



Domingo 07: un día de
reposo y reencuentros. Había quedado con Goyo y Chino Ricardo para reunirnos
este domingo en una cebichería de Barranco. Ya habían pasado tres meses desde
mi operación y durante ese lapso había hecho una fuerte abstención de cebiches,
así que les pedí en ir a un lugar para comer uno bueno. La cebichería escogida
era El Muelle. Tomé un sólido desayuno con bastante fruta: eso me iba a traer
consecuencias, pues no había estado comiendo mucha durante las semanas
europeas. En España comí una fruta que me gustó mucho: el caqui (https://www.ecoagricultor.com/caqui-propiedades-beneficios/).
Personalmente no había probado esta fruta de origen oriental y que también se
cultiva en nuestro país (https://www.agroperu.pe/caqui-el-manjar-de-los-dioses/).
A buscarlo. Tomé un taxi para estar al mediodía en el lugar acordado. No estaba
sintiendo mucho el cambio horario, pero sí el calor. Este era abrumador, luego
de haber estado en temperaturas de 9 grados. Me vestí con la ropa más ligera
posible. Le indiqué al taxista adónde íbamos a ir para tomar la mejor ruta
posible. El paisaje de Miraflores a Barranco ha cambiado mucho en los últimos
años. El taxista decidió tomar la ruta por Av. Reducto y había una serie de
edificios y espacios que me hacían recordar los años que viví en Lima (18 en
total). Pese a ser domingo, el tráfico era un poco complicado; esa es una de
las pesadillas de esta ciudad. De todas maneras, llegué a tiempo y Goyo ya
estaba en el lugar. Había ido temprano, pues el lugar se llena rápidamente.
Pese a que él es un habitúe del lugar, no garantizaba el hecho de que pudieran
guardar por mucho tiempo una mesa vacía. Cuando llegué, ya había una cola. Nos
fundimos en un fuerte abrazo y comenzamos a charlar sobre tantas cosas. El
problema es que yo había venido de Europa con un fuerte resfrío y eso iba a
acarrear problemas con uno de mis objetivos: revisión de mis cuerdas vocales y
visita a la foniatra. Había hablado con Saúl Suárez, el doctor quien me operó la
cuerda vocal derecha, y me comentó que con el catarro que tenía, iba a ser
difícil tener una revisión correcta del estado de mis cuerdas vocales; lo mismo
iba a pasar con la foniatra. Ante esa realidad, me limité a disfrutar los días
que iba a estar en Lima, o iba a intentar hacerlo como veremos luego. Volvamos
al restaurante: https://es.restaurantguru.com/El-Muelle-Miraflores.
Mientras esperábamos a Chino, tomamos una cervecita y Chino llegó a la hora que
nos había indicado. Otro fuerte abrazo y ahora sí: al ataque. Le había pedido
que no nos hicieran un cebiche/ceviche tan picante; los tres ya estamos
acusando estragos de la edad. ¿Cuál es el cebiche/ceviche original? Gran dilema:
he comido ceviches/cebiches diversos en Piura, Tumbes, Chiclayo, Trujillo,
Chimbote, Lima y hasta en Cuenca, Ecuador (con tomate) y cada uno tiene su
exquisitez y complejidad. Pero sí hay personas que te saben hacer la
combinación perfecta para que cuando pruebes el primer bocado, pases
automáticamente al nirvana. Aquí la historia de nuestro plato bandera: https://rinconperuano.com/gastronomia/origenes-del-ceviche.
Pero la comida no es sólo sentarse delante de un plato y comenzar a devorarlo,
sino cómo maridas este con unos buenos tragos, una buena conversación y un
lugar simpático. Recuerdo una vez haber comido un cebiche/ceviche sublime en
Piura, en Don Pedrito, un restaurante en el que preparan el cebiche/ ceviche
delante de los comensales. Y sabe a gloria (https://www.tripadvisor.com/Restaurant_Review-g667820-d8757115-Reviews-Cebicheria_Pedrito-Piura_Piura_Region.html).
