Datos personales

Trujillo, La Libertad, Peru
Un espacio para mostrar ideas y puntos de vista ligados al arte, a la cultura y la vida de una sociedad tanto peruana como universal

sábado, 20 de marzo de 2010

FRANCIA CONTADA POR OTROS

En la búsqueda de la verdad, una de las primeras ciencias afectadas es la historia. Esta ha sido tratada muchas veces desde perspectivas diversas y algunas de ellas faltan a la verdad. El interesante libro LA HISTORIA OCULTA DEL MUNDO de Paul Koch, nos muestra una larga lista de eventos de la humanidad en la que la verdad ha estado ausente, sea por una intención evidente (las más de las veces), sea por una actitud inocente del autor de la documentación. Además en dicho libro se aborda un icono muy conocido en el mundo de la fotografía, la cual ha sido motivo de reflexión desde diferentes frentes históricos. La foto en cuestión es EL MILICIANO de Robert Capa, la cual muestra a un combatiente republicano que cae herido de muerte en una batalla en Cerro Muriano en Córdoba durante la guerra civil española. Esta foto ha sido puesta en duda su autoría y su originalidad por mucho tiempo. La foto en cuestión es incluida en el libro ROBERT CAPA, LA COLECCIÓN DEFINITIVA, incluida en otras fotos más compiladas bajo el, patrimonio Cornell Capa/Magnumphotos. Sobre el hecho en sí, su veracidad, ésta ha sido cuestionada y no hay pocos que dicen que dicha foto fue un montaje, tal como lo denunció el británico Philip Knightley en 1975; la fuente es el periodista O.D. Gallagher a quien el mismo Capa le habría comentado sobre el montaje. Pero en España, recientes estudios aparecidos en la revista HISTORIA DE IBERIA VIEJA (No 56) sugieren que el autor de dicha foto no es el mismo Capa, sino la compañera sentimental del mismo, la fotógrafa alemana Gerda Taro, quien morirá aplastada por un tanque días después, en el frente de batalla. Esta es una nueva versión de esta bastante manoseada foto, pero que para muchos logró su objetivo: impactar a la opinión pública mundial sobre la matanza que ocurría en España, el mundo de la gente venida de todas del mundo para luchar por los republicanos (allí estuvieron Hemingway, Neruda, César Vallejo). Su intención era provocar (era reportero de guerra que simpatizaba por la República). Tal fue la intención de muchos intelectuales y artistas (Vallejo y su ESPAÑA, APARTA DE MÍ ESTE CÁLIZ, o Picasso y su impresionante GUERNICA) con el fin de difundir una idea y una posición. En esto sí podemos retomar el concepto que Platón tenía del arte, una imitación de la vida; pero esta imitación logra adquirir su propia vida, se vuelve autónoma y con el tiempo logra representar parcialmente a su autor para terminar, en cierta manera, representar su época.

Tomemos nuevamente el libro de Koch: arguye que los medios de comunicación crean falacias en la comunidad a través de diversas estrategias, todas ellas encajan directamente en las artes, sobre todo en el arte más masiva como es el cine. Éste crea estereotipos (el peligro Disney, por ejemplo), tergiversa la historia, prioriza eventos en desmedro de otros más relevantes y crea argumentos falaces contundentes como si fueran válidos. El cine norteamericano de los 50 creaba versiones históricas bastante peculiares, que ahora son risibles. La CLEOPATRA que encarnó la Taylor tiene cientos de elementos anacrónicos, pese a que tiene datos geohistóricos válidos; filmes como DIEZ MANDAMIENTOS fueron y son tomados al pie de la letra como documentos verídicos, cuando son narraciones o ficciones que encajan en textos de fe, mas no científicos. El cine no debe ser visto como un archivo histórico, aunque algunos lo quieran mostrar como tal. La validez de muchas obras de la cinematografía está en su interesante representación del mundo contemporáneo y su extrapolación en la historia. El cine es, pues, también ese campo de representaciones singulares o colectivas del momento que se vive. Jean- Luc Godard criticó así al cine como tal, habría que acercarlo a la realidad y mostrarla tal cual es: esta “intención” se ve no solo en la nouvelle vague (un nuevo lenguaje para la nueva era), sino en Dogma 95 (escuela de Copenhague con Lars Von Trier a la cabeza), con el poder de la steadycam que acerca al cine a lo soñado por el grupo Kinoglass y su director Dziga Vertov (su seudónimo). Pero limitarse casi al criterio de un documental es quitarle al cine lo que es: arte. En los últimos tiempos, algunos hábiles directores han visto esta técnica, la de mostrar el discurso narrativo como el de un documental o un video casero, ha dado sus resultados (y logran respuestas interesantes como el caso de CLOVERFIELD de Matt Reeves).

Luego de ver el problema de la intención en el cine surgen otras cuestiones en cuanto quién o quiénes abordan la historia para ser llevadas al cine. Los cineastas y estudios norteamericanos han sido muy libres en abordar la historia de otros países para adecuarlos a sus intereses de estudio. Y son muchos los ejemplos; lo mismo ha sido con la literatura y el teatro; las adaptaciones al cine pasan por muchos filtros, empezando por la lengua y terminando con las exigencias políticas de los estudios y los dueños de los mismos. Son como ediciones corregidas para bien. En el caso peruano tenemos un caso interesante con el film PANTALEÓN Y LOS VISITADORAS de MVLL, la cual tiene dos versiones: la de Francisco Lombardi de 1998 y la de 1975, codirigida por el mismo MVLL, hecha en República Dominicana con el famoso actor español José Sacristán como Pantoja. Ambas propuestas muestran una interpretación de la obra del mismo autor, siendo la más interesante como propuesta cinematográfica la de Lombardi. Los grandes clásicos han sido sometidos a versiones de lo más rigurosas como disparatadas. Pero el arte en sí debe tocar la esencia que subyace en la obra en sí; esos móviles que se repiten en otras obras con otro formato y otro material para llegar a nosotros, sus receptores. En muchos casos, la lectura no es fácil, lo que exige en nosotros mejorar “nuestra lectura” de la obra en sí, “sacarle el jugo” a la polisemia de una obra maestra. Así entonces veremos las múltiples aristas de una obra que ya tiene vida propia.

Bajo esta licencia es que nos acercamos a ver Francia desde las diversas perspectivas de directores extranjeros que han querido hacer su obra tomando el espíritu de este país. Pero, si respetamos la idea del arte, podremos alcanzar a través de estas propuestas cinematográficas el alma universal de la humanidad.

