerpo y las manifestaciones de este. Según los nuevos críticos literarios, con Emilia se inicia prácticamente la poesía erótica femenina en nuestro país. Ella es la frontera. Cuando hablábamos con Miriam, como docente, le pregunté si los poemas de Emilia Cornejo deberían ir a los textos escolares. Es obvio, como me respondió, el querer tapar la realidad es tan inútil como querer tapar el sol con un dedo. Emilia Cornejo le tocó vivir una realidad dura, contextos políticos que marcaron nuestra sociedad como el periodo de Odría hasta Velasco, ya que se suicida en 1972.  Pero esta talentosa escritora dejó varios poemas para descubrirla y para que millones de mujeres más la descubran. Alberto Escobar la nombra en sus referencias poéticas peruanas, puesto algunos de sus poemas fueron  publicados en la revista EROS en EEUU a iniciativa de ese raro personaje que fue Carlos Castañeda (devenido Castaneda). Un poema para recordarla.




TÍMIDA Y AVERGONZADA

tímida y avergonzada
dejé que me quitaras lentamente mis vestidos,
desnuda
Sin saber qué hacer y muerta de frío
me acomodé entre tus piernas
¿es la primera vez?
preguntaste,
sólo pude llorar.
oí que me decías que todo iba a salir bien
que no me preocupara,
yo recordaba las largas discusiones de mis padres,
el desesperado llanto de mi madre
y su voz diciéndome
“nunca confíes en los hombres”.
Comprendiste mi dolor
Y con infinita ternura
Cubriste mi cuerpo con tu cuerpo,
tienes que abrir las piernas, murmuraste,
y yo me sentí torpe y desolada.

En este vínculo electrónico pueden hallar su poemario EN LA MITAD DEL CAMINO:

http://www.contranatura.org/literat/biblioteca/Cornejo-En_la_mitad_del_camino_recorrido.htm#01


martes, 27 de diciembre de 2011

LA UNIDAD DE LOS CONTRARIOS DE LUIS EDUARDO GARCÍA

29 de setiembre. Después de algunas dudas, LEG decidió presentar su poemario con el cual había logrado el Premio Copé de Bronce del 2009. Y me invitó a hacer la presentación del mismo ante un nutrido público conformado por sus entrañables alumnos y el intelectual ávido de conocer la nueva producción de LEG, quien ya tiene un sitio en las letras de nuestra ciudad y región.

Confieso que soy poco lector de poesía, la cual demanda un rigor y recursos de lector frecuente que tuve que trabajar para poder estar a la altura de las circunstancias. LEG es un empedernido lector y tiene referentes amplios que son sus leit motiv poético. Gran admirador de la obra de Pessoa, es él quien le ha de dar recursos creativos de heteronimia que lo acercan mucho a los que fue este gran escritor portugués en vida. El velado homenaje atraviesa este libro desde el mismo hecho de cómo quiere abordar el principal y único tema de este poemario: el amor. Y además halló en el poeta argentino Roberto Juarroz el material necesario para crear sus epígrafes y que ayudan a crear una unidad interna en los tres bloques como se presenta el poemario, así como la división que uno, como lector, establece en el mismo; así, se puede decir que hay otro bloque visto desde la perspectiva de trato del tema y que se puede establecer uno del poema 1 al 7 inclusive, y de ahí hasta el 22.

