Datos personales

Trujillo, La Libertad, Peru
Un espacio para mostrar ideas y puntos de vista ligados al arte, a la cultura y la vida de una sociedad tanto peruana como universal

domingo, 3 de septiembre de 2023

¿SIN RUMBO INTENCIONAL? (ARTÍCULO DE OPINIÓN DIARIO CORREO DOMINGO 03 SEPTIEMBRE 2023)

 


Leer noticias diariamente es un poco deprimente. Bastante, diría yo. Esa realidad retratada en los medios de comunicación hace que cada vez más ciudadanos opten por apagar el medio de difusión, no descargar el diario virtual o no comprar los diarios. Entre edulcoradas falacias sobre una realidad negacionista o la exageración de una noticia para ocultar otras, el desinterés de lectores u oyentes se incrementa, quizás con la clara intención de que, precisamente, estos dejen de ocuparse en las situaciones escandalosas que vemos cotidianamente, pero que se hallan revestidas de una especial patena que los mismos medios “decoran”. Esto permite entender la selectividad de la delincuencia (por ejemplo, con el narcotráfico) o el tratamiento especial que reciben políticos incompetentes que tienen en dichos medios varios simpatizantes. El debilitamiento de la credibilidad periodística se incrementa cuando muchos medios no atacan a políticos que realizan acciones abiertamente delictivas, como los famosos congresistas mochasueldos. De haber una presión permanente de los medios, estos estarían ya en vías de ser desaforados, como antaño. Nos queda un panorama dubitativo en el que el periodismo como tal no sale bien parado: o ya no es el cuarto poder como se lo suele llamar, o está todo amañado generando una fuerte decepción social. Este escenario permite que la corrupción avance incontenible, como lo vemos no sólo en los poderes judiciales, legislativos o ejecutivo, sino en todos los planos sociales. Es una posición confrontacional que debilita el rol del periodista adoptando una actitud reñida a la ética profesional. La intocabilidad de algunos cuestionables personajes, sea en nuestra Región o a nivel nacional, vuelve cómplices a muchos profesionales con estos personajes y sus actos. Tantos escándalos frecuentes en los círculos políticos locales como nacionales harían de las páginas y noticieros espacios permanentes de investigación seria que convocaría cada vez a más ciudadanos deseosos de conocer una verdad que se pueda confrontar en las páginas de un diario o en las pantallas de nuestras televisores o celulares. El pluralismo debe darse en todo nivel y facilitar las investigaciones a todo nivel. Esa será la forma cómo esta profesión que busca la objetividad en el mayor de los casos cumpla esa función para hacer un verdadero servicio a la comunidad para que se pueda construir una verdadera ciudadanía. El buen ciudadano quiere buscar la información de hechos para poder construir sus reflexiones y conclusiones y construir ciudadanía. En momentos como estos, ¿podríamos tomar el actual periodismo como un ejemplo de buen profesionalismo para ser llevado a una clase escolar o universitaria? ¿Qué podemos indicar a un alumno cuando lea nuestros diarios y vea los programas de TV o redes sociales? Gran dilema para los profesionales del ramo y los consumidores de su producción. “¿Miente, miente, que algo queda?”


No hay comentarios: