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Trujillo, La Libertad, Peru
Un espacio para mostrar ideas y puntos de vista ligados al arte, a la cultura y la vida de una sociedad tanto peruana como universal
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domingo, 15 de octubre de 2023

SENTIMIENTOS ENCONTRADOS (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO 15 DE OCTUBRE)

 


La semana que pasó terminó con una acción terrible que marca el inicio de una espiral de violencia cuyos alcances tendrán tristes resultados para todas las partes involucradas. El alevoso ataque terrorista del grupo extremista Hamas contra ciudades y ciudadanos israelíes, tanto civiles como militares, cuando finalizaba la fiesta del Sucot y el inicio del Shabbat ha estremecido al mundo generando una ola de repudio y una serie de caminos abiertos se han cerrado para dar paso al odio, la intransigencia, el radicalismo y el diálogo de las armas. Y peor de todo es que la guerra declarada por Israel tiende a internacionalizarse lentamente y espero haya alguna pizca de sensatez para contener toda la ira que se ha generado en ambas partes, cuando a estas alturas la cantidad de muertos y heridos crece; lastimosamente la mayoría, civiles. Tengo buenos amigos y conocidos en ambos grupos humanos tan cercanos y lejanos a la vez. Desde el colegio en Arequipa conocí amigos de origen palestino, así como en la universidad; también tengo buenos amigos judíos con los que conservo una amistad de tiempo. Gracias a ellos estuve dos veces en Israel, país de gente maravillosa que ha hecho su nación con mucho trabajo; también conocí directamente a personas palestinas que fueron desplazadas por las ambiciones políticas y económicas que son cubiertas muchas veces por argumentos no razonables. La religión es un móvil fuerte en esta lucha ancestral que suele emplearse como argumento para justificar sus acciones y este es un grave problema. Además, muchos santuarios para las tres grandes religiones monoteístas (judaísmo, cristianismo e islamismo) se ubican en ciudades israelíes como Jerusalén; es precisamente el problema de ciertas restricciones con la mezquita de al- Aqsa, un lugar santo para los musulmanes. La mayoría cristiana en Nazaret, como anécdota, era de origen palestino. La visión extrema religiosa deviene en dogmas peligrosos que pueden influir en la política. En mi primera visita a la iglesia de la Natividad en Belén (en ese entonces Israel, ahora Palestina), mientras con varios turistas cantábamos Noche de Paz en varias lenguas, afuera hubo una fuerte trifulca entre palestinos y soldados israelíes. Salimos de la iglesia entre gases lacrimógenos y correrías. Estábamos en medio de la primera Intifada a finales de los 80. El camino para la paz ha sido arduo y muchos de los promotores para buscar la ansiada conciliación entre estos viejos rivales han sido asesinados como el caso de Anwar Sadat de Egipto e Isaac Rabin de Israel. Conocí a algunas personas en Israel en ese entonces que apoyaban la creación de un estado palestino. Hamas y el actual gabinete israelí están chocando, y ambos están decididos a desaparecer al otro; Hamas, cobardemente, usa a civiles como punto de refugio; pero la situación de Gaza es también muy compleja y raya con lo inhumano. Ojalá que la razón comience a surgir entre todos. Ojalá.


sábado, 19 de febrero de 2011

PASEO BARCELONÉS

Tras la visita al mundo del modernismo barcelonés, nos enrumbamos al almuerzo. En el trayecto iba contemplando otras bellezas arquitectónicas de la ciudad, que daban muestras del esplendor que tuvo Barcelona a inicios del siglo XX. Este modernismo arquitectónico va a la par de la belle époque francés, al art nouveau, al gusto de Gustav Klimt y su revolución vienesa, a la expansión europea por el mundo, a los inicios del cine, del gusto por el arte utilitario, los adornos menores y las joyas (hay que ver la exposición del museo Orsay en París para soñar), al desarrollo de la industria y de la construcción (aparición de nuevos elementos para la edificación, así como el rescate de los antiguos como el mosaico); toda esta febril época se va enfrentar, como el Titanic, con el primer fracaso colectivo de la humanidad: la primera guerra mundial. Pese a todo, Barcelona queda como un museo viviente de toda esa intención humana de una nueva sensibilidad (Freud, Proust, Debussy) y nuevos caminos del arte por lo onírico (lo que viene con ello, el surrealismo de Dalí, Buñuel, Derain, Picasso y, en cierta forma, Lorca).


Dejamos momentáneamente ese mundo para ir más atrás, al renacimiento y barroco catalán, el de sus plazas, iglesias y edificios cívicos. En realidad, uno se encuentra con monumentos más antiguos que los referidos a estos estilos, pero es por comodidad. Es más, el barrio se llama Barri Gòtic. Gracias a la propuesta de Quique nos fuimos a comer a un restaurante pequeño, pero muy acogedor, atendido por las mismas cocineras y propietarias: un restaurante familiar (no esos impersonalizados típicos de cadenas de comida, estandarizados). En un ambiente jovial pedimos el delicioso menú; lo recuerdo claramente por el arroz en tinta de calamar (a estas alturas mi colesterol y mis triglicéridos estaban en plena orgía, pero luego me di cuenta que no fue así); tomando con vino de la casa, los cuatros charlamos sobre nuestras vidas, nuestros achaques y lo que pasaba en el mundo y en el Perú. De pronto estaba en la cafetería de letras de la Católica; recordamos los viejos amigos, hicimos un recuento de ellos: Ingrid, Pierina, Conchito, Cristina, José Antonio, tantos amigos. Teníamos que ponernos al día.


