Datos personales

Trujillo, La Libertad, Peru
Un espacio para mostrar ideas y puntos de vista ligados al arte, a la cultura y la vida de una sociedad tanto peruana como universal
Mostrando entradas con la etiqueta elecciones presidenciales. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta elecciones presidenciales. Mostrar todas las entradas

domingo, 6 de mayo de 2018

ESCEPTICISMO (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO DOMINGO 06 DE MAYO) POBLACIÓN ELECTORAL UN POCO ENFERMA


Nuestro país no es un espacio para el aburrimiento. Todos los días, en el mundo político ocurren situaciones que pueden generar perturbación, molestia, hilaridad y, como ya va sucediendo en los últimos lustros, escepticismo. Esta actitud escéptica comenzó con la complacencia y complicidad aceptando a personajes cuestionados convertirse en dirigentes de nuestro país o de ciudades importantes. El lema “roba, pero hace obra” se volvió una suerte de eslogan que tipificaba nuestra complacencia con políticos de dudosa reputación, pero que recibían la anuencia popular a través de los votos. Un poco a lo “ya, pues, qué importa”. Esta complicidad pasiva de la población ha permitido que la corrupción crezca en desmedro de nosotros mismos. Sabido es que cualquier acto de corrupción tiene una repercusión negativa, mínima o de magnitud, que se evidencia en la lentitud de procesos en favor de un grupo o población, así como una escuela o un hospital menos. Quizá nuestro sentido de culpabilidad por haber otorgado un voto más a estos personajes hace que la sociedad calle en todos los sentidos.
Estamos presenciando un momento clave para la alicaída política peruana. El único líder importante que estaba en prisión preventiva, Ollanta Humala y su esposa, ha salido para seguir su proceso en libertad. La Justicia peruana se halla en la encrucijada de acelerar una imputación de lavado de activos que, por extensión, obligará a, de ser correcto, encerrar a otros líderes de la política peruana o regional, entre ellos, varios expresidentes. Sin embargo, Perú es el país de la magia y podría convertir sorpresivamente, de la noche a la mañana, un delito, en algo correcto, propio, saneado: de ser así, todos los personajes, incluso nuestro renunciante expresidente podría respirar tranquilo y solo tener “remordimiento de conciencia” el haber liberado a un criticado personaje como lo es Alberto Fujimori. De todo esto, los votantes somos testigos. De ser coherentes las observaciones hechas tipificadas como delitos, todos esos cuestionados personajes: Alan García (dos veces elegido), Alejandro Toledo, PPK, Ollanta Humala y la dos veces candidata Keiko Fujimori (todos fueron llevados o acercados al sillón presidencial, por nuestro voto); todos deberían de ir a prisión. Pero, Perú es país de posibilidades.
El Congreso, plagado de personajes altamente cuestionables, vinculados –muchos de ellos- con redes turbias de corrupción, ha sido “construido” por nuestros votos preferenciales. Estos han aprendido, por la indiferencia nuestra, a vivir a expensas de nosotros como avaladores de sus inconductas. Esta indiferencia viene de un socavamiento contundente desarrollado por la dupla Montesinos-Fujimori desde su primer gobierno. Destruyeron la vida política y creó una sociedad inerme, indiferente, banal (con ayuda de los medios) y hasta infantil, preocupada más por su álbum Panini o un mundial de fútbol, que por la realidad de su entorno social. Un mal que no se extingue; por el contrario, crece desmesuradamente.

domingo, 21 de mayo de 2017

A RÍO REVUELTO (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO DOMINGO 21 A PROPÓSITO DEL FANTASMA ODEBRECHT)

Hemos pasado una semana bastante movida. El fantasma Odebrecht ha vuelto a remover los cotilleos políticos tanto de palacio como de las principales tiendas políticas. Todo apunta a que la práctica empleada con la ex pareja presidencial Ollanta Humala/ Nadine Heredia era muy frecuente no solo por estos lares, sino en toda América Latina. La reciente noticia sobre el aporte de una fuerte suma de dinero a la campaña presidencial del actual presidente argentino, Mauricio Macri, ensombrece el panorama de todas las campañas electorales presidenciales en las últimas décadas allí donde la empresa ha puesto sus tentáculos.
Las recientes declaraciones directas (dos ex candidatas) o indirectas (a través de testaferros en el caso AGP) han influido en los medios para transformar un acto de corrupción hecho por el expresidente Humala y Nadine en una acción “legítima” hecha por diversas empresas que destinan fondos a, como afirmó Marcelo Odebrecht, posibles candidatos ganadores en una justa presidencial. Qué rápido cambió el tratamiento de esta acción al verse involucrados más sospechosos de estos beneficios turbios. Un matiz de sarcasmo corre por muchos medios al plantear explicaciones y justificaciones de esta interesante forma de clientelaje indirecto (abiertamente directo, diría yo). Aún queda mucho por aclarar todo el problema generado por los Panamá Papers, formas ilegales de hallar financiamiento, noticia que estalló una vez acabada la primera vuelta electoral y que comprometió tanto a la candidata a segunda vuelta Keiko Fujimori, como a nuestro actual Presidente, así como a AGP e incluso el ex candidato César Acuña. Por otro lado y esto es de interés público, en los descargos y declaraciones de todas las personas involucradas en este nuevo escándalo manifiestan siempre haber conocido a los representantes del monstruo Odebrecht en rondas empresariales. Un espacio en el que las conversaciones se vuelven dinámicas, interesantes y comprometedoras. Algo así como los lobbies. Ahí comienza un camino no muy claro para los intereses generales, salvo para las partes que llegan a un acuerdo beneficioso entre ambas

Esta semana que ha pasado nos muestra la urgencia de contar con una reforma electoral a fondo sobre las formas de financiamiento de los partidos políticos. Por un lado, vemos al narcotráfico extendiendo lentamente su poder no solo con dinero, sino ya incluso con candidatos suyos. Ahora vamos descubriendo qué otras formas de poder corrupto pueden estar colocando sus candidatos en campañas electorales de una nación como la nuestra, con escasa transparencia política, poco compromiso y cargada ignorancia de la sociedad civil que hace que los candidatos a todas las instancias políticas sirvan más a sus intereses o los de su amo, que a los intereses de las personas o colectividad que lo puso en un sillón político. 

domingo, 7 de mayo de 2017

FRANCIA, PUNTO DE INFLEXIÓN (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO 07 DE MAYO 2017)

