Sábado 19 de enero. Dejamos
Carcasona con rumbo hacia Montpellier. En el camino pasamos, sin entrar, por Narbonne,
Béziers, y dos lugares que me llamaron mucho la atención: Agde y Sète, lugares
de verano mediterráneo. Melissa me comentaba que estos son bellos balnearios,
llenos en verano. He aquí un poco de información sobre la griega Agde, un balneario
de lujo y del nudismo, (https://tusdestinos.net/cap-d-agde-francia-languedoc-roussillon-video/)
(https://viajestic.atresmedia.com/destinos/cap-d%E2%80%99agde-escapada-perfecta-mediterraneo-frances_2016030157ed2bdb0cf2aa7f694ea214.html#);
y Sète (https://www.youtube.com/watch?v=3GdY_LVKp6E)
(https://www.youtube.com/watch?v=kXhzkrYcE6I).
Imagino los balnearios como Huanchaco o Pimentel para tener una mejor visión de
sus potencialidades. En fin.
Seguimos nuestro camino hacia
nuestro destino. Llegamos un poco tarde, pero llegamos. Melissa se comunicó con
Olivier para llegar a su casa, me pasó su celular para poder hablar con él. Ya
está instalado en esta ciudad con Ibrahim, inmersos en el mundo universitario.
Es una ciudad de origen medieval, muy cargada de historia. Este fue un lugar de
gran presencia protestante, los hugonotes; hubo una lucha enconada por
recuperar esta ciudad durante las guerras religiosas, tras la famosa masacre de
San Bartolomé en la que muchos protestantes fueron masacrados. Aquí tenemos varios
datos de un periodo que puso en peligro la integridad de Francia: (https://redhistoria.com/las-guerras-de-religion-de-francia/)
(https://sobrefrancia.com/2013/03/18/origen-y-causa-de-las-guerras-de-religion-de-francia/).
El rey Luis XIII recuperó esta ciudad a la corona francesa. Aquí lo de la
famosa matanza de San Bartolomé (https://academiaplay.es/brutal-matanza-san-bartolome/) ( https://www.abc.es/historia/abci-implicacion-espanola-matanza-san-bartolome-boda-roja-dejo-7000-muertos-franceses-201610050055_noticia.html). Además fue el punto de encuentro entre el Mariscal
Pétain y Francisco Franco durante la Segunda Guerra Mundial (http://andaquepaque.blogspot.com/2017/10/franco-y-petain-los-dos-patitos.html).
La figura del mariscal Pétain sigue siendo muy polémica y en las celebraciones
del año pasado por los 100 años de la culminación de la Primera Guerra Mundial,
Macron desató una tormenta al querer reconocer su valía durante ese periodo,
pese a su traición en la Segunda Guerra (https://www.larazon.es/internacional/petain-el-traidor-que-fue-un-buen-soldado-OB20478666).
Interesantes historias se tejen en una ciudad. Otro dato interesante es que
esta ciudad tiene un crecimiento sostenido en cuanto a población y que recibió
muchos franceses que dejaron Argelia una vez esta independizada. La ciudad está
muy vinculada a Luis XIV, el famoso Rey Sol.
Una vez culminado el opíparo
almuerzo hecho por nuestros anfitriones, Olivier decide llevarnos a conocer el
casco viejo de la ciudad. Ahí tendremos un encuentro singular. Llegamos a encontrar
espacio para dejar el auto e irnos al acueducto Saint Clément (se le conoce también
como Des Arceaux). Este acueducto es una construcción del siglo XVIII y está
conectado con la torre de agua (Chateau d’Eau) que marca el inicio (o fin,
depende la referencia) de la Plaza Real de Peyrou en la que se halla una estatua
ecuestre del Rey Sol. Luego de algunas fotos, nos dirigimos hacia el Arco de Triunfo,
obra construida en el siglo XVIII, hecha por el arquitecto François D´Orbay. Hay
varios detalles con el fin de glorificar al famoso rey y en un detalle lo vemos
encarnando a Hércules. En la parte central está el escudo real con las flores
de lis. Esta construcción es perfecta en simetría. Tomamos la Rue Foch y no muy
lejos del Arco está el Palacio de Justicia. De pronto, Olivier nos pide
ingresar por las retorcidas calles medievales de esta ciudad para dirigirnos a
la Catedral de San Pedro (Cathédrale de Saint-Pierre de Montpellier), un imponente
edificio gótico. Cuenta con dos torres y un baldaquino en la portada principal;
esto es lo único antiguo que queda de este edificio, el resto fue renovado tras
los daños que recibió durante las guerras religiosas, en este caso, por manos
protestantes. Una pena que esta no estuviese abierta; por esa razón, nos dirigimos
hacia el otro edificio, la vieja escuela de medicina de la ciudad, la que se
halla en lo que fue el convento y claustro de esta antigua catedral. Esta facultad de medicina
es la más antigua del mundo y data del siglo XII, formalizándose en el XIII. Para
tener una idea de su importancia basta decir que aquí estudiaron personas como
Nostradamus y François Rabelais, nada menos. Hay una placa en mármol en la que
encontramos una lista de los primeros docentes en el siglo XII.
Sería bueno leer
esta información sobre antiguas universidades de medicina: https://encolombia.com/libreria-digital/lmedicina/hmedica/historiamedica-salermo/.
Quisimos entrar al Museo y Conservatorio de Anatomía, pero el tiempo nos ganaba.
Llegamos tras un buen trecho a la Place de la Comédie y nos encontramos con los
chalecos amarillos (Gillets Jaunes) en plena revuelta. La gente corría por temor,
pero a mí me parecía excitante: estaba viviendo la historia cincuenta años
después del famoso Mayo del 68. Hicimos una pequeña caminata y nos encontramos
con una vieja sala de cine llamada Pathé, como los viejos estudios. Ya
internados en la vieja ciudad vimos las vitrinas de una juguetería, un placer a
los ojos. Retornamos hacia el lugar donde Olivier había dejado el auto, pues
teníamos que ir todavía hasta Millau y eso implicaba una hora por lo menos. Llegamos
a recoger el auto y nos enrumbamos a Millau. Un fuerte abrazo fue la despedida
para un hasta pronto.
Llegamos a Millau casi a las 9
de la noche, luego de una larga jornada.