Datos personales

Trujillo, La Libertad, Peru
Un espacio para mostrar ideas y puntos de vista ligados al arte, a la cultura y la vida de una sociedad tanto peruana como universal
Mostrando entradas con la etiqueta ecuador. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta ecuador. Mostrar todas las entradas

lunes, 15 de enero de 2024

ECUADOR PARA EL ESPANTO (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO 14 DE ENERO)

 


Hace muchos años tuve la oportunidad de pasar prácticamente un mes en la ciudad ecuatoriana de Cuenca, en la que la violencia y actos delictivos eran raros y los ciudadanos dejaban sus casas sin cerrarlas con tantos seguros o alarmas. Ese paraíso se acabó. Lo visto en las redes sociales y los medios de comunicación de lo sucedido en Ecuador es, en cierta forma, el corolario de una sorda lucha de la delincuencia que busca “hacerse oír” en los espacios de poder de ese país y una demostración de su capacidad para poder doblegar a una sociedad y su gobierno. Los hechos violentos de los días martes 09 y miércoles 10 no son un fenómeno aislado que toma de sorpresa a los ecuatorianos, pero sí son hechos que han pasado a otro nivel tan riesgoso que ha exigido que el estado haya declarado la situación como “un conflicto armado interno”. Estos hechos también nos involucran de manera directa e indirecta y muchos analistas ven un escenario igual o muy parecido en nuestro país. Los grupos delincuenciales no presentan ninguna ideología, los mueve el afán de lucro y, con este, el poder. Son la parte visible de los hilos del narcotráfico, la minería y tala ilegal, y el comercio humano (prostitución) que, este último, va de la mano con estas taras sociales; estas han surgido en sociedades con estados débiles, esos que no pueden ofrecer seguridad, salud ni un empleo digno a sus ciudadanos; la juventud de estas sociedades se dedica a estas actividades comenzando con el sicariato y el transporte de droga y otros artículos ilícitos (madera, oro) y logran corromper al mayor número de integrantes de los poderes estatales (policías, jueces, por ejemplo). Esos escándalos los vemos, leemos casi cotidianamente. La delincuencia logra insertarse en el tejido social a través de la dinámica política y accede silenciosamente (aunque ahora ya es demasiado evidente y escandalosa) por medio de la masa amorfa actual que es un partido político. También lo hace en los procesos de reclutamiento en las fuerzas del orden, colocando “topos o informantes” en las mismas instituciones. Este es un problema muy presente en muchos países latinoamericanos. Veamos el caso nuestro, por ejemplo, en el que vemos a grupos de congresistas que promueven leyes que permiten “formalizar” la ilegalidad como la reciente promulgación de la Ley Forestal y de Fauna Silvestre o la aprobación de la reforma que elimina las elecciones primarias en los partidos políticos (¡sin participación de la ciudadanía!), lo que permitirá que numerosos injertos (como lo es ahora) compren prácticamente curules con dinero surgido de acciones turbias. Estas modificaciones justamente se dan en momentos que vemos la oscuridad en la que está inmersa ahora el pueblo ecuatoriano. Con los personajes que pueblan el congreso nuestro, quizás la espiral prometa ser más honda que la ecuatoriana. Ajustémonos los cinturones.




domingo, 27 de octubre de 2019

ADVERTENCIA (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO 27 OCTUBRE DIARIO CORREO TRUJILLO)