Este domingo Francia está viviendo su segunda vuelta electoral. En un proceso signado por la sombra de actos terroristas en su territorio y en el espacio europeo en estos últimos años, el sentido de tres palabras (libertad, igualdad, fraternidad) que movilizaron a la sociedad francesa y espíritus libres en las últimas décadas se ha visto amenazado por diversas reacciones de una ciudadanía atemorizada y movilizada por temores xenófobos y racistas. La segunda vuelta tiene como contendores a dos candidatos de igual línea ideológica; sin embargo, la candidata de extrema derecha Marine Le Pen canalizó los miedos de muchos ciudadanos que han visto a numerosos migrantes, sobre todo de sus antiguas colonias de África, Medio Oriente y Asia, como una real amenaza a la integridad francesa, su cultura latina y el espíritu cristiano que se admiten como los fundamentos de su identidad.
Hay, sin embargo, un olvido histórico que permitiría entender la actual situación francesa (o europea, en general) ligada a su pasado colonialista. Estas naciones fueron y son grandes gracias a un fuerte coste de todas las excolonias que les generaron un fuerte rédito económico, social y político. La historia enseña a la humanidad que cualquier acción tiene una secuela. Muchos países europeos han crecido gracias al “apoyo” de las tierras y sus ciudadanos de allende los mares que rodean a ese continente. Han sido parte de su historia y desarrollo. El simpático llamado hecho por el animador, periodista y analista británico John Oliver invita a la sociedad francesa a un voto consciente tras la posibilidad de que Francia siga el camino del aislacionismo y actitud de confrontación de la sociedad británica y norteamericana. El mundo parece encontrar como única respuesta a este proceso creado por el mismo sistema llamado globalización a la oscuridad, a la actitud conservadora y aislacionista. Extraña respuesta a un mecanismo creado por él mismo. Pareciera que lo que se pensaba como solo una propuesta económica no iba a rebasar las fronteras sociales, culturales y políticas.
Europa tiembla ante la posibilidad de una nueva deserción de un socio poderoso de subir esta líder extremista que quiere resolver problemas económicos y sociales con soluciones drásticas con graves repercusiones posibles. Las consecuencias no solo serían económicas (Euro, bancos, comercio) sino, y más peligroso, sociales y políticas. El triunfo de Trump en E.E.U.U. empoderó a grupos racistas, propuestas conservadoras y actitudes bravuconas en el mundo internacional. El aislamiento británico fue promovido por un líder que después terminó retractándose de los resultados. El lenguaje promovido por candidatos de extrema derecha hace recordar esa Europa que vio en su ciudadanía terribles demostraciones de racismo y xenofobia de dolorosa recordación. La historia ayuda a refrescar el presente.

Hoy Francia debe de continuar siendo l’espoir de la humanité

domingo, 16 de octubre de 2016

AMÉRICA, TRUMP, MIGRACIÓN (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO 16 OCTUBRE)

En lo que va de esta semana pasada, hemos tenido varios momentos interesantes que son la fuente de inspiración de este artículo, siendo los más relevantes: la celebración del Descubrimiento de América o el Encuentro de Dos Mundos, de acuerdo a la perspectiva; y el debate presidencial norteamericano y algunos comentarios actualizados del candidato Donald Trump.  El elemento vinculante entre ambos es el delicado tema de la migración,  actividad humana realizada por diversas razones.
La migración en escala obedece más a factores externos que internos de una sociedad, un núcleo familiar o persona. Una guerra, una hambruna o debacle económica en escala, un deseo de expansión como plan estratégico estatal, han sido generalmente los principales móviles que han  hecho que grandes grupos humanos se hayan desplazado a lo largo de la historia y que cambian la fisonomía geográfica social de los lugares emisores y receptores. El 12 de octubre de 1492 se inició un proceso de poblamiento y despoblamiento en ambos lados del Atlántico.  En los inicios del siglo XX una gran masa de pobladores europeos y asiáticos hallaron en toda América, sobre todo en los Estados Unidos, un espacio de oportunidades para mejorar sus calidades de vida. Después de ambas guerras mundiales, fue sobretodo Europa la mayor aportante de una población deseosa de hallar un territorio libre, fértil y pleno de oportunidades. 
Pero la migración masiva tiene en el trasfondo orígenes y consecuencias traumáticas. Un desplazamiento masivo implica un fuerte choque cultural, económico y político, vivenciado por la sociedad receptora al tener nuevos miembros que no han crecido en el tejido social que los acoge. Hemos visto esta situación  internamente cuando una fuerte cantidad de compatriotas tuvo que desplazarse de la sierra o selva en los 50 y 60 por la promesa de una vida mejor en las ciudades costeras gracias a la industrialización incipiente de entonces y las carreteras de penetración; y en los 80, por la violencia terrorista o el desarrollo del narcotráfico. La “recepción” no era del nada positiva, puesto que la gran mayoría de estos emigrantes fue a conformar los cinturones informales de las grandes ciudades, Lima a la cabeza, creándose los Pueblos Jóvenes. Hay que leer los trabajos de José Matos Mar y Rolando Arellano para entender este doloroso proceso que deviene en el Perú actual. Las crisis vividas en los 80 y 90 también creó una gran masa desplazada: muchos peruanos migraban hacia el exterior para buscar a una vida mejor. En un dato del 2012 (OIM) hay casi dos millones quinientos mil peruanos en el exterior: un poco menos del 10 % de la población peruana actual; muchos de ellos en situación vulnerable frente a posiciones radicales en los países que migraron. Posturas xenófobas como las de Trump sintetizan lo que muchos de los pobladores piensan del emigrante, muchas veces forzado de serlo por tristes circunstancias de la vida. Una triste radiografía de una respuesta a este susceptible problema.
  

domingo, 5 de junio de 2016

ELECCIONES: POSIBLE FUTURO CONDENATORIO (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO DOMINGO 05 DE JUNIO)

Los peruanos estaremos decidiendo hoy domingo quién nos estará gobernando por los siguientes cinco años. Es una de las elecciones más reñidas de las últimas décadas, teñidas de muchas irregularidades que surgieron durante la primera y la segunda vuelta. Durante la primera,  se excluyeron candidatos por irregularidades como la de la compra de votos que motivaron la cancelación de un fuerte contendor como lo era César Acuña; sin embargo, no se actuó con el mismo rigor con otra candidata quien había hecho lo mismo a todas luces y con claras evidencias en sus actividades proselitistas en zonas populares. Se sacrificó a su vicepresidente Vladimiro Huaroc, a modo de “premio consuelo”.
Así ingresamos a una segunda vuelta, con dinosaurios heridos de muerte como el caso de AGP. Pero la sombra de un flagelo que ha estado corroyendo las sociedades latinoamericanas, el narcotráfico, hacía su presencia en estas elecciones. Este fantasma acompaña todo tipo de lides electorales en nuestro país desde hace tres décadas. En estas presidenciales, esta amenaza ha saltado delante de nosotros. Y ha movido a la sociedad civil desde sus cimientos, pese a que este mal ya está enraizado en diversos sectores productivos como lo es el de la construcción o de servicios.  Inicialmente, varios personajes que solventaban los millonarios gastos de los diversos partidos en la contienda fueron cuestionados en una primera instancia con el escándalo de los Panamá Papers: muchos financistas aportadores de casi todos los partidos de la primera vuelta estaban involucrados en sociedades creadas en paraísos fiscales. Pero la bomba vendría con las denuncias del diario Univisión: lo de Joaquín Ramírez tenía que volverse internacional (aunque hubo medios locales que ya difundían este caso desde hace dos años) y con sello de la DEA para que la sociedad peruana se despercudiera de su letargo. Y más grueso escándalo fue el de los audios editados con tan toscos resultados que motivaron la renuncia de una periodista, el cierre del tendencioso programa que los propaló y la desaparición automática del hombre que era la imagen de una de los contendores. Hablar de ello en el último debate hubiera sido suficiente para desequilibrar a un partido que tiene entre sus principales cabezas a tales personajes. Es más, si hubiera mayor conciencia política y un fuerte sentido ético en nuestra sociedad, hubiera habido un desbande de muchos de sus seguidores y otros dirigentes ante semejantes hechos. Pero pareciera que no es así. Nos estamos volviendo cínicos. Un cinismo peligroso, no solo para la actualidad, sino para el futuro de la sociedad que se quiere tener.

