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Trujillo, La Libertad, Peru
Un espacio para mostrar ideas y puntos de vista ligados al arte, a la cultura y la vida de una sociedad tanto peruana como universal

domingo, 3 de mayo de 2020

EN NUESTROS FRÍOS LABERINTOS (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO 03 DE MAYO TRUJILLO)


Las noticias que nos rodean. Segundo país en la zona sudamericana con más contagiados. Revuelta carcelaria con reos fallecidos. Keiko y Susana Villarán libres. Colas inmensas para comprar cerveza en Piura, una de las zonas más castigadas por la pandemia. Viaje cuestionado del Ministro de Salud a Lambayeque llevando un puñado de pruebas para el coronavirus. Ley que faculta el retiro del 25 % de las AFP. Empresas grandes pugnando acceder a la Suspensión Perfecta. Renuncia del Ministro de Interior por graves casos de corrupción. Varios policías muertos por contagio. Trabajadores de servicios públicos, como SEGAT, suspenden sus labores por contagio de muchos trabajadores. El desempleo crece día a día. Comienza la migración en masa de residentes transitorios en grandes ciudades hacia sus lugares de origen. El dilema entre hambre o enfermedad. Reacción negativa de padres de familia contra la educación virtual. Fatiga social por el aislamiento. Colapso de la Salud Pública. Fotos de grandes fosas comunes de algunas ciudades que muestran entierros masivos. Redes llenas de noticias alarmistas que hablan de conspiraciones chinas y comunistas contra el mundo. Perú entre los primeros veinte países con más contagio a nivel mundial. Recesión nacional y mundial.
Hay muchas más noticias que estas. Son las que pueblan los diversos medios de comunicación, sean virtuales o físicos. En el mundo virtual, plagado de noticias falsas, estas van acompañadas de comentarios de toda índole, siendo los negativos los que más abundan en estas redes de las que están pendientes millones de personas “prendidas” a sus celulares, computadores o televisores. La gente está atenta a cifras, números, curvas y cuadros estadísticos, de campanas de Gauss. Hemos preferido congelar nuestro miedo a través de envolturas numéricas, fotos o filmaciones digitales en HD.
Paulatinamente, de manera personal, estas frías cifras comenzaron a tener rostro humano. Primero, ya son 14 personas del vecindario que cayeron enfermas con 2 muertos. Un policía, conocido de varios colegas míos, fallece por complicaciones respiratorias a causa de la infección. Luego, un compañero de trabajo está en UCI con respirador artificial con pronóstico reservado. Casi a inicios de la pandemia en nuestra sociedad, una amiga española, directora de un colegio, me escribió un extenso correo en el que me contaba el panorama lamentable de su escuela, PPFF y profesores contagiados, y con un sistema de salubridad en camino al colapso. Al leer su correo sentí lejano ese mensaje, pero como una clara advertencia. Ahora toca nuestra pequeña realidad. Pero, pregunté a varias personas si tenían conocidos o familiares suyos infectados, y la respuesta es negativa. Quizás estemos negando esta realidad por defender nuestro único rincón de protección frente a esta hecatombe que nos está arrollando. 
Defendemos con garras nuestro último reducto. 
Urge crear espacios de alivio social.

domingo, 26 de abril de 2020

NUEVOS ESCENARIOS Y DESAFÍOS (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO DOMINGO 26 DE ABRIL TRUJILLO)