Quique tenía que partir para dar sus clases (yo estaba de visita, el problema del que llega al mundo de los amigos que están trabajando). Así que Quique partió, y Chicho y Milka decidimos seguir la larga caminata. Antes de despedir a Quique fuimos por el barrio judío, uno de los lugares preferidos de Milka, caminamos por sus callejuelas y de pronto oí a un guía hablando hebreo; eso trajo en mí la memoria de una de las ciudades más bellas que haya visitado en mi vida: Haifa. Y todas estas ciudades, como Estambul, Esmirna, el Pireo, algo Tel Aviv, tienen ese sabor mediterráneo. Ya el sur de Francia se parece en paisaje a las colinas y pequeñas ciudades israelíes. Me transportaba a ello, y recordé que estos dos países eran para el mundo judío dos tierras amadas: Sarfat (Francia) y Sefarat (España, la amada). Barcelona tuvo su judería y estaba en una de las ciudades más dinámicas del renacimiento mediterráneo; y sus construcciones me lo iban a demostrar. Una vez concluida la visita a la vieja judería, Milka nos invitó a tomar un café en su departamento (piso, como dicen allí). Antes de dirigirnos, volví a pasar por la catedral, la cual no pude apreciar por estar rodeada de andamios y con el inconveniente que ahora te cobran por entrar. Desistimos de visitarla y dimos una vuelta por la Plaza de St. Jaume, ahí vi dos bonitos edificios que me recordaban a Madrid y su neoclásico: Casa de la Ciutat (Ajuntament) (con unos detalles curiosos y simpáticos) y el Palau de la Generalitat. Aquí me parece que revientan el lugar los barcelones cuando gana el Barça. El fútbol lo respiras por todas partes. Ya en el dpto. de Milka, y tras un cafecito reparador, nos mostró un poemario suyo que había ganado en un concurso. Obviamente el apremio no nos permitió leer algo de éste, pena. Raudos ya, salimos hacia la Barceloneta. el antiguo barrio de pescadores,  y su malecón, espacio ganado al mar para tener más playa y haber hecho un simpático paseo a sus ciudadanos (lo hicieron todo para las olimpiadas: en Trujillo estamos en vías de un bolivariano y, en realidad, nuestra ciudad está muy desmejorada). El paseo por la marina y, luego, por la playa fue agradable. Según Milka y Chicho, había tenido la suerte de haber llegado bajo el sol; y entonces los barceloneses se iban a la playa. Aunque el Mediterráneo es un “tazón”, muchos bañistas sacaron sus tablas para surfear (olas muy pequeñas, si vieran lugares como Chicama o el mismo Huanchaco) e incluso hubo nudistas que caminaban “en pelotas” por las playas. Barcelona es muy abierta y tolerante al respecto, con su comunidad gay y lésbica, así como su tolerancia racial y religiosa. Es un litoral no muy accidentado y el mar, como decía, es una poza, un remanso de paz. Caminamos mirando la zona de Centro Internacional de Comercio (World Trade Center)  para terminar en el monumento a Colón, famoso vigía de la playa barcelonesa. Me contaban que antes de los juegos olímpicos, estaba acoderada una réplica de uno de las carabelas de Colón; cuando uno lee las crónicas imagina barcos de grandes dimensiones. Totalmente lejos de la verdad. Es por eso que es una lástima que se haya sacado la réplica, la que hubiera servido a todos nosotros como un claro ejemplo de lo que es valor (o ambición) haber cruzado el Atlántico en tan insignificante nave. Mis respetos a esos intrépidos.


Luego de esta caminata, Milka nos invitó a subir por la Ramblas; pasamos a ver el palau Güell y cerca de ahí el Gran Teatre del Liceu; fuimos a su interesante mercado (Mercat de la Boqueria) y allí calmamos la sed con algunos jugos de frutas. Europa decepciona por los precios y la calidad de las frutas. Hay buenas naranjas o manzanas, e incluso uva. Pero papaya, chirimoya, mango, piñas, son frutas exóticas y eso hace exótico el precio también. Luego pasamos frente a la casa de la virreina (Palau de la Virreina), construida por Amat i Juniet (catalán de origen), famoso para los peruanos por sus amores con la “perra chola” (Perricholi). Milka, como chisme, nos contó que Amat mandó a construir soberano palacio para resarcirse de sus amoríos en tierras indias. Los cachos fueron saldados con una bella edificación. En nuestro caminar veíamos detalles de las ideas de los geniales arquitectos y diseñadores que alocaron Barcelona: fuentes, farolas, gárgolas, chimeneas, ventanas, esquineros, fontanas. Hicimos una breve parada en la iglesia de Betlem. Pero ya el cansancio nos pasaba factura y era momento de encontrarnos con Julia, amiga de Milka, y con Wilbor, a quien veía más de 20 años. Como punto de encuentro nos fuimos a la iglesia de Santa Maria del Mar. Según Milka, es una construcción hecha por el gremio de los pescadores que aportaron en su edificación. Es una bella construcción gótica del siglo XIV. Me cuenta que la noche de navidad, antes de la misa del gallo, una voz blanca intepreta El Cants de la Sibil-la. Bella.

Para cerrar la noche, todo el grupo, los 5 comimos tapas hasta reventar. Se comen los pinchos, cada mondadiente con una presa que escoges a voluntad. Todo rociado de cerveza de buena calidad. Una simpática velada. Pero como era día de trabajo, todos teníamos que regresar. Coordiná con Quique para visitar juntos más Barcelona.
Oigamos el Canto de las Aves

http://www.youtube.com/watch?v=-BP6FSJ8YcE

miércoles, 1 de abril de 2009

MUSEO DE LA MEMORIA, ¿PARA QUÉ?



Hace aproximadamente un mes una amiga virtual, Meg, me escribía desde el país vasco donde reside en la actualidad sobre la idea e importancia de un museo. En esos momentos en nuestro país se hablaba de la postergación de un proyecto de edificar e implementar un museo, llamado de la Memoria, en el cual se mostraría los años de barbarie que nos tocó vivir los peruanos durante casi tres lustros, desde los 80 hasta los mediados de los 90.