En la educación, todos sabemos que se enseña con el ejemplo. Los niños y jóvenes ven en sus padres y adultos el modelo de los valores que han de regir su mundo. Creo que el cinismo es lo que estamos enseñando en las calles y en nuestros actos a ellos. 
Después no nos quejemos.

domingo, 22 de mayo de 2016

¿HACIA UN NARCOESTADO? ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO DOMINGO 22 DE MAYO

“Detrás de cada gran fortuna, hay un delito”. Esta frase fue acuñada por el escritor francés Honoré de Balzac que aparece recurrentemente en su libro La comedia humana; una frase que describe la Francia posrevolucionaria en la que hombres y mujeres inescrupulosos sacaban provecho y amasaban grandes fortunas de manera ilícita y, como leía un comentario, “haciendo harina a los demás”.
Por estos días, la nueva denuncia contra Joaquín Ramírez, congresista de la República por Cajamarca y amasador de una gran fortuna meteóricamente acumulada, ha refrescado la memoria de todos los peruanos sobre los diversos sucesos en los que diversas formas reñidas de la ley han intervenido de manera directa en la política peruana corrompiéndola. La investigación en su contra se abrió el octubre del año pasado por la Fiscalía de Lavados de Activos al solicitar, como primer paso, levantar su inmunidad parlamentaria. Las investigaciones han ido desmadejando no solo el accionar de este personaje, sino el de muchos miembros de su familia que militan en el partido Fuerza Popular.
Los negocios turbios siempre han tenido fuerte presencia en la política nacional a través de diversos personajes que militaban en los partidos de turno. Los contubernios eran variados: en la época del primer gobierno de Fernando Belaunde, el contrabando, sobre todo textil, avalado por el entonces Ministro de Marina, almirante Florencio Texeira, debilitó a ese gobierno. El retorno de la democracia en los 80 trae otros dos sonados casos: el de Guillermo Cárdenas Dávila, “Mosca Loca”, quien se ofreció pagar toda la deuda externa del Perú de entonces; y el caso de Carlos Langberg, quien financió la campaña de Villanueva del Campo por el APRA, frente a Belaunde por su segundo gobierno. Ya el narcotráfico, poderosa herramienta de corrupción, se había instalado en el Perú y comenzaba a extender sus turbias redes. Ambos gobiernos de AGP también estuvieron regados de escándalos como el caso de Reynaldo Rodríguez López, “El Padrino”; y los famosos narcoindultos o los extraños vínculos con Gerald Oropeza y familia. Pero fue el gobierno de Alberto Fujimori y su siniestro socio Vladimiro Montesinos en el que el narcotráfico y la descarada corrupción de prebendas y dinero contante y sonante se enraízan en todos los niveles de la sociedad peruana, fuera de la densa red de corrupción que recorrió el mundo de la privatización como el sonado caso Yanacocha. Los estudios de Alfonso Quiroz, destacado historiador fallecido prontamente (HISTORIA DE LA CORRUPCIÓN EN EL PERÚ, IEP, 2013); Carlos Iván Degregori, antropólogo también fallecido (LA DÉCADA DE LA ANTIPOLÍTICA, IEP, 2012; así como el de las periodistas británicas Sally Bowen y Jane Holligan (EL ESPÍA IMPERFECTO, PEISA, 2002); todos, con sus respectivas investigaciones, develaron una red corrupción insospechada que se convierte en la pesada herencia que recibe nuestra debilitada sociedad política. La historia identifica al gobierno de Alberto Fujimori como un narcoestado.   
¿Estamos en camino de seguir esa línea?

domingo, 15 de mayo de 2016

DEBATES PRESIDENCIALES (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO 15 DE MAYO)

Estamos a menos a tres semanas de nuestra prueba de nervios como electores peruanos. Por ahora vayamos a las cifras, ya que estas nos ayudarán a dar un panorama interesante y a entender el porqué de algunas acciones que los dos candidatos están realizando y que posiblemente hagan en lo que resta de este periodo preelectoral.
Según los datos de la ONPE, en las últimas elecciones del 10 de abril, hubo 22’901,954 electores hábiles para ejercer su voto; de esta cantidad, lo ejercimos el 81.8 %; esto es, 18’734,130 electores. Sigamos con las cifras. Los dos candidatos que pasaron a la segunda vuelta recibieron: Keiko Fujimori, 6’115,073; y Pedro Pablo Kuczynski, 3’228,661. Si sumamos los votos de ambos tenemos: 9’343,734. Resta, pues, una gran masa electora de 9’390,396. Si agregásemos los electores hábiles que no votaron en la primera vuelta (4´167,824), hace en conjunto la envidiable masa electoral de 13’558,220. Esta es la cantidad de peruanos que no votaron por ninguno de los dos candidatos que pasaron a la segunda vuelta. Casi un 65 % de los ciudadanos no optó por ninguna de las dos propuestas de gobierno que se parecen tanto y, con las cuales, muchos peruanos no comulgan. Es más, casi tres millones de peruanos, entre blancos y viciados, no optaron por ninguno de los diez candidatos de la primera contienda. Entonces quedan unos diez millones de votantes a los cuales tratarán de atraer a su redil y captar algunos de los totalmente escépticos
Con las cifras frías que tenemos, comienza el peligroso juego de captar votos a través de promesas insostenibles y golpes sucios entre candidatos que se apoyaron mutuamente ante el “monstruo” Ollanta Humala en 2011. Entramos al campo de la demagogia pura, en la que la pena de muerte, la compra de un millón de patrulleros, limpieza de delincuencia en un año u otras vanas promesas han surgido y surgirán en boca de los candidatos para atraer a su tienda a electores casi nihilistas, cansados de indiferencia y algunos al borde de la insurgencia y beligerancia, como se ha visto en algunos resultados de la primera vuelta. En las giras que hacen los candidatos vemos anuncios como revisión de leyes mineras, acercamiento a la minería ilegal, relectura de las ideas de Gregorio Santos, baja del impuesto a la renta, son peligrosos cantos sibilinos que dejarían a una sociedad peruana bastante convulsionada. El torpe centralismo de los candidatos no les permite leer lo que pasa en el resto del país, pese a los trabajos de dirección política que han hecho algunos partidos como el fujimorismo.
Queda como una opción de aclarar las cosas para ese gran público a través de un buen debate en el que aclaren las ideas y que muestren claramente las diferencias entre uno y otro candidato. El hecho de que uno de ellos sea la hija de uno de los gobernantes más corruptos del planeta no es impedimento para que varios peruanos puedan votar por ella. 
Demos paso a las ideas.