Un problema grande es la higiene y la conservación y frescura de los productos
a consumir como el caso de los mariscos, que en verano se deterioran rápido. En
fin. Felizmente todo salió bien, pedimos chaufa de mariscos, además. Una vez terminado
nuestro almuerzo, ya casi a las 3 pm salimos a caminar por Barranco a buscar un
postre. Nos dirigimos hacia el Parque Municipal de Barranco por la Av. San
Martín, cruzamos el acceso al Puente de los Suspiros, el cual había construido
por el tío de un amigo que recientemente falleció. El conjunto la Ermita, la Bajada
Baños y el puente hacen de este lugar uno de los más atractivos de Lima y uno
de los más llenos de gente, también (https://miviajeporperu.com/lima/puente-de-los-suspiros-barranco/#google_vignette).
He ido varias veces cuando vivía en Lima y luego en esporádicas visitas fuimos
a sus restaurantes y bares (https://www.paquetesdeviajesperu.com/puente-de-los-suspiros-barranco-lima/).
Pero debo decir que nunca he entrado a la Ermita, punto pendiente (http://blog.pucp.edu.pe/blog/juanluisorrego/2011/05/31/la-ermita-de-barranco/).
Al llegar al Parque dimos la consabida
vuelta (https://munibarranco.gob.pe/atractivos-turisticos/).
Hacía años que no iba por sus instalaciones. Bajamos por la Pedro de Osma para
ir a una heladería: Blu, il Gelato del Barrio. Pero había una cola que daba
vuelta a la esquina. Cambio de planes. Subimos por Av. Grau y vimos el tradicional
bar El Juanito, lugar de muchos encuentros; historia de la ciudad y también
personal (https://es.restaurantguru.com/Juanito-Barranco-Barranco-District).
Seguimos la Grau hasta llegar al tradicional pasaje Ríos en la que ves una
palmera inmensa. Seguimos caminando cuando Goyo me indica en dirección hacia el
Cantarrana, restaurante bar que abrieron en los últimos años de vivir en Lima.
Entramos a una farmacia para comprar algunos medicamentos para nuestras gripes.
Caminando unas cuantas cuadras más y nos encontramos con un lugar muy simpático
con moda vintage cinematográfico: Camerino Caffe (https://es.restaurantguru.com/Camerino-Caffe-Barranca-District.
Un buen postre cerró nuestra marcha de ese día. Tomamos un taxi para el
departamento de Goyo donde estuvimos un rato conversando hasta que decidimos partir.
Chino tenía trabajo pendiente y yo iba a mi hotel que no está lejos del dpto.
de Goyo. Así terminé mi primer día activo en Lima.








Lunes 08 de enero: Como no
tenía los apremios de las consultas médica, decidí hacer visitas a diversos
lugares de Lima. Y me quedaron en el tintero. Primero decidí comprar unas
sandalias y un gorro no tan calurosos. También bloqueador solar. Las tiendas abren
tarde. Logré comprar una gorra muy buena en una tienda en calle Schell, pero la
tienda de zapatos Hush Puppies y Saga no abrían sino hasta las 11 am. Mucho
tiempo valioso perdido. Decidí ir a la tienda Bata en Av. Ricardo Palma, retorné
al hotel para dejar los zapatos anteriores, tomé mi maletín con las cámaras y
me embarqué en un taxi al Museo Larco. Con el taxi fui por las antiguas rutas que
me eran conocidas, pues eran rutas que solía tomar cuando vivía en Av. Panamá o
en Av. 28 de Julio hacia Av. Pezet. Nos fuimos por la Av. La Marina hasta
llegar al ingreso del museo por la calle Navarra. Hacía muchos años que no
visitaba este museo. Mi primera y única visita fue en los años 80. Este museo
se encuentra en una bella casa que hace recordar a las casas haciendas del Norte
peruano. Recuerdo que la disposición de las piezas expuestas era diferente a la
que vemos ahora; esta tiene una distribución interesante y una mejor museografía:
https://www.museolarco.org/. Este
museo tiene una gran cantidad de videos educativos que podrían ser utilizados
en clases: https://www.youtube.com/c/MuseoLarcoVideos.
La visita, si la haces con calma, te puede tomar un par de horas. La sección de
piezas de oro es muy buena, pero las piezas de cerámica moche son insuperables.
La cerámica moche, sus famosos huacos, son obras maestras tanto de formas escultóricas
(huacos retratos) como pictóricas, geniales gráficos del mundo moche, que se
ven tan locuaces (https://ceramicasperu.com/cultura/moche-o-mochica/).