En los años 80 tuve oportunidad de visitar dos veces Israel, país en el que permanecí varios meses por motivo de trabajo. Por todos es conocido que esa nación cuenta con un museo dedicado a la memoria de los casi seis millones de personas que fueron exterminadas bajo el régimen nazi y sus seguidores. El museo es impactante, está hecho para recordar el Holocausto y muestra una serie de fotos de por sí locuaces y demoledoras. Los israelíes son conscientes de que este museo no es sólo para recordar sino para enseñar a su población y al mundo de lo que la humanidad puede ser capaz, que los descensos a los infiernos no sólo es para el que es torturado sino el que decide tomar ese camino que arrastra la esencia de lo humano hasta niveles más allá de lo animal. La museografía tiene un impacto en el visitante, que apunta hacia la vergüenza de la especie. YAD VASHEM, el museo de la vergüenza, tiene por objetivo educar directamente al intelecto, a la psique y al alma humanas para hacerles recordar de lo que puede hacer sin medir las consecuencias, ni analizar las acciones que puede uno ejecutar. Al mostrar las imágenes, la persona reacciona o puede tomar una actitud cínica de indeferencia (la cual algunos sombríos personajes de la política israelí han adoptado, pese a tener en casa los tristes ejemplos que hubieron sufrido su pueblo).

Uno ingresa a una sala pequeña sólo iluminada por algunas velas, cuyas luces que han sido refractadas por espejos, mientras voces en 4 lenguas (hebreo, alemán, francés e inglés) van recitando los nombres de los casi 200 mil niños que fueron masacrados en el Holocausto. En el lugar también se encuentra una sala especial en el que vemos llamas votivas perennes, rodeadas por figuras en estrella (Magem David); estas figuras recuerdan a los campos de concentración más importantes, como Dachau, Treblinka, Birkenau o Auschwitz, en los cuales fallecieron cientos de miles de judíos, gitanos, comunistas, religiosos, homosexuales, líderes de oposición o discapacitados físicos. Cuando vi por primera vez este lúgubre lugar, recordé al maestro Brecht y su poesía de compromiso. Tras casi un par de horas de visita incómoda (no es agradable), salí con mucha rabia y pena.

Había leído sobre el tema, conocido sobrevivientes, visto filmes al respecto. Pero luego de esta dolorosa visita, lo humano te duele.

Sé que todas nuestras sociedades han cometido errores; algunos queremos negarlos para sentirnos bien en el cinismo. Pero también nos toca enfrentarnos sin temores a nuestros terribles demonios de la locura demencial que vivimos en esos años. Viví años duros en Lima y nos insensibilizamos para seguir viviendo; hacíamos chistes de los apagones, de las bombas. Todo nos resultaba remoto. Luego íbamos conociendo gente, exmilitares que habían estado en zona roja, venían con sus demonios; creo que uno queda marcado de por vida cuando uno ve la muerte violenta de otro, peor si uno la inflinge.

Lo que nos va a suceder es dar un gran paso para comenzar a entendernos más, para advertirnos que debemos estar atentos a lo que vivimos y entender nuestra sociedad para desarrollar la tolerancia y la justicia social y económica, que fueron los principales puntos flacos de los que adolece nuestra sociedad. Espero que el museo tenga esa intención educativa en nosotros para abrirnos los ojos de lo que algunos hicieron y lo que nosotros dejamos hacer. Es también un museo a la Responsabilidad, a mi compromiso como ser social.

Muchas cosas no nos van a gustar, pero es nuestra memoria.

viernes, 20 de marzo de 2009

CIUDAD DE ORO:JERUSALEM




Jerusalem. Las calles estrechas. Olor a especies y sudor de gente trabajando. Puertas ocultas entre los tenderos, puertas que te llevan a iglesias, sinagogas o mezquitas ancestrales. Muros construidos por judíos, derrumbados por cristianos o musulmanes. Gentes viejas y jóvenes de muchas lenguas y credos. Jerusalem.

La primera vez que pisé esta ciudad, un temblor pequeño recorrió mi cuerpo. No soy religioso, pero amo la historia en su verdad. Y en su tergiversación también, ya que nos muestra los deseos y las frustraciones de lo que uno quiere y no pudo ser. Esta ciudad, pequeña, de poca monta geográfica, ha sido la joya de las tres religiones monoteístas y por ella se han matado miles de hombres en el mundo. Y lo siguen haciendo aún.

En 1988 estuve por primera vez en esta magnífica ciudad. Sus calles respiran historia así como conflicto. Sus muros, los que la protegieron de la amenaza cristiana, tienen muchas historias impregnadas en sus amarillentas piedras. Uno va hacia ella por fe o por curiosidad. Recuerdo que al haber visto la película CRUZADA de Ridley Scott, muchas de las escenas estaban tomadas de esos fascinantes espacios que eran los estrechos corredores de la ciudad vieja y tuvieron el poderoso efecto de transportarme hasta sus calles, sus laberintos, hasta el olor del Shuk. Nunca he estado en Toledo, pero muchas personas me han dicho que las situaciones vividas en esta ciudad durante su edad de oro, permitió la convivencia pacífica entre las tres religiones. Jerusalem también en cierta manera la vivió sobre todo bajo el régimen de los musulmanes, sobre todo los árabes más que con los turcos. La ciudad va abriendo sus tesoros y vas descubriendo bellezas como iglesias bizantinas, antiguas sinagogas que surgen de las tinieblas desde la destrucción de Jerusalem por Tito o la fascinante mezquita del Domo de la Roca, con su cúpula dorada y sus bellos azulejos.
Caminar por sus calles es hallar gente alucinada por el dogma y fanatizada por el respeto de sus espacios religiosos. Vuelvo a tomar como referencia el film de Scott y recuerdo algunas frases que me hicieron recordar los lugares visitados: Balian de Ibelin trata de salvar la ciudad sitiada por Saladino (personaje que sí existió) y arenga a la gente encomendando a los ciudadanos defender la vida, no las piedras ya que estas son hechas sagradas por los hombres. Cierto es, pero esa fe y sentido de vida han hecho a esta ciudad deseada y atractiva.
La migración de millones de judíos a Israel (Aliah) ha hecho que sus ciudades sean una babel de lenguas. Jerusalem no escapa a ello. Recuerdo una tarde caminando por el barrio antiguo me hallé extraviado, por la zona de Talpiot; me encontré con un señor bastante mayor. Le pedí en el rudimentario hebreo que manejaba si hablaba otra lengua y cierta ubicación; luego de varias indagaciones, el señor me dijo que hablaba "españolit"; en ese momento, la historia y su gran peso emocional cayó sobre mi persona: hablaba la lengua de Cervantes, la que le puso al Quijote para que hiciera los comentarios de su España, la que le tocó vivir. La ancestral familia de este señor provenía de Sefarat, la España dorada de los judíos sefaradíes. Comencé a hablar en castellano y él me respondía en ladino. Jerusalem me enseñó por qué es lo que es. Ir Dolá.





martes, 10 de febrero de 2009

LA CAJA DE PANDORA




LA AVENTURA DEL MEDIO ORIENTE: LA DE NUNCA ACABAR




(Este artículo lo escribí para el diario LA INDUSTRIA en 2003, cuando empezó la guerra; muchos compañeros míos dudaron de lo escrito. Es una lástima que aún tenga vigencia)

En las últimas semanas, tras los nefastos hechos de la guerra de Irak, lo que el mundo temía ha comenzado a emerger. Tal como el mito de Pandora, la atractiva caja que el águila había ambicionado, fue abierta y no ha previsto las consecuencias que esto ha de acarrear. La tan mentada justificación que el gobierno de George Bush ha estado esgrimiendo para que la gente trate de comprender su accionar en esta absurda guerra, no ha hecho sino abrir un abanico de posibilidades peligrosas que ya han comenzado a estallar. Los últimos ataques suicidas en diversos países pro-occidentales de mayoría musulmana no es sino un peldaño en la inmensa escala de enfrentamientos que se avecinan en los próximos meses y años. Lo que sí hay que estar atentos a quiénes vamos a pagar las cuentas de todo este cambalache que se nos viene. A no dudar que han de ser los países pobres como el nuestro.
Hagamos un poco de historia: hacia los años 50, un gobierno civil, en abierta diferencia con la familia real Pahlevi, en Irán, liderado por Mohamed Mossadegh, nacionalizaba el petróleo que estaba en manos de las petroleras ya por todos conocidas. Un golpe de estado militar volvió al antiguo establishment. Eran los años en que los Sukarno, Nasser, Nehru, ponían los pelos de punta a las grandes compañías de los países colonialistas. El fin de la Segunda Guerra Mundial marcó el principio del fin del otrora poderoso Imperio Británico y todas sus zonas de influencias eran reemplazadas por los Estados Unidos; la débil Europa no hacía sino otorgar la independencia a muchas de sus colonias, no sin antes asegurar que éstas sigan dependiendo de ellas económicamente. Alguno líderes, con el apoyo abierto o subrepticio de la Unión Soviética de entonces (la Guerra Fría) acometieron el ideal de liberar sus pueblos de la opresión colonialista. Algunos lograron esa independencia formal, siempre y cuando pertenecieran a su esfera; pero otros no lograron sus objetivos (caso Irán) o les iba a costar mucho derramamiento de sangre (tipo Vietnam).
Por todos es sabido que esa parte del planeta encierra grandes recursos petrolíferos, y este territorio fue dividido de acuerdo a los intereses de las grandes potencias; así surgen una serie de países que no respetaron criterios lingüísticos o religiosos; y en muchos casos se hacían bajo la égida: Divide y reinarás. Es así como los curdos quedan fuera de sus territorios y fueron casi exterminados a una matanza en manos de los turcos e iraquíes comparable a la hecha contra los judíos y gitanos durante la Segunda Guerra Mundial. Quizá la historia no quiera ahondar en este tema puesto que la Turquía actual es un socio estratégico de los EE.UU. y el cual estuvo muy interesado de invadir Irak por el norte, para una posible limpieza étnica. Desde el punto de vista religioso queda el caso de los shi´itas, patética y dantesca situación que hay que entenderla en su contexto histórico para ver lo que se avecina. La ascensión al poder del rey títere Rehza Palehvi, más conocido como el Sha de Irán, va a ser un personaje encargado de controlar los intereses de las compañías petroleras en esa zona. El Sha oprimió a su pueblo duramente, sobre todo a los shi´itas, que es la mayoría religiosa de Irán (La división sunita y shi´ita es algo así como católicos y ortodoxos, pero no tan virulenta); pero sus métodos brutales no lograron controlar el país y éste se fue volviendo cada vez más peligroso hasta el año 1979 que significa la caída del Sha. Irán era un país tapón ya que estaba en una zona de alto interés, cerca de la Unión Soviética y de países poco amigos de EE.UU. como India, además de la cercanía al Medio Oriente. Aunque el Sha no mostró simpatía por Israel, tampoco era tan drástico con éste, igual que Turquía y Marruecos. La caída del Sha significó un cambio radical de las reglas de juego para la administración norteamericana. La CIA comenzó a buscar socios estratégicos en la zona. Los años turbulentos de la era Carter, tras la retirada onerosa de Vietnam, obligó a dicha administración buscar a estos personajes