Los siete primeros poemas el amor es acompañado por la tristeza (salvo el 2, que da cierta esperanza). El abandono, la decepción, son esas formas manifiestas del dolor que causa el amor que fue o el no correspondido. Y cierra con su poema 7 como un ángel caído, Lucifer, cuya luz se apaga, pese al brillo. De ahí, los poemas discurren en lo contradictorio que es el amor. Los permanentes recursos empleados, metáforas y sinestesias, corroboran esa contradicción a la cual termina llamando la unidad de los contrarios. Así llegamos al poema 10, tomando prestada la idea de Juarroz que atraviesa su Octava poesía vertical,  13, la cual es usada en el epígrafe de esta parte. El último verso del poema 10, va a ser el elemento de cohesión del resto del poemario. Este verso es el título de este poemario. Y es, además, el nombre de la última parte, cuyo último verso es nuevamente el mismo. En esta parte hace una explícita declaración de amor a su pareja, Natalia, y es el único nombre propio que ha de aparecer en toda la obra. La aparición de los heterónimos de Pessoa comienza a darse desde el poema 14, veladamente dedicado a la amada ideal de Pessoa, Ofelia Queiroz, a quien por coincidencia le escribió una carta un 29 de septiembre de 1929 en la cual trata de restablecer el vínculo roto entre Pessoa y ella, pero colocándola en otro sitio, al cual podía quizá acceder como otra creación, como un heterónimo; no como un ortónimo. Coincidencia o no, LEG se presenta ante el lector amado como un ortónimo, así lo hace explícito y lo tiene como exigencia.  Y cierra esta primera parte con un bello poema en el que resume todos los amores que un ser humano puede tener.  Aunque a su madre sí le alcanzó el tiempo para poder enterarse de la buena nueva, que había ganado un nuevo premio con un nuevo poemario, su figura de madre ausente se ve a lo largo del poema, como adelantándose a la pronta ausencia terrenal, y para eso juega con los opuestos para hacernos entender, a través de la contradicción, con el uso del oxímoron, lo que él espera del amor y lo que ha obtenido de éste.

La segunda parte, LEG toma distancia para hacer reflexiones del amor, “de acuerdo al cristal con que se lo mire”.  Y sus observaciones, aunque despojadas de cronicidad, son varias reflexiones de los múltiples hombres que pueblan a un ser humano. Es la parte más filosófica del poemario, y recurre a otro gran poeta que él ama mucho: Jorge Luis Borges. El poema 21 condensa, a través de sus versos, la persistencia de las contradicciones del amor, que aunque esquivo e inasible, dan en cierta manera una razón o sentido a las breves vidas de los hombres. Aunque quiere ser duro con los hombres como especie, reconoce que hay batallas en nuestro tránsito de la vida.
Sé que para poder comprender la integridad de este poemario, hay que haber leído el anterior, Teorema del Navegante, que fue presentado casi un año antes que éste. Conforman una unidad y anafóricamente refiere a éste en el actual poemario. Pero el extenso canto de amor que tengo en mis manos sacia la sed que uno tiene por ese sentimiento que como, dice Juarroz, es un centro que no coincide con el de la vida.    

viernes, 23 de diciembre de 2011

EL DESCANSO DE LAS PALABRAS DE CARMEN ORTEGA


Este año tuve el privilegio de presentar dos obras de amigos, a través de cuyos análisis desnudamos al creador y al ser humano que utiliza la palabra para crear belleza.

El 31 de agosto, Carmen Ortega, filóloga y educadora, fue la primera en ser desnudada a través de sus textos. Amante de la lectura, ella busca incesantemente textos para poder motivar a sus alumnos, pero también para poder saciar su sed de ampliar horizontes en este apasionante mundo de las palabras. Carmen había propuesto que tres personas nos acercásemos a su obra (desde la perspectiva kantiana, es muy difícil que accedamos a conocer íntegramente nuestro objeto de estudio, en este caso su obra) para poder presentarla, no como tamices implacables, sino como lectores sensibles, a la comunidad lectora. Fuimos tres los señalados: Karina Bocanegra, docente y poeta, gran organizadora de eventos poéticos; Orietta Brusa, docente e infatigable lectora, así como luchadora de los derechos de las personas; y mi persona. La cita fue en la Alianza Francesa de nuestra ciudad y frente a un numeroso público, comenzamos (me evoca la imagen de Neruda y su Oda a la Cebolla) a deshojar su obra para llegar al corazón de la misma. A través de un diálogo dirigido por mis preguntas, los tres fuimos “pelando” cada una de las capas que se presentaban en sus palabras, en sus cuentos, en sus metáforas, en sus diversas figuras. Cerró la presentación, la misma autora, quien con mucha franqueza reconoció los “finos cortes” que se había hecho a su obra y a ella misma.