LA PASIÓN DE JUANA DE ARCO CARL THEODOR DREYER (1928) Obra maestra de este gran director danés, preocupado por la espiritualidad humana, tomó el tema de esta gran heroína francesa e hizo un viaje al interior de su alma. La actuación de Maria Falconetti es extraordinaria y exigió tanto de ella que terminó en un sanatorio. Como René Jeanne y Charles Ford comentan en su HISTORIA ILUSTRADA DEL CINE, es una película que inicia el fin del cine silente, ya que sus imágenes poderosas necesitan la palabra para la redondez del mensaje. Intensos primeros planos que muestran rostros en toda sus dimensiones, arrugas, verrugas, pelos; no escapa nada a la cámara, puesto que tiene que mostrar al público todo un proceso psicológico tanto de Juana de Arco, como los de sus jueces (entre los que figura el gran artista Antonin Artaud). Según Kobal, estamos ante “una sinfonía de rostros”. Y es cierto, la película discurre en tomas de dichos rostros desde diferentes ángulos. Para mostrar la dureza de dichos rostros y el viaje psicológico de cada uno de los asistentes al juicio injusto contra Juana, se eliminó cualquier forma de distracción que afectase la concentración en el primer plano. Inicia el film con los archivos que muestran las actas de dicho juicio. El film se dio por perdido, pero una copia íntegra fue hallada en un manicomio en Noruega. Es una obra cumbre de la cinematografía.

TARTUFO FRIEDRICH MURNAU (1926) Adaptación muy libre de la genial obra del dramaturgo Molière, es una interpretación libre en la cual trabajan los mejores actores y personas ligadas a la realización de un film del expresionismo. El empleo del cine para representar esta obra es un pretexto de metacine; una historia sencilla, un anciano dominado por una ambiciosa ama de llaves ve la proyección de esta historia en una película proyectada en el cine ambulante de su sobrino, quien ve amenazada su herencia. El paralelo es la mencionada ama de llaves con Tartufo, un tipo hampón que se hace pasar por una persona digna. La obra que vamos a ver es una de las cuatro versiones que se hicieron, ya que tuvo mucha censura por su marcada sensualidad y algunas escenas anticlericales. Actúan Lil Dagover (la actriz de éxito de ese periodo), Werner Kraus y, sobre todo, Emil Jannings, con quien trabajó luego en FAUSTO.

EL BAILE ETTORE SCOLA (1983) Esta es un obra musical llevada a la pantalla por este buen director italiano, gran observador de la personalidad en un contexto. En esta oportunidad, con un puñado de actores de teatro, sin ningún parlamento entre los actores, se va desarrollando la historia francesa a través de las canciones de moda de entonces y los bailes como se las interpretaba. Un grupo de hombres y mujeres iba poblando la sala de baile; así vemos personas del Frente Popular y los burgueses, los ciudadanos temerosos del avance nazi, la ocupación y los traidores, la liberación, el problema de Argelia, el rock, la confrontación de pareja y Mayo del 68 hasta el año 1983, una sociedad de consumo, individualista y solitaria. Un excelente retrato de una sociedad y un magnífico ejemplo de recursos para hacer cine.

DANTON ANDRZEJ WAJDA (1982) El vínculo entre Polonia y Francia siempre ha sido sólido y Francia ha solido acoger en su territorio a gran cantidad de refugiados polacos por siglos; uno de los más famosos fue Chopin. La creatividad ha sido intensa en el trabajo colaborativo y el cine tuvo varias muestras de ello. Un gran cineasta como Krzysztof Kieślowski ofreció a Francia una inmensa trilogía (TROIS COULEURS) que representaban la bandera y la cultura francesas. Esta es la adaptación de una novela llamada El Asunto Danton de S. Przybyszewska en la que muestra la lucha entre el poder del terror, que lo encarnaría Robespierre, y la sensatez. Actúan en este film, Gérard Depardieu como Danton.

RELACIONES PELIGROSAS STEPHEN FREARS (1988) Quizá una de las novelas más adaptadas al cine ha sido la Choderlos de Laclos con su famosa obra “Les Liasons Dangereuses”. Hay adaptaciones francesas y una muy buena hecha por Miloš Forman en su film VALMONT. Este director británico toma el reto de dirigir a un grupo de actores y actrices ascendentes y logra una bella recreación de la Francia pre revolucionaria, con una aristocracia que tenía sus propias reglas de juego, con un sinfín de intrigas y lujos que iban a ser parte del juicio histórico en 1789, cuando comiencen a caer muchas de sus cabezas en la guillotina. Una novela sobre el amor y las diversas perspectivas que, pese a los siglos, no dejan de tener vigencia. Escenarios bellos, reconstrucción adecuada y una bella banda sonora la hacen un bello film. Actúan Glenn Close, John Malkovich, Michelle Pfeiffer, Uma Thurman y Keanu Reeves.

domingo, 14 de marzo de 2010

VIAJE A LAS PROFUNDIDADES DE FRANCIA (1)

Cierto es que uno asocia Francia con París. Automáticamente en nuestro imaginario simplista y práctico, nuestra recordación hace un viaje corto a la memoria para buscar las imágenes de un lugar denominado, una palabra nombrada, una pregunta hecha. Lastimosamente para Francia (lo mismo como Perú con Lima), todo un bello y apasionante país, se focaliza en una sola ciudad. Las políticas centralistas en nuestros países rindieron su fruto en prejuicio de las demás zonas de nuestras respectivas naciones.
Pese a lo anterior, la mayoría de mis amigos franceses y los no franceses que viven en Francia no viven  precisamente en la urbe; viven en la provincia (como yo en Trujillo, no en Lima) y a pedido de mis amigos, me fui al sur, me fui al AVEYRON. Con Olivier, quien es del sur, de GARONNE, nos fuimos a TOULOUSE, la ciudad más importante de la zona. Este viaje iba a ser un notable descubrimiento para mí; iba a ir a la tierra de los cátaros y los templarios, a una de las rutas del camino a Santiago de Compostela, un viaje al Medioveo y las catedrales románicas y góticas del lugar, a la buena comida y los excelentes quesos, y un viaje a ver grandes personas y grandes amigos.
Salimos de París en TGV, por la mañana; con toda la calma que un tren a gran velocidad te puede llevar, cruzamos la extensa llanura hacia Orléans y luego a Bordeaux. Llegamos a Bordeaux casi a mediodía y mucha gente dejó el tren; un poco más  de una hora más tarde íbamos a llegar a Toulouse donde ya nos esperaba Isabel,  quien había venido desde Rodez para recogerme. Se acercó a nosotros para darnos la sorpresa cuando salíamos de la estación. Decidimos esperar a la mamá de Olivier mientras comíamos algo: el hambre apretaba. Con Isabel salimos rápidamente de Toulouse, ya que el trayecto es más o menos largo; las autopistas francesas te llevan a tu destino a toda comodidad y no estaba abarrotadas de autos como era el caso de París. Mi llegada fue un sábado, tranquilo, reposado 30 de enero. Isabel me iba a recibir con quesos, panes y un poco de vino. Es increíble cómo se las arregla para poder seguir su vida, pese a la diabetes que la molesta. Me tenía separada una sorpresa: esa noche me iba a llevar a un baile de un club, en el cual la gente practica mucho el baile. Y así fue, una gran comilona de platos de la región (pollo a la cacerola, fantástico, relleno), con postres y rociado de vino; y luego el baile. Hicieron una presentación a lo medio oeste, vestidos a la usanza, todos bien cronometrados; luego la fiesta en sí. Una amiga de Isabel, muy entusiasta, pidió al hombre-orquesta que convocara a la gente de la fiesta a bailar la danza de la zona: la bourée. Se armaron grupos de 2, 4 hasta 6 parejas. Se lo tomaron a pecho. La gente aquí es muy orgullosa de su pasado; aunque ya en las ciudades no se habla occitano, aún hay palabras que se cuelan en el hablar y muchos sí dominan el dialecto. Es el peso de la historia. Bailamos, bailamos hasta la una de la mañana, a salir el frío helado nos cortaba la cara y tuvimos que limpiar el parabrisas congelado con una caja de plástica. La necesidad es madre de la inventiva.