Una vez una profesora alemana nos comentaba su dificultad para entender situaciones extremas (alimentación, salud, educación, seguridad, vivienda) en las que muchos peruanos vivían diariamente. Una señora ponderada que le sorprendía la capacidad de “resistencia” que muchas personas tenían ante estas, impensables en otros contextos. Pero, es necesario dar una referencia temporal de esta conversación: 1984. 
Décadas después, tras el terrible primer gobierno de AGP, la subversión de Sendero Luminoso y el Fujimorato, nuestro país tiene un rostro diferente; solo el rostro. Las situaciones básicas, muchas veces maquilladas para fingir bonanza o bienestar, no han sido del todo satisfechas. Esto se ha ido agravando más en los últimos años, alimentado por desencanto de un mundo político falaz, demagógico y cínico en el que se ha convertido el mundo político peruano. Los escándalos que involucran a excongresistas, por ejemplo, recién están estallando y no sería nada raro que los haya más, por lo que la desazón y desconfianza de la población seguirán en aumento. Muchas personas hablan de que una posible eclosión social no se dé en nuestro país, pues mucha de nuestra economía es informal, lo que “atenúa” cualquier situación de riesgo colectivo; pero no creo que sea un argumento contumaz de la posible olla de presión en la que se estén cocinando muchas frustraciones y desengaños. Pareciera que esta situación encontró una suerte de válvula de escape al clausurar el mediocre Congreso de la República.
A las reacciones de Ecuador y Chile, más lo sucedido en Bolivia, se les trata de hallar justificaciones externas a estas respuestas ciudadanas, ubicando culpables en la izquierda o en la derecha; pero, valgan verdades, ambas están siendo superadas por la realidad. Estas justificaciones son una forma de invalidar el gran malestar social generado en grupos de clase media en Chile o la mayoría en Ecuador; o en Bolivia, en un electorado cansado de la manipulación grosera como la acometida por Evo Morales para continuar en el gobierno del país del altiplano. Es también simplificar esta realidad tachando a miles de ciudadanos hartos de la situación de simples delincuentes. Lastimosamente, grupos de criminales aprovechan estas disrupciones para hacer sus fechorías. No olvidemos los grupos sediciosos “plantados” en la Marcha de los 4 Suyos, los que provocaron el incendio del edificio del Banco de la Nación causando la muerte de 6 personas. Estas sucias estrategias son empleadas por cualquiera de los grupos que están en el poder deslegitimados, sea de izquierda o derecha, con el fin de debilitar los justos reclamos de una población hastiada.
Al ver el documental La revolución y la tierra quizá uno pueda comprender la actitud pasiva y casi servil que se vivieron décadas pasadas. Quizá esa podría haber sido la respuesta adecuada a mi profesora de alemán de hace cuatro décadas. Pero, ahora esto ya no es posible. ¿Una advertencia?