El libro de Carmen tiene diversos móviles e inspiraciones. Gran amante del cine, muchos de sus cuentos se acercan a posibles guiones de cortometrajes de corte histórico como es el caso de su primera obra con la que abre el libro: El Escorial. Este cuento abre la primera parte: Con el Tiempo. Además este cuento presenta lo que va a ser el poemario narrativo que tenemos en nuestras manos. La autora, como el adolescente que rescató la Biblia Regia, regresa ya madura para entregárnosla (nos convertimos, cada lector, en Benito Arias) en nuestras manos. Nos va a regalar el valor de las palabras, un poco venidas a menos en estos tiempos, y frente al fragor de la vida cotidiana nos quiere enseñar la belleza de ellas en nuestras vidas, como lo han sido para ella a lo largo de trajinar, tanto como profesora, investigadora, madre, hija, esposa, amiga, mujer. Los siguientes cuentos peregrinan hacia la memoria, la cual es rescatada por la palabra (¡quién sino ella!), a la memoria de esa España gloriosa a la cual ella pertenece y que es su espacio geográfico (como los nombra decididamente). Algo que duramente se busca entre nosotros para hallar también algo básico que se busca en la escritura: identidad.

Luego de su viaje a la identidad, viaja a la intimidad. Y estos viajes son dolorosos, aunque figurados (o quizá personales), porque van cortando facetas de su vida y de las cuales no se puede salir muchas veces airoso. Es la más íntima y que valientemente Carmen (sobre todo para los que la conocemos) ha desnudado en su libro. Deja llagas, escoriaciones, heridas abiertas. Habla del abandono, de la violación, del despojo. También en esta parte se encuentran sus dos narraciones más extensas y que llevan, incluso, nombre propio. Las primeras narraciones breves son como fotografías de emociones, sentimientos de experiencias personales o de otros, las cuales las ha hecho suyas. Algunas teñidas de nostalgia, de remembranzas. Una de las breves más destacadas es Fotografía, con todo el movimiento escénico detenido y ya tornándose sepia. Muy lograda la memoria congelada y contemplativa de un retrato familiar simple, de aquellos que terminan en nuestros álbumes y evocamos con la tristeza de los ausentes. También esta parte/ sección es la más cargada de sensualidad (por eso Con la Vida). Oasis Azul es la que abre esa parte del mundo interno tan poco y tan frecuentemente mostrado. Pero es el sexo también que se muestra con todo su dolor, cuando es vejado como la triste narración Arena y Caña que ha sucedido muchas veces a mujeres que se alejaron de sus patrias para compartir sus vidas con hombres foráneos. Podría ser la historia policial de una violación de una turista más, pero abordada desde el alma de una mujer que ve violentada su dignidad, su condición humana, de mujer. Pero Humo de Soledad y La Nada son obras de nivel discursivo apabullante; fuera de la parte formal, las historias son marcadas por la soledad y el desengaño. Y ambas tienen personajes definidos, con nombres propios, con esquemas de vida trazados, que pueden ser lo de Carmen o los de sus personajes creados que tienen vida propia. La primera historia-cuento sucede en cualquiera de nuestras inefables carreteras, plagadas de cruces de muertos que con el tiempo se vuelven anónimos y quedan como hitos de la vía para los conductores. Triste y dolorosa con un narrador, Alberto, quien se convierte en una suerte de Pedro Páramo. Me hizo evocar a Bécquer y María Elena Walsh, cuando hablaban de los muertos y de las estatuas, tan solos se quedan ambos. La segunda narración se centra en una mujer viajera que vive un engaño y pierde por esas ilusiones lo que, en cierta manera, había creado como relación. Es una obra desencantada en tiempos quebrados muy bien elaborados en breve espacio narrativo.

La última parte, Fantasías, se centra en reflexiones de la vida, de su vida. Es la que más juega con elementos de sinestesia para lograr el sentido total; aquí se halla frente a la inefabilidad, más allá de las palabras (como Vallejo en su poema Intensidad y Altura). Las obras están inspiradas en vivencias de la frustración vivida (incluso, una alude a la política externa española de los últimos años) y presente a otros dos personajes femeninos: Lucía y Rosa. Personajes abandonados que se refugian en la palabra para seguir viviendo; se recurre a lugares comunes que pueden significar vida o muerte, como el agua.

La obra narrativa de Carmen está marcada por un vasto vocabulario, exigente y preciso. El castellano en su vastedad. Tal como también lo comentaron Orietta y Karina. Un buceo al alma femenina, la cual me hubiera gustado más compartir. Sólo me queda ser el dual.  


viernes, 29 de octubre de 2010

REVALORIZACIÓN DE LA GRAMÁTICA EN LA ENSEÑANZA ESCOLAR

El día 26 de octubre  me tocó presentar los textos que Editorial SM está empleando para el ámbito escolar. Mi preocupación por la enseñanza de la gramática en el colegio se inició desde que trabajaba en el León Pinelo en Lima en los 80. La profusión de textos con teorías no homogenizadas de este importante y muchas veces descuidado tema hizo que muchos docentes no abordaran el tema en clase y se focalizaran en redacción y literatura. Es más, los docentes del área de lengua tenían (y tienen) una débil formación en esta área, además en fonética, fonología y sintaxis. Con la Academia Peruana de la Lengua se ha trabajado ya dos cursos en estos últimos dos años y pensamos trabajar en un curso sólido de Fonética y Fonología el año entrante en la Alianza Francesa. Estoy colocando mis reflexiones sobre los tres últimos textos de secundaria de dicha Editorial.

