La carrera electoral va tomando forma tras
diversas campañas en las que se lanzaron candidaturas y se convocaron a
potenciales votantes, muy escépticos todavía, para captar sus sufragios
dubitativos. Esta campaña tiene varios rostros desgastados en esta nueva faena
electorera, mientras enfrentamos un franco desmoronamiento institucional de
muchas entidades de los poderes del Estado, del cual hemos sido testigos en la
última década y que diversos analistas nacionales e internacionales describen correctamente como “Estado fallido”. Algunos actos merecen una interesante
lectura, pues refleja el caldero social y político de nuestro país. Todo esto
aderezado por las mentiras de los candidatos que prometieron permanecer en sus
cargos o que el apellido de tal personaje no iba a aparecer en esta contienda,
como promete serlo. Lo de Keiko Fujimori es, también, un gesto bastante
interesante: lanza su candidatura en dos bastiones políticos, los de APP y el
APRA, partido este último que se lanza al ruedo con un posible nuevo rostro. Un
abierto desafío para un espacio caracterizado por una suerte de compromiso
político anodino, pero marcado por un fuerte avance del crimen organizado.
¿Existirá una relación entre ambas situaciones? FP intenta captar a un
electorado que se siente, nuevamente, estafado por su ex Gobernador Regional.
Pero la situación actual tiene nuevos matices debido a los destapes de
corrupción (el más reciente de Qali Warma) en las altas esferas gubernamentales
regionales. Entre prebendas y contratos oscuros que han dejado a Trujillo y la
Región damnificados, un interesante bolsón de ciudadanos descontentos
liberteños puede cambiar el panorama electoral el 2026. APP está apostando a
las cámaras que a la presidencia. En este espacio de captación de votos entra a
tallar el APRA, quien perdió el “Sólido Trujillo” ya hace dos décadas. Su
reaparición apelará a lo atávico en espacios donde tuvo una presencia relevante
y que ahora ha sido desplazado por FP, APP y tentativamente RP. De continuar la
campaña de demolición informativa en medios contra APP, esos votos buscarán
nuevos rumbos y esa miel electoral es apetitosa en esta campaña. Los partidos
nombrados saben que sus campañas en el Sur peruano serán conflictivas y sus
mítines serán una prueba de fuego tras haber visto con lo que le sucedió a
Phillip Butters en Juliaca o la visita clandestina de Keiko a la selva para sus
filmaciones con el fin de hacer spots electorales. Pero, volviendo a la sombra
política que nos envuelve, los analistas políticos son como la esposa del
doctor que no cae, como los demás habitantes, en una ceguera temporal que van destruyendo
las bases de la sociedad, según la novela de Saramago. Envueltos de bulos,
escándalos, insultos y violencia, los electores podemos ser autores de nuestra
propia destrucción al preservar la misma corrosión que está destruyendo nuestra
débil democracia representativa.

3 comentarios:
Realmente no hay mucho dónde escoger. Creo que otra vez veremos cómo la gente no vota por un candidato sino vota por quién sea para que el rival no gane.
Me gusta mucho el título de esta entrega y las maravillosas fotos con las que acompañas el artículo muy reflexivo, Gerardo… Ahora tan dispersos y con intereses menos nobles, ojalá se vea un real cambio, porque eso es lo que necesitamos🫡
Leyendo esto pensé que fue hablando Gerardo de la situación en Francia! Seria de nuestros tiempos que la debilidad remplace la democracia?
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