domingo, 17 de abril de 2016

RESACA ELECTORAL (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO 17 DE ABRIL)

Una semana pasada las accidentadas elecciones presidenciales y congresales, ya tenemos un panorama político de interesante lectura. Elecciones en las que hubo “heridos” de muerte que ya se cuentan como cadáveres políticos, así como ganadores insospechados que han cambiado el contexto social de nuestro país.
Para los muertos de esta contienda, estas elecciones han significado, para varios de ellos, su definitivo retiro de la política peruana; pero también ha significado, para desgracia de sus correligionarios, la casi o total extinción de otrora partidos poderosos que animaban las campañas electorales pasadas. El gran favor del JNE de mantener la valla mínima salvó a dos partidos que habían acuñado laureles políticos: APRA y PPC. La alianza formada para estas elecciones fue el clarinazo que pasó dura factura a sus ambos líderes. Tanto Alan García como Lourdes Flores Nano ya están dando pasos al costado para que sendos partidos traten de salvar lo que se pueda en la debacle. Sin embargo, la peor parte la llevó el PPC, puesto que ha perdido a buenos congresistas que tenían una buena carrera política para permitir que asuman escaños otros de dudosa capacidad del partido acompañante. Los militantes del partido limeño no se lo perdonarán a su lideresa. En el caso de AGP, su ego no le permitió ver el antivoto que carga históricamente y que tiñe a todo su partido. El hecho de que en enero la cúpula partidaria no le haya permitido su renuncia a esta contienda ha sido una interesante forma de desembarazarse definitivamente de este personaje. Otro dato interesante es el hecho de que el partido de Castañeda no va más allá de su cuestionado líder y, para Nano Guerra, fue el momento para darse cuenta de que ya es momento de que baje del bus y siga otro camino. El caso de Toledo ya linda con la lástima. Su obcecada actitud lo ha dejado en maltrecha posición y el poder judicial estará determinando su suerte.
En saldos positivos tendríamos a Acuña que, aunque separado por medidas que no se aplicaron por igual a los demás candidatos, vio que era posible “oler a popularidad”. Sus estrategias son las que han empleado descaradamente los otros contendientes. Si la sociedad acepta fácilmente este tipo de acciones ilícitas, Acuña puede tentar para la próxima contienda. El populismo asistencialista es una buena arma. Keiko y Acuña lo comparten. Barnechea trajo a un partido que lo rescató de los últimos rincones: ACCIÓN POPULAR. Sus últimos errados desplantes lo hicieron trastabillar, pero estuvo presente en la contienda. El otro es Verónika Mendoza (FRENTE AM, quien subió de un casi 2 % en diciembre a 18 %. El contendor a quien pisaba los talones, PPK, no dormía en calma. Y si la campaña demoraba un par de semanas más, quizá los resultados hubieran sido otros.
En realidad, los dos candidatos de segunda vuelta casi se mantuvieron iguales. Ahora comienza el segundo tiempo.

domingo, 10 de abril de 2016

DÍA D (ARTÍCULO PUBLICADO EN EL DIARIO CORREO DOMINGO 10 DE ABRIL)

El día decisivo llegó. Casi veintitrés millones de peruanos, y entre ellos casi tres millones de nuevos votantes jóvenes, iremos a las urnas para escoger entre los diez candidatos que postulan a la Presidencia a aquel que nos gobernará por los siguientes cinco años, acompañado de sus vicepresidentes; y, además, a los 130 congresistas que conformarán el nuevo Congreso que legislará durante un lustro a la sociedad peruana. En este acto electoral, los peruanos delegaremos a 138 personas que nos representen, legislen, protejan, eduquen, cuiden nuestra salud, actúen racionalmente, defiendan nuestros intereses y el bien común, culturicen, protejan nuestro medio ambiente, respeten nuestras ideas, faciliten nuestros proyectos; todo bajo la perspectiva de lograr una sociedad más justa, integrada, inclusiva y dirigida hacia la felicidad.  Esas son las promesas que los cientos de candidatos han estado difundiendo en diferentes medios a una sociedad bastante vapuleada y desencantada de mensajes positivos que se lanzan al aire y que vienen de personas cargadas de un pesado pasado que debe de ser tomado en cuenta.
Desde el inicio de la democracia formal en nuestro país, hemos tenido diversos presidentes electos y de facto que han intentado propuestas y modelos para poder desarrollar nuestra sociedad. Hubo 59 presidentes (algunos interinos y de transición) desde que nuestro país se declaró independiente de España. Todos ellos ascendieron al poder, de manera legal o subrepticia, con la responsabilidad de gobernar a una sociedad que tiene grandes carencias y profundas diferencias. Una sociedad en la cual muchas formas de escepticismo e indiferencia han ido ganando terreno gracias a que las grandes necesidades básicas no han sido satisfechas o son de mala calidad; necesidades convertidas en  promesas de diversos gobernantes de turno, los cuales las olvidaron o postergaron una vez ya en el poder. Una sociedad que ha visto a sus instituciones políticas debilitarse por el carácter caudillista de sus líderes, la escasa educación cívica de la ciudadanía y la carencia mortificante de una ideología tras un partido político. Y estas elecciones se han visto agravadas por haber tenido poco espacio para discutir planes concretos de gobierno y sí para defenestrar al oponente y crear un clima de zozobra y pánico que nada bien le hace a nuestra sociedad.
Quien suba al sillón presidencial este 28 de julio tiene la obligada misión de trabajar para la sociedad, que apunte hacia el desarrollo y no solo el crecimiento, el cual ha deslumbrado a un grupo de peruanos por haber contemplado solo lo económico sin ver los demás rubros importantes como salud, educación, integridad y bienestar, y que alcance a la mayoría de peruanos. Sino, todo esto, como de costumbre, volverá a ser promesa electoral en cinco años.  La pobreza e ignorancia son fuentes inagotables de réditos políticos.


lunes, 7 de septiembre de 2015

LA REALIDAD POLÍTICA QUE NECESITAMOS

ESCENARIOS SOMBRÍOS

Lo que se temía que iba a suceder, ha comenzado. La temida desaceleración china ha llegado y el freno económico en seco ocurre en un momento crucial para la vida económica y social de nuestro país: un posible mega Niño (http://www.rpp.com.pe/2015-07-07-minagri-peru-se-prepara-para-el-peor-escenario-ante-fenomeno-de-el-nino-noticia_814631.html). Aunque el fenómeno climático no nos va a tomar totalmente desprevenidos como el del 82-83, la coyuntura mundial complica a nuestro país en lo que sería el proceso de reconstrucción, el acceso a créditos para la reparación de los daños de ciudades y sistema vial, así como para la repotenciación de todo el motor productivo de la zona, sobre todo en agricultura y derivados. El primer impacto se tendrá pronto con la devaluación del yuan (http://actualidad.rt.com/economia/183032-america-latina-consecuencias-crisis-china) y el segundo, y posiblemente más nefasto, el enfriamiento de su economía (http://gestion.pe/economia/cuatro-razones-que-china-golpeara-economia-peruana-2140908). Nuestro aparato económico, generalmente de corte extractivo (minerales, sobre todo), va a resentirse y los problemas de inversiones en los rubros mineros van a acentuarse por la caída de los precios. La política cortoplacista de los últimos gobiernos nos va a pasar factura por no haber ideado con tiempo alternativas al panorama al cual entramos con marcada incertidumbre. Vemos extinguir la gallina de los huevos de oro. Y, hablando de oro, las economías mundiales se van a refugiar en este y nuestro país, rico en este mineral, ha exportado más de 4 millones de onzas hacia el 2013. ¿Estaremos guardando pan para mayo?