A estas alturas, sabemos qué decisiones ha tomado el Gobierno central para ciertos procesos claves de la sociedad peruana. En el terreno de la educación, la suspensión de clases presenciales a todo nivel educativo era una situación irremediable debido al escenario de la pandemia que se ha ido agravando con el pasar de las semanas. Y esta puede empeorar. Pero hay procesos vitales de una sociedad que no pueden parar. Esta crisis, lamentablemente, ha demostrado que la educación y salud, pilares fundamentales de cualquier sociedad, tienen problemas para dar respuestas puesto que no han sido prioridad en nuestro país. El gasto anual del erario en las últimas décadas lo dice todo.
Pese a todo, el Estado ha dado como respuesta la educación a distancia, modalidad empleada por décadas en diversas sociedades como la nuestra por diversos medios. Primero fue la radio, estrategia que permitió a países tan divergentes como Cuba o Corea del Sur hacer una campaña agresiva contra el analfabetismo logrando con creces su objetivo. Luego la televisión, llamada Caja Boba por Charles De Gaulle por el paulatino deterioro de los contenidos de esta. Para muchos la señal abierta, por su programación, tiene asociación negativa que es la que en el fondo ha motivado reacciones adversas a su uso para las clases a distancia. Y la Internet. La aplicación de esta, más los programas educativos televisivos, se da en un marco de emergencia en el que se halla todo el país. Es una respuesta como las que surgen en todos los sectores con el fin de continuar con esta institución vital.
Las observaciones hechas por diversos sectores y personas ajenas a la educación son interesantes y revelan muchas cosas:
1)    La relevante importancia del maestro en el proceso educativo. No es un “facilitador”, es un personaje vital que asume diversos roles en el proceso de enseñanza.
2) El desconocimiento de muchas familias de la enseñanza en sí. Se han visto abrumados por carencias de estrategias de motivación y seguimiento de este proceso. Esperemos que, tras esta amarga experiencia, muchos padres se involucren más en el aprendizaje de sus hijos. Los colegios no son guarderías.
3)    La desconfianza de la modalidad virtual por dos razones:
a)    Muchos profesores tienen escasa o nula experiencia. Varios han comenzado un aprendizaje “sobre la marcha”.
b)    El sistema en sí. Esto pone en entredicho cualquier enseñanza obtenida por esta modalidad, pues incluso se está cuestionando la enseñanza universitaria. Esto automáticamente pone en una encrucijada toda oferta educativa virtual desde simples cursos, diplomados, maestrías y doctorados. La educación es un desarrollo paulatino con acompañamiento y, bajo esa perspectiva, la virtualidad entra en cuestionamiento.

Esperemos que, cuando otras áreas profesionales vayan a tomar decisiones, permitan que el sector educativo participe e, incluso, le permitan modificar planes que vayan contra sus objetivos globales.

domingo, 19 de abril de 2020

TROGLODITAS Y FANÁTICOS EN EL CORONAVIRUS (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO 19 DE ABRIL)


Chepén. Un mototaxista lanza de su vehículo a una mujer con acceso de asma pensando que estaba infectada de coronavirus. La mujer dio negativo. En diversas ciudades de España, mujeres y doctores reciben anónimos mensajes amenazantes e insultantes en sobres, colgados en los vidrios de las puertas principales e, incluso, pintas en sus autos estacionados en el parqueadero colectivo del edificio; para su vecindario, el cuerpo médico es la nueva peste que circula. En Lima, fallece el propietario de una discoteca quien, una vez iniciada la cuarentena, vociferaba delante de las cámaras que esta pandemia era una farsa. Hace recordar, a la larga, a la sorna que protagonizó Rafael Rey, excongresista, quien resultara infectado. O los comentarios de Donald Trump y Jair Bolsonaro sobre la pandemia. El primero ya atenuó sus desafortunadas opiniones al respecto, mientras que la obstinación del segundo ha hecho que surja una suerte de gobierno en paralelo para evitar una catástrofe social en Brasil.
Por otro parte, diversos pastores religiosos protestantes, judíos ortodoxos o seguidores de sectas fatalistas son reacios a acatar todas las medidas de seguridad sanitaria para evitar el contagio y propagación de la pandemia. Basta recordar la reunión de más de 600 personas de varios grupos religiosos en el Swissôtel en Lima una vez iniciada el aislamiento social. O las noticias de ver a diversos pastores que lucran con la desesperación de la gente o amedrentan a sus feligreses por usar mascarillas, pues “la divinidad les da una coraza contra el virus”. Por otro lado, seguidores de un modo de pensar y defensores de algunos modelos económicos y sociales centrados en el liberalismo han chocado con las medidas tomadas por diversos gobiernos en pro de la protección social, tal como ha sucedido en Michigan, Ohio y Texas en contra del adalid del liberalismo económico, Donald Trump. Muchos estados se están viendo en la necesidad de replantear sus fundamentos económicos, aquellos que medraron lo público para dar prioridad a la iniciativa privada que la está pasando bastante mal en cuadros como estos. Grandes y pequeñas empresas piden que el Estado tome medidas de flexibilización y, en otros casos, que las salven. La Salud Pública ha sido el detonante por el cual las cosas no deben de ser como antes. Es un grave error que no se sabe cuánto nos va a costar como sociedad.
Tenemos muchas lecciones: mayor conciencia ecológica es una de ellas. Nuestra presencia en el planeta es nociva. Necesitamos energías limpias y renovables. Además, muchos arquitectos y planificadores hablan de priorizar ciudades pequeñas en desmedro de las megápolis. Cambio de modelo económico; la durabilidad de los artículos debe de ser más larga, solo nos preocupa el consumo, el mercado. Y pensar en el control de la natalidad como un principio racional de una sociedad que apunta hacia una armonía holística.
¿Podremos dar el salto?

