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Trujillo, La Libertad, Peru
Un espacio para mostrar ideas y puntos de vista ligados al arte, a la cultura y la vida de una sociedad tanto peruana como universal
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domingo, 19 de noviembre de 2023

¿DEPORTE COLECTIVOS, RADIOGRAFÍA SOCIAL? (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO 19 DE NOVIEMBRE)

 


Nuevamente cayó el equipo nacional de fútbol. Una crónica con un final ya previsto, ya anunciado: otro fracaso. El comportamiento errático y espasmódico de los dos grandes deportes colectivos, el fútbol de varones y el vóley femenino, pareciera que estuvieran retratando la crisis de la sociedad peruana en su conjunto. Gracias a los medios, la publicidad, la propaganda y a otros factores promovidos por la educación, los deportes colectivos son actividades muy integradas a la sociedad con muchos fines; no sólo sirven como entretenimiento, sino como una fuente poderosa de ingresos, así como una forma atractiva y estimulante de creación de identidad; también son una construcción de una marca y formas útiles de distracción de gobiernos para sus pueblos: pan y circo. Por eso, muchos estados son benefactores directos o indirectos de la formación de equipos acompañados de intensas campañas distractoras o fomentadoras de un chauvinismo a ultranza en la que los jugadores reúnen todas las cualidades y valores del buen ciudadano. Y en medio de los grandes eventos deportivos los gobiernos hacen sus fechorías en medio de la euforia popular. Ejemplos varios tenemos: durante la campaña clasificatoria del equipo peruano para el Mundial de Argentina 78 y mientras un ebrio Morales Bermúdez abrazaba a un sudado Julio Meléndez, en los diarios en un recuadro lateral salían discretamente al día siguiente una nueva alza de gasolina; o, cuando se caía frente a Bolivia en esta magra campaña del actual seleccionado, la reciente jugada del inefable congreso para lograr la bicameralidad y la reelección no sólo automática, sino a perpetuidad si lo desean los dilectos padres de la patria. El microcosmos que se arma en un seleccionado nacional, sea de fútbol o vóley, o las otras modalidades relegadas en nuestro pobre panorama deportivo, muestran un poco cómo es la sociedad de la cual “extraen” los jugadores que las conforman. Con sus bondades y defectos, juntos tratan de construir un objetivo decisivo: goles o puntos. Y una cabeza fría, exigente y preparada para la idiosincrasia de los connacionales: los DT. Pero no está funcionando. Ambos equipos a nivel sudamericano están en la cola: esa es la radiografía actual. En el Sudamericano de Vóley Femenino de este año, Perú quedó último; en este torneo sudamericano de fútbol, clasificatorio, también estamos últimos. En el reciente Panamericano, las medallas peruanas casi todas son individuales. Para nosotros, agobiados por nuestros políticos, delincuentes, recesiones e inflaciones; pareciera que la única forma para lograr nuestras medallas de resistencia va a tener que ser una lucha en solitario. Cuando escribo este texto, me viene a la mente ese vals que dice: “un fracaso más, qué importa, si en la vida nunca fui feliz”; mientras los DT y sus equipos técnicos, tanto del deporte como de la sociedad, siguen viviendo su vida en paralelo: todo en paz.


domingo, 14 de agosto de 2022

AREQUIPA EN SU DÍA

 