domingo, 13 de octubre de 2019

MACHALA A VISTA DE PÁJARO





Viernes 10 de mayo. Ecuador. Este viaje lo planificamos gracias a los datos de César Alva. El día previo había logrado obtener todos los documentos necesarios para poder pasar con el auto a territorio ecuatoriano. Salimos a las 8:30 am con destino a Machala. La distancia entre ambas ciudades no es mucha; además por el lado ecuatoriano, cuentan con una red de autopistas que son la envidia de cualquier peruano que ve solo eso en Lima debido al excesivo centralismo de nuestro país. La distancia entre ambas ciudades es de un poco menos de 95 kilómetros. De haber estado en el mismo país, lo hubiéramos hecho en casi una hora; pero el problema estaba en los trámites de frontera. Años pasados la ruta obligaba la entrada a Zarumilla, pero ahora se ha hecho un espacio denominado Centro Binacional en el cual se concentra todo lo necesario para los trámites; ahora ya no ingresas a Huaquillas o Aguas Verdes.  Hay un espacio entre fronteras que es una situación de limbo. Previamente, en el camino, hacia la frontera fuimos testigos del gran drama de la migración venezolana: gran cantidad de personas de todas las edades, hombres y mujeres, caminan desde el puesto fronterizo hasta Tumbes e, incluso más allá, como lo habíamos constatado el primer día que nos íbamos a Punta Sal.  En el lado peruano, uno se encuentra con muchos emigrantes venezolanos que colmaban las instalaciones. En las oficinas tenemos que dejar la documentación del auto en ambas sedes nacionales y sellar nuestros pasaportes, proceso más rápido que ir con DNI. Nos advirtieron por el horario de atención para el retorno, lo que tuvimos que tomar en cuenta para no tener problemas con el vehículo. Hay ventanillas diferentes con el fin de dar prioridad a los demás viajeros y atender a los cientos de migrantes venezolanos que estaban ese día en las instalaciones. La ONU ha ayudado instalando tiendas para que la gente, sobre todo los más vulnerables como niños, mujeres y ancianos, tengan un lugar donde dormir y algo de comer. El drama es grande.
Una vez culminados todos los trámites salimos a la carretera e ingresamos a territorio ecuatoriano. Hay varios controles que han aparecido por el problema de los migrantes, a los cuales facilita para que se dirijan rápidamente a la frontera peruana. Los días que estuvimos eran previos al cambio de régimen migratorio que estaba poniendo ahora Perú; por eso, la gran cantidad de personas que apuraban su paso para ingresar a nuestro país, puesto que Ecuador no les permite su permanencia. Ecuador, para ellos, es un corredor. La primera vez que estuve en Machala fue en 1975. Iba a esta ciudad luego de 44 años. Muchos cambios desde entonces. Ecuador cuenta con un sistema vial de primera. Una amplia autopista une la ciudad de Machala con la frontera peruana. Aunque el lado peruano cuenta con un tramo de buena carretera, no se puede decir lo mismo con el tramo entre Zarumilla y Tumbes, el cual deja mucho que desear, habida cuenta que en ambos lugares tuvimos lluvias del Niño costero en el 2017. Calles y carreteras están en un estado estupendo. Mientras que Tumbes, Piura, Chiclayo o Trujillo… Ecuador es mucho más formal en muchos aspectos que nosotros. La conducción es de lejos más respetuosa de la ley vial que aquí. Tampoco tienen cosas impensadas como mototaxis o ticos, aberraciones del populismo fujimorista que se permitió estos errores para que los miles de despedidos durante las privatizaciones de empresas públicas y la reducción del Estado lanzaron a la calle a muchos desempleados. En la ruta cruzamos algunos poblados como Arenillas o Santa Rosa, a los cuales no ingresas por ser este sistema una autopista. Mientras que el drama que vivimos con la inacabable Autopista del Sol cruza ciudades sin tener otros accesos. Una pesadilla. Conducir en Ecuador es un placer. Casi ya a mediodía llegamos a Machala. La ciudad está mucho más organizada que Tumbes, calles asfaltadas, buena señalización, amplias avenidas y un tránsito bastante fluido en el que no ves combis ni mototaxis imprudentes. La ciudad incluso está mejor urbanizada que Chiclayo o Piura, pese a ser una ciudad más pequeña en cuanto a número de habitantes, casi unos 250 mil. Se la conoce como la Capital del Banano, aunque confieso que no vi muchos. Aquí más datos de la ciudad y región (que llaman cantón): https://www.ecured.cu/Machala_(Ecuador). Nuestro objetivo era al centro de la ciudad a la plaza principal y hallar un estacionamiento para el auto. La idea era caminar un poco e ir a una agencia de información turística para aprovechar nuestro tiempo. Dejamos nuestro auto en una cochera que hace esquina entre las calles Ayacucho y Rocafuerte a una cuadra de nuestro objetivo. Llegamos a la plaza y decidimos visitar la catedral, llamada Nuestra Señora de la Merced ( https://ec.viajandox.com/machala/iglesia-catedral-A656). Una vez concluida nuestra rápida visita, nos fuimos al parque a ver la exposición de artesanía. Para los peruanos, la vida cotidiana es cara por la dolarización. Un día antes habíamos sacado varios dólares para no tener problemas con los pagos; vi un nacimiento de madera de origen otávalo y lo compré. Fue lo único que hice. Luego nos fuimos a una oficia de turismo para que nos dé la prioridad de visitas: Puerto Bolívar para visitar la isla Jambelí (https://ec.viajandox.com/machala/puerto-bolivar-A651). Lo interesante de la realidad geográfica de esta parte que pertenece al Golfo de Guayaquil es que está llena de manglares y tienen pocas playas de arena. Una de estas se encuentra en esta isla que es el balneario de los residentes. Antes de sacar el auto para ir al atractivo señalado, fuimos a dar una vuelta: quise comprar un polo (que llaman camisetas) y el precio en soles era exorbitante. Ni modo.