comprables, tipo Noriega de Panamá, popularmente conocido como “Car´e piña” . Los movimientos insurgentes de Nicaragua y El Salvador los obligaba a tomar decisiones rápidas. Saddam Hussein fue ese hombre salvador. Bastante equipado por las potenciales occidentales (tanto que Israel tuvo que tomar una decisión unilateral que enfadó a la administración Reagan, el ataque a la planta nuclear de Osirk en 1981), comenzó una fuerte campaña contra Irán con quien comparte una inmensa frontera. El casi 1 millón de muertos nos dice lo cruento que ha sido este enfrentamiento y que no pasa de un mero dato estadístico para el mundo occidental. El escenario fue ideal para que Hussein pueda desplegar la efectividad de todas las armas que le habían sido dadas: bacteriológicas, gases, armas inteligentes, etc.. Toda esa bella gama de eufemismos que nos tienen acostumbrados administraciones como la de Bush por un decir.
Hussein estaba encargado de hacer lo que quería, un laisser faire con poco rendir cuentas: he ahí la matanza que infringió contra los curdos ( no con cierta alegría para la administración turca) y contra el pueblo shi´ita, que se ubican en norte y sur respectivamente.
Los curdos han luchado permanentemente para lograr una nación, un territorio: pero éste estaría no sólo sobre grandes extensiones de la actual Irak, sino Irán,. Siria y.....Turquía. Estos han luchado para poder lograr un gobierno, desde los años 60, cuando la autoproclamación de Masoud Barzani (en Irak) y en 1945, la República Independiente de Mahabad, que duró un año. Los curdos suman 25 millones de personas y es la etnia más grande en el mundo que no tiene un territorio. Los curdos no tienen mucha fe en el mundo occidental y esto lo sabe muy bien Alemania, donde se ubica la población más grande de éstos fuera de los territorios identificados como tales. La captura de Öcala por los turcos y su casi ejecución hizo que los movimientos independistas en la actual Turquía se hayan puesto en movimiento. Pero Turquía quiere callar esto, pues quiere ingresar a la Comunidad Europea y recibir todos los beneficios y reconocimientos que esto significa. Si esto sucede, Kurdistan por un tiempo puede darse por no posible.
Por el lado de los shi´itas, los encarnizados enemigos de occidente has recibido un insospechado espaldarazo con este último conflicto. Ahora los shi´itas iraquíes pueden manifestar su fe libremente, así como su rechazo a la occidentalización de su mundo. La eterna ley del boomerang. Lo que no muestra la televisión norteamericana, lo muestra la europea, sobre todo la francesa, alemana e inglesa. Las dos primeras han sido muy frías en sus análisis y han mostrado todo el peligro que se aproxima a Norteamérica. La imagen del Ayatolah Jomeini, que retornó a Irán en 1979 y musulmanizó el gobierno y vida del pueblo iraní ha vuelto a aparecer en estampas, posters, polos, en fin. Recuerdo la revista MAD que sacó un número especial que parodiaba la administración Carter con la sombra del mulá Ayatolah Jomeini...¿Qué imágenes se han de cernir sobre la candidez norteamericana? Recuerdo que coincidía con la figura de Darth Vader de La Guerra de las Galaxias... ¿Será que los nuevos han de tener que luchar en red Matriz como Sr. Smith y Neo?
Sadam Hussein ha caído: ahora vienen los antiguos fantasmas que ya se venían venir. No sé qué podríamos esperar de un granjero tejano y fanático religioso (cristiano) por cuya cabeza dudo que pasen explicaciones sociológicas, antropológicas o históricas. No creo que ante el delicado rompecabezas existente pueda encontrar una solución rápida y viable; va a ser un largo camino que acaba de empezar con los diversos ataques suicidas en Marruecos, Turquía, Arabia e Israel. Europa sabe que la decisión que tome EE.UU. va a ser muy importante para su seguridad interior: no en vano tienen una gran población de origen musulmán o que vienen de algún país de esa confesión.
Hace unos días vi una película bastante interesante pero anacrónica; se trata de El Nacimiento de una Nación de Griffith, con un happy-end increíble, tipo súperman. No sé si habrá dicho final. Pero sí creo en la historia de los antiguos helenos: al final de la caja que Pandora había abierto y una vez dispersados todos los males sobre la tierra, aquélla encontró un pequeño obsequio para los hombres: la esperanza. Espero que así sea.

