Datos personales

Trujillo, La Libertad, Peru
Un espacio para mostrar ideas y puntos de vista ligados al arte, a la cultura y la vida de una sociedad tanto peruana como universal
Mostrando entradas con la etiqueta música. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta música. Mostrar todas las entradas

lunes, 3 de noviembre de 2008

JAVIER ECHECOPAR, maestro




Trujillo, Teatro Municipal, 7:30 de la noche, lunes 03 de noviembre. El teatro parcialmente lleno, Javier Echecopar sale al escenario con guitarra en mano. Con magistral movimiento comienza a interpretar las canciones de su repertorio. Javier en los últimos años ha sido un incesante investigador del reperterio musical peruano de la colonia y husmeado en archivos y trabajos de investigación que abordan este tema (como el delicioso estudio que realizó Juan Carlos Estenssoro sobre la vida y obra de José Onofre de la Cadena y Herrera, interesante personaje vinculado a Trujillo). Su exitosa carrera dedicada a la música lo ha llevado a ser el mejor guitarrista en lo barroco (me temo no sólo en el Perú, sino en Latinoamérica) y gran impulsor del rescate de nuestro patrimonio. No ha escatimado esfuerzos para vincular la música culta con la popular (ambas se nutren recíprocamente) y tiene una vasta producción discográfica (personalmente poseo 4 discos compactos que suelo oír con frecuencia). Aunque no soy muy aficionado a la música de guitarra, Javier tiene una gran capacidad de intepretación que llamó mi atención (como pocos guitarristas lo han hecho como Lagoya, Raúl García Zárate o Andrés Segovia). Gracias a eso, me embarqué en la empresa de oírlo con más frecuencia, lo que me permitió hacer gratos descubrimientos como el excelente disco GUITARRA ANDINA DEL PERÚ, en el cual hallé interesantes propuestas personales de HUÉRFANO PAJARILLO, que había oído en la versión del maestro Raúl García e incluso una versión en vivo que alguna vez oí a Jaime Guardia (hace muchos años) en versión de charango. Interesante es este bloque de yaravíes en los cuales ha podido captar el alma andina, en su dolor y alegría. Su trabajo mostrado su álbum LO MEJOR DE JAVIER ECHECOPAR es impecable; en este oí la primera versión de nuestro himno (el cual presenta después en un reinvención en CUATRO SIGLOS DE GUITARRA) y tiene unas versiones notables de unos lieders de Alfonso de Silva, con la limpia voz de Josefina Brivio (había oído estas versiones al piano con voces de sopranos como Mariella Monzón, Jacqueline Terry y Nora Usterman). Esta versión es limpia e interesante la audición en guitarra (siempre la había oído en piano). Las canciones modernistas son tan sensibles y muchas veces es difícil hallar ese humor de la misma; recuerdo ASHAVERUS, una bella canción poco interpretada; pero en el disco la versión de LAS GAVIOTAS es soberbia.
Pero lo más notable va a ser su trabajo en lo barroco; interesante y metódico trabajo el de CUADERNO DE MÚSICA PARA GUITARRA DE MATÍAS MAESTRO que data de 1786, el cual es más extenso en CUATRO SIGLOS.. y en LA GUITARRA EN EL BARROCO DEL PERÚ.
El concierto ofrecido en Trujillo mostró un amplio y sintético panorama de su trabajo académico. Estuvo acompañado por el "Cuarteto Trujillo" en la Suite Barroca Peruana en su propia versión. La primera parte se centró en lo barroco, tanto andino como español americano en las buenas transcripciones que él ha hecho de la inmensa obra de Martínez de Compagnon (mucha de esta la he conocido interpretada para un ensemble de cámara colonial y una buena versión es la del grupo ARS TAKI y la de Aurelio Tello.
La segunda parte se abrió con la transcripción a guitarra de la obra coral HANACPACHAP, pero lo interesante fue las variaciones que le dio a tan bella canción, cuya letra es original en quechua. Para mantener el sabor norteño de su visita interpretó una musicalización del poema de César Vallejo ESPAÑA, APARTA DE MÍ ESTE CALIZ en versión libre llamada Cáliz del 36. Dos alusiones a nuestro mar en Pájaro Marino y Chicama, luego una marinera; las raíces vinieron con dos canciones de Manuelcha Prado y cerró con su propuesta de nuestro himno.
Es un eximio guitarrista, espero que vuelva por nuestra ciudad; y espero que el público mejore para tener un concierto de primer orden, como nos lo merecemos ¿di?

martes, 14 de octubre de 2008

EL OTRO LADO DE NUESTRO HEMISFERIO MUSICAL


¿Qué tal si,
en tus sueños
volaras al cielo
y de allí trajeras
una rara y bella flor?