domingo, 12 de abril de 2020

FACTURA DE 30 AÑOS DE ANOMIA (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO 12 ABRIL)


Preguntaba un amigo tratando de identificar al o a los culpables del fallecimiento del primer médico peruano en medio de esta pandemia, en medio de esta locura que está transformando desde los vínculos sociales más íntimos hasta la economía de nuestra nación. La respuesta creo que nos atañe a todos.
Desde hace tres décadas y tras los crasos errores de la gestión de AGP, el Estado se convirtió en una suerte de paria en la sociedad peruana. Las palabras “estatal” o “gestión pública” tenían una carga semántica muy negativa, la cual se ha acentuado más gracias a los múltiples de actos de corrupción, la cual se ha incrustado en todos los tejidos del aparato estatal, sobre todo en el político y en el judicial. Son tres décadas de habernos martillado que lo estatal y lo público son lacras sociales. Casi dos generaciones de peruanos han crecido bajo esa mirada.
El debilitamiento del Estado ha permitido, tras su desmantelamiento productivo, que surjan diversas formas de poder económico que, incluso, pueden cuestionar su autoridad. El sistema impuesto por el Fujimorato no solo desarmó todo lo que pudo del aparato estatal, sino que supo, además, cómo hacer una sociedad acrítica, hedonista, aprovechadora, trasgresora, egoísta y poco empática con la problemática nacional. La palabra del Estado era y es cada vez más débil y carente de credibilidad y autoridad, tanto de este como de todos los organismos encargados de ejecutarla. Esto nos permite entender que, incluso, entidades religiosas convocaran reuniones o la actitud de muchos jóvenes recién empezada la cuarentena. Una real anomia.
A lo largo de estas décadas hemos visto crecer poderes alternativos que asumen roles que ahora están colapsando. El crecimiento de corporaciones en este periodo lo explica. Incluso esto ha influido en pilares esenciales como la educación y la salud; en el primer caso, se la orientó al sentido del mercado, modelando las habilidades y capacidades de las personas con el fin de poder incorporarse en una empresa o crear una, realidades en total situación crítica por los momentos que vivimos. Habilidades blandas como empatía y solidaridad no han sido prioridad, justo cuando más las necesitamos y pueden salvar la vida de varios, incluida la tuya, estimado lector. En la salud, se permitió una lamentable reducción, cual escarnio social, del sistema público. Con esta pandemia, enfrenta además la herencia de tuberculosis y dengue. La sociedad, nosotros hemos permitido llegar a esta situación a través de políticos electos que aceptaron dichas condiciones; nosotros los colocamos a través de las urnas. Esa es la verdadera democracia; no es un término económico, es un término social y compartimos todos este sistema. Reflexionemos, además, sobre la situación de los llamados partidos políticos y sus líderes, los cuales han demostrado hasta ahora no estar a las alturas de las circunstancias.
Estos son, pues, nuestros 30 años de boom económico.

domingo, 5 de abril de 2020

APRENDIZAJE POSITIVO, LIDERAZGO NEGATIVO (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO DOMINGO 05 DE ABRIL)


