26 de julio. Miércoles. Mi último día en esta fugaz visita a Uruguay. Mientras estaba en cama y leyendo distraídamente algunos de los textos y folletos de lugares por visitar, me puse a reflexionar sobre la razón de mi viaje: visita a la familia de Gustavo. Aunque había visto la casa del lugar por el Google Maps, no tenía la certeza de poder encontrarme con alguien de su familia. Luego estaba el hecho de tocar esa puerta desconocida y presentarme como un amigo filatelista que viene a conocer la familia de Gustavo 50 años después. Había hecho una travesía para ver un fantasma. No sabía qué iba a poder decirles, si es que el lugar seguía perteneciendo a su familia. Había llegado a una ciudad que había sido amenazada por una dramática sequía y con la posibilidad de que Montevideo se quedase sin agua: https://www.youtube.com/watch?v=2JUbxMO9PNQ. Como medida extrema, mezclaron agua dulce con salobre para no consumo humano, pero para otras acciones (https://www.youtube.com/watch?v=AEwkkE80BQs). La ciudad no presentaba ese estrés por las noticias que se difundían por los diversos medios. Tomé la decisión de no perturbar la calma y el recuerdo de Gustavo. Dejé que las cosas siguieran su curso. Me levanté para poder ir a conocer otros lugares.
El día anterior había estado en el Mausoleo de Artigas, a quien olvidé mencionar en la crónica anterior. La visita fue después la que hice el Museo de Casa de Gobierno. El General Artigas es el héroe nacional por excelencia. ¿Quién fue José Gervasio Artigas? A este personaje ilustre lo conocí por unos libros de leyendas y hazañas que mi padre nos regaló, a mi hermana y a mí, siendo pequeños. Me impactaron nombres como Tacuarembó (https://rea.ceibal.edu.uy/elp/la-batalla-de-tacuarembo/los_hechos.html). Luego las estampillas uruguayas “hablaban” mucho de este héroe. Artigas es el héroe que encarna Uruguay, pues le creó a autonomía a la República Oriental que pudo haber sido una provincia oriental de Argentina. Artigas es Uruguay en cierta manera (https://www.buscabiografias.com/biografia/verDetalle/1409/Jose%20Gervasio%20Artigas). Aquí hay una explicación sobre el origen del Uruguay que se basa en la idea de Artigas. Aquí un video sobre el origen de Uruguay: https://www.youtube.com/watch?v=KR7rynM97nE. En este video se pueden oír las razones históricas coloniales que generaron las distancias entre Baires y Montevideo, ciudad que tuvo una fuerte relación con el imperio portugués y posteriormente con Brasil. Eran disputas desde el famoso Tratado de Tordesillas en el que los imperios portugués y español se dividieron Sudamérica con una línea imaginaria e imprecisa. Como el origen de los nombres de muchos sitios (Toponimia) se pierden en el tiempo y se alimentan de la imaginación, las más de las veces, aquí alcanzo dos versiones: https://www.montevideo.com.uy/Tiempo-libre/-Como-surgio-el-nombre-Montevideo-Nuevo-libro-de-Eduardo-Cuitino-aporta-otra-teoria-uc707563; https://www.lr21.com.uy/editorial/210067-el-origen-del-nombre-montevideo. Al levantarme tomé un ligero desayuno para seguir mis andares. Pero iba a descubrir un problema que también vería más tarde en Bs As: los museos abren a mediodía. Aunque los museos nacionales son gratuitos, los horarios sí hacen complicado las visitas. Primero me dirigí al Palacio Salvo que tenía visitas establecidas y empezaban más temprano (eso en comparación con los otros). También fui a ver una suerte de museo numismático, que también estaba cerrado (no es el oficial). Cerrado. Ante eso, decidí irme al Museo de Artes Decorativas. Como indicaban en la información en redes, este abría a las 10 am (¡¡¡). Era casi las 9 am y decidí hacer una caminata para ver los grandes y bellos edificios de la ciudad vieja. Comencé con la Plaza Zabala (https://montevideo.gub.uy/areas-tematicas/cultura-y-tiempo-libre/parques-plazas-y-zoologicos/plaza-zabala).