Este escenario debe ser el tema obligado para los futuros candidatos, de los cuales aún no hemos oído comentario alguno al respecto. Los voceados candidatos deben hablar de planes de contención, mantenimiento de nuestra economía y la reconstrucción de ciudades, carreteras, escuelas, hospitales, además de ver con qué fondos contamos y qué estrategias van a tener para estos escenarios. Lastimosamente, como circo ambulante, más se hallan preocupados en robar agendas de los demás, en vez de elaborar planes de gobierno que trabajen con estas dos realidades que, de todas maneras, han de condicionar el nuevo gobierno que suba en julio del 2016. Es el momento de exigir como ciudadanos a aquellos que quieren gobernarnos para ver si pueden asumir el reto de un periodo que no va a ser nada agradable  desde el punto de vista de la política en términos correctos.

domingo, 29 de mayo de 2011

RECORDANDO LA MARCHA DE LOS CUATRO SUYOS

Ha pasado más de una década de aquella fecha.
De pronto lo que parecía ser una elección más para dejar cinco años más en el poder a Fujimori, provocó una reacción de indignación a miles de peruanos cansados de corrupción, de saqueo económico, de injusticia generalizada que era todas luces vista, pero no cuestionada por los férreos tentáculos del poder y corruptela clientelar que había desarrollado el inefable Montesinos en toda la sociedad peruana. Nos habían adormecido con el cuento de la pacificación (que como bien explicó Gorriti sólo se realizó durante el primer periodo del fujimorato) y de la estabilidad económica que había impulsado la informalización de la sociedad (recuerden el boom de los desempleados públicos con sus taxis) y el terror sembrado a todas aquellas empresas que caían en la desgracia para esta mafia y utilizaron la Sunat para la extorsión. De pronto una parte de la sociedad dijo "basta"; pero, valgan verdades, muchos peruanos no queríamos creer, porque arrellanados en nuestras cúpulas de cristal o humillados por la sociedad que nos trataba de apestados (hasta ahora), no queríamos romper el statu quo. Se estaba más cómodo así. Era mejor ser indiferente.
Pero sentí vergüenza personal, cuando apareció el famoso video que mostraba a Montesinos y Kouri en un acción de cohecho demasiado evidente; pero nos resistíamos aún. Teníamos miedo de nuestra casa, de nuestra cuenta en el banco, de nuestro auto flamante que estaba en el garaje. No. Es más, escuchábamos atentos a lo que decían sobre las fugas tanto de Montesinos como de Fujimori. Recuerdo a la Cuculiza negando en todos los idiomas que su adorado presidente fuere a renunciar. Ahí está la historia.
Han pasado 11 años y vemos que muchos de los actores de aquella marcha y de la otra marcha silenciosa que era el llamar a la conciencia a los peruanos, han claudicado. Se han convertido en  lo que fuimos como ente social durante la década de los 90. Si Canal N era hostilizado por su pose democrática, ahora aplaude a la representante de aquel oscuro periodo de nuestra historia, aquel en el que fueron tratados como parias y hostilizados.
Varios de los que apoyaron esa marcha de conciencia han sido consecuentes y han expresado su posición. Quizá no pro Ollanta, mas sí anti Keiko. Eso reconforta, ya que queda dignidad en nuestro País.
Personalmente, no quiero sentirme como parte de ese "ganado" que fuimos durante esa década y que,en cierta manera, condenamos esa marcha, la de los 4 Suyos, que terminó en violencia y difamación descarada. No, no quiero teñirme de vergüenza como la que veo en muchos compañeros de trabajo y amigos que han claudicado con comodidad y que me avergüenza, porque me siento parte de una camarilla mafiosa que otorga perdón al ladrón que me robó, que me despidió, que me humilló, sólo por un extraño sentido de comodidad.
Cuando veo instituciones que plantean su posición, sean medios de comunicación (que son pocos, hay muchos pecados que expiar de la década de los 90) o entidades educativas (¿no se había desarrollado toda una fuerte campaña de valores en esa época? Bueno, algo queda); así como la posición de personajes de toda índole desde intelectuales hasta artistas y hombres y mujeres de a pie, no me queda más que unirme a sus voces para no ser un paria más de nuestra dura sociedad.
Veremos qué tendremos al amanecer del 06 de junio. Si descaro o dignidad.

