Viernes 01 de
febrero. Luego de visitar la Catedral, haber visitado la Giralda, el hermoso
Patio de los Naranjos y salir por la Puerta del Perdón, nos dirigimos al
Archivo de Indias. Cabe destacar que la última zona visitada, esto es, la
Giralda hasta la Puerta del Perdón son los restos de la gran mezquita que se
había construido durante la ocupación musulmana. Otro detalle es que dicha
mezquita se siguió usando como iglesia hasta el terremoto de 1356. Pero también
uno descubre que no fue el único terremoto que ha azotado la zona. Aquí dejo
esta página que nos da información breve: https://sevilla.abc.es/sevilla/sevi-cinco-terremotos-destructivos-sufrio-sevilla-201604052325_noticia.html.
Salimos hacia la calle
Alemanes en dirección a la Avenida de la Constitución. Rodeamos el edificio
religioso, pasamos al lado de la Parroquia del Sagrario, que es la única zona
de culto en la actualidad de todo el complejo religioso dedicado al turismo
(altamente rentable, por cierto). Nos íbamos al Archivo de Indias. Durante el
viaje, una amiga, Paloma Lohmann, me había dado consejos de ir a este sitio por
el valor histórico y por el hecho que este espacio acoge los bustos de ilustres
investigadores que visitaron y trabajaron en sus instalaciones, como es el caso
del papá de Paloma, Don Guillermo Lohmann Villena. Y era cierto. Con Carmen
estuvimos viendo estos bustos en el que hay de otro peruano, Raúl Porras
Barrenechea. Este edificio era una lonja comercial, pero el rey Carlos III
(1785) convirtió este edificio en un gran archivo que reuniese toda la
información de las Indias (América y Filipinas). Por eso es el lugar ideal para
investigadores de Humanidades (historia, antropología, lingüística, sociología,
etnología, paleografía, entre otras) y ciencias afines (economía, geología,
sismología, etc..) que quieren ahondar en una región, país o área. Aquí más
datos: https://sevillasecreta.co/archivo-de-indias/. En
realidad, es la memoria de muchos países americanos. Por esa razón, muchos
historiadores visitan sus vastas instalaciones. El edificio de dos plantas
alberga archivos, mapas y exposiciones. Revisando la cartografía busqué la de
Trujillo y estaba con otras ciudades peruanas como Lima, Ayacucho. Esta es la
página oficial: https://www.culturaydeporte.gob.es/cultura/areas/archivos/mc/archivos/agi/portada.html. Aquí
un video: https://www.youtube.com/watch?v=Z3PqkFM2vGY.
Salimos del Archivo ya un poco
cansados y con mucha hambre. Carmen propuso ir a un restaurante que quedaba a
la otra orilla del Guadalquivir. No era una caminata extensa, además íbamos ir
viendo la ciudad; ya era un poco más de las 2 de la tarde y muchos lugares
estaban llenos de turistas. Nos aventuramos a ir al Maritrifulca, que se halla
prácticamente sobre el Puente Isabel II en la orilla sur. Bajamos desde la
catedral rumbo a la calle Adriano para llegar a nuestra meta. Luego me iría a
enterar que por ahí estaba la plaza de toros de La Maestranza. Llegamos al
Paseo Cristóbal Colón. Llegamos hasta el puente para cruzar el Guadalquivir.
Cruzamos lentamente este río por cuyas aguas circularon tantas embarcaciones
hacia América y en ellas iban nuestros antepasados para mezclarse con toda la
gente que iban a conformar las nuevas naciones. Algún día quisiera participar
en ese hermoso proyecto que se llama Momondo para ver de dónde vengo. Es un
proyecto que nos cambiaría la vida a tantos: https://www.youtube.com/watch?v=tOLgSi8awdk. Llegamos
a nuestro objetivo: el lugar se veía fantástico, pero había que hacer
reservaciones. Carmen y yo retornamos por nuestros pasos, y en la misma calle
Adriano con Pastor y Landero encontramos un restaurante, Bar Tendido 1, que nos
atendió almuerzo pese a la hora. Felizmente aquí no son tan estrictos con los
horarios como lo es Francia. Almorzamos bien. Barriga llena, corazón contento.
Seguimos por la misma calle Adriano una vez culminado nuestro almuerzo. A veces
me detenía en algunas tiendas para ver trajes de luces, vi una que tenía para
niños. Todo sobre la avenida misma. Nos internamos por las estrechas calles
sevillanas hasta encontrarnos una pequeña tienda de recuerdos turísticos en la
que me compré un par de polos con detalles de esta España vieja. Seguimos
nuestra ruta de caminantes, viendo algunos edificios emblemáticos como el hotel
Alfonso X o el palacio de San Telmo. Llegamos a una zona que acogió la Feria
Iberoamericana en 1929, razón por la cual muchos países americanos, entre ellos
el Perú, construyeron pabellones con detalles de sus países. El peruano es
usado actualmente como Consulado de nuestro país: tiene muchos detalles incas y
es considerado una joya: https://www.youtube.com/watch?time_continue=197&v=4jzGoTQpQrI. A
causa de esta Feria, Sevilla cambió en su rostro arquitectónico, pues se
edificaron una serie de grandes monumentos siendo uno de ellos nuestro
siguiente objetivo: la Plaza de España. Muchos de estos monumentos se han
mantenido y son parte obligada de la visita
a esta ciudad: https://www.visitarsevilla.es/que-ver/monumentos/monumentos-de-la-exposicion-iberoamericana-de-1929/. Al
llegar a esta plaza no pensé hallar obra de tal envergadura. Toda España está
representada en sus regiones y provincias. Cada una de estas áreas tienen
imágenes de personajes, lugares o historias más representativas de las mismas. Algunas
de estas son verdaderas joyas. Como es una plaza pública llena de turistas, hay
diversos músicos y bailarines ofreciendo su arte para el apoyo de unos cuantos
euros. Por ejemplo, vi un grupo de bailaoras y un solo bailaor, el cual tenía
un aire muy gitano. Verlos fue muy gratificante. Viendo este espectáculo nos
sorprendió un repentino aguacero. Esperamos un momento para que escampe y poder
dejar este lugar usando la avenida Isabel la Católica y desde ahí hacia la
avenida El Cid pasando al lado del parque Prado. Aquí hay más datos: https://rutacultural.com/plaza-espana-sevilla/. https://sevillasecreta.co/plaza-de-espana/.