Mañana, lunes 15 de agosto, Arequipa celebra un nuevo aniversario de su fundación, celebración en la que la ciudad recuerda su creación hispana, aunque sus orígenes se remontan en el mundo prehispánico sureño. Viví más de una década en esta bella ciudad al desplazarse mi familia norteña por cuestiones laborales de mi padre. Años maravillosos. En 1970, la ciudad experimentó un vuelco en cuanto al tratamiento de la ciudad y el abrir nuevas propuestas para hacer de esta un potencial turístico que trató de involucrar a la mayoría de sus ciudadanos del Centro Histórico. La apertura del claustro de Santa Catalina y la restauración de varios barrios emblemáticos como el de Yanahuara, por ejemplo, significó no sólo el aporte de la empresa privada, sino el apoyo de sus ciudadanos y el poder municipal que hizo suya esta propuesta para crear un nuevo rostro de Arequipa. Fueron años movidos, pero la población hizo suya esta idea y es ese sueño hecho realidad el que ahora muchos visitantes ven de esta ciudad. Desde la señora que salía a barrer un buen tramo de la acera de su casa hasta las autoridades que entendieron que el bien común era el bienestar de todos. Hubo y hay problemas, como en toda sociedad; pero hay que reconocer que la visión de una idea, su planificación y organización, más la presión colectiva (importante) para lograr el objetivo hizo una transformación relevante que han hecho que la ciudad sea considerada una de las más bellas del Perú. No es acción divina, ni regalo de los dioses; es el trabajo colectivo que hace que esta ciudad sea lo que es. Lastimosamente la profunda corrupción de las últimas décadas ha afectado a esa región; pero, pese a todo, es el carácter de su gente, de su visión cívica y ciudadana, de su identidad regional, de su orgullo de pertenencia (esa que tanto usan como caballito de batalla en diversos lugares); todo esto combinado les ha permitido colocarse en un buen puesto en lo económico como cultura y social en el país.

Aunque no soy muy simpatizante del fútbol, escribo esta nota también por la alegría por un equipo de fútbol, el Melgar Fútbol Club, quizás desconocido para la mayoría de personas pendientes de las notas centralistas en los medios. Ese equipo ha arrancado gritos y llantos de alegría a miles de peruanos necesitados de algo positivo mientras los políticos deshacen nuestro país. Que ese puñado de jugadores represente el espíritu de los demás ciudadanos, aquellos que no queremos ser aplastados por la miseria que representa el mundo político. Que los jóvenes tengan un momento de orgullo y satisfacción frente a los fracasos y podredumbre de los personajes de moda en los medios (¿Ya se olvidaron de Kimberly García?). Lima no es la vara que mide el éxito de nuestra realidad. Así como Colombia, Ecuador, Bolivia, Brasil, incluso Chile y Argentina, tienen ciudades contrapesos a sus capitales; sueño el día en que Trujillo pueda convertirse en una. Ojalá llegue a vivir esa experiencia.




domingo, 18 de marzo de 2018

MARCA TRUJILLO (UN CAMINO DIFÍCIL HA EMPEZADO, PERO INTERESANTE) ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO DOMINGO 18 DE MARZO


El día jueves 15 del presente comenzó a rodar por todos los medios la marca ciudad, la Marca Trujillo. Un proyecto anhelado por un grupo de ciudadanos de crear un concepto que ayude a la construcción de la identidad trujillana.
El proceso para llegar a esta Marca no ha dejado de ser accidentado, habida cuenta que se hizo en un ambiente bastante politizado. Pero la idea de la creación de una marca es un bien común, colectivo, que va más allá que los intereses políticos partidarios. En el ambiente sesgado que cunde en la ciudadanía, las buenas iniciativas, muchas veces, se ven enturbiadas las más de las veces por una actitud negativa contra el contrincante, pese a que este pueda ofrecer interesantes propuestas para viabilizar soluciones económicas, culturales y sociales para la ciudad. Para acceder a la Marca Trujillo, luego de los trámites administrativos correspondientes, se contrató un servicio de Consultoría, la cual enfrentó no pocas dudas en el aparato burocrático, así como ácidas críticas al mostrar sus primeros productos. Este desarrolló un completo estudio en la sociedad con sus principales actores. La creación de una marca no solo obedeció a la idea de lograr un despegue y un crecimiento sostenido en lo económico, industrial, cultural y turístico; sino también identificar todo aquello que fortalezca la identidad de los trujillanos de nacimiento y residentes. Esta fue sometida a varias pruebas y testeos entre diversos ciudadanos de la ciudad que realizan diversas labores, además de personalidades destacadas en diversos ramos que residen en nuestra ciudad. Las reuniones que se realizaban con diversas personas fueron constructivas, pese a que pudieran parecer demoledoras. Lo bueno es que se comprendió que se debe de partir de un punto para comenzar un proceso que tomará buen tiempo. Luego de su presentación, queda su difusión activa a partir de la fecha a la comunidad a través de los medios de comunicación, tanto locales como nacionales.
Marca Trujillo también cuenta con Comisión de Promoción de la misma, que velará por las condiciones que garanticen su desarrollo y ejecución para que se cumplan con los objetivos e impactos a corto, mediano y largo plazo. Esta Comisión la integran personas independientes provenientes de diversas empresas e instituciones nacionales y privadas; funcionará como un órgano técnico y especializado, que permita tener una mirada externa crítica estratégica para las actividades que se realicen en beneficio de la ciudad y su Marca. Además, ya se han nombrado un grupo de embajadores que llevarán la marca a sus actividades: Piccolo Clemente (con un simpático discurso presentado a la audiencia vía un audiovideo), Modesto Montoya, Gerardo Chávez, Maju Mantilla, Pepe Alva (quien habló a nombre de ellos): es el primer grupo de embajadores, ciudadanos destacados en sus rubros.
Es, pues, una buena oportunidad para que Trujillo, ya una gran ciudad, pueda apostar por una imagen positiva y la construcción de una mejor percepción sobre nosotros mismos, sus ciudadanos.