domingo, 1 de mayo de 2011

HACIA LA VERGÜENZA

No he querido usar el espacio de mi blog para involucrarme en todo este campo de disputas tan agresivas y divisorias como lo han sido y están siendo estas elecciones. Lo único que he visto a lo largo de los medios virtuales en los últimos días de la primera vuelta y los que corresponden a la segunda es una serie de mensajes atosigantes por un lado, y excesivamente cargados de odio por el otro. Nadie escapa y ha escapado de haber insultado o haber sido insultado. He participado en foros en los cuales la mayoría de personas del grupo apoyaba a un candidato que no era de mi simpatía y en un discurrir de las ideas sensatas se fue convirtiendo en una pesadilla mediática; he visto dos foros de personas de mi ex universidad y la cosa está patética. El hecho de no simpatizar por un candidato te ha vuelto en una suerte de "apestado" e incluso categorizado por mucha gente, la mayoría adolescentes, que no tiene ninguna idea de lo que es "democracia". Muchas personas que conozco pertenecen a un círculo social, económico y cultural que tiene el privilegio de haber tenido (y tener) mejor educación. Pero al verlos casi en calidad de energúmenos, intolerantes e intransigentes he preferido callar. Algunas reflexiones sensatas han venido de varias personas, amigas o conocidas mías; pero son pocas. La polarización a la que se ha llegado quiere anatematizar a una persona que encarna una corrienta política, como si ella fuese la culpable. Si hubieran puesto a otro, la lógica plana con la que se ha razonado en las últimas semanas la hubiera hecho culpable. Ya no puedes discrepar. En cierta manera, las razones que esgrimen para culpar a este candidato, Ollanta, son aplicadas por ellas: autoritarismo, resentimiento e incapacidad.
Si vemos estos tres grandes hiperónimos o macro palabras - si cabe el término-, encierran todo lo que estas personas han destilado a lo largo de la primera y, en lo que va, la segunda vuelta.
Autoritarismo en su pensamiento en una sola dirección; ellos son los correctos, no hay otras posibilidades. Su verdad es la única e increíblemente debe aceptarse a pie juntillas. Este es su concepto de democracia (!)
Hay un marcado resentimiento de un grupo social y de varias personas que quieren pertenecer a él, es un odio casi visceral; hacía tanto tiempo que no veía cargas semánticas racistas tan fuertes; muchos psicoanalistas van a tener un interesante campo de estudio en esta violenta sociedad que se ha ido formando en los últimos 20 años. En realidad, la brecha económica en nuestro país se ha mudado a todos los campos, peligrosamente, reitero, peligrosamente. Peor aún, los medios y las instituciones que deberían invocar a la razón política no hacen sino azuzarla con algunas proyecciones que quizá no hayan medido (¿o sí?).  Y el resentimiento no tiene razón: el ex portavoz del grupo que defiende cierta forma de pensar , Mario Vargas Llosa, de pronto ha caído en la desgracia ya que él quería ser coherente en su pensamiento, en una nación en la que la coherencia ha perdido su rumbo. Lo enlodan e, incluso, lo contraponen a un literato de medio pelo como puede ser Jaime Bayly. Personalmente, MVLL no me simpatiza, pero su acto dignifica a nuestra sociedad que quiere borrar todo el pasado de un gobierno que hizo todo lo que están achacando a Ollanta: quedarse en el poder (Fujimori se quedó casi 11 años si no hubiera sido por los Vladivideos); tirarse abajo la economía (ya nos olvidamos de la recesión del 98-99); cortar la libertad de prensa (esta es la que más risa da, a menos que tengan algún saldo del pasado gravemente pendiente); cortar derechos civiles (¿los tuvimos en esa época, salvo para un grupo de personas?). Mario Vargas Llosa fue maltratado por ese gobierno y como mucha gente que perdió empleos, vio sus ahorros desaparecer en malas gestiones. El entorno que rodea a la candidata permanece y MVLL tiene sus justas dudas (como todos) que tenga la capacidad de gobernar nuestro país, si no es con mano férrea, tiránica, tal como le gustaba (y le gusta) a la gente: una paz de cementerio. Un ejemplo ya lo estamos viendo al despedir a periodistas destacados por no encajar en los planes venideros en un posible gobierno de la candidata. En la nueva forma laboral se entiende, pero despides a un ineficiente, no al que te hizo pasar a ser un emblema de la prensa libre.
Quiero cerrar con la incapacidad: creo que la hemos vivido permanentemente vía virtual. La incapacidad de oír al otro, de tolerar formas divergentes de pensamientos. Una alumna de una clase en la Universidad dijo muy suelta de huesos para qué leemos a Arguedas que es de cholos y serranos; el profesor tuvo el buen tino de aclararle las ideas a esa jovencita, cuyos rasgos físicos la acercaban más al mundo andino que al del soñado "primer mundo". Ella fue, tal vez, una portavoz de esa masa silenciosa de jóvenes que se les ha envenenado la mente con la negación total de lo que somos. Duro trabajo por hacer en la educación.
 Espero que el día 06 de junio, luego de la resaca de las elecciones, los peruanos nos levantemos para restañar las heridas que está causando este intenso periodo. Eso no lo hace ni uno ni el otro candidato, lo tenemos que empezar nosotros. Ojalá podamos.

miércoles, 23 de febrero de 2011

ANGURRIA DE UNOS POCOS FRENTE AL BIEN COMÚN

Estamos siendo testigos de un evento que puede cambiar la imagen de una sociedad permanentemente golpeada por los caprichos de unos pocos a la de una sociedad cuyo bienestar general sea respetado por cada una de las personas que la integren. Lo que sucede en Lima es clave para que el ciudadano de a pie se sienta respaldado por sus autoridades frente a la prepotencia que suelen imprimir los grupos de poder sea éste económico, político, religioso o de cualquier índole.
La correcta decisión de sacar todo tipo de panel publicitario que entorpezca el normal fluir de una ciudad debe ser aplaudido por todos, ya que obedece a un principio no sólo de estética o de bienestar, sino a un principio de orden el cual todos los ciudadanos debemos respetar para poder convivir en armonía. Sabido es que este principio cívico no es respetado frecuentemente puesto que no ha sido aprendido por cada uno de nosotros a lo largo de nuestras vidas: lo que no se aprendió de niño, no se lo aprenderá de grande, parafraseando el refrán alemán. Es cierto, en un país caracterizado por hacer lo que uno con poder hace sin importarle a los demás ha sido nuestro ambiente educativo, y la historia en su forma oficial y/o popular nos lo demuestra. Lastimosamente los últimos representantes oficiales de los peruanos (llámese gobiernos) no han hecho nada más que corroborar esta suerte de ley tácita en nuestra sociedad. Montesinos y su gavilla. Toledo y su familia. Alan García y su clan. Cada uno con sus más que terribles muestras ante la sociedad de "el que puede, puede y hace lo que le da la gana". Desde la "hora Cabana" hasta Bagua y la corrupción del Poder Judicial, son diferentes grados de esa impunidad que hace de nuestro país una verdadera jungla en la que sobrevive el más fuerte, el que golpea más, el que suelta más billete, el que compra más periodistas, el que acapara más terrenos, el que hace lobbys más jugosos; en fin, la muestra es vasta e interesante, y nos dice mucho de nosotros como sociedad.
Pero, de pronto, una mujer quiere poner un poco de orden en su casa, en su Municipio. Y su decisión ha causado escozor a todos los políticos que veían nerviosos cómo sus líderes eran golpeados directa o indirectamente con el fenómeno Wikileaks. De pronto, les llegó la oportunidad para poder retomar la imagen ante el electorado para aparecer como luchadores de los intereses del pueblo, en este caso, "la libertad de expresarse". Eso dicen.
Los políticos que tenemos son personas que saben que su estabilidad económica personal depende del hecho de ganar un curul; eso les permite vivir cómodamente por otros 4 años, tener su casa en Lima, hacer sus negocios particulares (¿habrá alguno que no haya sacado provecho de su posición como congresistas, sea no pagando impuestos, reflotando sus empresas, beneficiándose de la compra barata de terrenos declarados como eriazos, creando universidades o sucursales de ellas, logrando prebendas, o un largo etcétera?). Esto es lo que está en juego en realidad. Un cartel menos es un puñado de votos menos en las ánforas. Quizá. En la memoria leve de los electores peruanos, quizá sea necesaria una recordación en una esquina de un parque, en el techo de una casa, en una avenida saturada de carteles. Quizá pueda recaudar tres o cuatro votos más, quizá.
Pero Susana Villarán ha actuado con sentido común. Si mi espacio está saturado, lleno de tantas cosas, procedo a limpiar y a arreglar. Y en el caso de la comuna, para eso existen marcos legales que defiendan a todos los que habitan ese espacio. Las leyes se hacen para velar el bien común (salvo las que a veces nos han sorprendido nuestros gobiernos, algunas con nombre propio). Si mal no recuerdo, durante el gobierno municipal anterior, hubo una idéntica acción que se procedió a limpiar una avenida de varios carteles publicitarios e incluso se desmanteló un cartel electrónico. No sé en qué quedó toda esta acción, puesto que fue noticia de una semana, luego hubo otras prioridades noticiosas. Sería bueno saber si se respetó o no lo decidido. Y espero que la Alcaldía de Lima haga prevalecer su autoridad para que marque una pauta de la cual todos los ciudadanos de todas las demás ciudades del país nos debemos ceñir. Aquí en Trujillo tenemos la mala suerte de tener a dos personajes ligados al Municipio que están postulando al Congreso; ergo, las posibilidades de ver a nuestra ciudad bajo las reglas del ornato y respeto están muy lejos de que se cumplan, habida cuenta que el alcalde nuestro maneja la institucionalidad con un sentido de gamonal (no están extintos).
Personalmente apoyo la decisión de la Alcaldía en la persona de su alcaldesa; que los prepotentes que han salido ayer en TV amenazando de enjuiciarla por su recta decisión entre en razón y que éstos entiendan que no es un capricho personal, sino el poder de una ciudad que debe ser respetado. Mas, si siguen en su decisión, que nos sirva de medida para ir conociendo el talante de los personajes que quieren representarnos. Por sus actos los conoceremos.