TERCER AÑO:
El texto ofrece una interesante y variada presentación de la historia de la lengua española. El docente debe tener a la mano un buen grupo de palabras que explique el origen del vocabulario castellano. Como una buena fuente de información en internet tenemos la siguiente página: http://www.elcastellano.org/origen.html Además tenemos algunos buenos textos de consulta como BIOGRAFÍA DE UNA LENGUA del autor ENRIQUE OBEDIENTE SOSA, texto muy profuso en ejemplos para entender las diversas influencias de la lengua castellano a lo largo de su historia. Otros textos de investigación lingüística son los de HEINRICH LAUSBERG (Lingüística Románica) y AMADO ALONSO (Estudios Lingüísticos), fuera de la REAL ACADEMIA DE LA LENGUA ESPAÑOLA (http://www.rae.es/rae.html). Además da pie para ver la historia del castellano en América, a veces accidentada, otras veces muy rica. El fragmento presentado en la página 47 de Fernando Iwasaki es muy interesante para ver de manera somera las vicisitudes pasadas por los hispanohablantes en el reconocimiento de sus aportes a la lengua y la situación actual. En este punto vale la pena hacer un buen “buceo” a la página de la Academia Peruana de la Lengua (http://academiaperuanadelalengua.org/peruanismos/principal) para ver cómo es el proceso y qué palabras han sido recientemente reconocidas. Además los interesantes textos de Martha Hildebrandt, Peruanismos y El Habla Culta, son pertinentes materiales de consultas y deben estar en las bibliotecas personales y del centro de estudios. Cabe destacar en esta oportunidad que la Academia ha tomado una nueva estrategia y ahora ya sale a capacitar fuera del ámbito limeño; este año hemos tenido una capacitación en la Alianza Francesa y hace dos, la hicimos en la Universidad Privada del Norte. El año entrante haremos una nueva invitación para ver el tema de fonética y fonología. Volviendo a nuestro tema, la presentación de las variedades del castellano del Perú demanda una buena revisión que se han presentado en el youtube; la PUCP colgó un video muy interesante de muestras regionales. Esto podría ser también un trabajo interesante entre nuestros alumnos para realizar un pequeño trabajo de campo recogiendo diversas formas de habla de nuestra Región. Este trabajo ha sido hecho de manera escrita, sea trascribiendo los textos orales para acercarlos a su forma de habla, así como la forma escrita en sí. Pero nuestros alumnos, tan prestos a trabajar en lo audiovisual, podrían crear un archivo de oralidad. Un campo rico para investigar.
Una buena nueva es la inclusión de Amadís de Gaula para poder entender la pasión de los hombres del Medioevo por el amor a las novela de caballería. Y luego entender al Quijote. Se mantienen los autores clásicos como el Arcipreste de Hita y su tan poco revisado EL LIBRO DEL BUEN AMOR, pero Amadís es una feliz inclusión.

La revisión exhaustiva de la gramática es bienvenida. La descripción funcional de la lengua es algo que se debe insistir y comparar esto con las demás situaciones humanas. El alumno tiene problemas para comprender la funcionalidad de los objetos que son descritos en su esencia y luego en su función. Pasa eso con los sintagmas verbales que se convierten en núcleos de sujetos (cuyo núcleo pertenece a un sustantivo como función privativa), o por otro lado, sintagmas nominales que se convierten en predicados. Exige un manejo fino de las categorías gramaticales. De manejar esto correctamente podemos avanzar sólidamente hacia la construcción oracional. El texto presenta una denominación interesante: el verbo de núcleo compuesto pasa a ser ahora perífrasis de participio. Esto me parece más lógico, ya que se hablaba de simple, compuesto y perífrasis, se reduce a simple y perífrasis de infinitivo, de participio y de gerundio. Una vez sólido el conocimiento, se pasa a la Oración Compuesta. De poderse trabajar bien en este grado lo referente a la Oración Compuesta, sobre todo la subordinación, se habrá dado un gran avance para la preparación de un alumno para estudios superiores de pregrado. Hubo, hay y habrá muchos docentes que rehúsen enseñar gramática, puesto que ésta suele ser densa y tornarse aburrida. Pero la gramática plantea un orden mental en la persona que le permite, cual punto de apoyo, poder entender el lenguaje y con ello el orden del universo que lo rodea.