El último día de enero, Isabel me había preparado una sorpresa. Me iba a llevar a ese impresionante mundo de los cátaros, los odiados y poco entendidos renegados de la Iglesia de esos siglos: los herejes albigenses (de la zona de Albi), además vistos por los inquisidores como heréticos por haber tenido toda una organización dogmática poco comprendida. El peso de este pasado casi anatematizado se ve en raros mensajes como el que se lee en el folleto que compré en la magnífica iglesia de Santa Cecilia en Albi.


Con Isabel nos dirigimos hacia Albi en camino a una maravilla histórica: Cordes- sur -ciel. Desde
la carretera en lo alto de una elevada colina el viajero puede distinguir Cordes, toda amurallada. Como no era verano, el mar de turistas no nos iba a acompañar, por lo que nuestra visita fue tranquila y pudimos ver la pequeña ciudad (convertida en una zona para artistas) construida en el siglo XIII para ver sus palacios, sus grandes casas, las almenaras desde sus murallas y la quietud de estar en un sitio que carga mucha historia. La ciudad vio su esplendor , pero fue amenazada por la haberla identificado como un centro de artesanos herejes o cátaros. En el lugar hay un pozo muy profundo (113 metros, pones una moneda de un euro para iluminar todo lo largo del pozo) en el cual se dice que se arrojó a 3 inquisidores. Según me contaba Isabel, aún hay gente que habla occitano, el nombre de esta pequeña ciudad en esa lengua es Còrdas. Aquí más datos: https://www.lonelyplanet.es/blog/cordes-sur-ciel-el-pueblo-preferido-por-los-franceses. 
El almorzar fue toda una odisea: siendo domingo y en invierno, casi no hay movimiento turístico; al descender nos dimos con la triste realidad que ya no había lugar para almorzar. Compramos fruta y unas pequeñas galletas, más el queso que teníamos para engañar el hambre. Pese a todo, se puede decir que Cordes es uno de los pueblos  más bellos de Francia ( https://www.nuevatribuna.es/articulo/sociedad/viajes-sur-francia-cordes-sur-ciel/20190102164758158850.html). Premunidos de energía nos fuimos hacia la otra meta de ese día: Albi.


Esta ciudad resultó toda una sorpresa: la catedral que tiene, Santa Cecilia, es un monumento eclesiástico que tiene trazos de todos los movimientos arquitectónicos de la zona. Románico, gótico, renacentista. La inmensa construcción empezó en 1282 y casi concluye en 1515; sufrió embates de la revolución francesa y su última gran restauración fue en el siglo XIX. Al exterior, la iglesia tiene toda la fachada románica, inmensas paredes con columnas adosadas. Es un monumento fácilmente perceptible a la distancia. Tiene un inmenso y bello coro, pero lo más interesante es el inmenso mural del Juicio Final en el que se ve una zona reservada a los cátaros. La guía que compré para tener una información exacta habla que esta iglesia se construyó para salvar la fe de las herejías. Lo interesante de la guía es que no tiene un autor identificable, dice.. "los sacerdotes de la parroquia". Una de las cosas más impresionantes de esta visita fue recordar cómo la fe católica se construye, como toda religión, por mitos y percepciones. La iglesia cuenta con un pequeño tesoro en el cual se halla algunos restos óseos de santos y santas, hay una urna que tiene los huesos de un brazo de un santo. Cuestión de fe. Leía que este edificio es el más grande del mundo hecho en ladrillo. Es una inmensa y apabullante construcción. Otro dato interesante que leí al lado de la imagen de Sta. Cecilia es el hecho que por un error de mala interpretación de un texto, esta santa se convirtió en la protectora de la música. Ella no cantaba, ni tocaba un instrumento, ni mucho menos. Fue una caprichosa lectura de un texto en su honor que se creyó entender que ella cantaba a Dios; parece ser que sólo oraba.
Ya apretados por la hora, salimos con Isabel para ver el museo de Toulouse-Lautrec, quien (no nos olvidemos) era de origen noble y cerca, muy cerca a la catedral está un museo con gran parte de su obra. Había visto algo en el Museo D´Orsay, pero lo que hay aquí es impresionante. Mas el tiempo no nos permitió ver mucho, vimos sus grabados y algunas pinturas mayores, en el sótano había mucho más y vimos unos cuantos afiches, técnica en la que fue todo un maestro.
Un poco desconsolados,. salimos a comer algo; antes fuimos a unos jardines que quedaban a orillas del río Tarn, que se encuentran a las espaldas de la gran iglesia. Bello paseo con sus puentes a la distancia.
La cocina francesa no tiene pierde. Lo que mis ojos no pudieron disfrutar , mi boca lo hizo. Francia es un paraíso para eso.
Isabel me estaba guardando más sorpresas para los días siguientes.





sábado, 13 de marzo de 2010

PINTURA EN EL LOUVRE: VIAJE A LA EXQUISITEZ (3)