Así que sacamos nuestro auto y nos dirigimos a este puerto, donde íbamos a almorzar, además. Las autopistas te llevan rápido al destino. Nos dirigimos al puerto de embarque a Jambelí. Hay una serie de restaurantes y bares en los cuales puedes comer o refrescarte, pese a que no era un día muy caluroso. Escogimos uno no muy lejos del embarcadero. Hubo problemas para entender algunos platos; por ejemplo, pedí uno de camarones, pero aquí son los langostinos. Luego de haber culminado nuestro almuerzo y con ligera caminata nos fuimos al embarque. El precio era de 4 dólares ida y vuelta (no hay que perder el par de boletos que recibes) y esperamos unos 15 minutos para embarcar. Subimos a una lancha que nos llevaría a nuestro destino. La isla Jambelí es bastante larga y corre paralela a la costa sur ecuatoriana. El puerto es el segundo en importancia en Ecuador por lo que ves una flota interesante de barcos cargueros a la espera de descargar o cargar sus conteiner. La travesía no es muy larga, un poco menos de una hora. Vas rodeando la parte noreste de la isla hasta que ingresas en una zona de manglares hasta llegar al balneario de Jambelí. Es la playa que tiene arena. Aquí hay muchos restaurantes. Tras una hora disfrutando de la brisa marina y viendo el atardecer, retornamos al embarcadero. Hicimos el mismo trayecto y fuimos a buscar el auto para retornar a Tumbes.
El camino de retorno ya fue anocheciendo. Decidimos llenar el tanque de gasolina, puesto que aquí sí era barata (ahora están en plena turbulencia por las medidas tomadas por su presidente). Los ciudadanos y comerciantes ecuatorianos ahora viajan a Perú a comprar cientos de cosas, puesto con el cambio a ellos Tumbes y Perú les es muy barato. Comida, ropa y electrodomésticos son la atracción. Por esa razón, Tumbes está viendo ahora este auge de malls para atraer a los ecuatorianos a consumir. Lo mismo que Tacna con Chile. Por eso se entiende que en los últimos años se haya incrementado la presencia de muchos turistas ecuatorianos que van hasta Piura por los costos. He aquí esta noticia de hace 3 años: https://www.eltelegrafo.com.ec/noticias/septimo/1/el-turismo-hacia-el-peru-aumenta-por-la-depreciacion-del-sol. Aquí vemos una centrada en el problema comercial, también de hace tres años:  https://www.elcomercio.com/actualidad/comerciantes-huaquillas-peru-ventas.html.






El retorno lo hicimos por una vía alternativa lo que nos causó un poco de temor, pues no sabíamos hacia dónde íbamos. Por eso preguntábamos con cierta frecuencia sobre nuestro destino. Tomamos la vía Balosa-Machala, que era estrecha, pero estaba en buen estado. Tomamos la autopista nuevamente a la búsqueda de un grifo para llenar de gasolina. Nos confundimos a la altura de Santa Rosa e ingresamos un breve tramo regresando nuevamente a la autopista. El tiempo nos estaba quedando corto para cruzar la frontera previa entrega de papeles y certificados en ambos lados. Un poco antes de llegar a la frontera vimos una estación que estaba a la otra orilla, así que tuvimos que dar una vuelta en la zona indicada. Llenamos el tanque (ahora con la tensa situación esto cambiará) y comenzó el retorno. La salida de Ecuador tomó más tiempo, pues se había caído el sistema fuera del hecho que algunos funcionarios eran para ahorcarlos por su actitud. Quizá estaban fastidiados por todo este problema de la migración masiva, aunque nuestras ventanillas eran en otra zona de atención. En fin.
Ya en territorio peruano llamamos al dueño del auto para indicarle que ya estábamos prestos para llegar a Tumbes y devolver el auto. Llegamos casi a las 9 pm. Fuimos a cenar en nuestro restaurante para tomar unos cuantos tragos y comer rico.
Una jornada apasionante.






domingo, 19 de mayo de 2019

COMPARACIONES ODIOSAS (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO DOMINGO 19 DE MAYO)

Una escapada por otras realidades nos abre los ojos y permite medir muchas cosas de los innumerables planos que conforman nuestra sociedad. El día a día nos atrapa y no nos permite observar la realidad que una ciudad y una Región encierra, caso Trujillo y La Libertad. Un viaje a Ecuador generó en mí una sana, bastante sana envidia y, también, una frustración por las posibilidades perdidas por nuestra sociedad debido a diversos factores. Con un grupo de amigos logramos cruzar la frontera en auto para poder hacer una rápida y selectiva visita a Machala, la cuarta ciudad de Ecuador en economía y la quinta en población; y su puerto, Puerto Bolívar, no muy lejos de la misma. Haber ido en auto nos permite hacer las primeras comparaciones: su sistema vial. No es que uno se sorprenda por la buena autopista que une la frontera con esta ciudad, sino que es una zona que también sufrió los embates del Niño costero del 2017. Pueden leer el trabajo de investigación hecho por Shiela Serrano con otros al respecto. Viajar por tierra de un lado a otro de la frontera es frustrante, puesto que del lado ecuatoriano quedan pocos daños en sus calles y carreteras, producto del Fenómeno de ese año; sin embargo, Trujillo, tercera ciudad peruana, y su sistema vial están aún en un lamentable proceso de reconstrucción que, me temo, sea solo un paliativo hasta el próximo Niño. Ni hablar de Chiclayo, ni de Piura.
Ingresar a Machala fue otra experiencia; yendo al volante en un país ajeno al tuyo, el estado de alerta es latente; pero la no circulación de combis, ticos o mototaxis es todo un alivio para cualquier conductor. Manejar en Trujillo, Chiclayo, Piura e, incluso, Tumbes se ha convertido en un verdadero desafío para el más paciente y tenaz. El casco antiguo machaleño tiene algunas zonas peatonales y posee anchas calles, en las que se ha destinado un carril para transporte de buses. En una ciudad con muchos vehículos, hay poco uso del claxon, son respetuosos de semáforos y señales de tránsito, y respetan el orden de ingreso a un óvalo. Recuerdo una entrevista radial a un dirigente de transporte público pesado, quien se quejaba de la presencia de óvalos en una carretera o en la ciudad. Bueno, si un chofer, dizque llamado, profesional desconoce su uso, dice mucho del riesgo que todos tenemos al transportarnos en buses y explica el alto número de accidentes mortales viales.
La ciudad lucía limpia, ordenada. Ecuador trabaja mucho en atenuar el impacto generado por la deforestación y la contaminación de la basura. Esta ciudad ha obtenido logros; a diferencia de nuestras ciudades. El caso La Hermelinda quedará, todo parece, en una intentona de calmar las iras de molestos ciudadanos que esperaban una acción más radical y eficaz contra este flagelo de nuestra salud, seguridad y ornato de nuestra ciudad.
Tanta gastronomía de calidad y bellos paisajes se deslucen gracias al desorden que somos como sociedad, paraíso de la impunidad.