domingo, 22 de octubre de 2017

FESTIVALES Y CULTURA EN LA CIUDAD DE TRUJILLO (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO TRUJILLO) A PROPÓSITO DEL IV FESTIVAL DE CINE PERUANO DE TRUJILLO

Hacer actividad cultural en nuestra ciudad o Región se ha vuelto en una proeza por el poco o nulo apoyo que se recibe por parte de organismos públicos o instituciones y empresas privadas. La politización de alguna de ellas o el raro concepto de rentabilidad de algunas otras hace que el necesario apoyo económico para estos eventos se convierta en un camino tortuoso para gestores culturales en nuestra ciudad; el otro gran problema que enfrenta el espectáculo en sí, sea académico o artístico, es la afluencia público masivo por lo general indiferente o ignorante (por desconocimiento) debido a causas como las estrategias erradas de comunicación hacia público objetivo (por parte de los gestores) o por el desconocimiento y poco compromiso de posibles promotores aliados de estos eventos que no colaboran en la difusión del mismo entre un público habituado a un consumo ligero y banal de formas de espectáculo de nuestra ciudad. De nuestra experiencia personal, llevamos casi veinte mil personas al teatro por años dentro del marco de actividades académicas del departamento que dirigía. Fue un trabajo sostenible, apasionante; pero la sede central en Lima decidió que no era necesaria esta estrategia pedagógica en la Universidad. Con los promotores se había trabajado, de manera sistemática, propuestas teatrales de calidad que revitalizaron la vida de esta arte en nuestra ciudad. Incluso llamó la atención de sectores empresariales que vieron otro filón interesante de rentabilidad de su imagen apoyando eventos como estos. Mereció páginas centrales en suplementos económicos. Pero estas actividades chocan con la indiferencia e incomprensión de personas que no tienen mucha idea de su importancia en lo educativo. Iniciadas a todo pulso, valiosas e importantes para el desarrollo académico, social y cultural de nuestra juventud, impactan con la dejadez e indiferencia de los interesados en las mismas. La inevitable partida del Museo de Arte Moderno hacia Lima es una oportunidad más perdida, incluso para la actividad turística que no termina de comprender el gran filón de volver a ser la Ciudad de la Cultura. Trujillo ha visto extinguirse buenas propuestas artísticas y académicas.

Sin embargo, muchos ciudadanos no ven extinguir su entusiasmo. Contra huaycos, viento y marea se han organizado diversos eventos artísticos en pintura y artes visuales. Este lunes 23 se inaugura el IV Festival de Cine Peruano de Trujillo en las instalaciones del CIDUNT, espacio para ver películas que la cartelera comercial no las difundirá. Vendrá, Liliana Trujillo, actriz principal de Rosa Chumbe, film que representa al Perú en la vitrina comercial que es el Óscar. Se debatirá el futuro del cine regional para romper el acentuado ombligo centralista que corroe todas las actividades en nuestra ciudad. Y se premiará a uno de los principales pilares del cine peruano: Nora de Izcue. Trujillo debe volver al esplendor que la identificó, pero con la ayuda de todos sus sectores vitales. Un Festival para hacerlo nuestro.