Tres semanas de aislamiento. Tres semanas de una experiencia que nadie quiso tener y que ahora la tenemos instalada en nuestras ciudades. Una epidemia que fue hasta menospreciada por muchos e, incluso, se la manipuló con una carga política desviando la verdadera dimensión de una pandemia, situación absurda y torcida por la que ahora se tienen que morder la lengua por su ignorancia, intransigencia, indolencia o estar contaminado sufriendo sus consecuencias. Esta tragedia ha puesto en prueba a todos los peruanos, latinoamericanos, a la humanidad en general. En esta anómala situación vamos viendo la educación que cada uno ha recibido y la capacidad de respuesta que cada uno tiene frente a la misma. Esta crisis, pues, ha desnudado muchas falencias sociales y esperemos que, así como la humanidad tiene que replantear muchos errores, nuestra sociedad reoriente sus ideales y objetivos, fortalezca nuestros logros y enmiende sus graves carencias.
Dos pilares sociales deben de ser motivo de reflexión y acción: educación y salud. La salud ya no será vista, espero, como se estuvo haciendo hasta antes de la pandemia. Buenos médicos y un eficiente sistema de salud público son bases para una sociedad sana. Sin embargo, las prioridades no se han enfocado precisamente en el sistema público, lo que ha hecho que mucha gente (trabajadores y usuarios) recurra al sistema privado, dejando en la vulnerabilidad a un gran segmento de la población de medianos y escasos recursos que vive en permanente riesgo. Replantear la salud pública tiene que ser la nueva prioridad de ahora en adelante. Debe de ser política estatal y todo nuevo gobierno debe de honrarla. Sino escenas futuras, como las actuales, se repetirán. Hay que el tema sensible de la corrupción, gran enemigo de nuestra sociedad. La salud debe de estar amarrada a políticas de prevención: lo importante es que la población sepa cómo prevenir enfermedades y cómo actuar frente a casos como estos. El otro pilar es la educación es el otro pilar fundamental y el que ha estado buscando respuestas a esta nueva realidad. La virtualidad es una herramienta útil que puede salvar la situación; pero las condiciones sociales distan de ser óptimas como para poder tener a millones de niños y jóvenes atendiendo clases virtuales por una u otra razón. Las numerosas capacitaciones hechas por años en materia de TIC deberían de salir a relucir en momentos como estos. Quizás la “caja boba” (como llamó De Gaulle a la televisión) pueda ayudar en estas actividades, quizás. Menos Esto es guerra, más Sucedió en el Perú.
Lo negativo viene del mundo político. Ver a autoridades ediles involucrados en escándalos (nuestro teniente alcalde en una juerga o el alcalde haciendo proselitismo durante entrega de alimentos) es demostrar una incapacidad de liderazgo en momentos que la población necesita de modelos positivos y asertivos a nuestra situación.
Son asuntos pendientes

domingo, 29 de marzo de 2020

REFLEXIONES II (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO DOMINGO 29 DE MARZO)


15 días, una quincena. Tras la última semana cargada de muchas tensiones, también tenemos muchas lecciones. Muchas cosas por cambiar a futuro, un futuro que se vislumbra incierto. He visto y leído muchas buenas voluntades, ingenio y capacidad de respuesta ante la incertidumbre de lo nuevo que se vendrá; sin embargo, se han visto actos y reacciones censurables por personas de toda condición.
En mi artículo anterior, hablaba sobre las desmesuradas acciones ocurridas desde el inicio del evento. Muchos personajes públicos reaccionaron contra las medidas que se han dado; pero vemos que muchas naciones, en un principio reacias al aislamiento forzado, han comenzado a actuar de la misma manera. Siendo un virus de alto contagio, el aislamiento social es un principio inmediato. Estamos frente a medidas totalmente nuevas para nuestra sociedad. Son perfectibles, como cualquier respuesta que se dé; hay vacíos, los hay. Hay muchos casos desesperados, los hay y los habrá. Ante una situación como esta, con tanta población a la que se la ha impulsado a la iniciativa personal (emprendedor de micro y mediana empresa), el Estado busca los medios de poder proteger a una gran población vulnerable. Hay una gran población marginal, la cual tiene escasos o nulos medios para responder a esta situación. La actitud de romper el aislamiento se entiende por su necesidad de ganar el pan diario. Pero el hecho de que haya individuos que salen para festejar o reunirse para “celebrar” esta pandemia debe de ser sancionado drásticamente. Hubo un caso de exceso por parte de un militar con un ciudadano en Piura, acción censurada por la misma institución; pero, lamentablemente, hay casos de reincidencia. Llevar esta gente (quizá infectada por su irresponsabilidad) a la cárcel conlleva un peligro para la población penitenciaria, pues esta tiene nulos medios de protección. Y otro censurable caso es de los congresistas que, en plena expansión del virus, deciden hacer una sesión presencial para discutir la aprobación de una comisión multipartidaria que evalúe las acciones de este gobierno y la delegación de facultades a la Comisión Permanente. La angurria del poder sobre la ponderación.
PD. El viernes falleció Marcela García; una amiga comprometida con una participación más activa de la sociedad civil en el seguimiento del compromiso y comportamiento de políticos de diversos estamentos: alcaldías, gobiernos regionales u otras instituciones. Su aspiración fue la de convocar a todas las instituciones civiles (empresariales, culturales, educativas, etc..) a asumir un compromiso más activo para evitar el avance de lacras enquistadas en nuestra sociedad: la demagogia y la corrupción. Nuestra inacción ha permitido que muchas promesas electorales sean parte del catálogo de demagogos y la corrupción, íntimamente ligada, haya avanzado a niveles insospechados.
El sueño de Marcela debe de ser nuestro derrotero común como sociedad, ahora más que nunca.