sábado, 20 de diciembre de 2008

QUITO, BELLA (1)



Casi la mitad del mundo. A pocos grados se encuentra la capital de este país que lleva por nombre el de la famosa línea equinoccial que divide el planeta en norte y sur: Ecuador. Quito es una ciudad serrana, rodeada de montañas y un volcán, el Pichincha. Este viaje lo realicé en febrero de 1992, llegué un 03 de febrero desde Cuenca, luego de una extensa visita a unos amigos que vivían en esa ciudad. Había ido a este país por dos motivos personales: visitar precisamente a Laura y Patrick (y su hijito Camilo); y reacomodar mi vida, ya que estaba dejando Lima tras muchos años para instalarme en Trujillo. Antes de tomar la decisión final, quise hacer este periplo.


Había estado en Ecuador en 1976, pero había llegado hasta Machala; en realidad, no era mucho. Esto sí era más extenso. Ecuador estaba en una bonanza económica y nosotros salíamos del desastre que fue (no lo olvidaré) el gobierno de Alan García. Muchas instituciones, turistas, proyectos se habían alejado de nuestro país por la violencia, la inestabilidad política y la terrible inflación que nos comían. Ecuador estaba lindo, pujante; sus carreteras eran envidiables y sus lugares se veían llenos de personas que querían conocer un país andino. Y Quito puede ofrecer muchas cosas como ciudad.


Una vez instalado en un hotel céntrico y apoyado de una guía, me dirigí a recorrer el centro viejo, cerca del Panecillo. Quizá para muchas personas no hallen atractivo las ciudades con calles en subida y bajada, pero como había vivido muchos años en Arequipa, las ciudades así me atraen mucho (Trujillo es excesivamente plana). Las estrechas calles del Centro Viejo son atractivas, bulliciosas. Me fui a la Plaza Mayor, por ahí había que empezar; el palacio de Carandolet, la sede de gobierno no es algo notable; tampoco lo es la catedral; pero si hay algo bello por ver en esta ciudad son las iglesias de San Francisco y la Compañía, extraordinarios monumentos barrocos que han sufrido modificaciones por las reconstrucciones hechas luego de diversos violentos terremotos que asolaron la ciudad. Si uno quiero ver la joya de la ciudad, uno debe ir al convento de San Francisco. Iglesia y claustro son una belleza impresionante. En realidad, con las iglesias de El Sagrario y La Compañía, esta ciudad tiene para competir con las de Cuzco, Guanajuato o Potosí. Entrar a ver los espacios aéreos, cúpulas totalmente labradas, sus altares en pan de oro y sus innumerables cuadros de la escuela quiteña te apabullan por la belleza y el boato. Mención aparte es sus yeserías, sus imágenes, muchas de ellas hechas por un gran artista como fue Bernando Legarda (hay una en la iglesia de San Francisco en Trujillo, ciudad en la que hay bastantes trabajos de la escuela quiteña - por ejemplo, el convento de las carmelitas es obra de jóvenes quiteñas-). Hay que ir a ver el Museo de Arte Colonial, es una visita obligada. Los claustros de San Francisco tienen su propia identidad y difieren bastante del complejo construido por esta congregación en la ciudad de Lima.
Quito no sólo es iglesias; otra visita obligada es al museo Guayasamín, impresionante y además un verdadero obsequio de arte y arquitectura de este predilecto a su ciudad.