Al igual que su metalurgia. La sección de huacos eróticos está mucho más
atractiva de aquella que vi hace una buena cantidad de años. Los moches
describieron su vida cotidiana en sus cerámicas, su cosmogonía, su sexualidad,
su sentido de la guerra. Una cultura tan locuaz: https://www.youtube.com/watch?v=GKw4MGBL-QM.
Hay otras piezas más de otras culturas del Perú precolombino, pero las piezas
mochicas son de incalculable valor arqueológico. Cuando salía, pedí en la entrada
un taxi para poder ir a la Catedral, pero no pensé que llegara tan rápido. Vi
la tienda del lugar, pero no me dio tiempo para buscar algún catálogo del
museo.






El chofer tomó el camino por la Plaza
de la Bandera y fue por un camino para poder entrar por la Plaza Ramón Castilla,
una ruta inusual; pero la Plaza de Armas se encontraba cerrada; bajamos por el Jr.
De La Unión y me dejó a la altura del Palacio de Gobierno, el cual debo de visitar
un día que me quede más tiempo en la ciudad. Tuve que bordear la plaza para
llegar a la Catedral, la cual estaba abierta y ofrecía visitas guiadas. Llegué
justo cuando había empezado una: https://www.elartecristiano.com/catedral-de-lima.
La visita fue bastante instructiva y demostraba la historia de la ciudad. Tal como
había visto en Burgos y Palencia, las capillas eran una muestra del poder
económico de varios sectores económicos de la sociedad de entonces. La
edificación ha recibido muchas modificaciones debido a los fuertes terremotos.
Leyendo la novela histórica Una historia breve, extraña y brutal de Dante
Trujillo, en esta se cuenta la historia del asesinato del presidente Balta y el
posterior linchamiento de los hermanos Gutiérrez, cuyos cuerpos fueron colgados
en una de las torres de la catedral. También había leído, como una interesante
anécdota, que los planos de la catedral limeña corresponden a la de la ciudad
de Puebla y viceversa; en otras palabras, la edificación que hay en Puebla,
México, debería corresponder a Lima; pregunté al respecto y me indicó que no
era cierto (https://mexicotravelchannel.com.mx/estados/20210914/catedral-de-puebla-historia-arquitectura-fachada/).
Aquí datos arquitectónicos: https://www.urbipedia.org/hoja/Catedral_de_Lima.
Bajamos a las catacumbas y luego visitamos el museo con un rico patrimonio de pinturas,
esculturas, trajes y otros. Algunas paredes están adornadas con azulejos (https://museosnacionales.com/peru/museo-de-arte-religioso-de-la-catedral-de-lima/).
En cierta forma, después de haber estado en catedrales como las de Palencia y Burgos,
no me sentí tan impresionado del tesoro arquitectónico en un inicio, pero a
medida que íbamos avanzando me fui entusiasmando de la belleza del lugar, sobre
todo capillas como la de la Evangelización, el antiguo órgano ya en desuso (el
de Arequipa sí está activo), el mausoleo de Francisco Pizarro, la historia de
nuestro país a la larga (https://www.youtube.com/watch?v=ajFHRT-_3tE&t=5s,
https://www.youtube.com/watch?v=exreKuR7T74,
https://www.youtube.com/watch?v=qfeC3xUmlvY).
Ya el hambre me apretaba, por lo que me fui a buscar algún restaurante cercano.
Me fui al Embarcadero 41 (https://www.embarcadero41.com/#!).
Pedí un arroz con mariscos y un buen jugo. Una vez terminado me dirigí hacia
San Pedro, pero estaba cerrado al igual que el Museo del Banco Central de la Reserva
(https://www.bcrp.gob.pe/museocentral/el-museo.html),
museo que visité en los años 80. Vi unas bellas pinturas de Hernández y Merino,
además de la colección numismática (https://mucen.bcrp.gob.pe/mucen/).
He visitado los museos de Trujillo y Piura, cuyas instalaciones están en bellas
casas de las respectivas ciudades. Me dirigí hacia San Francisco con el fin de
poder ingresar, pero vi un desorden descomunal tras el derribo del cerco perimetral
en 2022 (https://elcomercio.pe/videos/pais/cercado-de-lima-sacerdotes-protestan-por-obras-en-iglesia-san-francisco-nnav-video-amtv-noticia/#google_vignette,
https://www.aciprensa.com/noticias/92182/autoridades-se-pronuncian-por-derribo-de-cerco-de-historico-templo-franciscano,
https://larepublica.pe/sociedad/2022/09/15/poder-judicial-ordena-a-la-municipalidad-de-lima-reconstruir-el-muro-de-la-iglesia-san-francisco).