domingo, 14 de mayo de 2017

MUSEO, PATRIMONIO, CULTURA, EDUCACIÓN (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO DE TRUJILLO 14 DE MAYO)

El 18 de mayo de cada año se celebra el Día del Museo, día dedicado especialmente para la recordación a la comunidad de la importancia que esta institución viva tiene para la cultura, la educación, la identidad y, a través de su preservación y crecimiento, el compromiso que todos las demás instancias de la organización social de una comunidad tienen con este. El museo acumula parte del patrimonio de una sociedad y fomenta la educación para el desarrollo del conocimiento, sensibilidad e identidad del grupo social que lo acoge. Hay museos emblemáticos en diversas ciudades y países que son el orgullo de sus habitantes y emergen de vez en cuando en conversaciones entre conocidos o para difundirlo a extraños como una de las bondades de su ciudad, región o país.  El Norte peruano cuenta con varios museos, sobre todo arqueológicos, que no solo tienen renombre nacional, sino internacional. Tumbas Reales de Sipán no es únicamente una atracción académica, sino turística que moviliza a miles de personas, connacionales o extranjeros, a desplazarse a tierras lambayecanas. Ha sido un motor económico de la Región y ha visto el surgir de otros museos que han ampliado la oferta turística de una ciudad que aún sus habitantes no han entendido en toda su magnitud. Los museos se vuelven polo de atracción que aplaca la curiosidad, el sentido histórico o el placer estético de las personas que recorren sus galerías. Y en el mundo de la museografía moderna, el museo se tornado en un espacio lúdico y divertido que atrae a muchos niños y jóvenes a sus ambientes para tener un encuentro amable con el arte o la historia. He tenido la oportunidad de ver varios museos en Israel, Francia o México que son visita obligada de toda la familia, para todos los gustos. En nuestro país, el Museo de Túcume ha sido planteado bajo esa perspectiva.

Sin embargo, nuestra sociedad entra en graves contradicciones sobre el trato que le da a su patrimonio. El mundo oficial recientemente ha “liberado” varias zonas arqueológicas de la sierra liberteña que han quedado a merced de la minería. Ministerios, gobiernos regionales o municipales, a través de diversos medios propagandísticos, venden nuestro patrimonio arqueológico a los potenciales turistas y a la vez se desentienden de este. Esta actitud nos convierte en una sociedad esquizofrénica, con individuos que manejan un lenguaje ambiguo y una doble moral. Obedecen a criterios inmediatistas, angurrientos y egoístas, más que velar por una sociedad sana, coherente, conocedora y respetuosa de sus bienes colectivos. Además, han logrado convertir el patrimonio como fuente de lucro, así se entiende por qué gran parte de este está en manos ajenas o museos del exterior. El tráfico de obras de arte o piezas arqueológicas es tan poderoso como el narcotráfico. Algunas de las tantas razones por las cuales, la cultura y la educación seguirán siendo la última rueda del coche.