jueves, 28 de agosto de 2008

CINE LATINOAMERICANO





La inmortalidad de una película surge en el momento
en que el artista, por más violenta que sea su expresión,
se pregunta en qué tipo de sociedad quiere vivir.
EDGAR SABA, PRESENTACIÓN CATÁLOGO 12 ENCUENTRO LATINOAMERICANO DE CINE


OJOS DE LATINOAMÉRICA

Trujillo ha sido por tercera vez sede del Duodécimo Encuentro Latinoamericano de Cine y en una semana intensa, hemos sido testigo de cuatro óperas primas (primera visión) y tres filmes premiados en diversas versiones anteriores u otros festivales. Gracias a la gestión de la Facultad de CC. De la Comunicación de la Universidad Privada del Norte con el organizador principal la Pontificia Universidad Católica del Perú, hemos podido contemplar cine de Cuba, Argentina, Brasil, México y Perú, filmes en los cuales vemos madurez en cinematografías (sobre todo la mexicana y la argentina) de antiguas escuelas, así como la emergencia de cinematografías pequeñas que ya están ocupando sitiales en diversos festivales; ya hay una sólida producción colombiana y chilena, que complementan las anteriormente mencionadas a las cuales podemos agregar la cubana, una aún tímida uruguaya y la aún díscola peruana. Ecuador ya mantiene un ritmo de producción interesante, lo mismo que la boliviana que trabaja en coproducciones, siendo México el nuevo socio para las novísimas producciones de los dos países andinos. Lastimosamente la distribución del cine de nuestros países no es posible, ya que éste es considerado poco rentable para las cadenas distributivas; esto hace que los costos de hacer cine en nuestros países sean más altos ya que el riesgo de inversión es, en consecuencia, mucho más alto por el temor de no poder tener el retorno del dinero invertido. Algunos éxitos, además, se han dado en filmes de dudosa calidad, ya que estos explotan el morbo de la gente más que su interés de hacer el cine un espacio de conocimiento y entretenimiento a la vez. Y esto hace arriesgar mucho más el cine experimental, quedando esta actividad a misiones quijotescas que aún se inclinan por hacer cine de calidad por estas latitudes. Por eso, estos festivales son un despertar hacia el asombro para mucho del público que acude a las salas. Pero esto no es algo generado de la noche a la mañana, es una acción conjunta de un ministerio activo en los países nombrados en los que participan artistas, distribuidores y empresarios para crear una suerte de marca. Un poco como crear una línea de producción que se convierta en un emblema de un país: algo así “espárragos, cebiche, cine”. Es una interesante modalidad, pero es un poco peligrosa ya que muchas veces el que dispone del capital no quiere decir que esté muy interesado en hacer buen cine; ya se ha visto que es bastante difícil hacer un cine comercial experimental.
LA PUTA Y LA BALLENA LUIS PUENZO (ARGENTINA - ESPAÑA) 2004 Una película poética. Una escritora española sabe que tiene cáncer y quiere seguir con un proyecto sobre una mujer que se enrumbó, enamorada ella, tras un hombre hacia la Patagonia argentina. Allí se prostituye y sueña alguna vez ser libre. La escritora reconstruye la historia a través de fotos y declaraciones de ciertas personas que conoce en su viaje a Buenos Aires. La búsqueda la lleva a un mundo insospechado. La mujer prostituida ve una ballena varada y se interesa por ella, pues, como ella, también quedó abandonada en un lugar remoto del mundo.

EL VIOLÍN FRANCISCO VARGAS DE QUEVEDO 2007 un film grabado como si fuese un documental en blanco y negro nos muestra una triste y violenta historia de marginados y desterrados. Trata sobre un viejo que se encuentra entre militares y guerrilleros en una sociedad marcada por la pobreza y la violencia represiva de las fuerzas “del orden”. Podría ser Chiapas, pero puede ser cualquier sociedad andina de nuestros países o en las que haya demasiada y marcadas diferencias sociales. En momentos como estos, en los que comunidades selváticas en nuestra selva se levantan, este film adquiere cierta dimensión en la contextualización respectiva. Muchos critican su clara alusión política, pero en filmes como éstos es bastante difícil asumir un rol neutral.