 
CUARTO AÑO
Este texto exige un estudio sistémico de la lengua. Esto implica una buena revisión de los diversos niveles de estudio de la misma. Hay que repasar detalladamente FONÉTICA y FONOLOGÍA, repasar los alófonos del castellano hablado en el Perú. Los rasgos suprasegmentales, la construcción morfemática, la sintaxis, la semántica y el discurso. Por fin veo un acercamiento más consciente hacia el quechua, conociendo su corpus fonológico. Sería interesante acercarnos con otra lengua grande como el aimara (Hay un texto interesante de JOSÉ LUIS AYALA y su libro LITERATURA Y CULTURA AIMARA, que cuenta con poemas, fábulas e incluso con una breve selección de textos de historia e ideología desde la perspectiva aimara). El libro también enfoca de manera general otras lenguas habladas en nuestro territorio, por lo que sería oportuno para un docente de nuestra región ver algunos textos sobre la toponimia y vocabulario de la antigua cultura moche; para este objetivo les recomiendo el DICCIONARIO MOCHICA-CASTELLANO / CASTELLANO-MOCHICA del autor JOSÉ ANTONIO SALAS. Lo que se ve en III año, sobre las variaciones lingüísticas del castellano peruano se revisan con más detalle en este año. Como un tema de curiosidad para diferenciar lo coloquial con lo estándar, sería bueno revisar el simpático libro HABLA, JUGADOR de Julio Hevia, texto que da una particular revisión de la replana peruana. Esta también es una forma de variable sea social y en muchos casos generacional. Es un tema muy interesante que debe acercarnos a varios valores como la tolerancia, el respeto y el derecho de cada persona a ser como es. La revisión gramatical es más extensiva y compleja vista en el texto de III año.
En la parte literaria, tenemos un acercamiento a nuestra realidad prehispánica, como parte de un plan lector sostenido, no debemos incluir textos de nuestra región y nuestro gran literato JOSÉ MARÍA ARGUEDAS por su centenario de nacimiento. La presencia de algunos autores nuevos como Carlos de Sugüenza y Góngora, Narciso Aréstegui, Juana Manuela Gorriti, José Hernández (les recomiendo ver con sus alumnos la versión de MARTÍN FIERRO, que hizo Torres Nilsson), Clemente Palma y el joven Daniel Alarcón amplía la oferta literaria, la cual recaía siempre en los “clásicos”. Debo admitir que faltan aún ser incluidos algunos buenos poetas del famoso movimiento HORA ZERO, movimiento que estuvo acompañado de un rock violento, pero que fueron el fiel reflejo de una época: los 80



V AÑO

Con la madurez que un alumno de V año esperamos tenga, se puede trabajar con más detenimiento cada uno de los temas visto los dos años previos. Es la oportunidad de repasar concienzudamente el castellano peruano. Además, cada una de las categorías gramaticales es una a una analizada, como preparación del alumno para sus futuros estudios superiores.


En este año el texto puede invitar a los alumnos a hacer una comparación entre todas las escrituras actuales: árabe, hebreo, chino, coreano, japonés, hindi, tailandés, cirílico, griego. De la antigüedad, los jeroglíficos, la rúnica, la cuneiforme. Es un material que un docente puede pedir a sus alumnos. Acerca al alumno a ser una persona global y evita la llana generalización que se hace con los pueblos. En cuanto a las literaturas, acercarse a las religiones antiguas y sus textos religiosos, los cuales son también obras literarias. Por razones de espacio, hay que presentarles las otras literaturas antiguas como la coreana. El texto nos aproxima a la literatura antigua del cercano oriente y vemos también los antiguos cantos épicos europeos del norte. Veo con agrado la inclusión de grandes varias veces postergados, como Chaucer o Montaigne.