martes, 6 de enero de 2009

ALGUNAS MUESTRAS DEL CINE DEL ASIA








“Gloria a Quien ha creado todas las especies que hace brotar de la tierra,
las que proceden del trabajo del mismo hombre y las que no conocen”
AZORA XXXVI, versículo 36, QURAN

En Fukang tenemos también tranvía – replicó el hijo
con gran asombro de Luna Yen. Grandes cambios debía haber sufrido
la ciudad en la que transcurriera su infancia.
SHANGAI HOTEL, VICKY BAUM


LA VIEJA ASIA, UN MUNDO MARAVILLOSO

Asia: el inicio de todo, el principio del mundo civilizado, cuna de las más antiguas civilizaciones, algunas de las cuales aún perduran como la China y la India. Gran epicentro de las religiones actuales, sean monoteístas o politeístas: por sus extensas tierras caminaron Jesús, Buda, Mahoma. Surcaron sus mares hombres de leyenda como Simbad para ser evocado en tierras mesopotámicas por Sherezade; ciudades míticas que aún persisten como Bagdad o Jerusalén, como Estambul; otras se perdieron en el tiempo como Samarcanda en la soñada ruta de la seda; Beijing sigue siendo la ciudad celeste y aún está Kyoto, la ciudad sagrada salvada de la barbarie atómica de la Segunda Guerra Mundial. Con la mano de Genghis Khan, los mongoles construyeron el imperio más grande que se haya imaginado hombre alguno. China mandó con Marco Polo muchas técnicas que han de revolucionar al rudimentario hombre europeo: les regaló el papel, la tinta china y un silencioso milagro que revolucionará a la humanidad: la imprenta. Además revolucionaron a la Italia de entonces con dos grandes descubrimientos gastronómicos a tal grado que muchos en la actualidad piensan que son inventos italianos: los helados y el fideo. Los árabes salvaron el patrimonio griego y romano, y traerán de la India, ciencias que las van a rescatar en su lengua: al-quimic, física, al-rimetic..estas serán enriquecidas por ellos con el al-gebra, al-goritmo; les llevarán el al-riz (arroz), al-qutun (algodón); les traerán el placer de la buena vida con la al-fombra y la al-mohada. Las especias traídas (mostaza, canela, jengibre, clavo de olor) por los árabes para mejorar las gastronomías de los bárbaros europeos con el tiempo causarán la revolución en Europa iniciando el crecimiento de la burguesía comercial, dando pie al Renacimiento y luego al descubrimiento de América. Los hindúes crearán el cero y los árabes crearán las cifras modernas (¿alguien usa la romana?). No es posible concebir el pensamiento del hombre occidental actual sin la influencia de las lenguas indoeuropeas (venidas desde la India e Irán), o la religión judía que da la visión monoteísta y finita del mundo actual, no olvidemos que Joshua (Jesús) nació en Judea. Pero también están Alah, Vişnu, el Gautama Buda, Amateratsu. Solo quedan en el recuerdo los dioses griegos, romanos, celtas o nórdicos, evocados ellos en los días de la semana en cada lengua europea. Quedaron los millones de dioses del Shintô o del Brahmanismo hasta nuestros días. Sus libros sagrados pueblan nuestras casas: la Biblia (ambos testamentos), los Vedas, El Quran. Cuando los Beatles viajaron a la India volvieron a la memoria de los hombres una nación liberada por un hombre diminuto que luchó por una idea que derrotara a uno de los imperios más poderosos de ese entonces, ese hombre es Gandhi; como él otro diminuto hombre pondrá en jaque la presencia norteamericana en Vietnam, Ho-Chi Mihn. El famoso efecto mariposa no es nada menos que una concepción hindú que tiene ya más de tres mil años.

Asia es el continente más grande del planeta, así como el más poblado; la población de la India es más del doble de toda la población de todo el continente americano desde Tierra del Fuego hasta Alaska. Tiene los países más ricos en cuanto a ingreso per cápita (Emiratos Árabes Unidos y Brunei). Aunque México sigue siendo la ciudad más grande del orbe, el crecimiento exuberante de Shangai, Beijing, Yakarta, Manila ponen “en riesgo” esta supremacía guiness Pese a la inmensidad territorial, hay frecuentes conflictos que hacen temblar la paz mundial; ahí están Israel, Palestina y Líbano; India y Pakistán; Irak y los territorios curdos, que también involucra a Turquía. Sus territorios encierran inmensas montañas (Himalaya), ríos caudalosos y extensos (Río Amarillo o Yenisei) como sagrados (Ganges); zonas tan húmedas como la cuenca de Bengala y áridas como el desierto de Gobi. El nuevo poder de China, país continente, se manifiesta con sus inmensas ciudades así como las grandes obras de ingeniería a las que se está dedicando como el represa 3 Gargantas, cuyo lago artificial ya está sumergiendo más de dos grandes ciudades y pequeños pueblos.

En este apoteósico contexto, el arte asiático ha estado alimentándose de esa abrumadora realidad tanto geográfica como humana. Sus bellos libros religiosos son hermosas reflexiones cosmogónicas de sus antiguos habitantes; la creación de la identidad de estos pueblos pasaba por la lengua y su ordenamiento del espacio que ocupaban: los jardines colgantes de Babilonia, la Muralla China, los templos hindúes o japoneses, Borobudur, La Meca, el Muro de los Lamentos, Hagia Sofía, Bali, cientos de nombres que no hacen sino agrandar nuestro imaginario de leyendas y maravillas. Alí Babá, Aladino aún recorren viejas calles de pequeños pueblos asiáticos hasta llegar a las increíbles construcciones de los Emiratos Árabes Unidos, país que acoge el 15% de todas las grúas de construcción de todo el mundo actual. Buda estará contemplando con su risa enigmática lo que pasa en este siglo XXI en su continente.

Les alcanzo un pequeño grupo de filmes de este impresionante continente, de inmensos contrastes, tan poco conocido en nuestras carteleras, aunque el boom de la cinematografía japonesa en los 80, la china en los 90 y la coreana recientemente sí nos han acercado a este lado del planeta. Este grupo nos puede dar visiones generales que corresponden a diferentes momentos de esta vasta filmografía.


EL BAÑO ZHANG YANG CHINA 1998 Este es un bello film que muestra el encuentro de un hijo con su padre quien tiene un salón de baños calientes (parecido a una sauna); además se reencuentra con su hermano menor quien sufre retardo mental. El barrio de su infancia es constantemente demolido por el crecimiento de la nueva Beijing. Las distancias entre el padre e hijo se van acortando no sin antes sufrir algunas fricciones. Pero la muerte del padre deja al hijo en una insólita posición. Es doloroso el encuentro entre el pasado y el demoledor futuro. Las decisiones finales son difíciles de asumir, pero luego de todo lo vivido, un cambio de rumbo es enfrentado con mayor entereza. Es, además, una parábola de lo que está viviendo la sociedad china, con una tradición milenaria que subyace en la sociedad y un contundente avance arrollador de esta ya gran potencia económica mundial.

APAJARITO (EL INVENCIBLE) SATYAJIT RAY INDIA 1956 Esta película corresponde a una trilogía (EL LAMENTO DEL SENDERO – PATHER PANCHALI y EL MUNDO DE APU- APUR SANSAR), que empezó con escasísimos recursos económicos y una sola cámara de 16 mm Trata de un niño, Apu, quien vive en ese mundo carente de cosas materiales, pero lleno de mundo espiritual. Estas películas reflejan la sociedad bengalí, una de las tantas etnias, rica en cultura. Esta segunda película, la más difundida, muestra a Apu independizándose de su madre y enfrentar los problemas de la pobreza solo. En una inmensa producción cinematográfica como la India, no era difícil hallar esta joya, pese a que no estaba tan inscrito en la serie de filmes más reconocidos en circuitos económicos internos. No es un film sensiblero como muchas veces identificamos a las películas patéticas y lacrimosas que suele enviarnos Bollywood.