AMORES PERROS ALEJANDRO GONZÁLEZ IÑARRUTI 2000. Un film interesante que permití descubrir el cine mexicano al mundo; en realidad, sí hay una buena producción pero esta película obtuvo un fuerte apoyo financiero para su difusión. Permite también el éxito internacional de Gael García. Cuenta tres historias cuyo hilo conductor se basa en la violencia y en los perros (como Coloquio de Perros de Cervantes), cuyos dueños sufren la vorágine de vivir en una las ciudades más grandes del mundo (si no es la más grande). Familias disfuncionales, asesinos a sueldos, gente frívola pueblan la ciudad y se cruzan en ella sin conocerse. La música carga más esa atmósfera de violencia que se respira en el aire.

SIN DEJAR HUELLA MARÍA NOVARO 2000 Una mujer decide cambiar su vida y no se le ocurre mejor idea que robarle la cocaína a su pareja y éste decide perseguirla con su banda. Ella conoce a una española, traficante de arte precolombino y ambas deciden huir apoyándose entre sí. Es una película inspirada en el cine de carretera de la escuela norteamericana, aquella que rinde el culto a la máquina y su sensación de libertad, aunque en este caso el móvil es otro. Hay muchos parajes que parecen al film THELMA Y LUISA de Ridley Scott.

PROFUNDO CARMESÍ ARTURO RIPSTEIN 1996 Los filmes de Ripstein siempre son una sorpresa por el manejo de lo sórdido y el manejo de un humor negro que desconcierta a los espectadores. El encuentro de dos personas en sus soledades y mediocridades les permite conocerse paulatinamente; ella es una mujer obsesa por su gordura y quiere amarrarse con él; pero él (Nicolás) es un estafador y asesino de mujeres ricas solitarias; ella lo acompaña en sus acciones.

BATALLA EN EL CIELO CARLOS REYGADAS 2005 Un film bastante polémico y que causó sensación en su estreno. Muchas escenas se censuraron por mostrar casi sexo explícito. Tema muy sencillo, pero actual: un secuestro que termina mal y el autor del crimen, arrepentido, no sabe a quién contar sus cuitas. Es a la hija de su patrón, una chica frívola que se prostituye, quien le cuenta todo. Un México violento, indiferente, sorprendente. Su confesión no lo lleva a nada, la situación empeora. Reygadas es un director que ha iniciado una carrera ascendente, pues su tercer largometraje LUZ SILENCIOSA triunfó en Cannes, Lima y otros festivales, y fue vista aquí en Trujillo en la reciente muestra

EL POLAQUITO JUAN CARLOS DESANZO (ARGENTINA) 2003. Una historia en una sociedad que vivió la opulencia bajo el gobierno de Carlos Menem, hasta que les llegó el sinceramiento. Cuando el problema estalló, el ahorro de miles de argentinos fue secuestrado por los bancos, el famoso Corralito, y la gente comenzó a saquear tiendas y supermercados. De pronto los argentinos, ciudadanos de uno de los países considerados las despensas del mundo, se vieron robando en basurales para comer, todos los días la televisión transmitía saqueos a tiendas, camiones o trenes. En ese contexto se narra esta historia, la de un chico de la calle: violento, agresivo, hambriento, canta en los trenes para comer. Duro film.

UN TITÁN EN EL RING VIVIANA CORDERO (ECUADOR) 2002. Es un film interesante, de bajo presupuesto que gira en torno a esos héroes anónimos que pueblan los pequeños pueblos de nuestros países. Se habla de esos espectáculos tan populares y bizarros como lo es el cachascán y todo lo que hay a su alrededor. Es además un pretexto para ir contando diversas historias que a la larga todas se llegan a tocar. En una entrevista a la directora, ésta comenta que la máscara adquiere un valor simbólico en el film como un objeto ligado a la hipocresía.

SOÑAR NO CUESTA NADA RODRIGO TRIANA (COLOMBIA) 2006. Basada en un hecho real, un grupo de 129 soldados y sus oficiales hallan, en su lucha contra las FARC para rescatar a dos secuestradas, un ingente botín del grupo guerrillero. Lejos de retornar el dinero, todos se coluden para repartirse el dinero y lo despilfarran, lo que comienza a levantar sospechas. Son denunciados y algunos de ellos devuelven lo robado, parte de los soldados niegan el robo y se crea toda una discusión al respecto.