domingo, 16 de abril de 2017

UNA VENTANA DE POSIBILIDADES: TURISMO EN TRUJILLO

El marte 07 de marzo tuve una primera reunión con el Comité Cívico por la Revitalización del Centro Histórico de Trujillo a invitación de Mario Falero, quien lo preside. El motivo de la reunión fue para retomar el trabajo que se hizo el año pasado con sus logros y bemoles, y la necesidad de un compromiso mayor para lograr el objetivo principal que es revitalizar el Centro Histórico de la ciudad. Durante la conversación se comentó, en ese entonces, que estábamos cerca de la fecha en la que el Niño del 25 se manifestó con tres días lluviosos que abatieron a la ciudad el mismo mes a pocos días. Y el 14 cayó la primera plaga a la ciudad. Durante seis días, la ciudad en su totalidad sufrió fuertes lluvias y, sobre todo, siete huaicos que paralizaron la ciudad. Los ciudadanos nos preocupamos de cómo guarecernos y cómo defender nuestros bienes. Una vez pasada estas riadas, la ciudad comenzó a restañar sus heridas, que tomarán buen tiempo, y la espera de un plan coherente para que de una vez por todas Trujillo cuente con un programa de prevención más coherente y que haya una decisión política más sostenible, así se tomen medidas impopulares.
La reunión se centró, sin conocer aún lo que se nos venía, en ofrecer un programa atractivo para la ciudadanía y turistas para la Semana Santa, de la cual nos separaba casi un mes.  Nos cayó la noche; sin embargo, se siguió trabajando en base a unas ideas intercambiadas por correo antes del desastre. La gestión de Miriam Gayoso alcanzó una propuesta de tres circuitos religiosos, para lo cual se había preparado ya un bosquejo de tríptico. Dos de los circuitos eran en el Centro Histórico y tenía a la Catedral como eje principal. Y un tercero que se focalizaba en cuatro iglesias de la periferia que son “iglesias de indios”.  Debido a la situación se trabajó a cierta velocidad con el fin de tener esta propuesta lista para los días jueves 13 y viernes 14, que corresponde a la fecha de Semana Santa. Con el fin de promocionar estas rutas se hizo una conferencia de prensa el viernes 07 para difusión a la comunidad. Ese día, quizá por no haber alcanzado información sobre mi CV, me “nombraron” historiador, profesión que me hubiera gustado seguir, fuera de la de lingüística; pero usurpé ese título. Mil disculpas a los agraviados.
Con el fin de monitorear este nuevo “producto”,  el día 05 se hizo un primer simulacro con la visita del primer circuito. Esta no fue del todo satisfactoria, pues hubo una serie de descoordinaciones que sucedieron, felizmente, en este espacio. Nos encontramos todos en el atrio de la Catedral con el grueso de guías de turismo gracias a la gestión de Yvette Cayetano, quien había convocado al mayor número de ellos para poder convencerlos sobre este proyecto. Hubo más responsabilidades, pero la premura y la situación generada por el estado de la ciudad hicieron que varias actividades sean suspendidas. A las 9 de la mañana, ya reunidos, nos dirigimos a la iglesia de Santa Ana. El templo se encuentra en la esquina de los jirones Orbegoso y Zepita, sin conocerse la fecha de construcción; es una iglesia de Indios, de allí que este mantiene una semejanza con compositiva con los templos análogos, como son los de Mansiche y Huamán; por eso su ubicación no se halla tan distante de una de las puertas de la antigua muralla de la ciudad (obra planificada por el ingeniero italiano Joseph Fomento): la portada de Mansiche. Está dedicada a Santa Ana, madre de María, por lo que es interesante ver una talla moderna de Santa Ana niña con sus padres, los abuelos de María.

 La iglesia es regentada por una orden colombiana de padres, a los cuales se les reconoce por el uso de larga sotana marrón. Cuenta con una plazoleta, antiguamente abierta al público, hoy luce cercada por rejas de fierro que limitan su acceso, acondicionada con bancas, acompañadas de árboles, jardines, farolas y luminarias; cuando uno accede a la plazoleta hacia la mano izquierda y hacia el fondo hay una placa interesante colocada en 1935 que rememora el cuarto centenario de la fundación de Trujillo y el compromiso que asumió la pequeña comunidad judía residente en nuestra ciudad en esos años que se comprometió a reconstruir la iglesia que quedó muy dañada por el Niño de 1925. 

Ese fenómeno fue catastrófico para todo el Norte peruano. Recuerdo la visita de una amiga que venía a investigar el primer caso de posesión demoniaca de dos monjas del Convento de Santa Clara; ella fue recibida amablemente por las madres; poco después se enteró que todos esos archivos fueron destruidos por las lluvias y huaicos de ese entonces. Recuerdo haber visto una foto ampliada de la Plaza de Armas de esos años que mostraba una alfombra negra en el piso de la misma: era una ingente cantidad de insectos que cubrían la plaza. Nos tocaba San Francisco (conocida como “El Sagrario”), pero estaban en plena limpieza. Me hubiera gustado ver las joyas que tiene este convento, diversas tallas e, incluso, se habla de una pequeña escultura de Juan de Legarda, famoso tallador y escultor quiteño de la colonia.  Lástima. 