Dejando atrás a la Victoria de Samotracia, ingresamos a la primera planta del ala DENON, para poder ver algo de pintura francesa, a los grandes maestros italianos del Renacimiento y algo del Barroco español. Al entrar a las  salas de grandes pinturas, vemos inmensos formatos de Géricault (impresionante LA BALSA DE LA MEDUSA), Antoine- Jean Gros (BONAPARTE Y LOS APESTADOS DE JAFFA)y el inmenso Delacroix (miré extasiado con muchos visitantes LA MUERTE DE SARDANÁPALO y la revolucionaria LA LIBERTAD GUIANDO AL PUEBLO). Los cuadros te van rodeando y fuera de la belleza, también te van hablando de historia, como las obras de Jacques- Louis David; o el gran maestro de la figura humana que es Jean-Auguste Ingres; ver su ODALISCA, la que vi por primera vez en una estampilla rumana en mi niñez, me hizo recordar cómo contemplaba esta mujer voluptuosa, generosa en carnes, que te lanza una mirada dubitativa entre sensual, atrevida y cándida; o los bellos paisajes de Camille Corot.
Pero el plato fuerte iba a venir con los maestros italianos; pero hay tantos y tantas obras en un sólo lugar que sientes una intoxicación de belleza. Por ahí sale un Cimabue y sus bellos retablos prerrenacentistas y ver la marcada influencia de escuelas de Cremona o el poder de la iglesia de Oriente en la estética de entonces. De pronto estás frente LA CORONACIÓN DE LA VIRGEN de Fra Angélico y mudo contemplas el trabajo de la perspectiva en estos hombres de fe que quisieron rendir su obra a su creencia. Pero perspectiva pura la hallas en Uccello y su BATALLA DE SAN ROMANO, en la que las lanzas de los guerreros trazan las perspectivas que guían nuestros sobre este cuadro. Los platos fuertes estaban por venir: el primero lo ves con el SAN SEBASTIÁN de Mantegna, gran estudioso del cuerpo humano (algún  día iré a Brera en Milán para ver su CRISTO MUERTO); EL RETRATO DE UN ANCIANO Y UN JOVEN de Ghilandaio; LA VIRGEN DE LA ROCA y LA VIRGEN, EL NIÑO JESÚS Y SANTA ANA de Leonardo. Estaba rodeado de maestros que mostraban toda la visión del mundo de la Europa de entonces, la nueva visión de un mundo tras el descubrimiento de América y que iniciaba el viaje hacia sí mismo. Creo que el día que llegue a UFIZZI en Florencia habré colmado mis más grandes sueños del arte. Una sensación especial fue ver a LA GIOCONDA  en la sala en la cual estaban las otras obras de Leonardo; felizmente no me hallé ante un tumulto de gente como suele pasar con las obras vedette de un museo (como me pasó con la RONDA NOCTURNA en Amsterdam), pero no colmé las expectativas que había generado en mí al momento de hallarme con este famoso cuadro. Quizá ya estaba saturado, quizá no estuve preparado o quizá sobrestimé la obra. No lo sé.
Mucha más atractiva fue la pintura LA MUJER DE LOS ESPEJOS de Tiziano, obra equilibrada, con un dominio de luz magistral y esos volúmenes tan bien distribuidos. Y para cerrar esta visita a los italianos me extasié con el genio de Arcimboldo, del Veronés y del Tièpolo. No quiero olvidar de mencionar esos inmensos cuadros detallistas de Francesco Guardi, casi un fotógrafo de los eventos sociales masivos de su época. Sus cuadros retratan la vida fastuosa  de la Venecia rica y burguesa que le tocó vivir.
Tenía que cerrar con los españoles, tenía aún fresca la visita al Prado, por lo que tenía que ver en esta colección tenía que llenar mi retina con "novedades" impactantes. Con las obras de El Greco y las de Ribera, el Españoleto, me doy por satisfecho. Otras buenas piezas de Zurbarán y Goya completan la breve colección de pintura española del Louvre. La pintura de EL TULLIDO de Ribera siempre me ha parecido, salvo por el pie enjuto, el retrato del Lazarillo de Tormes; la cara pícara y su pobreza digna las hacen obras gemelas. Cumplí con un sueño más. 
El tiempo nos iba venciendo, Olivier me dijo que el museo ya estaba por cerrar; 5 horas de viaje por él no han sido suficientes para mi curiosidad, pero suficientes para mi físico. Ya regresaré por más.

domingo, 7 de marzo de 2010

MADRID, MÁS ALLÁ DE LO ESPERADO


























En realidad, no tenía muchas ganas de ir a Madrid. El primer contacto que tuve con esta ciudad fue en 1994 a pocos meses que el gobierno español había impuesto el visado obligatorio a varios países andinos, entre ellos, Perú. Había ganado una beca para Dinamarca y el paso obligatorio a Copenhague fue Madrid. No pude gestionar la visa de este entonces (aún no existía el espacio Schengen) y me vi forzado a quedarme en Barajas, 4 horas en la ida y 13 horas en el retorno. Esta última fue insoportable y el recuerdo que tenía de esa vez me desanimaba mucho de hacer ese viaje; además me encontré con una serie de personas bastante groseras en momento de hacer consultas. No. Veía la forma de ir vía Amsterdam, ciudad de la que tengo mejores recuerdos, que es bella y la recuerdo con tantas cosas para conocer. Ni modo.
Tomada la decisión, tomamos el vuelo diario de Iberia a Madrid, el cual iba como un micro a La Esperanza. Nuestros paisanos trasladan medio Perú en sus maletines de mano, algunos de los cuales se ven amenazadores si te cayera uno accidentalmente en la cabeza. Había una familia insoportable, cuyo padre era un tipo que se jactaba de ir a España a hacer una maestría con toda su recua: el tipo y su anodina mujer no sabían de control de la natalidad; iban con sus 4 hijos, algunos de los cuales no tenían ni un año de diferencia, y la mayor tendría unos cinco años. El menor era una criatura que nos hizo más desagradable el viaje. Pensé que iba al infierno.
Luego de casi 13 horas de vuelo directo, llegamos a Barajas. Era casi las 7 y media de la mañana, hora local (6 horas de diferencia con Perú); casi adormitados, salimos del avión para hacer el largo periplo a nuestras maletas. Tomamos un tren que une el lugar de llegada al terminal. Esto ya era todo un cambio a lo visto hace 15 años. Pese a todo el trayecto es largo, recogimos maletas y visé mi pasaporte; en el vuelo habíamos ido con un alumno de la Universidad en la que trabajo. En Lima casi perdimos el vuelo; en Madrid, casi pierdo mi maleta. En realidad, es bueno viajar con una sola maleta para poder desplazarte con rapidez, además tomas el metro, barato, y evitas ir en taxi. Con Olivier pensamos en ir a un hotel módico y céntrico, y hallamos uno a media cuadra del corazón madrileño, la Gran Vía, a dos cuadras del inmenso edificio de la Telefónica. Ideal. Previamente, comimos unos churros, pastelillos y un buen chocolate  caliente para la fría mañana madrileña.
Olivier había estado en Madrid por una larga estancia y resultó ser un guía estupendo. Fuimos a ver los lugares que iban a impresionarme de sobremanera. Cerca de nuestro hotel estaba la estación de metro Callao; ya un poco repuestos y luego de un buen baño, salimos a caminar. Tomamos camino a la Plaza Mayor, previa visita a la Puerta del Sol. Habíamos cruzado el Monasterio de las Descalzas; además en el trayecto entramos en el remodelado Mercado San Miguel. Al verlo imaginé el Mercado Central de Trujillo puesto en valor de igual manera. Soñar no cuesta nada, pero frustra. Llegamos a la Plaza Mayor y nos encontramos con la estatua ecuestre de Felipe III, mis respetos, es el gestor de magnífica plaza. Sus galerías tienen diversas tiendas de libros, antigüedades, numismática y filatelia; esto me hizo recordar mis estampillas bastante olvidadas por mis nuevas responsabilidades y hurgué algunas colecciones que me hicieron recordar mis años mozos: allí estaba la colección de trajes típicos de España o las pinturas de los grandes maestros españoles como las de Sorolla. Salimos por una de las puertas laterales en dirección hacia la Plaza de la Villa. Cuando salíamos ya Olivier tarareaba la canción de Mecano Un año más, también la evoqué. Esa es la canción de Madrid. Íbamos cargando la historia.

























Llegamos luego de breve caminata a la Catedral de la Almudena con el Palacio Real; la cola para el palacio nos desanimó y fuimos a la catedral. Entramos a su museo y la visita obligada a su domo. Las historias y leyendas de España se centra en esa estrecha relación que tuvieron con los árabes, los moros, los mozárabes. Esta catedral no deja de tener este estrecho vínculo. La más grande de las creencias cristianas en esta parte de Europa se gesta también como respuesta a esa ocupación de siglos: la Peregrinación de Santiago de Compostela. La Virgen de la Almudena es la patrona de Madrid y su denominación viene de palabras árabes: almudit o almudaina. Desde la cúpula ves toda Madrid, desde el Campo del Moro y todas las torres y cúpulas de sus viejas iglesias, así como sus altos edificios.