Espero que se solucione este problema, pues el caos aleja a los visitantes. Estaba
muy cansado, el calor me molestaba y las nuevas sandalias me estaban sacando ampollas.
Decidí tomar un taxi para ir a mi hotel. Habíamos quedado en vernos por la
tarde para reunirnos varios amigos de la PUCP, pero Goyo había dado positivo en
COVID. Eso me alertó y cancelamos todo. Decidí descansar. No me sentía bien
estomacalmente. Al día siguiente iría a hacerme prueba del COVID.




Martes 09 de enero:
prácticamente mi último día. Tomé un desayuno con poca fruta. Tenía la flora
muy activa por haber abusado de tanto comer fruta. Había quedado con Goyo para
dejarle una inmensa casaca que había traído desde Portugal. Preparé mis maletas
y había hablado con una amiga, Paloma, para reunirnos por la noche, pero le
comenté sobre mi situación de contaminación. Me entusiasmó de todas maneras
para ir. Fui temprano a dejar la casaca en la portería del edificio de Goyo y
luego me fui a la Clínica Suiza para hacerme prueba del COVID. Cerca de ahí
tomé un delicioso y barato menú. Me fui caminando por la Av. Arequipa hasta
llegar al Centro Cultural Ccori Wasi de la Universidad Ricardo Palma. Ingresé para
ver dos exposiciones, una muy interesante. Las dos exposiciones: El Día
Internacional del Diseño Industrial 2023 y la de José Luis Carranza, esta última
bastante inquietante (https://www.artsy.net/show/klaus-steinmetz-contemporary-art-centro-cultural-ccori-wasi-exposicion-jose-luis-carranza-2023-2024?sort=partner_show_position).
Espero que la exposición haya sido visitada por muchas personas, la cual había
sido curada por Manuel Munive Maco. Aquí información del pintor: https://cosas.pe/cultura/67734/jose-luis-carranza-historia-natural/.
Luego me dirigí a la galería Miró Quesada de Miraflores, pero estaba cerrada.
Vi una puerta aledaña y pedí al cuidador que me dejará ver parte de la
exposición Erosión de Luis Sifuentes (https://www.miraflores.gob.pe/miraflores-inaugura-erosion-exposicion-de-luis-sifuentes-donde-la-piedra-se-transforma-en-arte/).
Pese a no contar con la correspondiente iluminación, las piezas eran notables,
sobre todo los tallados de piedra. Lo que me extrañó era el hecho de que la
sala estaba cerrada; luego me he ido enterando que el actual inefable alcalde
de Miraflores, declarado enemigo de manifestaciones artísticas, decidió cambiar
las “funciones” de esta sala (https://www.infobae.com/peru/2024/02/10/vecinos-de-miraflores-rechazan-que-reconocida-galeria-de-arte-luis-miro-quesada-se-haya-convertido-en-oficina-de-cobros-municipales/).
Para cerrar, me fui a la librería Estruendomundo donde compré algunos libros
como La vida de Chejov de Irène Némirovsky y Perú Batalla, el tomo 1 de Gastón
Gaviola (anteriormente me había comprado el tomo 2). La Némirovsky fue revalorada
tras su muerte en Auschwitz (https://www.lecturalia.com/autor/385/irene-nemirovsky)
y Gaviola se le ha dado por escribir historias apasionantes de diversos
personajes (algunos conocidos, otros no) que participaron en las muchas
batallas y combates que hemos tenido en nuestra complicada historia (https://diariocorreo.pe/cultura/gaston-gaviola-la-historia-nunca-es-aburrida-si-sabes-contarla-noticia/#google_vignette,
https://www.youtube.com/watch?v=SYJJ9giplXA).





Ya por la noche fui a casa de Paloma
para encontrarme con viejos amigos del colegio León Pinelo. Una buena
conversación y buena comida (Paloma es buena anfitriona) me permitió cerrar mi
estadía en Lima. Al día siguiente me iba a Trujillo. Así terminé mi viaje europeo
y limeño.