Llegamos a la plaza Don Juan de Austria. Una
cosa que me sorprendió la cantidad de naranjas que estaban por los pisos,
algunas reventadas y un poco fermentadas. Temporada de esta fruta que caían de
los naranjas que hay en avenidas y plazas. La distancia entre nuestra última
visita y nuestro hotel era muy corta. En realidad, era un hotel muy bien
ubicado.
Había hablado con un amigo peruano
temprano, Mario Falero, quien radica en Sevilla ya hace muchos años y estuvo por
un breve paso por Trujillo. Habíamos quedado en vernos más tarde para ir de
copas. Carmen y yo nos preparamos para una última salida. El punto de encuentro
fue en el Ayuntamiento a las 7 pm. La idea era comer algo en los numerosos bares
simpáticos que tiene la ciudad, pero antes recorrer algunos puntos neurálgicos
de esta vieja ciudad que tiene grandes festividades como la Semana Santa, la
que cantó Antonio Machado y Joan Manuel Serrat con La Saeta. Aquí dos
versiones: https://www.youtube.com/watch?v=4qWuJ7sjKTk,
la de Serrat; aquí esta versión con Camarón y Tomatito: https://www.youtube.com/watch?v=NLbxlViBIk4.
Esta es la Sevilla turística también. Por este motivo nos fuimos a una de las
iglesias más esplendorosas: la del Divino Salvador. Llegamos cuando estaban
realizando un oficio. Es interesante la vida en España: hay mucha actividad nocturna,
mucha más de la que pueda haber en otros países que he visitado, incluido el Perú.
Incluso hay servicios religiosos a horas poco frecuentes como 9 pm. en pleno
invierno. La visita fue un poco corta, pues queríamos ir a otros lugares. Ingresamos
por un patio lateral que, según leía, son los restos de un lugar visigodo y
durante la presencia musulmana, fue una mezquita. El altar mayor concitó mucho
mi atención, una verdadera joya del barroco. Aquí detalles del mismo: http://www2.ual.es/ideimand/retablo-del-altar-mayor-iglesia-del-divino-salvador-sevilla/.
Aquí más datos y luego un video oficial: http://leyendasdesevilla.blogspot.com/2011/03/iglesia-del-divino-salvador.html,
http://www.catedraldesevilla.es/iglesia-de-el-salvador;
video: https://www.youtube.com/watch?v=0xTI83wm5zU.
Fue una grata visita. Luego, Mario nos propuso visitar uno de los lugares más
interesantes de Sevilla: el Metropol Parasol, llamado también la Setas (Hongos).
La propuesta de intervención de la Plaza de la Encarnación es muy interesante,
dinámica y armoniosa. Es una construcción futurista para una ciudad tradicional
de riesgos y atrevimientos. Mario nos invitó a subir para caminar por las
sendas que tiene este edificio en su parte superior. El problema era el frío
que nos calaba los huesos. La caminata, por eso, fue rápida para no terminar
congelados. Descendimos para ir a otra iglesia. Aquí más datos de esta obra: https://www.archdaily.pe/pe/722852/metropol-parasol-jurgen-mayer.
Esta es obra descripción más de arquitectos: https://es.wikiarquitectura.com/edificio/metropol-parasol/.
Y, por último, un video: https://www.youtube.com/watch?v=UND5RNsKPHo.
De ahí partimos hacia Plaza San Pedro y su pequeña iglesia, en la que había otro
culto a esas horas. Y bueno, nos quedaba ir de copas y comer tapas. Nos fuimos
primero a un simpático bar en el que nos encontramos con gente de cine, pues los
premios Goya se iban a entregar al día siguiente (https://www.premiosgoya.com/notas-de-prensa/los-premios-goya-2019-se-celebraran-en-sevilla/);
estuvimos conversando de cine, comiendo y bebiendo. Buenas copas de vino nos
acompañaban en una amena conversa con dos personas de cine, Carmen, Mario y yo.
Cerramos nuestro periplo con la visita a un bar muy simpático: el Garlochí.
Una
noche movida para despedir a Sevilla como debe de ser. Nos despedimos de Mario,
Carmen y yo nos fuimos a dormir, pues al día siguiente nos íbamos a Madrid.