En nuestra marcha, vimos el Palacio desde fuera. Para otra vez será. Cruzamos el Teatro Real, el cual no me impresionó mucho. Marchamos hacia la Puerta del Sol nuevamente y fuimos a nuestro hotel por una pausa. Un poco más tarde, trazamos nuestro nuevo objetivo: El Museo del Prado. De este ya he contado al respecto.
En la trayectoria nos apertrechamos con comida. Había que recargarnos de energías.
Ya salidos del Prado y bastante agotados, puesto que habíamos pasado una noche en blanco, decidimos regresar. Hicimos una pascana en un bar simpático y vi los recuerdos que había comprado. Ahora íbamos por libros, DVD y música. Madrid tiene una inmensa librería de origen francés: FNAC (la cual visité por segunda vez en mi segunda escala, cuando visité el Museo Reina Sofía), allí tu locura rebalsa: libros de historia, cómics, libros de cine, de todo. Filmes de maestros, clásicos y el cine nuevo mundial, música de todo el orbe. Bueno, seguí mis instintos consumistas (hay que hacerles caso de vez en cuando) y ataqué lo que pude. De pronto recordé lo del peso de las maletas: no libros, la melancolía inundó mi alma. Libros de fotografías, de historia, eran mucho peso para mi maleta y un gran dolor para mi alma. Compré varios cd (unos 10) y DVD de clásicos europeos (12), creo que calmó mis frustraciones. Lo interesante es que mucho de lo que compré en Perú cuesta el doble y, sobre todo, existen.
Con Olivier hicimos una visita a los bares simpáticos de Madrid; había recibido la invitación de un amigo suyo para comer al día siguiente. Por mi parte, había contactado con un amigo mío, Javier, en Madrid; pero el hecho de hallar un adaptador de tomacorriente para cargar la batería de mi cámara fotográfica me sacó de quicio. Aquí no hay ferreterías y el único lugar era el famoso Corte Inglés; pero no todos tienen el servicio de ferretería; iba de una tienda de la cadena a otra y no hallaba la misma. Luego que hallé una, no me sirvió ya que era otro modelo; busqué otro hasta que hallé. Esto debería haber advertido, se volvió una pesadilla. No había caído en cuenta de que en el Mercado libre del avión te venden uno de multiuso. En fin, así aprendes.
Hicimos una buena marcha nocturna, pero había que descansar. Al día siguiente, con mucha sed me levanté a buscar agua. Felizmente, cerca de ahí había una tienda de un señor oriental (chino de la esquina peruano) que tenía los pertrechos necesarios. Fuimos a desayunar unas pequeñas tapas y luego a la marcha.
Fuimos a la Plaza Mayor (era domingo, el 24 de enero) y era una fiesta, vendedores de estampillas, monedas, billetes, objetos exóticos: corre dinero. Algunos artistas ambulantes muestran su arte y habilidades. Antes de llegar a la plaza había comprado un libro sobre Madrid, de la colección Historia de la Fotografía (Madrid 1931-1939, II República y Guerra Civil), quería llevarme la mayor cantidad de libros. El peso. Antes de irnos al Mercado de El Rastro, me compré un raro cómic, de Luxley, con una fascinante historia que muestra el mundo al revés. El año 1191, el mundo europeo es invadido por los americanos, todos los pueblos, aztecas, mayas e incas, dirigidos por un inca vidente, asesino, cruel e injusto. Visión interesante. El texto tiene mucho de antirreligioso, (sobre todo católico), pero la visión que se tiene de los precolombinos es por demás alucinante. En fin.
En el Rastro, Olivier me dijo prestar atención por mis cosas, sobre todo mi cámara. Era la tentación. El Rastro es un mercado de pulgas, encuentras de todo, ahí encontré el regalo para mis amigas en Francia, bellos gatos tallados en madera. Ves de todo, como una boutique popular y gente de todas partes.
Antes de ir a encontrarnos con los amigos de Olivier, nos acercamos a ver la Puerta de Toledo.
Nos encontramos con los amigos de Olivier en la Puerta del Sol a la una en punto. Nos invitaron a comer en un restaurante de la ciudad; bello, acondicionado en una casa antigua, con instalaciones geniales, el restaurante fue todo un placer; entre vinos, quesos manchegos, tapas, calamares, hicimos una comida opípara. Una ciudad es bella por el estómago también. Madrid lo es.
Nuestro avión rumbo a París salía a las 6:30, así pues cancelamos nuestro hotel y nos fuimos a la estación de metro Callao para irnos al aeropuerto. Para viajar en metro, una maleta es ideal. Sano consejo, a menos que uno emule a Jesús y el calvario.
Salimos rumbo a París. Madrid me dejó con una buena sonrisa que se volvió alegría en mi segunda escala, cuando vi a muchos madrileños disfrazados por carnavales (era sábado 13 de febrero), un jolgorio por las calles de la ciudad que hacían olvidar el recio frío que azotaba la ciudad. El 14 dejé Madrid y dejé Europa.




EL LOUVRE, LA LUZ CORPÓREA DE LA BELLEZA (2)

Luego de haber dejado las salas del Egipto faraónico, nos dirigimos hacia la zona de Levante (Cercano Oriente) e Irán. Atrás dejamos a Sejmet, Horus, las bellas estatuas del escriba o la del enigmático Amenofis IV para dirigirnos hacia otro lo de los rincones del mundo donde se inició la civilización: la Mesopotamia, el Cercano Oriente e Irán. Al ver las diversas piezas en los gabinetes, recordaba a muchas de estas vistas en mis libros de historia: ¡todas delante de mí! Hubo muchas piezas que rebuscaban en mi memoria su total significado, no verla ahí aislada de su entorno. Era todo un trabajo kantiano de situar el inmenso valor del objeto que tenías delante de ti para darle la verdadera dimensión de su importancia. Así tuve cinco bellezas por las cuales quedé absorto, mudo por el peso de la cultura: la Estela de la Victoria del Rey Naram- Sin (casi 4100 años de antigüedad), el Código de Hammurabi (impresionante, además de ver ese increíble principio del hombre por querer determinar su convinencia con entelequias que aún no son aprehendidas por nosotros para vivir en armonía),  la pequeña estatuilla de la diosa Ishtar (la cual va a ir evolucionando en variantes en las culturas vecinas), los impresionantes Toros Alados del palacio de Sargon II (impresionantes y, como leí alguna vez, aterradores vigías de la fe de ese entonces) y los inmensos Capiteles del palacio de Darío, que adornaban una sala de audiencias (apadana) en un número de 36. Había visto majestuosidad de columnas en los palacios egipcios, sobre todo en Luxor y el inmenso "bosque" de columnas en el Templo de Amón en Karnak; pero los detalles de estos capiteles son mucho más impresionantes y estéticamente mejores.