Y ¿qué tal si,
Al despertar,
Tuvieras esa flor
En tu mano?

¿Qué pasaría?

Deepak Chopra

Hace ya un buen tiempo, a la llegada de Caetano Veloso a la ciudad de Lima para ofrecer diversos conciertos abrió buenas perspectivas de encontrarnos con esa gran corriente musical de nuestro inmenso vecino que, pese a la cercanía, es poco conocida por nosotros. La lenta y a veces pusilánime distribución y difusión musical en nuestro país han hecho todo lo posible para alejarnos de hitos que sirvieron para hacer conocida o enriquecer esta manifestación artística en este lado del continente. La música brasilera es una feliz mixtura de los fados portugueses, música aborigen y la infaltable presencia de los ritmos negros, que muestran ese gran crisol de razas que es el Brasil.

En la década de los 60, el Brasil, sometido a una larga dictadura, vio una extraordinaria eclosión en sus artes, desde el cine hasta la literatura. Incluso algunos célebres escritores incursionaron en la música como es el caso de Vinicius de Moraes, quien guitarra en mano y con algunas musas de sensuales y bellas voces, eternizaron el bossa nova, para felicidad de todos los amantes de la música. Es interesante el contexto en el que se va desarrollando este movimiento musical, con una revolución cubana al galope y con nuevas búsquedas en el mundo del arte, caso la nouvelle vague francesa; y éste va a influir (globalización positiva) en el famoso cinema nôvo con directores de la talla de Nelson Pereira y Glauber Rocha.

Caetano Veloso, Antonio Carlos Jobim, João Gilberto, Gilberto Gil, Chico Buarque de Hollanda son autores de numerosas canciones que renovaron el mundo musical brasilero; canciones como Bom dia tristeza, Se todos fossem iguais a vôce, agua de beber, chega de saudade y sobre todo el gran aporte de la letra en Garota de Ipanema, mundializaron la música de este país y viene de los autores previamente nombrados. Acompañaron la difusión de estas obras, voces como la de Nara Leão y Maria Creuza.

Hacia 1964, apoyados por el gran saxofonista Stan Getz y las voces de Astrud y João Gilbert, este himno carioca revoluciona el mundo de la música, y en América Latina hubo gratas influencias de las cuales no escapa nuestra música; así compositoras como Chabuca Granda se ven influidas por dicha vanguardia musical.

Un caso especial en la música de este país es el Milton Nascimento, músico extraordinario quien ha trabajado con todos los grandes músicos contemporáneos (como el caso de nuestro compatriota Alex Acuña), ha acercado la música de su país a África, el continente que aportó ritmos y armonías que los caracterizan. Además rescató los instrumentos indígenas de nuestra América primitiva y las introdujo en la música popular. Felizmente hay varios grupos, como el Inéditus de Costa Rica que están siguiendo estos pasos. Debemos hablar de dos extraordinarios trabajos que realizó en los 80 como son los casos de sus álbumes Yauaretê (Jaguar), un verdadera canto ecológico, y el extraordinario álbum Miltons, que nos ofrece una sentida canción al fallido actor River Phoenix, una magistral reinterpretación de La Bamba, una soberbia canción a Don Quixote, con un soberbio piano del no menos famoso Herbie Hancock y la percusión y voz de Naná Vasconcelos (con la de Milton hacen una excelente dupla y ha trabajado en varios álbumes con Pat Metheny, sobre todo en Offram y A letter from home, la voz de Pedro Aznar es también bella).