domingo, 12 de septiembre de 2010

PATERSON CITY, LITERATURA DE LA TRANSCULTURACIÓN

Esta presentación la hice ayer 11 de septiembre.
Paterson City es una novela breve que surge de la motivación académica de una maestría en San Marcos, específicamente de las clases del Dr. Luis Millones; y de las experiencias personales de la madre del autor, quien suele viajar a EEUU con cierta regularidad a Newark. Es una historia cotidiana de un joven emigrante que sufre todo tipo de desarraigo; no solo se queda sin patria, se queda sin su abuelo, luego sin padre, sin vínculos. Paulatinamente va perdiendo su identidad lingüística, ante la coerción que ejerce la nueva sociedad a la cual va a pertenecer (y que al final termina por rechazar a causa de todos los incidentes que le va a tocar vivir). El desarraigo lo va viviendo desde el momento que llega a territorio norteamericano; para esto, la alusión al Perú se da solo en flash back que le hacen recordar al colegio La Salle (por la descripción que hace el autor), por la alusión que hace del distrito Breña, por ese proceso doloroso que fue Sendero Luminoso y la sociedad peruana. Los desarraigos van acompañados de numerosas negaciones;  Mike, uno de los principales de la novela y supuesto amigo del narrador, niega a su padre, en tanto que la madre del narrador niega a su marido, quien se había enrolado a las huestes de Sendero Luminoso, en los años 80; así pues, por el temor y dolor de ver aterrada a una persona fanática, la madre va negando a su hijo, la narrador de la obra, paulatinamente a la figura, la identidad de su padre. Mike trata de negar la lengua que su padre y madre hablan, y adopta una actitud displicente y hasta agresiva contra todo lo latino. La necesidad de Mike de su nueva aceptación es muy dolorosa, puesto que en el fondo exige erradicar todo lo que él es en esencia. Se refugia en un excesivo erotismo para hallar algo real, tangible, vital. Esta exagerada erotización arrastra también  a nuestro narrador, primero para complacer a su nuevo amigo, luego para descubrir las nuevas emociones que esta nueva vida le iba a dar. Pero, además, la erradicación extrema de Mike implica el total rechazo de su entorno familiar y una violenta eliminación de todo aquello que culmina con la destrucción física de todos los elementos que puedan ligarlo al pasado. Las acciones de quemar (destruir, pero también renovar como el mito del Ave Fénix) cierran todo un proceso del deterioro interno de Mike (quien además tiene un diminutivo inglés) para “empezar una nueva vida” En cierta manera, me hace reconocer – salvando distancias de referentes – al famoso cuento “ALIENACION” de Julio Ramón Ribeyro, cuento en el cual Roberto inicia su proceso de norteamericanización con las apariencias externas desde la ropa hasta la piel, la “camaleonización” de su nombre (Roberto a Bob Cabanillas) y la definitiva asimilación a su nueva nacionalidad. Bob es Mike, pero Mike lo hizo desde adentro, no fue voluntad de él convertirse en gringo, su familia lo traslada y la nueva situación lo transforma. Bob quiere ser Bob; Mike lo es, porque ya vive allí y se va a rodear de una sociedad opulenta pero que lo sabe extraño y tiene que buscar los medios para ser aceptado, cueste lo que cueste.
La madre, así como todo el grupo de mujeres de su entorno, realiza una relación asimétrica de poderes y aceptación. La madre, la tía Nelly y la tía Ramona (el vicio sudamericano de “tiizar”, hacernos tíos,  a la gente para hacerla parte del círculo y crear vínculos afectivos rígidos, algo así como el padrinazgo) son el círculo de protección de nuestro narrador. Como todo emigrante, se instala cerca de los suyos y en cierta forma vuelve a instalar esa sociedad que dejó atrás por varias razones, pero que le da cierta comodidad para poder empezar a desplazarse; el hombre es un animal de costumbres y nos cuesta cambiarlas. Las tías ayudan a preservar esa suerte de status quo en la nueva sociedad, son una suerte de tránsito. Pero ellas también han pagado su dolorosa cuota de integración. Como en las novelas de García Márquez, las mujeres son personajes sólidos, que podrían haber sido más explotados, ya que es la nueva realidad de la gente que emigra de nuestro país. Según  estudios hechos sobre la emigración en nuestra sociedad, son las mujeres las que más emigran para hallar un trabajo, sea digno o no, y para sostener a un hogar. Otro revelador estudio nos arroja un dato que debe enrojecer al más velado de los machos de nuestro país: más del 65 % de los hogares de nuestro país es sostenido por la mujer, ella es padre y madre del hogar. Ellas se encargan de todos los detalles, ellas van cubriendo a todos los personajes varones con el olvido. La madre del narrador es un personaje duro, refugiada, sobreviviente y sola. Y se abre camino para darle un futuro a su hijo. Nelly también hace lo suyo, como Ramona (algo que ver con Ribeyro)