En nuestro discurrir, nos dirigimos hacia las salas de las esculturas francesas, allí me iba a encontrar con todo un bello mundo visual. Reconozco que no hemos tenido una cultura en nuestra ciudad hacia la escultura, hacia el concepto de monumento tanto del punto de vista cívico-político, como el estético. Tenía una velada intención de ir al cementerio Père - Lachaise para poder ver todos esos mausoleos cargados de historia y belleza. En el Museo Nacional de Atenas había visto, en 1988, la estatua de bronce de Poseidon (la hallada en Sounion), así como la bella estela funeraria de Hégeso, hijo de Próxenos, un niño montado sobre un caballo, todo en movimiento. Desde ese entonces, mi interés por la escultura la veía estimulada en visitas a museos, parques públicos, cementerios. En Lima fui al Presbítero Maestro y tuve muchas satisfacciones. Pero Europa es mucho más de lo que pides, anhelas o puedes ver. Lo vi en los museos daneses de Roskilde, el medioevo escandinavo en su catedral, o Lousianna, con mi primer acercamiento a Giacometti. Pero el Louvre es el colmo. Este placer también lo viví en el Museo Bode de Berlín, del cual hablaré en otro texto.
¿Qué puedes priorizar en estas salas de escultura francesa (sólo francesa, faltan las otras)? Deja que tus ojos se deslicen hasta que lo más bello te detenga; a mí me detuvo la Tumba de Felipe Pot, el gisant y su cortejo de plañideras; todo ese conjunto condensa el Louvre escultórico. Simplemente bello. La imaginería religiosa es otro punto interesante. Nuestros altares barrocos, sobre todo en Cuzco, Arequipa, El Carmen de Trujillo y Lima vieja tienen bellas estatuas de santos y santas, obras de anónimos o de artistas de la talla como Martínez Montañés, Juan y Alonso de Mesa o el gran maestro ecuatoriano Bernando de Legarda, cuyas bellas tallas las ves en el Convento de San Francisco de Quito o su bello Museo de Arte Colonial (hay que ir a verlo). Volvamos al festín Louvre; aquí me topé con bellas imágenes religiosas: la Virgen de los Dolores de Germain Pilon, del siglo XVI, cuya presentación se hace en un espacio de fondo anaranjado que resalta la vivacidad de tan bella talla; o su impresionante Cristo Descendido, un anónimo que se remite al siglo XII, proveniente de la Borgoña.
Luego de una merecida pausa, con Olivier nos dirigimos a ver otras bellezas, nos fuimos a ver las esculturas italianas. Luego de haber almorzado en el subsuelo, bajo la pirámide, retomamos fuerzas para ver estas maravillas; aquí nos íbamos a topar con Dos Esclavos de Miguel Ángel, estatuas destinadas al mausoleo del papa Julio II o la bella obra de Canova, Psique y Amor.
Tomanos una galería que atravesaba la Grecia preclásica para ver una bella estatua de un guerrero (Guerrero Borghese), ver el busto de Homero y dirigirte por las escaleras para ir a la primera planta para ver algo de pintura.
En la escalera nos encontramos la Victoria de Samotracia, que pese a los siglos, estragos y daños, es y será siempre la victoria de la civilización sobre la barbarie. Así dejé, fascinado, el mundo de las esculturas para ir a las pinturas.

jueves, 4 de marzo de 2010

UN OCÉANO DE BELLEZA: EL LOUVRE (1)

Para hablar del Louvre  es necesario pensar en medidas mayores.
Empecemos por decir que es el museo más grande del mundo y que contiene inmensas colecciones de arte muchas de las cuales aún no pueden ser expuestas. Que bajo el bello edificio que alberga las obras, hay casi toda una mini ciudad subterránea que alberga todos los servicios necesarios y sofisticados que discretamente se ocultan para que la belleza del lugar no se vea perturbada por algún elemento indiscreto que rompa nuestro embeleso contemplando las obras de arte del lugar. Que te debe tomar por lo menos un par de días para que la visita pueda abarcar todo el museo y hayas contemplado lo más relevante de su colección. En realidad, visitar el museo Louvre es algo abrumante, pero es El Museo.
El jueves 04 de febrero, luego de la visita a Notre Dame y buena caminata por el Quartier Latin, nos dirigimos, Olivier y yo, hacia el Louvre. El lunes 01 habíamos estado sólo para visitar la parte subterránea de los servicios y ver la pirámide diseñada por el arquitecto Ming Pei. Es una inteligente forma de solucionar el ingreso a este museo. Te internas en sus entrañas y en el mundo subterráneo ves tiendas, restaurantes, cafés, servicios, librerías y oficinas de información. Es un mundo aparte, pero que depende de la belleza que se halla en la parte superior.
Una vez adquiridos nuestros billetes, nos dirigimos desde la pirámide invertida por el acceso Sully a ver la historia del Louvre. La historia de este monumento arquitectónico es la historia de la ciudad. Su construcción medieval se ve  en los fosos y restos amurallados. El edificio tuvo muchas funciones, castillo, palacio, su origen noble fue, en cierta manera, su catástrofe, puesto que en la Revolución de 1789 sufrió terribles incendios y la parte que daba al Jardín de las Tullerías nunca fue reconstruido. Eso fue aprovechado por los arquitectos como Hausmann para hacer ampliaciones y desarrollos de perspectivas.
De el Louvre Medieval, nos dirigimos a las salas que albergan las antigüedades egipcias. Las piezas son bellas y tienen una interesante museografía, la distribución de las piezas y el trabajo de la luz es muy valioso. El interior del edificio presenta toda una estructura moderna y respeta lo esencial de lo que fue: un palacio. He visto buenas colecciones de arte egipcio en Viena, Berlín y, sobre todo, El Cairo.
Pero es impresionante ver la cantidad de piezas de todo tamaño que yacen en esta colección, creada por Champollion; el Egipto faraónico es impresionante: miniaturas, sarcófagos, joyería, estatuas, altorrelieves. Personalmente, el Museo Egipcio del Cairo tiene piezas más impresionantes; pero la museografía en el Louvre te hace aprovechar la máximo el pedazo de historia que tienes delante de ti. Creo que lo que tiene Berlín en sus museos de la Isla (como ahora los llaman) compite con lo que el Louvre te puede ofrecer. No he visto los museos de Londres ni el de Nueva York (menor en este aspecto).
Otra cosa que invita a reflexión es el sentido del pillaje legal que muchas expediciones tenían antaño (¿seguiremos así?). Aquí en el Perú, pugnamos por recuperar las piezas llevadas por la expedición Bingham luego del "descubrimiento" oficial de Machu Picchu y que están en las bóvedas de la Universidad de Yale. Cierto. Ya nuestro gobierno no gestiona el retorno; ¿será que así nos han calmado nombrando a Machu Picchu, maravilla moderna? El Gobierno Egipcio reclama a Berlín (¿lo hará con Francia?) varias cosas entre ellas el bello busto de Nefertiti..¿Qué pasará?

martes, 2 de marzo de 2010

Y TÚ, ¿CÓMO DISCRIMINAS?

¿Cómo discriminamos?.
Discriminar: el diccionario de la R.A.L.E. tiene dos acepciones interesantes: "separar, distinguir, diferenciar una cosa de otra // 2. Dar trato de inferioridad a una persona o colectividad por motivos raciales, religiosos, políticos, etc."