domingo, 13 de febrero de 2011

VOZ DEL PUEBLO, VOZ DE DIOS

Lo de Egipto es el colofón y el principio de un momento histórico que tiene por principales protagonistas, un pueblo cansado de líderes ególatras y una falsa democracia que dice representar a un pueblo y lo que en realidad hace es entronar una casta de individuos que se dedican a expoliar a los ciudadanos que los eligieron a través del circo democrático en que se han convertido nuestros gobiernos.

La génesis de este conflicto se inició, como efecto “dominó”, con la revuelta en Túnez, país árabe también cansado de ver a una gavilla de ladrones gobernantes, apoyados por la complacencia de gobiernos occidentales con el fin de mantener una suerte de status quo para beneficio de sus economías, más que la del pueblo que tiene a estos políticos dirigentes. El concepto de “república bananera” puede acercarse a describir estos tipos de gobierno que han gobernado los países árabes en los últimos años, con ciertas variantes. El mundo árabe se vio varias veces fragmentado, sea por el temor de la unidad de esta gran nación, sea por el interés de mantener una fuente ingente de recursos naturales para el beneficio de las potencias occidentales, que es las más de las veces. La historia de estos países se ve jalonada por la creación y promoción prejuiciosa de diversas ideas divisionistas u odios entre los pueblos de habla árabe, que fueron unidos algún día por el profeta Mahoma. Algunas de estas situaciones se ven vistas de manera romántica y tergiversada por el casi mítico personaje Lawrence de Arabia, quien unió a los pueblos sometidos por el Imperio Otomano (los turcos) para pelear por el lado británico. Una vez concluida la primera guerra mundial, los países árabes no vieron la tan voceada libertad. Es más, se crearon algunas naciones como Kuwait para herir el orgullo árabe y para poder negociar con los nuevos gobiernos títeres la explotación del oro negro, tornando millonarias a las familias reales, y pobres a sus pueblos. En cierta manera, los árabes tienen toda la razón del mundo para dudar de la supuesta amistad de los países occidentales con toda su comunidad. Como ejemplo, es el rechazo de Estados Unidos y otras potencias contra el “díscolo” Nasser, líder que creó la República Árabe Unida (RAU) para recuperar lo que pertenecía a los egipcios, siendo un caso entre ellos, el Canal de Suez. A su muerte, los norteamericanos no dudaron en apoyar a líderes con Anwar Sadat, primero, luego Mubarak con el fin de velar sus intereses. Las movidas de fichas por parte de los gobiernos occidentales y las descaradas intromisiones en las políticas internas fueron generando un fuerte resentimiento de un pueblo que veía el ilícito enriquecimiento de sus autoridades y el empobrecimiento de los ciudadanos de a pie. Algunos países no árabes, pero muy cercanos a ellos como el caso de Irán es un claro ejemplo del descarado intervencionismo occidental para derrumbar al gobierno nacionalista de Mossadegh, y tras derrocarlo, colocar en el poder al famoso Sha Reza Pahlevi, quien gobernó con mano dura a su país. La errada política interna avalada por los ingleses y norteamericanos, sobre todo, terminaron de fomentar la caída del Sha y el ascenso incontenible de los Ayatolas. Esto es producto indirecto de la obtusa óptica de las petroleras que se escudaron en sus gobiernos para obtener recursos seguros y baratos (tiene mucha similitud con lo que pasa en nuestros países y las políticas neoliberales de Menem, Fujimori y sus seguidores, sólo que en nuestros casos, “legitimados”).

Egipto se había convertido en un país tapón, una vez muerto Nasser, el ascenso de Anwar Sadat permitió a la política norteamericana negociar con un hombre menos “duro”; así en 1977 se logró algo impensado: 10 años después de la guerra de los 7 días se firmaba el famoso tratado de paz de Camp David. Ambas partes se comprometían a un alto al fuego, la devolución de grandes extensiones de terreno a Egipto (la península de Sinaí) y un tratado comercial. Pero las castas militares no iban a perdonar esta paz endeble y van a asesinar a Sadat en 1981 durante un desfile militar en una masacre que fue asombrosamente vista por televisión por todo el mundo. Aún recuerdo un hombre sin un brazo que salía entre la humareda y los cuerpos destrozados. La turbulencia de entonces hizo temblar no sólo a políticos, sino a los mercados, que aún estaban nerviosos del fuerte boicot de los países árabes con el embargo petrolero de los años 1973 y 1974 (¿recuerdan el racionamiento de gasolina de esos años?). El ascenso de Mubarak se dio en ese marco de inestabilidad política que podría haber provocado una nueva guerra en Medio Oriente y con el consiguiente descalabro económico mundial. Mubarak se volvió en hombre de confianza de Estados Unidos, adalid de la lucha contra el comunismo y posteriormente contra el islamismo, el nuevo enemigo surgido para hacer que las cosas funcionen dentro de la dicotomía geopolítica de las naciones: amigo/enemigo. En cierta manera, la pérdida de algunos jerarcas pro occidentales como el Sha, o la “conversión” de otros como Hussein (inicialmente hombre de confianza de USA, Inglaterra y Francia), hizo que el rol de gendarme de la zona recayese en Mubarak. Y como jerarca “elegido”, se volvió candidato eterno (como lo era Somoza en Nicaragua o Stroessner en Paraguay) para lo cual se realizaban algunas elecciones como las del 2005 ó 2010 con el cantado triunfo y el apoyo férreo de la mayor potencia del mundo.

Un rol importante en estos eventos ha sido indudablemente el libre acceso a la información; la Internet bien usada es un campo de conocimiento impensado, sobre todo para buscar otras opciones fuera de las que se nos tienen acostumbrado los “lenguajes oficiales”. Es cierto lo que dicen varios analistas sobre la actual generación egipcia, una generación que ha crecido con la imagen omnipresente de Mubarak; pero también es una generación que ha crecido con el desarrollo de la comunicación en línea, la del día a día. Y vieron lo de Túnez, un hecho que prendió la mecha a esa carga de dinamita social que subyace en las sociedades árabes. Y vieron que era posible. La cólera tunecina era también la cólera social egipcia y la de otros países, como Argelia o Jordania.