EL GLOBO BLANCO ABBAS KARIOSTAMI IRÁN 1995 La ternura de este cine es descubierta en la década de los 90 en los festivales de Cannes y de otras latitudes. Debido a la animadversión de los gobiernos sucesivos de Estados Unidos, este filmografía ha sido poco conocida por estas latitudes por el problema de la comercialización; pero sus bellas películas nos muestran que con pocos recursos, grandes historias simples y mucha imaginación y talento se pueden hacer pequeñas obras maestras como este simple cuento de hermanos que transcurre en un solo día antes de las fiestas religiosas de Ramadán. Clase para nuestras cinematografías, cuyas realidades se parecen a la iraní.

HAPPY TOGETHER (JUNTOS FELICES) WONG KAR WAI HONG KONG – CHINA 1997 El cine de este director chino es sorprendente, el manejo de las relaciones amorosas en una sociedad que ha mantenido una suerte de tabú al respecto. Una pareja de jóvenes homosexuales decide partir en Argentina a probar suerte y vivir su amor en otro ámbito; pero las cosas no salen como uno quiere; ambos son personalidades muy distintas; uno más calmado acepta la suerte de la ruptura; el otro, más arrebatado, se embarca en una serie de acciones turbulentas; pero el amor marca en la vida de ambos. Un cine bastante inusitado, habida cuenta que la homosexualidad no es aceptada en esta tradicional sociedad.

KADOSH (SAGRADO) AMOS GITAI ISRAEL 1999 Para ver este film hay que entender mucho sobre la religión judía y ciertas formalidades rigurosas en su manejo interpersonal. La religiosidad está en muchas personas y rige su accionar cotidiano; muchas veces algunas leyes de la sacralidad chocan con lo terreno, aquí hay una disputa entre el amor humano y la ley. Cuando esta última pone en conflicto al ser humano en sus sentimientos como el amor de hombre y mujer por un mandato, el conflicto en la persona religiosa es agónico. Un rabino casado con una mujer estéril está obligado a rechazarla, una religión en la que la mujer tiene poco poder de decisión; la ley le pide hijos, pero sus sentimientos le piden vivir con la mujer que amas. En el fondo parece la parábola del buen samaritano. Impresionante.

TOKIO MONOGATARI (CUENTOS DE TOKIO) YASUJIRO OZU JAPÓN 1953 Este es uno de los mejores filmes de Ozu, una narración sencilla de una pareja de ancianos, que decide ir de visita a Tokio a ver a su hija mayor. Una serie de acontecimientos desagradables los impulsa a regresar, pero en el trayecto la esposa muere. El anciano tiene que enfrentar la soledad y surgen diversas propuestas. Este sencillo film es un extraordinario ejemplo de simplicidad y observación, involucrando a nosotros, los espectadores, como participantes de las historias al poner las cámaras a la altura de una persona sentada a la mesa donde se desarrollan los diálogos o encuentros.

viernes, 5 de diciembre de 2008

EVOCACIONES DE TIERRA SANTA




1988, mes de enero; salgo con un grupo de alumnos del Colegio León Pinelo hacia Israel. El avión de KLM que estaba programado para nuestro vuelo un día martes queda varado en la ciudad de Guayaquil; hacía apenas unos meses que el avión que llevaba al equipo de Alianza Lima había caído al mar a la altura de Ventanilla y esos recuerdos quedaban en latentes, atemorizando a los viajeros del aeropuerto Jorge Chávez de Lima. Teníamos que salir ese día ya que nos permitía llegar antes del Shabbat (sábado judío) que empieza el viernes a las 4:30 p.m. aproximadamente (en invierno). Los planes cambiados ya generaban ciertas angustias que el grupo de 58 personas compartimos.

Personalmente me había preparado para este viaje por todo lo que iba a ver y a recibir de este interesante y explosivo lado del planeta. El vuelo desde Ámsterdam hacia Tel- Aviv ya era toda otra historia; como habíamos partido el viernes temprano, nos permitía llegar a Israel antes de las 4 de la tarde; pero en el avión iba gente de confesión musulmana y judía; a ciertas horas, algunos musulmanes empezaban su rezo hacia la Meca; las aeromozas sorteaban en el pasadizo a aquellos que habían extendido su alfombra o hacían plegarias de pie hacia la sagrada ciudad. La comida kosher era de rigor; ya estaba en otro mundo y solo me quedaba mirar y aprender. Aterrizamos a eso de la 1 de la tarde sin contratiempos, el grupo pasó rápidamente los controles de migración y todo ese terrible escrutinio que ahora se ha puesto de moda en los Estados Unidos. Nos llevó un bus hacia nuestras instalaciones, que quedaban hacia el norte de Israel, más cerca de Haifa que de Tel-Aviv o Jerusalén. Ya estábamos en Israel, el frío nos recibió, la lluvia y un país moderno. Los estereotipos de un país desértico, caluroso y lleno de ruinas por doquier no estaban encajando en lo que veía. Personalmente quería ver la historia viva, tenía esa marcada intención; tenía que esperar un poco más.