Leía el balance económico de 179 países en el atlas publicado por Le Monde para el 2010 (Le Monde, bilan Economie 2010)  publicado en el mes de enero, en el cual se hace un detallado y sintético estudio de la cantidad de países previamente nombrada. Es interesante cuán fríos pueden ser los datos y cuán relativos y engañosos los resultados. La  relatividad de las cifras se ve en este atlas que muestra a nuestro país ("tigre de América") con un crecimiento de 1,5 %, Alemania - 5, 3 % y Congo un increíble 7,4 %. Datos fríos del atlas.
Hay una sección muy interesante en esta revista-atlas que ha motivado escribir esta reflexión. En la sección En resumen (En bref, pag .12) hay una serie de informaciones interesantes, cuadros, datos que en cierta manera sirven para acompañar los datos, informes, entrevistas y mini ensayos que hay a lo largo de la publicación. Algunos que son muy interesantes: para el 2010 habrá la suma de 43 millones de desempleados nuevos, expectativa dada por la Oficina Internacional de Trabajo, si es que en el mundo no se hacen los ajustes pertinentes (¿los habrá? ¿cuántos nos toca a nosotros?). Otra escala de desigualdad es la que se ha incrementado en los Estados Unidos; así otros datos y cuadros muy interesantes para leer con detenimiento, como indicadores de deterioro del medio ambiente o salubridad y salud.
El cuadro que más me ha interesado era el de la Discriminación en el campo laboral. Con una serie de variables, se ha hecho una encuesta a 26756 personas entre los 27 países que conforman la Comunidad Europea. Los parámetros son (en orden de respuesta): a) el modo de vestirse, de presentarse;  b) la edad;  c) el color de la piel o el origen étnico;  d) alguna discapacidad física;  e) la apariencia física general (estatura, peso,..);  f) el modo de hablar, el acento;  g) la manifestación de un credo religioso;  h) el sexo;  i) opción sexual;  j) el hecho de fumar o no;  k) el nombre;  l) la dirección (entre otros no especificados).
Extrapolemos estos parámetros de esa sociedad en la nuestra y veremos algunos de estos valores fácilmente aplicables a nuestros mensuras, nuestros medidas de segregación.

a) En el primer caso, la ropa de marca se ha vuelto un parámetro interesante que se ha tornado todo un quebradero de cabeza para padres que son sometidos por sus hijos para acceder a diversos grupos sociales. Para eso está, además, la fábrica de la moda.

b) En la edad, gracias al nuevo sistema, cada vez las personas somos más descartables. La juventud es el terror de los adultos y viejos. El canibalismo laboral de nuestros países ha acentuado esta terrible realidad creada en los últimos años. Una amiga regresó a su país, Argentina, a buscar trabajo; por su edad ya era obsoleta para su sociedad. Mi cuñado camina muy nerviosos en los últimos tiempos; sobre él pende la espada del despido.

c) Lo del color de la piel ya huelga decir cómo tratamos este tema en nuestra sociedad. Lo de cholo de mierda, negro de mierda, blanquiñoso de mierda o chino de mierda está a flor de labio y sale en nuestro hablar cotidiano. ¿O no?

d) La discapacidad física es todo un parámetro que recién ha entrado en la conciencia de la sociedad peruana desde lo laboral hasta las mejoras de construcciones de espacios públicos o privados, pero ¿cuánto? Dudamos en poner baños especiales para ellos o elevadores en lugares de dos o más plantas.

e) En Dinamarca entendí una situación especial: las bromas que solemos gastarnos como gordo, chato, calvo, panzón, etc.. son impensables en la sociedad danesa. Pero existen esos matices discriminatorios.

f) El otro día una profesora me contaba el caso de una alumna que había llegado de la selva para estudiar en nuestra universidad. La alumna pocas veces abrió la boca para participar en clases, ya que su peculiar forma de hablar de la selva arrancaba alguna risa burlona de algún mozalbete. La chica terminó por retirarse del aula.

g) Lo del factor religioso aún no es relevante en nuestro país, no es frecuente ver judíos, cristianos ortodoxos o musulmanes en nuestra sociedad. Pero ya hay cierta animadversión por algunos grupos cristianos protestantes.

h) i) La opción sexual es aún una lacra en nuestra sociedad, si tomáramos esa referencia en nuestro país, la homosexualidad masculina y femenina sigue siendo un hostil factor de segregación. Lo mismo sucede con la mujer, quien tiene que abrirse paso en una sociedad marcadamente masculina.

j) Los fumadores están conformando ese nuevo de discriminados, los vemos en las puertas de edificios fumando solos o en grupos, como nuevos apestados.

k) Los últimos casos sí se dan en nuestra sociedad, a tal grado que las leyes permiten a una persona poder cambiar sus nombres si es que sus padres tuvieron la mala idea de ponerle algún nombre no apropiado, que genera suspicaciones y muchas veces situaciones hilarantes.

l) Vivir en un Pueblo Joven, una Callampa, Una Villa Miseria, una Favela, define una serie de decisiones. Comparémolas con los que viven en zonas residenciales: los servicios, la seguridad, la actitud.

Este pequeño cuadro nos da a entender, además, de dónde saldrán algunos de los nuevos 43 millones de desempleados para este año.
Si conoces gente que está en estos parámetros, avísales. Están en las listas de discriminados y pueden ser candidatos de los próximos reajustes laborales.
Si no es así, ¿cómo discriminarías tú a la gente para llegar a la meta?


PD. AGP (indignante) ha viajado a Chile a llevar ayuda y traer compatriotas. Cuzco ha tenido intensas lluvias y a 8 muertos recientemente. Pisco ya tiene más de dos años en la dichosa "reconstrucción". ¿Nuevas formas (o antiguas) de discriminación?