Estuve dos veces en El Cairo, estuve en esa plaza inmensa que se ha vuelto un símbolo: plaza Tahrir. Una plaza frecuentada por cairotas yendo a laborar, a recibir un sueldo miserable, a callar la ignominia de cerca de 30 años. Y conmueve ver que la esperanza de luchar por un mundo mejor no está muerta, que es posible que el pueblo haga oír su voz y que derribe al gobernante que le ha dado la espalda a su nación; aquí en nuestro continente lo hicieron los ecuatorianos, quienes se pusieron sus pantalones y enfrentaron a dos gobiernos por haberles mentido, haberles dicho tantas promesas que nunca se cumplieron. Y que de pronto existe un poder del pueblo para reclamar la parte del contrato que firmó con sus ciudadanos, tal como lo plantea Rousseau en su Contrato Social. Sé que ahora Egipto tiene por delante un camino duro por recorrer por falta de experiencia como dicen los analistas políticos, tan paternalistas ellos con nuestros pueblos. Hay dos grandes riesgos entendidos: Israel y el desarrollo de fundamentalismos, así como, obviamente, el cuidado de sus recursos. Imagino cómo habrán estado las hermanas petroleras preocupadas con sus pozos en la movida zona del Medio Oriente. Quizá en unos meses nos pasen la factura con un alza del petróleo. Alguien tiene que pagar. Ya Estados Unidos habrá negociado bajo la manga con los militares para controlar “los pasos democráticos” (se puede leer esto en los diversos mensajes de la Casa Blanca). Personalmente espero que las cosas vayan a favor de este sufrido pueblo, que haya buenas y directas negociaciones con Israel, un país que tiene derecho a existir y coexistir con sus vecinos. Y que los ciudadanos apacigüen su euforia y planifiquen su sociedad y mantenga esa calidad de faro en el mundo árabe. El Cairo es la ciudad soñada en el mundo árabe. Largo camino.

¿Qué ejemplo debemos sacar de esto los ciudadanos peruanos? Todos deberíamos estar alertas con el próximo evento del 10 de abril. Nuestras pantallas, nuestros diarios, nuestros medios de comunicación se están llenando de discursos que hablan de un Perú mejor. Todos. Los anteriores prometieron lo mismo; muchos mintieron prometiendo una cosa, luego terminaron haciendo otras. Pero es el deber nuestro de hacer respetar nuestra voluntad otorgada para que el gobernante de turno haga el trabajo que le corresponde y velar por el pueblo que lo eligió. Tenemos que desarrollar nuestra conciencia cívica.

Quiero recordar un nombre que se volvió símbolo de este movimiento espontáneo en el mundo árabe, un tunecino de 26 años, Mohamed Bouaziz, quien desesperado por la burocracia y la corrupción que le impedían poder trabajar con su carreta, se prendió fuego en extrema desesperación. Veo a mucha gente pobre y sencilla, que va a un hospital y no tiene 5 soles para poder ser internada; el caso de una niña que murió por no ser atendida, ya que no tenía documentación. No hay que ir muy lejos para hallar cientos de casos como Bouaziz. Pero lo que leí en el diario El País y me impactó muchísimo fue la respuesta sencilla y bella de su hermano menor: ante la compra de la carreta de su hermano Mohamed por algunas personas para hacer de ésta algún tipo de símbolo, el jovencito prefirió quedarse con el recuerdo de su hermano mayor para preservarla en la memoria de todos los suyos. Creo que eso se llama dignidad.

lunes, 10 de enero de 2011

CÁLCULO POLÍTICO: CAYÓ CROUSILLAT, ¿ACOMODO EN EL APRA?

La captura del mes se llevó a cabo sospechosamente postergada (ocho meses) el día de hoy, 10 de enero, ad portas de las elecciones internas del APRA en las cuales algunas figuras políticas cuestionadas pueden pasar al retiro si las urnas les niega su participación en estas nuevas elecciones presidenciales del 10 de abril. La captura del liberado Crousillat ha sido una de las acciones más lentas y que tiene todos los visos de ser una movida política en los momentos más álgidos del partido gobernante.


En una encuesta realizada en nuestra ciudad recientemente la mayoría de los encuestados tiene una muy entendida animadversión contra los partidos políticos. El accionar de todos ellos durante los últimos gobiernos elegidos ha sido deplorable y los parlamentarios inefables no dejan de sorprendernos con sus acciones, las cuales no hacen sino empeorar su imagen como representantes probos de nuestra sociedad (aunque en el fondo una sociedad se ve reflejada en sus líderes y en el manejo de sus medios de comunicación). Esta situación ha ido empeorando en el circo que se han convertido las listas de parlamentarios que cada uno de los partidos está preparando para las elecciones de abril. Los clanes familiares, los arreglos de última hora, la captación de personas con imágenes de popularidad (reinas de belleza, deportistas, ex jefes policiales) han hecho de estas elecciones un verdadero carrusel de puestos y movidas económicas bastante interesantes y dudosas en cuanto a su seriedad y compromiso (se sabe que muchas de las personas que han ingresado al Congreso como invitados han terminado cambiándose a otras alianzas electorales, como el caso del indescriptible e inútil Torres Caro). Para coronar todo este ambiente, Aráoz pidió un baño de transparencia y honestidad en uno de los más cuestionados partidos políticos y que está en la gobernación, situación que ha generado un enfrentamiento con el ex primer ministro, Jorge Del Castillo.

Ante todo el contexto y antecedentes explicados, ¿cómo entra la captura de Crousillat en la movida política? ¿Qué favores y desplazamientos se vienen pronto antes de las elecciones internas de los partidos? Toda persona sensata tiene la justa sospecha que esta captura cae dentro de un desplazamiento de fichas en este ajedrez que hay que mover hasta el 10 de abril. AGP ya no exige propaganda y publicidad en pro del gobierno actual. Pero hay varios medios indirectos de hacerla. Y en eso, nuestro dilecto gobernante sabe cómo hacerla. La posibilidad de un destronamiento de Aráoz podría darse en las siguientes movidas que se hagan de aquí hasta el 16 de enero, movidas de corto y mediano plazo, puesto que la repercusión de los mismos debe llegar hasta las elecciones mismas gracias a los medios de comunicación adictos al gobierno o al acomodo posterior (valgan verdades, la captura de uno de los personajes más poderosos del cuarto poder en la era Fujimori es un reflejo fiel de lo que se mueve en dichos medios en los que los intereses políticos y económicos tiñen los contenidos y la editorial de los mismos).

Se vienen días movidos y muchas acciones van a saltar pronto al ruedo, algunas para desprestigiar a la fauna política (hay tantos rabos de paja para quemar) así como ocultar, precisamente, la mediocridad de los mismos.  Las movidas van a ser interesantes, veremos cómo salen parados Aráoz y Del Castillo, personajes que se están confrontando. De moverse bien las fichas, esta captura va a ser bien capitalizada por el APRA en un  momento de tormenta interna. De salir Del Castillo, el baño de moralidad y anticorrupción les dará una nueva cara, situación que fortalecerá a Aráoz en su acción de limpiar la cara del partido gobernante. Si queda Del Castillo, debe surgir en esta presión al Poder Judicial una campaña para limpiar el pasado de Del Castillo, para ir inmaculados al 10 de abril.
Parece ser que ahora “Todo Vale”.