Al leer la historia uruguaya, esta fue bastante turbulenta. Plazas como la de Artigas o la de Bruno Mauricio de Zabala nos lo recuerdan. España, Portugal, Brasil y Argentina estuvieron muy involucradas, así como los ingleses (¡cuándo no!). Tras esta tranquila plaza vi a lo lejos una torre muy puntiaguda: la iglesia de San Francisco del Puerto. En mi caminata vi algunas fachadas bastantes dañadas, pero los edificios son monumentales. Se ve una antigua bonanza. Felizmente hay un plan agresivo (y se ve) de rescate de estos edificios para mantener el centro monumental de la Ciudad Vieja (https://www.youtube.com/watch?v=_ss6ywfcXP8) (https://www.lr21.com.uy/comunidad/1297718-programa-de-revitalizacion-de-ciudad-vieja). Ah, si los trujillanos aprendiéramos; no sólo autoridades, sino su población; podríamos convertir nuestro Centro Histórico en un sitio atractivo; hubo un proyecto de intervención de la Cámara de Comercio previo a la pandemia. Espero que no esté en los sueños de los justos. Nuestra ciudad es terreno de nadie. Y ver Montevideo, o Cuenca en Ecuador es vergonzoso para nosotros teniendo un patrimonio más antiguo y diverso. En fin (https://www.youtube.com/watch?v=AMBPw80_b3M).
Me dirigí hacia la iglesia anteriormente mencionada (https://municipiob.montevideo.gub.uy/node/192). Al frente de esta hay un simpático parque con instalaciones para niños y murales. Pero lo que sí impresiona es el edificio que se halla en diagonal a la iglesia: el Banco de la República. Es una construcción monumental que se pierde por la estrechez de las calles que lo rodean (https://www.brou.com.uy/documents/20182/29503/01-BROU_CC.pdf/e9181546-ae82-4453-9327-b85135ce6cdd). Salvo el pequeño parque al lateral derecho, esta magnífica construcción no tiene espacio para “respirar”. La puerta principal está sobre la calle Cerrito la que sería mi ruta una vez terminada mi contemplación. Seguí por la calle Misiones, las cuales albergan en su entorno dos casas museos: Casa Antonio Montero/ Museo Romántico y la Casa Rivero/ Museo Histórico Nacional. Para la próxima visita. Me ganaba el tiempo. Pero en mi merodeo me encuentro con una oficina del Correo Uruguayo. De pronto, mi historia personal vino como un rayo: ingresé para ver estampillas, esas que quizás Gustavo me hubiera ofrecido ver. ¿Quién sabe? Ingresé con discreción, las mujeres de la atención estaban conversando entre ellas, pues ya casi nadie manda cartas, sobres o cajas por correo. En Trujillo ya la oficina parece clausurada. Ingresé y pregunté por sobres de primer día; mi pregunta las sacó un poco de su tranquilidad. Sobres del primer día de emisión. Como ya comenté, me inicié en la filatelia cuando tenía 11 años; así tuve amigos en diversas partes del mundo y me dedicaba a la cacería de estampillas por intercambio o por compra. Así conocía a Gustavo Ruibal. A través de esos pedacitos dentados conocías la historia, geografía física y humana de cada nación, su fauna y flora, sus lugares más destacados, sus prohombres. También, las estampillas eran una forma sutil de propaganda que molestaba a los vecinos de un país, como el caso de estampillas bolivianas que proclamaban al Chaco como territorio boliviano. Si uno se remite a estampillas ecuatorianas de los años anteriores al Tratado de Itamaraty (https://www.deperu.com/calendario/134/tratado-de-paz-de-itamaraty-entre-peru-y-ecuador), estas mostraban mapas o siluetas del territorio ecuatoriano con Tumbes, Jaén y Maynas. También, la guerra ideológica entre las dos Alemanias se dio en el campo filatélico de manera sugerente. Por las conmemoraciones del Centenario de la Guerra del Pacífico, hubo una extensa colección de sellos que luego fueron retiradas por errores de impresión y que elevaron su precio. Muchos comentaron que fue intencional, pues estas estampillas se vuelven valiosas y costosas para los coleccionistas, museos e historiadores. Compré varios sobres del primer día (https://es-academic.com/dic.nsf/eswiki/1434665). Cuando viajé por Europa central compré estos sobres y estampillas en colecciones completas en Budapest, Praga y Jerusalén. Volví a las andanzas filatélicas. Un sobre conmemora los 50 años del primer alunizaje y la estampilla es en 3D, por lo que viene con los lentes para verla mejor. Otro sobre es en homenaje a la China Zorrilla, soberbia actriz de teatro que tuve la suerte de ver en Lima (https://www.gub.uy/ministerio-educacion-cultura/politicas-y-gestion/concepcion-china-zorrilla) (tiene una suerte de estrella de la fama en la calle Sarandí y otra en Corrientes en la calles de los teatros en Baires); otros sobres eran sobre diversos personajes afro uruguayos, su primera misión en la Antártida y uno que sí impactó en la sociedad de Montevideo: el cincuentenario de la Tragedia en los Andes chilenos (https://elpais.com/sociedad/2022-10-13/la-tragedia-de-los-andes-50-anos-despues-llevar-un-poco-de-nuestros-amigos-en-el-cuerpo-y-en-el-alma-fue-un-honor.html) (https://www.youtube.com/watch?v=nTGx9O5vtSo). No me atrevía a visitar el museo. Recuerdo en el libro Viven comentaba que fue un diario peruano que difundió la noticia sobre el hecho de que los sobrevivientes comieron la carne de sus amigos muertos. Por otro lado, estampillas en homenaje a Mafalda y el tango, tema de discusión entre argentinos y uruguayos. Una estampilla emitida en homenaje a Carlos Gardel que dice Centenario del Registro de Nacionalidad Uruguaya Carlos Gardel. Para sacar unas cuantas chispas. Pese a toda disputa, Gardel cada vez canta mejor (https://www.youtube.com/watch?v=I5JQ1m3mxKw). Luego de la visita a la Casa de Correos me indicaron un lugar donde podía comprar más estampillas y así lo hice. Como me sucedió en Coimbra, Portugal, tienes una gran diversidad de este mundo de pequeños trocitos de papel que aún encandilan a personas de todo el mundo. En esta oficina dependiente de la Administración Nacional de Correos sobre la calle Sarandí fui el único cliente por una media hora. Y la Sra. Karina Caraballo se tomó la molestia de enseñarme colecciones y sobres del primer día. Pero tenía urgencia de ir al Museo, era un poco más de las 10:30. Me dio los datos para poder sellos en el futuro por Internet; lo que mató al correo tradicional sirve para poder hacer compras de sellos en línea (https://www.stamps.uy.post/). Salí rápidamente hacia el museo y me doy con una ingrata sorpresa: los museos abren a mediodía. Era pues información falsa y confusa la que te ofrecen en internet muchas veces. Entonces decidí ir al Palacio Salvo, aprovechando una corta caminata por el malecón por la Rambla Francia.
Estas aguas son parte del sistema fluvial del Río de la Plata por lo que, al igual de Baires, estamos frente a aguas dulces (https://www.ecured.cu/R%C3%ADo_de_la_Plata) (https://www.youtube.com/watch?v=aGUX1j2bsmY&t=7s). La marcha fue simpática, es una construcción rodeada de edificios y algunos monumentos y, por otro lado, el río. Como en el caso del Amazonas, el agua dulce ingresa buenos kilómetros mar adentro (https://www.youtube.com/watch?v=aGUX1j2bsmY&t=7s). La caminata la hice hasta más allá del Cubo del Sur hasta la Plaza España. De ahí subí por la calle España hasta la Plaza Artigas. Llegué al Palacio Salvo en el que iba a empezar otro tour. Iba con dos brasileños y la guía. Montevideo recibe grandes oleadas de brasileños y muchas personas hablan portugués. También lo iba a ver en el ferry.
El Palacio Salvo es una joya arquitectónica (https://reporteasia.com/economia/turismo/2023/05/05/el-palacio-salvo-un-icono-de-la-arquitectura-y-la-historia-de-montevideo/). Comenzamos en la primera planta en que vimos detalles en las columnas que el arquitecto había presentado en su proyecto. Luego tomamos el ascensor que nos llevó hasta el mirador interior, pues el clima era un poco agresivo (los vientos). En el descenso fuimos apreciando la belleza de la construcción, la distribución de los ambientes, algunos infelizmente intervenidos. Vimos alegorías varias y vitrales que han sido rescatados. La visita nos mostró esos detalles bellos que amenazan ser destruidos por el hacinamiento y el deterioro por el tiempo. Por razones económicas, como sucede en todas partes, el edificio fue tugurizado al venderse por partes y se ven los resultados. Ahora hay un plan de rescate de este monumento icónico de la ciudad. Si desaparece, cae la identidad visual de esta ciudad por décadas (https://www.youtube.com/watch?v=s3vTuNDNHtE) (https://reporteasia.com/economia/turismo/2023/05/05/el-palacio-salvo-un-icono-de-la-arquitectura-y-la-historia-de-montevideo/). Y como edificio viejo y con historia, es un edificio con fantasma (https://www.youtube.com/watch?v=gcwkFP3UXvs). Al descender entramos a un espacio muy interesante que incluía la visita: el Museo del Tango.