Así que nos dirigimos a la Catedral. La información de la misma dice así: “Desde la fundación de la ciudad de Trujillo, se planifico y estableció el terreno para la construcción de la iglesia matriz, la que se edificó de manera muy reservada. Sin embargo la primera construcción fue muy simple y con la creación del Obispado de Trujillo mediante bula papal emitida por el papa Gregorio XIII en año 1577, esta iglesia se transformó en catedral, mejorando y ampliado su construcción para que esté acorde a su estatus. Esta primera iglesia fue destruida por el violento terremoto del 14 de febrero  de 1619 siendo reconstruido entre los años de 1647 al 1666. El 23 de agosto de 1967, el Papa Paulo VI elevó a esta catedral a la categoría de Basílica Menor, cuando el arzobispo de Trujillo era el padre Carlos María Jürgen. Esta es la distribución arquitectónica básica que ha llegado hasta nuestros días. El sistema constructivo en que se basa la estructura de esta iglesia es el arco, arcos ciegos, bóvedas, cúpulas, y muros portantes, el establecer el comportamiento de la estructura ante movimientos sísmicos y determinar los puntos de falla, permitirá establecer su estado de conservación. El primer ambiente es el sistema de naves dispuestas en cruz, y que están destinadas al uso público en la se desarrollan las actividades religiosas públicas.” La iglesia ha sido pintada en su interior. Tuvimos la oportunidad de ver dos cuadros: el de Santo Toribio de Mogrovejo otorgando el Sacramento de la Confirmación a Santa Rosa de Lima y el del Misterio de la Santísima Eucaristía, dividida en tres escenas (cielo, tierra e infierno), el cual generó una polémica por las diversas interpretaciones que focalizaban la atención sobre la Virgen María, cuando en realidad el punto de referencia es la eucaristía; la distribución es simétrica y marca claramente la división de los tres niveles; interesante es el trabajo de la luz en el mismo cuadro. Desconozco el autor y buceo en los libros de historia. Alguien debe de tener ese dato. Aquí terminamos el primer periplo, con diversas observaciones a corregir.




No asistí al día siguiente, que era el segundo circuito ni el lunes 10 que se iba a realizar el tercer circuito. Pero sí lo hice de manera oficial el viernes santo, el 14.  Íbamos a visitar las iglesias de las reducciones de indios. Salimos varias personas en un ómnibus en dirección a Huamán, siempre bella. La iglesia Señor de Huamán tiene una de las portadas más impresionantes del arte barroco indígena del Norte peruano. Hay toda una simbología  tan locuaz en sus hornacinas, detalles de las dos sirenas que representan la lujuria, el pecado, caso raro en el barroco peruano. La plaza debe de ser rescatada y cuidar la fachada, pues muchas palomas la están deteriorando con sus heces. En el interior hay varios lienzos coloniales que hay que restaurar urgentemente.





Luego nos fuimos a la iglesia Mansiche, llamada Divino Salvador, que, como Huamán, se construyó sobre zona pantanosa. Las lluvias del 14 de marzo la han afectado un poco. Esta iglesia tiene un bello altar y ha mantenido dos bellos retablos laterales de cedro de Nicaragua.




La siguiente iglesia fue San José que se halla en la carretera a Huanchaco, vecina a Chan Chan. El origen de la misma se pierde en el tiempo pues creen que fue una pascana obligatoria en los peregrinajes de la Virgen del Perpetuo Socorro a Trujillo. Oficialmente fue fundada en 1876. Ironías de la vida: esta iglesia fue la primera que visitó el papa Juan Pablo II en su visita a la ciudad. Todos pensaban que iba a ser Mansiche, se engalanó la plaza de esa iglesia, se hizo un parque de bustos papales e incluso un arco (ahora demolido). Aquí hay leyendas como el de la gringa (que aparece a medianoche a los conductores en la carretera) o del cura sin cabeza. El escritor Camino Calderón habla de otro origen. La iglesia está totalmente pintada en el interior. Parece ser que cada cófrade ha puesto en cada hornacina su gusto particular. Hay una pequeña talla de Cristo de la colonia.




