El
último viernes tuve una entrevista radial con Carlos Gonzales, destacado
periodista de RPP, a propósito de la década de la publicación del libro
Criminalidad y violencia juvenil en Trujillo, texto que explora el contexto
social, cultural y económico, y estudia casos de jóvenes que tenían problemas
con la ley. Todo esto ubicado en el distrito de El Porvenir. El libro fue
publicado en mayo del 2014 durante mi jefatura del Dpto. de Humanidades de la
UPN, el SENAJU y el MINEDU. La información levantada gracias a datos
proporcionados por los diversos actores involucrados en este álgido tema
(municipalidad, sector justicia, policía), más las entrevistas hechas por
docentes del Dpto. permitió la elaboración de este texto de libre acceso. La
investigación hecha permitió que los docentes, por ejemplo, hayan tenido
relevantes conversaciones con jóvenes que habían delinquido o jefes de bandas
con los cuales se pactaron entrevistas especiales. La dureza de esta situación
nos impactó cuando supimos que uno de los entrevistados había sido asesinado. Esta
condición generó una serie de estereotipos que alcanzaron al grueso de la
población, sufriendo una estigmatización que es una rémora para todos los
vínculos sociales que los jóvenes establecen en la comunidad no permitiéndoles
avanzar para alcanzar sus objetivos personales en diversos campos como el
laboral, por ejemplo. También funciona como suerte de pesada ancla que
contribuye a una autopercepción negativa. Se tiene que ser violento, porque esa
es la imagen que represento. Estos son móviles, estigmas culturales lentos de
erradicar. ¿Tras una década pasada, cuánto se ha cambiado y hecho para evitar
esta situación? El libro, tras ofrecer toda esta información sustentada de
manera cuantitativa y cualitativamente, plantea una serie de recomendaciones
preventivas que deberían haberse convertido en políticas públicas municipales y
regionales, sin importar el color político partidario. Son medidas anticipatorias,
centradas en lo educativo, recreativo, laboral y planificación urbana; medidas
que se propusieron a los candidatos a la alcaldía de Trujillo en ese entonces; durante
un debate de los postulantes en Los Tallanes, me encargué personalmente de
entregar un texto a cada uno de ellos. Teniendo un sentido preventivo, esto
debe ir acompañado, en paralelo, de una campaña intensa de comunicación para
que llegue al mayor número de ciudadanos y hagan suyas estas estrategias y que,
incluso, deben ser reclamadas a cuanto candidato tengamos en las siguientes
campañas, pues muchas de estas medidas siguen vigentes una década después. Se
anuncia un paro general, pues la población está harta de la violencia cotidiana.
De haberse trabajado con antelación, mucho de lo que estamos viviendo se
hubiera evitado. En vez de terruquear a los ciudadanos, es hora de oír y atenderlos.
La sociedad no es enemiga de los actores políticos; por el contrario, propone
soluciones.
He aquí el libro para su descarga.
(https://juventud.gob.pe/wp-content/uploads/2017/12/Criminalidad-y-violencia-juvenil-en-Trujillo.pdf)