lunes, 1 de marzo de 2010

EL PRADO, SUBYUGANTE

Madrid. 22 de enero. Habíamos aterrizado por la mañana en Barajas y nos habíamos dirigido con nuestras maletas hacia el centro de Madrid en metro. Nos ubicamos en un hotel a sólo media cuadra de la Gran Vía, cerca del gran edificio de la Telefónica. De ahí iniciamos una extensa marcha por el Madrid viejo e imperial del cual hablaré en otro texto. Ahora quiero hablar de mi visita a los maestros españoles que se encuentran entre las paredes de este gran museo con el cual inicié mi gran periplo europeo hacia las artes visuales. Habíamos llegado a la Fuente de Neptuno, cuando Olivier me señala a lo lejos los edificios Jerónimos Y Villanueva, el complejo que hace el Museo del Prado. La decisión de Olivier de hacer un alto en Madrid la tomé con cierta reticencia, pero el regalo visual que tuve con esta visita fue suficiente. Habíamos comido antes un sánguche como aperitivo y un poco descansado para ir cuadrando nuestro nuevo horario biológico: estábamos con 6 horas de adelanto o atraso, depende como lo vean; pero esto nos había alterado nuestro sueño. Pese a todo, la emoción de ver a Goya, Velásquez, Murillo, El Greco o Ribera nos hizo desplazarnos rápidamente.
Comimos nuestro aperitivo fuera del museo y las aves nos roedaban. Alucinante. Algunas de estas aves permanecían suspendidas para poder comer las migajas que sosteníamos en nuestras manos. Un espectáculo. Una pena que la batería de mi cámara se había bajado para entonces.
Ingresamos al museo y dejamos nuestras cosas en el vestuario. Así comenzó nuestro recorrido. En el camino iba viendo aquellas pinturas que siempre soñé ver. Cuando era pequeño, mi padre nos compraba libros de historia, geografía y arte, imposible no llegar a ver un Goya, un Velásquez, un Bosco. Muchas de estas obras eran para justificar no sólo a la más bella creación del hombre, sino para explicar la génesis de su creación, esto es su historia y su espacio. Gracias, papá.
Lentamente comencé a recorrer con Olivier como guía las obras que se abrían deslumbrantes ante mí. A veces la belleza te duele. Cómo no amar al genial Bosco y su Jardín de las Delicias; puedes quedarte delante de él horas, pero otras obras te esperan para que las acaricies con los ojos. Ahí tienes a Brueghel y su impresionante Triunfo de la Muerte; en esos momemtos comencé a recordar y recitar a Olivier las famosas "Coplas a la Muerte de su Padre" de Manrique. Cuánta verdad en sus versos, cuánta verdad en su pincel. Van Der Weyden y el dolor entorno al cuerpo de Jesús yaciente. Las Meninas de Velásquez, todas gráciles, me había encontrado en Viena en el Museo de Arte creado por María Teresa, una gran colección de pinturas de la escuela española de este periodo; pero la colección de El Prado es soberbia. La impresionante figura de El Caballero de la Mano al Pecho del Greco, todas las mujeres rollizas de Rubens y su famosas rellenitas Tres Gracias; o la desafiante e imponente Maja Desnuda. provocadora, dueña de la situación (recordé el film de Aitana Sánchez, Voleverunt), Murillo y sus vírgenes, Sánchez Coello, todo un maestro. El Tiziano. Zurbarán. Y ese gran maestro, Sorolla, maestro de la luz, tan opacado por los grandes del surrealismo que vi en el museo Reina Sofía.
Las colecciones están iluminadas frescas; puedes acercarte a ellas para ver la calidad de la obra como la locuacidad del que la pintó.
Había entrado, con el Prado, a una increíble visita al pasado bello vivo.
Inolvidable.

http://www.youtube.com/watch?v=_B91T6bomh4&feature=related

PENA Y APRENDIZAJE

Hablar sobre lo sucedido en Chile ya es casi redundante. Lo de este último sábado, sin embargo, ha mostrado las partes más brillantes de las personas así como sus sentimientos y emociones más oscuras. En algunos casos, las intenciones de ayudar pueden, en vez de ayudar, generar más caos y confusión. Veía en la televisión chilena a algunos reporteros que, quizá, en un acto de solidaridad pedían ayuda inmediata en tal o cual lugar cuando todavía no se había conocido la dimensión de la tragedia; algunas veces, estas situaciones pueden generar falsas expectativas a personas cuyas posibilidades de recibir ayuda son un poco remotas viendo la dantesca situación en la cual otras son más apremiantes y urgentes. Esta tragedia ha rebalsado todos los límites. Quizá Chile haya estado preparado para un sismo, pero no para el de la magnitud y calamidad como el que los ha azotado este último 27 de febrero.
El día de hoy en el comedor hablaba con los miembros de mi familia sobre las ubicaciones de las cosas útiles y urgentes que deberíamos tener a mano: qué poco preparados estamos. Una linterna, un botiquín. ¿Agua? No se ha previsto. ¿Alimentos no perecibles? Tampoco.
Este terrible y penoso acontecimiento debe invitarnos a cada uno a la reflexión en todo lugar y levantar la mirada a tu entorno. Trujillo no sobreviviría a un desastre así. Zonas como El Golf, de un suelo de alta licuefacción sería una zona de catástrofe; me parece que los edificios construidos en esa zona no cuentan con zapatas, así que la posibilidad de hundirse son altas, así como le pasó a casas de dos o tres pisos en el terremoto de Chimbote del 70. Nuestro centro histórico quedaría en ruinas y muchas de las casas semiderruidas serían trampa mortal de la gente que vive ahí. Cerca de la Alianza Francesa, tenemos 4 casas tugurizadas las cuales caerían sin remedio.
Las rutas de fuga de muchas zonas de la ciudad se convertirían en trampas mortales, ahora que se han dedicado a cerrar muchas de las calles con trancas. Es obvio que en caso de sismo pocas personas se preocuparían en levantarlas y permitir el fluido de autos, sobre todo, los vehículos de emergencia como bomberos y ambulancias,..¿o los vecinos se preocuparían? .
Es cierto los comentarios que he leído y oído en estos días: la falta de seriedad para hacer un simulacro. Los he visto en el colegio y en la universidad, centros en los que trabajé y trabajo, y la actitud de las personas (no digo los jóvenes, ellos imitan el ejemplo) es indolente, pusilánime y vergonzosa; mas el día en que se ven en aprietos, son generalmente estos incoscientes (hombres y mujeres) quienes más generan daños y desastres personales. Me pareció muy interesante las reacciones que tuvieron muchas personas a raíz de la alerta de tsunami en nuestras costas. Parece ser que algo hemos aprendido; no falta por ahí algún estúpido que se crea el hombre que puede todo y desafían los fenómenos naturales. Si fuéramos sensatos, dejaríamos a esos imbéciles a su suerte; lastimosamente, el hecho de crear esta situación moviliza a gente de apoyo y auxilio que debería estar ayudando a aquellos que los accidentes o la catástrofe afecta. Así es la imbecilidad humana.
Se ha empezado las clases. Más de ocho millones de niños y jóvenes han retornado a aulas, muchas de ellas, precarias. Espero, para el bien de todos y de la sensatez que el momento reclama, se tome esta tragedia como un tema de discusión y reflexión en todas las aulas, incluidas las universidades (más aún ahí, la casa del saber y la ciencia). Los fenómenos naturales son más grandes que la humanidad y tenemos que saber convivir con ellos, aprender a ser honestos con nuestras limitaciones y velar por el bien de todos. Sinceramente, no cabe duda de que si hubiera un sismo como el acaecido en Chile, muchas construcciones modernas caerían con sus habitantes adentro, ¿quién se hace responsable de ello?
La cultura de la prevención debe estar en todo. Empezar por los medios de comunicación: diferenciar accidente de irresponsabilidad, por ejemplo. Las dos tristes irresponsabilidades acaecidas en nuestras carreteras no son accidentes. Son fruto de la irresponsabilidad. Si un edificio cae en un terreno sobre el cual no debió construirse no es infortunio, ni castigo de dios; es irresponsabilidad.
Quizá esperemos, como las lluvias recientes, que nos suceda una catástrofe como la que ha asolado a nuestros amigos chilenos para recién descubrir cuántas irresponsabilidades pudimos haber evitado. Ojalá que tanto Usted que lee este artículo como yo que lo escribo, podamos sobrevivir a una tragedia parecida para podar constatar lo que pienso.
Desde aquí, un abrazo sincero y solidario a Sergio y Elena, Patricio y Eliana, a Marisol por lo sucedido en su patria. Fuerza.