Nuestro último objetivo fue Huanchaco, la iglesia de Nuestra Señora del Socorro. La vista sería impresionante si se pintaran todas las paredes laterales de la casi ciudad. La mirada de ladrillos sin enlucido desmerece mucho una vista panorámica atractiva con el muelle y el mar como fondo. La iglesia tiene varias tumbas en las paredes y lo interesante es obviamente la virgen cuyo rostro es nada menos que la famosa Juana la loca, esposa de Felipe el hermoso de Flandes, y de cuya dinastía vendrían los Habsburgo. Era usual usar los rostros de reinas para imaginar a una talla de vírgenes. En España se usó, por ejemplo, el de Isabel la católica, madre de Juana la loca. Otro detalle es que se halla la tumba del benefactor Dean Saavedra. Además hay un interesante exposición de un amplio y lujoso vestuario para la virgen y el niño que lleva en sus brazos. Hay además una colección permanente de cuadros del pintor Pío Ángel, quien ha hecho la representación de la vía crucis con todos los detalles huanchaqueros que podemos distinguir: la usanza de vestir, los arenales, el mar y el inconfundible cerro Campana, lugar sagrado que esperamos haya la voluntad de preservarlo e incluirlo dentro de la oferta turística de este balneario y la ciudad.






Retornamos a Trujillo, tras casi tres horas de una visita interesante. Un nuevo filón se ha abierto. Ahora a hacerlo crecer y mejorarlo. Trujillo tiene lo suyo.  

domingo, 19 de junio de 2016

LAS RAÍCES DEL ODIO (PARCIALMENTE REPRODUCIDO EN EL DIARIO LA INDUSTRIA TRUJILLO DOMINGO 19 DE JUNIO)

El reciente y lamentable suceso acaecido en la ciudad de Orlando, EEUU, o lo sucedido con el asesinato de un joven travesti  de 15 años en La Esperanza, Trujillo, son muestras de las diversas manifestaciones de los sentimientos más oscuros que movilizan el comportamiento humano. En el caso norteamericano, todo apunta a que el móvil no ha sido una acción terrorista de carácter político, sino que sus raíces se funden en el odio al otro. Este sentimiento, definido por la RAE como la antipatía y aversión hacia algo o hacia alguien cuyo mal se desea, genera una profunda repulsión hacia una persona, cosa, idea, fenómeno; e incluso provoca en la persona que odia un deseo vesánico e irracional de destruir a su objetivo. El odio se origina, generalmente, en el miedo a lo que rechaza. Para entender más el hecho que segó la vida de 50 personas tomo prestado el siguiente párrafo del ensayo Odio y racismo en la institución imaginaria de la sociedad globalizada del Dr. en Filosofía Harold Valencia López de Colombia: “El odio al otro […] se instala a través de dos canales. Un canal se dirige al otro (objeto) real, como revés de la imagen positiva de sí mismo. El otro canal refracta en odio a sí mismo, porque el YO como fabricación social es uno de los primeros extranjeros en uno mismo. Es el extranjero que habita en mí y que el proceso de socialización me ha forzado a alojar, […]. Este odio de sí mismo tiene como característica su universalidad, y el sujeto necesita desplazarlo hacia objetos exteriores para poder sobrevivir. Desde esta óptica, hay una tendencia profunda de la psique humana de encerrarse, de rechazar, odiar, de sentir con hostilidad todo lo que no es ella misma, lo otro, lo distinto lo que representa una amenaza, un peligro. Esta tendencia […] es generalmente reforzada […] al conjugarse con la otra tendencia profunda de las sociedades […] a su clausura. […], la tendencia al cierre de toda sociedad, a hacer imposibles ciertas preguntas, su rechazo y hostilidad frente a lo extraño, al extranjero. […] la podremos denominar la raíz social del odio.” (pág. 4, subrayado es mío http://www.ub.edu/demoment/jornadasfp2009/comunicaciones/3_miercoles/valencia-harold-odioracismo.pdf)
Así podemos entender que las denominadas minorías alojan el odio de los demás en los miedos colectivos, manipulados por diversos intereses como los económicos, políticos, religiosos que toman esas características de la universalidad de las minorías; estas pueden ser de toda índole: racial, lingüísticas, generacional, geográficas, de clase, de género. Simplificamos en las minorías nuestros miedos-odios fortalecidos por las construcciones sociales. Y así crecen los miedos sociales como la homofobia o la xenofobia. Da pseudo fundamentos al racismo y la intolerancia religiosa, a la discriminación laboral y a la generalización ramplona de un grupo humano. La sociedad peruana, en cierta manera, resultó siendo violenta por su pasividad ante la terrible masacre con los peruanos que reunían ciertas características: pobre, quechua hablante, indígena. NN para la mayoría de la sociedad urbana costeña.
Estos miedos y odios son aprehendidos por diversos medios: el hogar, el grupo social, los medios de comunicación e, incluso, políticas de Estado, como lo fue el Nazismo como modelo más sofisticado de exterminio. Incluso todos los niveles estructurales de esa sociedad funcionaron para justificar exterminios: desde la filosofía hasta la forma de producción (llámese campos de concentración). Los odios están latentes y esperan una coyuntura para “exorcizar sus demonios” y están presentes en nuestra sociedad: así entendemos las barras bravas o la muerte de dos policías en la sierra liberteña.