WHISKY ROMEO ZULU ENRIQUE PIÑEYRO (ARGENTINA) 2005 Un lamentable accidente de aviación causa la muerte de 67 personas. Se realizan las investigaciones y se descubren errores garrafales intencionales que violan las leyes mínimas de seguridad aérea. Antes de que estalle el escándalo, la línea aérea LAPA decide presionar al juez, pero este prosigue; luego aviación civil y militar entran a tallar. Este film es realizado por alguien quien fue piloto de esta aerolínea y conoce a fondo la verdad. Esta es una triste realidad que nos muestra la falta de escrúpulos de muchas empresas que por el fin de abaratar costos no miden las graves consecuencias que pueden provocar. Es cuestión de comparar con lo que pasa con nuestro transporte terrestre para ver las semejanzas.

EL AÑO QUE MIS PADRES SE FUERON DE VACACIONES (O ANO QUEM MEUS PAÍS SAÍRAM DE FÉRIAS) CAO HAMBURGER (BRASIL) 2006. Año 1970. La dictadura militar derechista arreciaba en Brasil y todo personaje universitario o intelectual era mal visto. Incluso la iglesia católica de Hélder Câmara era perseguida durante esta violenta represión. Lo que pudo ser una patética historia política se convierte en simpática historia en la que los personajes principales son un viejo judío y un niño cuyo abuelo era el vecino, el abuelo muere súbitamente y el vecino se hace cargo de la criatura, ya que sus padres tienen que refugiarse. La relación es hosca en un principio, pero la necesidad de ambos los une hasta la llegada de los padres. Es una simpática narración que suaviza el duro entorno que vivieron los brasileños por muchas décadas.

LA HISTORIA OFICIAL LUIS PUENZO (ARGENTINA) 1984 Este es un valiente film filmado poco después de la caída de los militares argentinos después de su fracaso en las Malvinas y haber asolado un país con secuestros y masacres. Con esta película salieron a la luz para el grueso público esa etapa oscura de la Argentina: secuestrados, raptos de bebés, desaparecidos, la locas de Mayo. Cuando se venía abajo el barco, los militares y colaboradores debían huir y es, a través de una profesora de historia, genialmente interpretada por Norma Aleandro, que vamos descubriendo la triste historia que mereció como reflexión de la comisión que se ocupó de averiguar sobre estos crímenes una sola frase: NUNCA MÁS

HUELEPEGA ELIA SCHNEIDER (VENEZUELA) 1999 Este es un film que le pide poco a la realidad de la niñez de nuestros países. Así como GREGORIO en Perú, LA VENDEDORA DE ROSAS en Colombia, EL POLAQUITO en Argentina o PIXOTE en Brasil, esta película habla de los niños de la calle, los petisos, garotos, coros o pelados. Son niños que se reúnen en bandas para sobrevivir, la violencia de los que viven con ellos, quienes con frecuencia los violan o en el peor de los casos, los asesinan. Viven en favelas, callampas, villas miserias o pueblos jóvenes y se drogan para olvidar su condición. Este film se presentó en Trujillo para la 5to Encuentro de Cine Latinoamericano.

XXY LUCÍA PUENZO (ARGENTINA) 2007 La posibilidad de tener un hijo hermafrodita (ambos sexos en su cuerpo) es bastante alto. Esta es la historia de Alex, criada como niña pero que tiene ambos sexos. Sus padres tratan de seguir adelante con ella; él es cirujano e indaga las posibilidades para corregir el hecho natural. Mientras ella trata de sobrevivir en una sociedad que margina a los “raros”, sobre todo en esa pequeña comunidad en la que se han refugiado. Un interesante tema para una sociedad que aún no “crece” en su mentalidad para encarar situaciones como estas, que de manera alegórica podría darse en cada persona que no nazca dentro de los estándares de “lo normal”.

NUEVE REINAS FABIAN BIELINSKY (ARGENTINA) 2000 Este film de buena factura rompió con todas las expectativas de un cine noir en la Latinoamérica. Se han hecho filmes policíacos en nuestros países en los que la justicia es la vencedora o en las que había una suerte de crítica social implícita demasiado evidente (como ABISA A LOS COMPAÑEROS), pero este rompe con muchos esquemas y el cine estadounidenses muy dado a reciclar películas con cierto éxito comercial a la platea gringa, no logró la calidad narrativa y actoral en su mediocre remake. Quizá para muchos jóvenes la palabra filatelia tenga poco de interés o les sea bastante desconocida, pero hubo algunas novelas de crímenes que hablaban de robos a estampillas valiosas así como filmes en los que la temática se centra en estampillas (como este caso). Buena trama, solidez en el relato, buena edición.