En este espacio se interpretó por primera el famoso tango La Cumparsita por su autor Gerardo Matos Rodríguez en 1917. El espacio reproduce exactamente dónde estaba el lugar donde se lo interpretó por primera vez (https://uruguaynatural.com/index.php/uruguay-es/tango/item/2103-visitar-el-museo-de-la-cumparsita-a-los-pies-del-mitico-palacio-salvo). El tango es para los argentinos y uruguayos, más o menos, como el pisco para los peruanos y chilenos. La Cumparsita (https://www.bbc.com/mundo/noticias-42102471) es un tango que siempre escuché de manera instrumental; pero hay versiones cantadas como la de Gardel que popularizó este tango en el mundo (https://www.youtube.com/watch?v=N91S51sNKdo). Una de las mejores interpretaciones fue de la Aníbal Troilo, eximio bandoneonista (https://www.youtube.com/watch?v=M6jZHcRbDWw). Me estaba quedando ya poco tiempo. Tenía que estar cerca de las 4 pm en el terminal de buses Tres Cruces para tomar el bus que me lleve a Colonia y de ahí a Baires. Me fui a almorzar nuevamente a Dueto. Temprano para hacer la visita al Museo de Artes Decorativas. Ya con el estómago lleno me fui a mi nuevo destino.
Este museo fue una grata sorpresa: http://patrimonio3d.uy/artesdecorativas/#obras_pictoricas. Era el Palacio Taranco, familia rica que edificó esta bella casa y adquirió obras de artes como Sorolla (¡3 cuadros!), 3 de Zuloaga, un Ribera el españoleto, un Ghirlandaio, un Vicente López, entre otros (https://www.youtube.com/watch?v=xcxYLD6kcSE). Están haciendo diversas temáticas para darle un sentido holístico del patrimonio. Hablé con una señora muy amable sobre la casa, su patrimonio. Cada vez que veía una joya me acercaba a ella para comentarle lo que había descubierto. Comentaba que los descendientes de la familia que construyó la casa recordaban cómo usaban la vajilla que ahora preservan con recelo. Y en la parte inferior, en el sótano hay una interesante exposición grande de piezas de origen helénico. Como comentaba la señora encargada del lugar, es un patrimonio único en Sudamérica. Mucha amabilidad. La señora responsable de la parte superior me invitó al recorrido temático en base a los pianos (¡Hay 3!) y que incluía el Museo Romántico. A la larga me di cuenta de que había sido un error haber comprado el retorno tan temprano, pues quería ver un poco del mundo agrario uruguayo en el tramo Montevideo- Colonia. Craso error. Mejor hubiera retornado en el último ferry (a las 7:30 pm) directo desde Montevideo. Hubiera podido disfrutar esta visita y hubiera ido al Museo Romántico. En fin. Salí del Museo bastante satisfecho y vi una tienda, La Escondida, que ofrece artículos de cuero; lo que me atrajo fue una boina, bella. Como hacía un buen frío (había amanecido lloviendo un poco), decidí comprarlo. Le tuve mucho cariño y lo iba a usar permanentemente hasta extraviarlo en el desordenado aeropuerto de Lima. Me fui al hotel, ya había dejado todo listo; con mi nueva gorra salí con mi maleta y mi maletín de cámaras. Ahora mi maleta pesaba más. Había pedido un taxi, el cual tenía que abordar rápido pues la calle es bastante estrecha y hay muchos autos aparcados por lo que tienes que ser expeditivo, ni loco de hacer la tontería de ponerse a negociar o, peor aún, pagar al momento de bajar. Imposible. Me llevó al terminal de buses Tres Cruces (https://tramitesuruguay.com/terminal-3-cruces/?expand_article=1). Llegué un poco temprano al lugar. Comí una medialuna en espera para dejar la maleta y subir al bus. El viaje fue bastante incómodo, pese a que hay muy buenas carreteras. Llegamos a Colonia a su terminal casi una hora y media después (https://coloniauy.com/terminal-de-colonia-del-sacramento/). Comenzamos a hacer los trámites para sellar el pasaporte de salida de Uruguay e ingresar a Argentina. Había otro servicio más. Estaba lleno de gente. Subimos al ferry. El viaje es mucho más corto a Baires. Llegamos a Puerto Madero.
Descendimos del ferry para el control de pasaporte. Al salir tomé un taxi para el hotel. Al llegar, decidí descansar para empezar una jornada larga en Buenos Aires.
Fin
de mi experiencia uruguaya. Tengo que volver, pues he dejado muchos pendientes
y quizá me anime a buscar, ahora sí, a la familia de Gustavo. Ojalá.