 El colegio, el primer gran micro mundo social al cual nos integramos, es el primer ensayo de asimilación, lugar en que los choques no faltan. En realidad, el colegio es la primera gran jungla de la cual debemos aprender a salir  victoriosos. Es pagar nuestro primer derecho a piso para ser alguien en cualquier sociedad. Es interesante ver que los niños de dicho centro educativo público, migrantes, cargan con todo el bagaje cultural, aunque, valgan verdades, son los que rápidamente van a atraer la asimilación a sus respectivos hogares: la lengua, las costumbres, la historia, la visión particular del mundo que cada sociedad tiene. Todo eso es llevado por los más jóvenes a sus hogares. Es por eso que los países donde hay mayor migración como los europeos y los EEUU. Les interesa de sobremanera que los jóvenes vayan a sus escuelas, así la asimilación logra sus objetivos. Por lo boca de Mike, oímos las palabras amenazantes culturales que nos dice que ya ha cruzado la orilla tal como lo dice en su frase “…Allí todos son latinos. Latinos que hablan español como les da la gana, pero que también tienen la obligación de hablar el inglés, no como les dé la gana, sino como a nosotros, los estadounidenses nos da la gana” (pág. 42)
En medio de esa jungla, aparece Clarita, linda, una filigrana para esa selva. Pero, en el orden social, ella debe ocupar un lugar. Cual tragedia griega, el personaje bello encierra en sí un falta destino como la novela nos la ha de contar. La predestinación surge porque nuestro ahora héroe griego “destruye” el orden de las cosas al haberse enamorado de la hija de una prostituta, también ciudadana del Little Lima. Su marginalidad se extiende a su hija y la condena, la ensucia, la marca y la hace maldita. He aquí uno de los principales motivos por el cual esta breve novela tiene visos fatalistas. Vas a crecer en una sociedad de oportunidades, tal como te la han dicho que es, pero esas oportunidades te harán morder una serie de sinsabores que te harán cambiar, a no dudar. Nuestro narrador, simple mortal, juega su rol de héroe predestinado a la desgracia; es el reflejo de cómo todos los peruanos vemos la vida, en la cual dios juega un rol fatalista, “dios lo quiso” “es un castigo divino”, “si dios lo quiere”, “resígnate, así dios lo ha querido”, son frases que surgen rápidamente para justificar en muchos casos nuestra propia torpeza o una forma muy sutil de desprenderme de mi responsabilidad y achacársela a otro.
La novela es ágil, se lee en un solo tranco; personalmente me gusta la imaginación para recrear situaciones creíbles de una sociedad en cual nunca estuvo. Fuera de las alusiones a muchas personas de la soiciedad peruana de antaño, como Perico León y Elmer Alfaro, el famoso "Machucao", hay muchas alusiones a situaciones sociales que para muchos jóvenes como ustedes le son muy extrañas: la vida de Lima en los 80, Sendero Luminoso, Bolívar, la situación histórica de Argentina, Uruguay, Chile y el famoso plan Cóndor que lo lidero Morales Bermúdez  y no Velasco (dato histórico que habría que corregir), el judaísmo tan raro por nuestras tierras y del cual tenemos una fuerte herencia religiosa. Hubo momentos, personalmente, que recordaba los terribles momentos de lo que era Sendero en los 80, bajo el gobierno de Belaunde y el nefasto primer gobierno de AGP, los apagones, los cortes de luz, el toque de queda, los perros muertos colgados en los postes, las masacres de campesinos, nuestros casi 70 mil muertos (más que cualquier país de América que no haya tenido conflicto externo); son situaciones que deben pasar al olvido.
Nuestro narrador, Mike, la madre, la Tía Nelly se fueron para dejar todo eso atrás, pero quiera uno o no, la historia la cargas contigo y te marca. Paterson City es pues la historia de muchos peruanos y de uno solo.