domingo, 22 de marzo de 2020

REFLEXIONES (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO 22 DE MARZO 2020)


El pasado domingo había escrito un artículo titulado Apocalipsis mediático. Exactamente una semana después, el coronavirus ya está instalado y avanzando en nuestro país. Desde entonces, la cifra de infectados ha ido creciendo exponencialmente, tenemos cuatro fallecidos, un nuevo ministro de Salud y un prácticamente toque de queda que se va haciendo cada vez más riguroso. También vamos viendo comportamientos erráticos e inmaduros de muchas personas, así como instituciones y empresas que han velado por sus intereses más que por el bienestar de sus trabajadores, sus familias y la sociedad en general. Esta situación, insólita y extrema, está sacando los demonios de la sociedad. Muchas personas han tenido reacciones absurdas contra las acciones tomadas por el Gobierno ante una situación nunca vivida y, por lo tanto, no tenemos ningún marco referencial aplicable en su totalidad a nuestra realidad. Cada país está buscando una u otra forma para poder afrontar esta crisis que no solo está llevándose vidas; sino economías personales, empresariales y nacionales.
La insania social empezó con un manejo inadecuado de la información que generó una estampida de consumidores compulsivos de papel higiénico y gel con alcohol, ambos materiales poco útiles para la prevención. Ver a hombres y mujeres cargando planchas de papel higiénico daba más la sensación de una diarrea colectiva como una reacción de pánico ante la llegada del famoso virus. La semana previa al domingo 15, diversas instituciones actuaron correctamente cancelando reuniones, presentaciones, eventos diversos; sin embargo, los espacios de alta probabilidad de contaminación, como discotecas o bares, siguieron sus actividades. De manera individual, muchos siguieron comportándose como si nada estuviera pasando u otros, inconscientes, han hecho, de esto, un festival o vacaciones de desenfreno. Ambos ruines tipos merecen nuestro total desprecio. El manejo de la información ha sido deplorable; las redes sociales se han vuelto las “verdaderas fuentes de la verdad” (con casi un 90 % de información truculenta y falsa) y abrió los temores de una población de poca o nula formación cívica y que ha crecido en una cultura del individualismo y egoísmo. Por ejemplo, la reacción de vecinos de Huanchaco contra la familia que tiene a una joven infectada es una muestra de ello. La ignorancia es más efectiva y alimenta el miedo, bien aprovechado por muchos para sus intereses.
Así surge el rumor del desabastecimiento, situación que genera mucho malestar. Se habla de ayudar al pequeño comerciante que muchas veces no tiene los medios para hacer frente a los supermercados. Pero la bajeza del aprovechamiento de varios de ellos les va a pasar una amarga factura en el futuro. Nula solidaridad con los ciudadanos de a pie; estos les responderán de igual forma.
Tenemos un nuevo Congreso amorfo. Debemos de ver el daño de la corrupción. Este tema lo debemos discutir la semana entrante.

domingo, 15 de marzo de 2020

APOCALIPSIS MEDIÁTICA (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO 15 DE MARZO)