Están, además, Boden Powell, Jorge Ben, Djavan, Ney Matogrosso, Toquinho, entre muchos más, quienes llenan el rico y vasto mundo de ese Brasil que se agita bajo las botas de la dictadura que manda muchos de sus mejores artistas al exilio; las intérpretes de la talla de Maria Bethânia o Elis Regina, quienes llenaron los oídos de los brasileños con música que habla sobre ellos, el hombre común, sus problemas y sus sueños. Por eso, muchos de estos autores, cantantes y trovadores están en el alma popular , tanto así que hasta los transbordadores bahianos llevan sus nombres o aparecen en estampillas como si fueren héroes de batallas ideológicas. Hay muchas canciones que son ya himnos: Menino de Rio, Aguas de Março, Vai levando, Nos Bailes de la Vida, Um Jeito estupido de te amar, samba de uma nota so,...

Caetano Veloso tuvo a bien poner en uno de sus álbumes, la canción Fina Estampa, merecido homenaje a Chabuca Granda (1994). Cuando vino a Lima confesó su temor y osadía de interpretar dicha melodía a los peruanos; y salió bien parado. Su cálida voz también nos conmovió en la película HABLE CON ELLA, con su singular interpretación de CUCURRUCÚ PALOMA.
Espero que los medios masivos de comunicación asuman ese reto de hacernos conocer más y esto vaya calando ya tanto en el gusto de la gente, como en la sensibilización de aquellos que tiránicamente deciden lo que debe ver y oír la gente...”en pro del rating”...

jueves, 2 de octubre de 2008

VOCES CELESTIALES


Debo reconocer que una de las artes más extrañas que el hombre haya re-creado es la música. El poder que un conjunto de sonidos arreglados de manera diacrónica y sincrónica puede generar en una persona, ha merecido toda mi admiración desde que tengo uso de razón; adosado al hecho de que el habla humana es una actividad tan cercana a este arte. Recuerdo una crítica que leí sobre una extraordinaria cantante egipcia, Oum al Khalsoum; en ésta, el crítico nos hacía “oír” el poder de algunas voces, cuyos timbres ya forman parte de un patrimonio personal y, también, de la humanidad.
La voz humana tiene desde ya una vasta y rica clasificación que rige tanto la extensión (registro) como el timbre del cantante; las seis denominaciones genéricas que se emplea para clasificarlas (las voces) es una herramienta útil, pero herramienta al fin , cuya naturaleza fría no nos permite “entender” el carácter de cada timbre, de cada personalidad. Otra frase que me quedó grabada fue una referente a Carlos Gardel, que reza así “cada día canta mejor”. El haber escuchado de la cantante egipcia su canto extenso llamado Las mil y una noches fue todo un placer auditivo, canto acompañado de un texto poético como sólo las lenguas semitas pueden construir; cuando oí a Gardel en El día que me quieras, soberbio tango de Le Pera & Discépolo, eso no me hace más que corroborar que la voz tiene cierto sello que hace incluso la formación de una identidad de un pueblo. Tras este apasionante leit-motiv, me lancé a la búsqueda de las mismas: Mercedes Sosa y Gracias a la vida. Lila Downs y La Sandunga. Edith Piaf y La Vie en Rose. Juliette Greco y Les Feuilles Mortes. Toña la Negra y Humo en los ojos. Silvio Rodríguez y Sueño con serpientes. Pablo Milanés y Yolanda . Este pequeño grupo nos puede permitir hablar de algunos cantantes, varios conocidos; algunos de ellos dejados en el desván del olvido.