Pero es la Educación la verdadera herramienta que puede contrarrestar esos desbordes. Por eso debe de ser prioridad en una nación que quiere cerrar heridas y tender puentes a las minorías con las mayorías. Proceso lento, pero urgente. 

domingo, 24 de abril de 2016

¿PARA QUÉ CUATRICENTENARIOS? (ARTÍCULO PUBLICADO EN EL DIARIO CORREO DOMINGO 23 DE ABRIL)

Abril ha sido un mes generoso en celebraciones relevantes para las artes y cultura locales, nacionales y mundiales. Abril es mes de las letras y obituario perenne de César Vallejo. Pero este año, las letras recuerdan los cuatrocientos años de la muerte, asombrosamente coincidente, de tres grandes escritores: William Shakespeare, Don Miguel de Cervantes y Saavedra, y el Inca Garcilaso de la Vega. A pesar de que en nuestra sociedad hemos ido perdiendo el respeto por los elementos culturales constructores de la identidad y las personas que forjaron las simientes de lo que somos, es necesario rescatar del olvido general a personajes que elevaron, en este caso el idioma, las herramientas humanas para dignificarlas y hacerlas vehículo de cultura y desarrollo. Shakespeare y Cervantes son para sus respectivos idiomas el momento cumbre de su expansión y empoderamiento. Volvieron cultas sendas lenguas en ese camino que fue el Renacimiento para los idiomas modernos que se hablan en casi todo el planeta. Los consolidaron y, además, los convirtieron en inagotable y esplendorosa fuente artística y de identidad. Sus países natales han preparado diversas celebraciones, puesto que son conscientes de la relevancia de estos escritores que retrataron la psique humana. Y sus personajes se convirtieron parte de la cotidianidad de los hombres e ingresaron a nuestro vocabulario; por eso tenemos actos quijotescos o dudas hamletianas.

Para los peruanos y americanos, en general, surge la figura de Garcilaso, el primer mestizo cultural, el primer hombre que, a decir del músico francés Manú Chao, comenzó una era de la que no hay marcha atrás: el mestizaje. Garcilaso condesó los primeros demonios que arrastraron a todos los hombres y mujeres que no se adecuaban a modelos sociales, religiosos, culturales; esa suerte de parias que andaban por las colonias sin poder ubicarse en el inconsciente de la época. Se desarrollaron complejos que, 400 años después, cargamos sobre nuestras espaldas e impiden que palabras como “inclusión” y “derechos humanos” sean difíciles de aplicar en una nación que cada cierto tiempo saca esos lastres oscuros para prejuzgar al otro, a los demás, para aplastarlos. Garcilaso tendió puentes y le fue difícil. Sin embargo, dio el primer paso para unir dos realidades tan distintas, pero que convivían en él. Idealizó su pasado, sí. Pero en el contexto de su época, frente a las humillaciones que eran objeto sus medio hermanos, tuvo el valor de rescatar todo aquello que fue vilipendiado y visto como salvaje y atrasado. Así muchos continúan pensando; solo basta ver los comentarios de muchos en las redes sociales para ver qué poco hemos cambiado desde aquel encuentro de dos mundos un doce de octubre de 1492. Quisiera retomar las opiniones de Manú Chao; en una entrevista hecha en un diario limeño, dijo que estaba maravillado de Latinoamérica puesto que llevábamos muchos años de ventaja con lo del mestizaje. Espero que algún día sea cierto plenamente.