A la semana siguiente, una vez instalados todos y ya trabajando (fuimos a trabajar), tuvimos nuestra primera extraordinaria visita: íbamos a Jerusalén. La mayoría de chicos era de confesión judía (salvo uno); mi compañera de viaje era una persona religiosa, pero el fanatismo no era algo que la caracterizara: Aún así, la ciudad era toda una idea acompañada de una emoción que todos hemos desarrollado a lo largo de nuestra formación cultural. Este pequeño espacio en el mundo había sido el lugar codiciado por judíos, egipcios, persas, hititas, asirios, filisteos, mongoles, mamelucos, árabes, turcos, cruzados, franceses, ingleses; por aquí solo faltó que pasaran aztecas, mayas e incas. Fue una velada misión la mía. La ciudad moderna es muy bonita, pero cuando vimos las murallas de Solimán el Magnífico, ya estábamos en otra órbita. A pesar de estar en invierno, ese día, ese mediodía que llegamos al Muro de los Lamentos, había un sol radiante para ver a todos los peregrinos que estaban rezando dios hebreo. De pronto, una sensación indescriptible nos embargó al oír a los Muezines comenzar el rezo en árabe ALÁ ES GRANDE Y SU MÁXIMO PROFETA ES MAHOMA; al mismo tiempo, se oyen los tañidos de cientos de las campanas de todas las iglesias cristianas de la ciudad (sí, no solo católicas, sino coptas, armenias, sirias, ortodoxas rusas o griegas, y todas las protestantes). Inefable sensación.

Israel es el centro de las tres grandes religiones monoteístas de occidente; no solo Jerusalén es el punto de peregrinaje obligado de judíos, cristianos y musulmanes, pero sí uno de los más importantes. Cuando hubimos llegado a Israel, los palestinos los antiguos filisteos, sus antepasados) habían comenzado una larga huelga por el reclamo de sus derechos: la Intifada. Fuera de estar en una zona tensa históricamente hablando, este nuevo hecho acentuó nuestra atención en ser precavidos al ir a los lugares que nos provocaba visitar. Esta situación de tensión en este espacio territorial tan pequeño (Israel es del tamaño del departamento de La Libertad) se ha trasladado a muchos niveles de instituciones que hacen interesante la vida en esos lugares. Un lugar tan relevante para el mundo cristiano como es El Santo Sepulcro está controlado por Católicos franciscanos, ortodoxos griegos y armenios; pero los espacios más pequeños (algunas capillas) son también del dominio cristianos coptos, sirios y etíopes. Contaban que para colocar un foco, era necesaria la reunión de todos los integrantes y muchas veces no llegaban a ponerse de acuerdo. Esto sí era preocupante, puesto que desde algunos aspectos este monumento estaba un tanto deteriorado (lo vi nuevamente en 1990) y no había una intención colectiva de un arreglo del mismo. La vida cotidiana había llegado a las instituciones, sobre todo, aquellas tan antiguas y jerárquicas como las religiosas.

Personalmente, no soy una persona religiosa; mas he sido criado en una sociedad de cultura cristiana católica, es parte de mi patrimonio personal y es, a través de ello, como veo muchas cosas del mundo, es una perspectiva cosmogónica y también una formación estética, emocional y espiritual a la cual me identifico por mi intención de pertenencia. En cuanto estuve caminando por las calles de Nazaré, Jerusalén, Hebrón o Belén, mis referentes eran los sacerdotes y monjas católicos, y todo aquello que me identificara con ese mundo. Identifiqué como lugares válidos, pese a ser solo sostenidos por el dogma, aquellos que la iglesia refrendaba como verdaderos lugares por los que anduvieron patriarcas, profetas y santos del antiguo y nuevo Testamentos. Muchas veces caminaba por la Jerusalén antigua y más de una oportunidad oí a varios oradores que mostraban un nuevo Gólgota, lejos del que yace bajo la iglesia del Santo Sepulcro. Hablé en algunos hospicios de Nazaré con monjas palestinas o inglesas (a las cuales les hablé del espíritu de Chesterton), y compartimos un mundo común pese a las diferencias idiomáticas y culturales. Visité la iglesia de la Dormición de la Virgen en Jerusalén y entré en algunos conflictos históricos cuando en Turquía, visitando Éfeso, me hablaron de Meryemana, el lugar donde María había muerto (así está registrada en la historia de la iglesia, el viaje del apóstol Juan y el virgen María, quien acompañó a Juan en su peregrinaje por Éfeso y en donde edificaron una bella iglesia, actualmente en ruinas). Quizá la racionalidad permite tener un conocimiento más exacto y veraz de las cosas; pero el ver a tanta gente movilizada durante los peregrinajes no dejaba de conmoverme. Vi gente de toda condición, edad, raza, lenguas, movilizarse por estos antiguos parajes en busca de una sensación. La Fe mueve montañas. Y también el peso de la historia.

Uno de los momentos más culminantes y que en cierta manera cubrió mucho de este viaje fue el viaje a Belén. La llegada a esta ciudad es interesante; ahora pertenece a Palestina, cuando estuve aún era territorio ocupado por Israel. Fue una visita tensa, con muchas advertencias severas de lo que nos podría pasar (fuimos 3 personas). La iglesia es discreta y como muchas de la antigua Jerusalén, está regentada por varias instituciones cristianas; al descender al lugar donde posiblemente estuvo el pesebre, confluimos muchas personas de lenguas y razas diversas; pese a ser febrero, un grupo cantó en inglés NOCHE DE PAZ, los demás seguimos espontáneamente en nuestras lenguas (unas 10 por lo menos) hasta que terminamos; fue emocionante. Pero afuera nos esperaba otra cosa: Un grupo de palestinos salió por las estrechas calles gritando contra Israel, la policía llegó, bombas lacrimógenas; tuvimos que correr hacia diversos lugares para refugiarnos; yo me dirigí hacia los baños públicos y ahí me encontré con varias personas que habían huido buscando protección. Calmada la situación salí en busca de mis amigas que habían corrido hacia la Municipalidad. Comentamos el caso, fue una tensa experiencia. Pero ni aún eso nos ha de quitar ese tranquilo momento que habíamos vivido por unos minutos confiando y esperando en que algún día la Humanidad aprenda a vivir en paz, que ese espíritu por el cual clamamos un 24 de diciembre de cada año, sea el modo de vivir para cada uno de los habitantes de este aún bello planeta. Esperemos así sea. Amén.



(Salió publicado en Díatreinta, publicación mensual de la Facultad de CC. de la Comunicación de la UPN)