Recuerdo la primera vez que vi a Mercedes Sosa allá por 1971 en Arequipa, no era aún muy conocida en los circuitos que no correspodían a la canción comprometida como lo es hoy. Se centraba en difundir el folclor de la Argentina andina, y llegó con esas señales. En esa época, tanto Argentina como Chile, además de Bolivia, estaban generando un interesante movimiento de música popular que ya estaba entrando a los escenarios grandes. Corría la figura de la extinta Violeta Parra por esos años, y muchos cantantes tomaban sus canciones para difundir su encomiable obra, sobre todo Gracias a la vida, Volver a los 17 y La Carta. La primera canción ha sido interpretada por un sinnúmero de cantantes en varias lenguas (tuve oportunidad de escuchar a Joan Baez abriendo un concierto suyo en las ruinas romanas de Caesárea en Israel con esta canción... y la cantó en castellano), e incluso, desafiando a Pinochet, Paloma San Basilio abrió una presentación suya en un festival de Viña de Mar con esta canción. Pero fue la Sosa con su impecable álbum Tributo a Violeta Parra que la convierte en una suerte de intérprete oficial de Violeta. Casi no hubo concierto de ella en los 70 y 80 que no figurara esta canción. Cuando regresó del exilio en la apertura de la dictadura de Galtieri durante el conflicto de las Malvinas, su presentación fue apoteósica y esta canción casi hizo caer al teatro desde sus cimientos. La Sosa ha trabajado con muchos cantantes de todas las latitudes latinoamericanas, desde Pablo hasta Milton; una canción que sí debe escucharse por el dúo que hicieron es Inconsciente Colectivo, que la interpretó con su autor, Charlie García. Gracias a una colección editada y lanzada a la venta por El Comercio, hemos podido hallar una joya peruana, María Landó, de Chabuca Granda, cantada con Pedro Aznar. Su voz de contralto es fuerte y nítida, y destacada en canciones como Canción de las simples cosas (una joyita) y algunas que canta de Guastavino (¿existe algún álbum de Guastavino interpretado por ella?). Cuando era joven, sus canciones eran menos sofisticadas; pero, a veces, la madurez (¿o vejez?) eso se va postergando y caes en cosas que no van con tu espíritu.. Pero, en ella, se perdona

domingo, 10 de agosto de 2008

CONCIERTO DE MÉLISANDE CHAUVEAU AL CLUB CENTRAL DE TRUJILLO


Ayer sábado 09 de agosto hemos sido testigo de un extraordinario recital de una artista excepcional en las instalaciones del Club Central de Trujillo; su recital dejó a mucha gente atónita, no sólo por la calidad interpretativa y su voluntad de seguir frente a un instrumento que tenía problemas técnicos, sino porque lentamente su compromiso personal con cada una de las piezas que iba interpretando nos arrastraba a "vivir" la música que discurría en cada nota que pulsaba en el aún inefable piano del Club. Me había comentado que había trabajado todo el mes de julio para este concierto y que ella, amante del mar puesto que había nacido en Nice, se había privado este verano europeo para trabajar en este trabajo personal que la iba a traer a Perú por estos días. Y su trabajo metódico (y atrevido) le rindió frutos. Su osadía y capacidad la hicieron tomar la decisión de celebrar a un compositor capital para la música culta moderna: OLIVIER MESSIAN, de quien celebramos el primer centenario de su nacimiento. El concierto (muy francés) empezó con una breve pieza de Maurice Ravel, a quien el famoso Círculo de los Seis le debe mucho de su inspiración y sus propuestas revolucionarias de la música del siglo XX. La segunda obra se centró en varias partes de la magnífica Vingt regards sur l'enfant-Jésus, compuesta en 1944 para la pianista (en cierta forma, "protegée") Yvon Loriod, durante el periodo sombrío de la Segunda Guerra Mundial; cada "regard" tiene previamente una introducción hablada que centra la idea o leit motiv de la pieza. Los "regards" son densos y muestran toda una visión metafísica pesimista que rodea a la Europea a fines de la Segunda Guerra. Olivier Messian se encierra en un visión mística. Hacia fines de la guerra, mucha gente se tornará escéptica y una nueva filosofía se cernirá en el mundo europeo de post guerra; caminos como la nueva fenomenología o el existencialismo buscarán un compromiso de la humanidad. La pianista Mélisande ha encontrado esa agonía de una alma con dudas y temores, y que busca aferrarse a una suerte de misticismo muy católico en un "valle de lágrimas"; la fuerza expresiva de la pianista acentuó la angustia de los temas. Luego de tremenda expresión de la pianista, nos ofreció un breve mascarada para piano sólo para la mano izquierda. Para cerrar la noche, la pianista escogió a uno de los más grandes compositores rusos que fue admirado por Messian: Modesto Mussorgsky y su inmenso CUADROS DE UNA EXPOSICIÓN. Esta obra ha sido capital en muchas corrientes. Tuve la suerte de haberla oído en su versión original por un pianista francés (allá por el año 80 en Lima), luego en una versión rock (¡) del grupo EMERSON, LAKE AND PALMER; una versión orquestal con la propuesta de Leopold Stokowsky y por último la versión del japonés ISAO TOMITA.