El coronavirus llegó al Perú. ¡Hay que salvar nuestros hijos, hay que matar a todos los enfermos y comprar todo el papel higiénico y botellas de gel que haya para poder proteger con estos a mis párvulos embadurnándolos y envolviéndolos como una momia egipcia! ¡Los venezolanos la han traído, bótenlos al mar! ¡Ya hay 38 contagiados y el curita ya murió! Pero ¿por qué el gobierno toma medidas tan drásticas como cancelar las clases de mis hijos del colegio y la universidad? Pucha, o sea que por culpa del virus ya no podré ir al estadio a ver al equipo de mi corazón, ni compartir un par de chelas con un solo vaso con mis patas; no vale. Y no podré ir a celebrar mis fiestas patronales, ni cargar el anda en la procesión. ¡No es justo! Así es cómo, lentamente, la incongruencia y una suerte de insania se han comenzado a instalar en la psique social de los peruanos y de todas las personas, en general.
La situación del coronavirus ha desnudado la sociedad peruana, no solo en su parte política y legal, sino en lo social y antropológico. Así como hay actos altruistas, hay también manifestaciones del lado más ruin que puede ocultar una persona. Desde el punto de vista gubernamental, las acciones tomadas han sido las correctas: primero evitar que millones de niños (no hay mortandad entre ellos, pero son agentes conductores) y jóvenes adquieran el virus, sea por los encuentros en aulas escolares, sino en el pésimo servicio público privado, pues miles de vehículos sucios (combis, colectivos, micros, buses de 25 años de antigüedad o más) llevan como ganado a estos grupos sociales hacia y desde sus destinos. ¿Cree uno que diariamente estos vehículos son limpiados con desinfectantes? Viajar apiñado es exponerse a contraer, más que el colegio o universidad, el dichoso virus. Es raro que no se haya abordado este tema. ¿Muchos intereses de por medio? Ahora queda en las conciencias de padres y madres no exponer a estos en sitios masivos; la gente tiene graves problemas de comprensión, pues tergiversan los mensajes enviados por los medios correctos. Muchas lecciones positivas se pueden sacar. Si la familia refuerza lo aprendido por los niños en aulas sobre la limpieza, habremos dado un gran paso. La pelota está en el terreno familiar.  Por otro lado, las acciones de apoyo al sector productivo son correctas en la medida de lo posible. Podemos volver a una suerte de normalidad, si es que acatamos las reglas. Italia fue una muestra del dejar actuar libremente y ahora acarrea el desastre que tiene. Pero un matiz centralista relució inicialmente; todo a Lima. Ahora ya han descentralizado las unidades de análisis a las grandes ciudades. Ojalá hubieran actuado así con el dengue, tan lejos de Lima, tan lejos.
Se reclama agua. Ahora es el turno de los políticos. Dirigir el gasto hacia zonas de alto riesgo es despilfarro. Desde 2017, estamos esperando que actúen correctamente nuestras autoridades locales. ¿Lo harán?

domingo, 8 de marzo de 2020

MUJER (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO 08 DE MARZO)


Leyendo un artículo de Martín Estévez para la revista argentina El Gráfico en la que incluye una entrevista al joven deportista medallista olímpico Braian Toledo (recién fallecido), este comentaba la dura y triste niñez que pasó en su hogar en el que su madre vivía una casi insana fantasía con un hombre que huía de ella cada vez que estaba embarazada de cada uno de los numerosos hijos que tuvo. La madre había puesto todas sus aspiraciones en un tipo con el fin de poder completar su sueño de madre-esposa con amplia prole. Esperaba poder cumplir con el rol que se asigna a la mujer en nuestras sociedades en las que existen tantos ritos como coerciones para que ellas cumplan con las mismas. Las trasgresiones de estos roles hacen que la sociedad las condene por no estar ceñidas al sistema. Uno de estos lamentables casos fue el de las reacciones contra la madre de la niña asesinada en Independencia, Lima, quien recibió una andanada de críticas y censuras por parte de los medios, sobre todo vulgares. Algunos promovieron la lapidación mediática y astutamente tomaron distancia de la misma responsabilidad que les cae por ser promotores de una cultura mediocre de sexismo chabacano. Muchas mujeres apoyaron la burda propaganda, aunque otras ya toman una posición más crítica, habida cuenta de que los medios no son capaces de tratar la noticia del incremento de feminicidios, sino como actos truculentos y cargados de morbosidad. La sangre vende tanto como la calata de la semana.
Como sociedad arrastramos entelequias determinantes de la mujer. Aún quedan personas (pocas, espero) que conservan el marcado deslinde entre madre y la vida sexual. Una vez conversé con un universitario que estaba convencido de que todas las madres deben de ser como la virgen María. El camino de la mujer en la historia es duro. En la Biblia se habla de la primera mujer, Lilith; ella se rebeló contra Dios y el hombre. Fue expulsada del paraíso convirtiéndose, según leyendas, en la madre de todos los vampiros. Luego se creó a Eva, arrancada del hombre. Eva jugó el papel de la mala; su acción significó la anatematización social, política y cultural de su género. En otras culturas, sufrieron desprecio y minusvalía. Un poema chino del Che King dice en sus primeros versos: “La sabiduría del hombre sabio es nuestra fuerza. La sabiduría de la mujer sabia es nuestra ruina[..]”. En el código de Hammurabi, el ojo de un hombre plebeyo valía 60 siclos de plata; la vida de una mujer plebeya, 30. Muchas viudas eran quemadas vivas con su cónyuge muerto, pues estas se convertían en una carga para la comunidad. La función de reproductoras ha sido promovida por algunos modelos de gobierno (Mussolini, Hitler, Perón) con políticas agresivas de natalidad premiando a las mujeres que daban más hijos al régimen.
Su lucha por la equidad ha sido reconocida el 08 de marzo como Día Internacional de la Mujer. Una conmemoración para honrar y seguir trazando nuevos derroteros.